Los recuerdos de ellos dos, esos que en su momento fueron sellados para volver difícil la última prueba que daría por terminadas las misiones de Xiao, y poder ponerle un final a todo; por fin fueron liberados.

El sello se rompió desde el instante en que sus miradas ligeramente temblorosas se encontraron con los afilados y tan profundos mirada, violeta negro. Tan hermosa mezcla de colores, unos ojos combinados con los colores de ojos de sus amados padres.

—Mi pequeño.—Besa la coronilla del mas pequeño.

En momentos como estos es que siempre me planteo si Deamon y yo hemos sido buenos padres, en espacial yo. ¿He sido buen padre, esposo? No quiero pensar de esa manera, pero es inevitable cuando nuestro pequeño Huang a pasado por tanto. Sin embargo, si no hubiera hecho lo que hice en esa entonces, tomar esa dura desición de enviarlo su alma y la Deamon a diferentes mundos. Hoy, no estaríamos aquí, juntos.

Si, tal vez no fue la mejor decisión pero estaba tan desesperado por salvarlos y porque el tonto de mí de ese momento, no era ni tercera parte de lo que soy ahora. Ese Xiao era demasiado estúpido y amable como para dañar un insecto. Por lo que terminé tomando esa decisión, para salvar el reino de la persona que amaba e incluído a él, mi hijo.

Fragmentar sus almas para después ir a recolectarlas con la ayuda de Akita (015) eso también nos ayudaría a volvernos mas fuerte en especial Huang. Solo que, no me esperaba tal variable. Que el maldito de Rirel logra descubrir mis planes y cambiará la dirección del alma de Huang. Como no podía destruirla, quiso usarlo para causar daño, problemas.

—¡Estás tan grande!—Se percibe lamentos en su voz.

Enojados por no tener la oportunidad de verlo nacer, en su faceta de bebé de la cual nunca se cansaría de presenciar. Huang de bebé es cosita mas bonita que sus ojos hayan visto y es lo mismo en todo su crecimiento, sin embargo, no quieta el hecho de lamentable que no sera verlo crecer en un en torno cálido que jamas se volvería a derrumbar mucho menos ponerse frío, extrañarse, tampoco se tendrían que despedir nunca más.

Xiao y Deamon no querían que su hijo recordara nada de lo vivido en esos mundos, esperaban que al traerlo nuevamente todo sería diferente. Le mostrarían un entorno desconocido que poco a poco irían conociendo juntos, y los que harán al ya finalizar con esto último.

Vivir lejos de todo lo relacionado con estos mundos, plano, universo y jamás, jamás se volverá a mencionar la palabra "Dios" o "Dioses." En la familia Beanhmon.

—Tienes unos ojos tan hermosos.—Resaltó cariñosamente, acariciando el rostro de su pequeño.

Huang en apariencia también tiene mucha similitud con sus dos padres, solo que su cabello es negro azabache como el de su padre mientras que tenía la mirada de su papá. Esa era la verdadera apariencia de Huang, siempre teniendo un poco de ambos padres, quienes lo mantienen abrazado fuertemente e ignorando el desastre no muy lejos de ellos.

No les era importaba en lo más mínimo esos seres que por más divinos que sean, son insignificante a sus ojos y unos rastreros que ni deberían de existir por divertirse con el dolor ajeno. Porque en todo ese tiempo que los estuvieron observando si tenían conciencia y esa amabilidad hubieran parado todo, diciendo que ya estaba bueno pero no, siguieron observando y viendo cuánto tiempo duraban. Para ellos era ver una película o un juego quizás.

Tampoco tenían la intención de perder el tiempo en prestarles atención a sus miserables cuerpos, su única preocupación y atención está en su familia. Unicamente quieren sentir, besar todo el otro de su pequeño hijo, hacerle saber cuanto lo aman y lo han extrañado.

—Creí que no los volvería a ver nunca, cuando volví abrir mis ojos me encontraba en lugar oscuro, encadenado—Se aferra a sus cuerpos, solo enfrente de sus padres se vuelve el niño que es. Mostrando sus miedos y vulnerabilidad.

Lo que sería algo muy difícil de creer si a los que le dios una paliza estuvieran aún concientes, viéndolo actuar de esa manera tan lamentable cuando no hace unos momentos atrás, antes de que Xiao y Deamon llegarán el no tan pequeño Huang, había descendido al primer plano desde las mismísimas tinieblas con sus grades seis alas entre negras y blanco, rompiendo todo con un solo balanceó de ellas.

Huang sería el único ser en el universo con la capacidad de usar tanto la energía demoníaca de un demonio, por parte de Deamon como la divinidad por su papá, Xiao.

.—fue tan aterrador pero no el hecho de despertar de esa manera, sino que, el no encontrarlos en nigún lado por más que buscará en ese lugar tan oscuro.

Rirel hizo un último movimiento después de la misión cumplida del noveno mundo, extrajo el alma de Huang y se apoderó de ella antes de que cruzará al décimo mundo. Si Xiao ganaba la prueba del último mundo tendría como salir victorioso, usando a Huang por supuesto.

Encerrado el alma de Huang en lo que parecía una caja de dominó, no le basto hacer solo algo como eso que, también tuvo que encadenarlo para que no anduviera liebre. Esperaba que Huang se volvería loco estando ahí dentro pero para la mala suerte de Rirel, el pequeño Huang ni siquiera emitió un sonido ni se movió.

Desde que abrió los ojos si busco a sus padres pero sin entrar en desesperación, solo le llevo unos minutos dárse cuenta que eso podría ser obra de Rirel por lo que se puso a pensar en como salir.

Haung no quería ser salvado nuevamente por sus padres y ponerlos en momentos difíciles, en ese instante él se prometido simismo salir de ese lugar por su propio cuenta y lo encontró la manera. "Soy hijo des mis padres y sin importar a que cuerpo vaya mi alma sigo teniendo mis poderes, el viajar por esos mundos no fue solo porque sí, había una razón." Fueron sus pensamientos entré otros que lo iluminaron.

Esa caja donde estaba encerrado no eran tan poderosa para contener la iluminación y ascensión de un Dios, pero demonio. A Huang en medio de su iluminación le dieron a elegir con que energía quedarse, y él sin pensarlo puso todo para ser un demonio. Estaba seguro que su papá lo entendería y estaría orgulloso de esa decisión, de por sí ya odiaban a muerte todo lo relacionado con lo divino. Sin embargo, a pesar de su decisión, Huang puede seguir haciendo uso de su poder divino.

—Lo siento tanto.—Se disculpan en repetidas ocasiones.

—Nunca fue nuestra intención el ponerte ansioso.—Aclara Deamon mientras en sus brazos arrulla a su familia, acto seguido también lo hicieron sus alas.—Te tocaron unos padres con linaje bastante complicado.

—Lo sé y nunca los culparia.—Mirá a través de las rendija de las alas de su padre, viendo al culpable de todo.—Esa cosa es la única culpable.—Apunto a Rirel.

No podía abrir la boca ni pensar sin que no vomitara sangre, o esa cosa en su pecho se fuera enterrando más y más en su alma porque esa es su función. Generar miedo, ansiedad, desesperación con la lentitud en la que se iba sumergiendo en buscas del alma para destruirla.

—Tienes toda la razón, querido hijo.—Las oscuras miradas de ambos padres, parecían tragarse todo como un agujero negro.

—Queria eliminarlo de una sola vez pero me contuvo.—Confeso tiernamente.—¿Lo hice bien, verdad?

—Lo hiciste perfectamente.—Dijeron todos orgullosos de su hijo.—No podemos destruir tan rápido a lo que será nuestra fuente de energía, sacó de boxeo.—Sonríe diabólicamente mientras observa a su padre, Rirel.

Tanto su esposo e hijo sonrió de igual o mucho más maquiavélicos, pensando en como será la construcción del lugar dónde estará yendo Rirel. El desgarrar su alma una y otra vez es divertido pero tienen en mente algo mucho mejor, un sitió dónde Rirel sea humillado, de grado a lo más bajo. Que barran el piso con él y no pueda hacer absolutamente nada.

—No necesitamos un sustento de energía como ese, pero si para 015... Digo, Akita. Su alma tiene que ser puesta en un cuerpo de alto calibre, se lo merece.—Sugiere Deamon.

—Es verdad.—Xiao concuerda con su esposo.—Akita tiene que vivir con nosotros por mucho tiempo, sera nuestro Mayordomo... Digo, familia.—Sonríe maliciosamente.

—¡Sí!—El mas pequeño se emociona.—Pero, antes de irnos destruyamos todo esté lugar tanto que nunca más vuelva a funcionar, construir.—Se encuentran en el primer plano y ellos tenían que ir al plano intermedio.

—Solo por hoy les permito volverse locos.

Padre e hijo no hicieron esperar a Xiao, destruyendo todo mientras pisaban que otro cuerpo tirado en el suelo. Xiao solo los veía con sus ojos tan brillantes, felices. Cómo si ellos dos estuvieran jugando en un parque de atracciones, mientras que sus manos forman un puño y golpean la cabeza de Rirel en repetidas ocasiones, rompiendo su nariz.

Nota.🤍

Buenas tardes y feliz noche 🌃 siempre espero que se encuentren bien de salud, que esten disfrutando de estas fiestas navideñas.🧨🎇❤️

Le pedí a la AI que me creerá una una imagen de Huang, lo descubrí tan minuciosamente como pude, como me lo imagino pero no es lo que esperaba mas cuando se trata de sus ojos. Solo me los dan en rojo (con sus poderes pueden cambiar de ojos hasta aparecía.) Lo seguiré intentando. Sin embargo, les dejó lo que me dió y también la de Deamon.👇👇👇👇

Para la IA así se vería más o menos nuestro precioso Huang, siendo un joven-adulto ❤️🤍

Este sería según Deamon pero le sigue faltando 😭😑