capitulo 10
Con pasos ligeros y su mirada enfurecida yacía el padre de Xiao, con destino a esa dirección donde se encuentra su hijo, sintió una muy leve anomalía y en lo primero que pensó fue en su pequeño que no hace mucho salió de su radar.
Pensando que de alguna manera Xiao volvió a salir de ese lugar sin autorización, es ahí el motivo de su prisa por agarrarlo con la guardia baja y ver cómo lo hace, también quería aprovechar esa excusa para encerrarlo en un lugar más oscuro alegando que sera por su propio bien, uno que al meditar o hacer otra cosa; estaría entregando voluntariamente su energía.
Anteriormente el meterlo ahí fue la primera opción para el padre de Xiao, pero ese lugar aun no estaba terminado y le urgía recluir a su hijo mayor por lo que eligió otro lugar.
—¿Ya sabes lo que tienes que hacer, verdad?—Mas que una pregunta era un recordatorio para Akita, lo que le sucederá tanto a él como las personas que aprecia si llega a desobedecer sus órdenes.
‹Está vez todo tiene que salir bien con mis planes, no puedo permitirme perder como la última vez. Tengo que aprovechar el hecho que Xiao no tiene sus recuerdos de lo vivido en esos anteriores mundos, sino fuera porque mi otro yo me ayudó con eso entonces estaría siendo vencido por ellos nuevamente.› Está es otra de las razones por las que va en busca de Xiao.
El padre de Xiao encontró la manera de hacer trampa, el avisarle a su copia de este mundo que sus planes están por fallar. Haciéndole saber y advirtiéndole que debe exprimir hasta la última gota de Xiao si quiere eliminar completamente a los demonios, antes de que Xiao recupere sus recuerdos y destruya este mundo en base a una simulación.
Al ser este un mundo creado únicamente para probar a Xiao, su padre podía advertirle a lo que vendría siendo una copia de si mismo sobre la evaluar en la que se encuentra Xiao.
La evaluación sobre la decisión de Xiao con respecto al camino que estará tomando; si hundirse en la oscuridad o abrazar esa oscuridad y enseñarles el camino correcto sin perder su identidad. Esas dos son las únicas dos opciones que tenía por elegir Xiao.
En base a lo que elija los dioses de mas arriba tomarán una decisión, si fue lo correcto el permitir que un ser tan brillante como lo es Xiao, se mezclará con tal corrompida oscuridad como lo es Deamon. Más bien ellos, egoistamente y de manera cobarde pusieron tal peso en Xiao cuando desde un principio pudieron solo destruir al ser que amenazaba con la paz de todos los reinos, pero no. Prefirieron quedarse al márgen y ver cómo los involucrados resolvían tal situación.
—Como podría olvidarlo, señor Rirel.—Baja su mirada escondiendo asi esa sofocante impotencia.
No quería mentirle ni volverse una debilidad para el único ser que ha sido tan bueno con él, si Akita hubiera sabido que se volvería un grillete para Xiao entonces hubiese desistido el seguirlo al plano intermedio. Prefiriendo mil veces la muerte a ser usado para empezar una guerra.
‹Me ha dejando en este estado tan deplorable para hacer enojar a mi maestro, quiere que le cuente sobre mi “supuesta lucha” con un demonio inexistente porque a ese que ayudé esconderse ni siquiera tenía fuerzas o movilidad para atacarme... Solo quería evitar una lucha y salvar unas cuantas vidas pero mis acciones solo terminaron complicando las cosas. Ahora, bajo amenaza me estoy dirigido con mi maestro.
Si me ve con estos moretones y ojo hinchado que a penas puedo ver con el, se enojara... No quiero eso pero tampoco quiero ver como el señor Rirel lástima a los hermanos de mi maestro.›
Rirel al no tener a su alcance al demonio que capturó y escapó con la ayuda de Akita; no tuvo otra que recurrir al plan "b" que sería usar al ya mencionado y estimular asi a Xiao. Al apreciar tanto a su asistente el como su contratista tendría que castigar a todo aquél que se atrevio hacer tal cosa.
—Nunca lo olvides sino quieres volverte polvo y jamás reencarna.—No puedo fallar otra vez o seré yo el que termine recibiendo el castigo de los superiores.
Ya tenía ganada está lucha con la destrucción de Xiao y Deamon al poner primero la vida de su hijo ante la de ellos, cuando se destruyeron a ellos mismo yo estaría recogiendo sus almas, volverlas añicos. Sin embargo, ese maldito demonio de Desmodeo, hermano de Deamon. Intervino antes de que pudiera tenerlos en mis manos.
Quiere tanto a su hermano mayor que no le importó perderse en el vacío con tal de recuperar el alma de su hermano mayor y cuñado, gastando sus últimas energías en envíalos a otro pequeño mundo para después ocultar su ubicación. Espero que esté muerto o siga vagando en el vacío porque si lo encuentro le irá muy mal al igual que toda su familia.
—¡Hijo, ha surgiendo un problema!—Entra a ese lugar algo.—Se trata de Akita.—¿Dónde está? ¿Ya se reunió con ese maldito demonio? Este mundo es una prueba y está siendo observado por el creador de todo, pero tampoco significa que se pueda mirar absolutamente todo, no.
Hay cosas que no se pueden saber cómo por ejemplo, si Xiao ya se conoció con Deamon o si su relación ya avanzó al grado de ya estar esperando a ese niño, ese maldito engendro tiene la mayor culpa también.
Solo después de que ellos dos murieran hace cientos de años, me enteré que Xiao acepto su castigo y muerte tan a la ligera porque ya había enviado el alma de ese niño a otro mundo. Poniéndole a salvo y fuera de mi alcance porque no sabría su ubicación, buscarle fue lo más molesto solo hasta que Xiao apareció entonces ese engendró del mala también.
Vi a ese mocoso como un grillete para ellos dos y el cual usaría en su contra en cada mundo, esperando que en una de esas ellos dos terminarán muriendo acusa de su propio hijo es por eso que secretamente le ayude a viajar junto a sus padres, ganándole a Deamon porque también estuvo dispuesto a darle su energía para que viajará con ellos en esas misiones.
El tener algo de control del alma de ese pequeño engendró del mal lo aproveche para ponerlo en situaciones peligrosas, complicadas para sus padres. Como por ejemplo, en el mundo apocalíptico dónde Xiao debió morir tras sacrificarse pero no fue así, desde ahí mis planes empezaron a fallar cada vez más.
—¡Xiao!
Mierda si volvió a salir y si se encuentra con Deamon las cosas se complicaran, Xiao tiene que atacar a esos demonios sin que sepa de la existencia de Deamon. Pero, eso todavía no a sucedió porque según tengo entendido su encuentro sería un...
—¿Padre?—Sale de la cueva que no parecía una por la decoración y los detalles en su construcción.—Por tus gritos casi tengo una desviación... ¡¿Qué te pasó, Akita?!—El aura violeta y opresiva rodea todo su cuerpo mientras toca el rostro herido de su asistente.
Estaría ciego sino reconocería los castigos de este viejo, no puedo seguír llamándole padre cuando es muy evidente lo que está tratando de hacer con esto. Quiere que sea yo, el que inicie el ataque contra los demonios con la situación de Akita como excusa.
Me preguntó, ¿que hubiera hecho si no estuviera al tanto de los planes de este viejo? ¿Atacaría sin pensar el reino de los demonios o trataría de pedir una explicación como seres civilizados?
—¡¿Quién tuvo la osadía de tocarte?!—Interroga agresivamente.
Rirel sonrió disimuladamente tras ver la furia en Xiao, creando que su preparación tendrá éxito. Mirando fríamente a Akita al ver que no le respondía a Xiao.
—Maestro, estos golpes...
[No digas nadas, Akita.] <¡Maestro!... ¿Cómo es qué...?> [Te explicaré después solo diré que ya lo sé todo, no digas nada más. No tengo excusas para defenderme al permitir que te hicieran eso, soy un mal maestro. Anduve comiendo carne mientras tú la estabas pasando mal.] <¿Carne?> No entienden. <Es normal que coma sus comidas para estar saludable, maestro.> Xiao no dijo nada mas no quería romper corromper la inocencia de Akita.
—No digas más, Akita. Puedo oler el hedor de un demonio en ti.—Expreso furioso.—Ya con eso se lo que paso, fuiste atacado y eso no se quedará así. Esas pequeñas cosas tienen que darme una explicación.
Los preparativos para cualquier imprevisto o percance ya estaban listos en ambos lados, uno para defenderse y el otro para atacar que vendría sido el plano intermedio. Bueno, es lo que creía Rirel que sus planes son perfectos y que no habrá ningún inconveniente sin saber que, Xiao y Deamon están mas que listos para acabar con todo antes de que inicie tal guerra. Solo están jugando con Rirel al hacerle creer que tiene todo bajo control.
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