Narra Alexandre

Escuchar esas palabras sentí que el mundo se detuvo para mi, al fin conocería a esas personas que tanto daño me hicieron con tan sólo dejarme vivir toda mi niñez y gran parte de mi adolescencia en un orfanato, deseando a cada momento recibir amor, deseaba tanto el amor de madre. Pero ellos no estuvieron conmigo, a mis dos años ellos me fueron a dejar a las puertas de un orfanato, condenando mi vida a la soledad.

-Enseguida voy, ve a mi casa yo ahora mismo voy para allá.

Colgué y me levanté de la silla, miré a Violette, quien me mira con el ceño fruncido.

-Tengo que irme, hablamos después.

Salí a prisa de la empresa, ignorando a los reporteros que seguían allí me subí al auto y arranqué a toda velocidad.

Si poder evitarlo una lagrima rodó por mi mejilla, esto es algo tan doloroso para mi. Algo que hasta el día de hoy no he podido superar, bueno nada de mi pasado he podido olvidar.

Llego a los portones de mi casa, los guardias de seguridad al reconocer mi auto ligeramente los abren, conduzco hasta la entrada, bajo del auto y a prisa subo los escalones de la entrada.

Abro las puertas de mi despacho con rapidez.

-Y bien ¿quienes son?

Él detective sonrió divertido.

-Siéntate Adrián.

Lo miro mal, él sabe lo mucho que ansío saber quienes son mis padres biológicos. Pero sin embargo le obedezco y me voy a sentar a mi silla de cuero.

-Habla -ordeno

-Estas muy ansioso. Bien, aquí está toda la información de ellos -me pasa un folder con la información dentro -Clara y Antonio Jhoson.

Decidido y lleno de curiosidad abro el folder, en la primer hoja está la información de ella.

Clara Johnson

Edad: 46 años
Estado civíl: casada
Hijos: Dimitrio Jhomson, Clarisa Jhomson, Alexandre Jhomson

Actualmenre ella recide en Madrid, es ama de casa, es de clase social media.

Antonio Johnson

Edad: 48 años
Estado civíl: casado
Hijos: Dimitrio Jhomson, Clarisa Jhomson, Alexandre Jhomson

Actualmente recide en Madrid, labora en una empresa a nivel mundial "Williams Inc."

Dimitrio Johnson

Edad: 23 años
Estado civíl: soltero

Actualmente trabaja en la misma empresa que su padre.

Clarisa Johnson

Edad: 21 años
Estado civíl: Soltera

Actualmente trabaja en la empresa "Williams Interprise", desempeña el cargo de la secretaria presidencial.

Alexandre Johnson

De él no se encuentra nada en los registros, sólo se sabe que sus padres lo dejaron fuera de un orfanato, cuando apenas era un niño.

Sonrío ampliamente al leer la información, esto no puede ser más que fabuloso. Toda mi familia biológica trabaja para mi, ¡vaya que era una grata sorpresa!

-Buen trabajo, detective.

Le miré con una sonrisa macabra. Él sólo negó al adivinar mis pensamientos.

-No vayas a cometer una locura, Adrián. Deja el pasado atrás, no pienses en la venganza, eso no te traerá nada bueno.

-El pasado siempre estará tras de mi, eso es algo que no podré olvidar nunca. Ahora que ya hizo su trabajo, pude retirarse; en unos minutos tendrá su pago en su cuenta bancaria.

Él se levató resignado por no haber podido hacerme recapacitar, eso es algo casi nulo, para que yo cambie de parecer se necesitará más que palabras.

Me levanto de mi silla y me dirijo al mini bar que tengo en mi despacho, me sirvo una copa de wiski.

Saco mi teléfono celular y llamo a mi secretaria.

-¿Señor Williams?

-Quiero que tenga un reporte de mis empleados en la empresa de Madrid, lo quiero para mañana, Señorita.

-Como ordene Señor Williams, ¿desea algo más?

-No.

Colgué la llamada, me llevo la copa a la boca y bebo un gran trago de la bebida.

¿Por qué a ellos si los habían criado con ellos? ¿Por qué razón a mi no me quisieron en sus vidas? ¿Por qué a ellos no le negaron el amor y cariño de padres y la sensación de tener una familia que a mi me negaron?

Esas y más preguntas rondan en mi cabeza. Simplemente no lo entiendo, ¡¿qué hice para que no me quisieran en sus vidas?!

Camino a mi escritorio, vuelvo a leer la información. No me había dado cuenta que había otra hoja, la miro y lo que hay allí me detruye aun más mi corazón y daña mas mi mente, haciendo crecer más mis deseos de venganza. Allí están ellos sonriendo en las fotos, juntos en familia.

Duele, duele bastante el darte cuenta que tus padres no te quisieron. A
pesar que han pasado tantos años, yo no supero el no haber crecido en un hogar. Recuerdos vienen a mi de mi niñez, de la soledad que me abarcaba pero a pesar de eso luchaba por siempre tener una sonrisa en mi rostro, era un niño alegre a pesar de todo, pero la vida se encargó de borrar cualquier rastro que quedaba de él.

Si, me da envidia verlos a ellos felices, verlos juntos. Recordando lo mucho que yo desee tenerlos cuando era un niño. Estaba marcado con eso.

-Tendré que visitar esa empresa -sonreí

Bebí el resto de la bebida y salí del despacho. Salgo de casa, y voy a casa de mis padres, de esas dos únicas personas que me han brindado amor.

Conduzco a toda velocidad en mi auto, al fin llego a su casa, esa casa que fue mi hogar por varios años. Bajo del auto, entro a casa enseguida busco a mi madre, voy al jardín allí está; leyendo un libro. Apresuro el paso y me acerco a ella.

-Mamá -digo con la voz ahogada

Ella al instante levanta la vista del libro y cuando me ve, se levanta de golpe y corre a abrazarme. Sin poder evitarlo lagrimas salen como cataratas de mis ojos. Por primera vez en muchos años me desahogo, y que mejor que en los brazos de tu madre.

-Ellos tienen una familia, mamá. ¿Por qué a mi me negaron eso? ¿Por qué? -dije aquello con dolor, dolor que guardo hace mucho.

-Ya hijo, tal vez era lo mejor. No sabes la razón por la que ellos lo hicieron. No los justifico, pero gracias a eso he tenido la oportunidad de tener un hijo, de uno que estoy realmente orgullosa. Yo te amo hijo -dijo ella sobando mi espalda con las palmas de sus manos.

-Yo también te amo, tu eres mi verdadera madre, pero me es inevitable no poder sentir ese rencor y que me duela, pasé quince años de mi vida en ese orfanato. Sufriendo en la soledad, sufriendo por mi primer amor y no tenía a nadie que me consolara y me dijera que todo iba a estar bien...

-¡Ay hijo! -ella sollozó -no sabes lo mucho que me duele escuchar todo ese sufrimiento que pasaste; pero recuerda que hoy no estas solo, tienes a estos dos viejos que te aman tanto, a estos viejos que les diste la oportunidad de ser padres. Y muy pronto hallaras a una mujer que amarás tanto y se muy bien que ella también te amará. Esa mujer que te ayude a dejar el pasado atrás. Todo estará bien hijo.

Durante unos cinco minutos estuve abrazado a ella, parecía un niño. Me fui separando de ella, le doy un beso en la mejilla y le sonrío.

-Gracias, gracias por todo.

Gracias por leer❤

¿Qué creen? Se me había olvidado que hoy tenía que actualizar 😁, menos mal que el capitulo ya estaba hecho 😉.

PD: Alexandre en multimedia.

Jakelin Amaya