Narra Alexandre

-¿Qué planeas Alexandre? -pregunta mi madre entrecerrando sus ojos.

Abro mi boca para hablar pero me es imposible ya que mi padre me interrumpe.

-Ni se te ocurra mentirnos, Adrián. Tu madre y yo sabemos muy bien que tu no quieres a ninguna mujer, hace no mucho dijiste que tú no te casarias ni mucho menos enamorarte de una mujer. Asi que dinos la verdad.

-Es para ayudarle a ella. Necesita recuperar su reputación, ella estaba desesperada porque todo lo que con grandes esfuerzos construyó se le estaba derrumbando frente a ella.

-No me digas que es Vi...

-Violette Miller -interrumpo a mi madre. Ella ahoga un jadeo

-Pero...

-Esas son mentiras creadas por el desgraciado de su ex novio. Yo nunca me acosté con ella, todo a sido una víl mentira.

Mis padres me ven sorprendidos.

-¡Dios! Mis amigas y yo no fuimos al desfile porque creimos en todas las barbaridades que dijo ese hombre -dijo su madre arrepentida.

-Ella esta muy deprimida, tanto que acepto casarce conmigo

-Tu nunca haces nada sin recibir nada a cambio, te conozco Adrián -dijo mi padre

Sonreí de oreja a oreja, por supuesto que todo lo que yo hacía era buscando un beneficio propio.

-Que bien me conoces padre, estoy harto que la prensa me critique. En fin lo único que busco de ella es eso, hacer creer que he sentado cabeza o descansar al menos un tiempo de cada uno de sus comentarios acerca de mi--- mentí. A mi me daba igual lo que la gente hablaba de mi. Eso no es lo que busco de ella. Es algo que no se lo confío ni a mi propia sombra.

-Bueno, esta de más decir que tienes mi apoyo -dijo mamá sonriéndome.

-Gracias, mamá.

-El mio también hijo.

El resto de la cena la pasamos en silencio, dedicándonos solo a disfrutar nuestra compañía.

Me fui a dormir a mi antiguo cuarto, todo estaba tal y como lo deje hace algunos años. Me doy una ducha antes de acostarme a dormir, necesito relajarme un poco con los sucesos que han pasado hoy.

Antes de acostarme tomo mi telefono celular y llamo a la Señorita Miller.

-¿Hola?

-Buenas noches Violette

-¿Adrián?

-Ese mismo. Te llamaba para recordarte que mañana vamos a hablar con la prensa, voy a pasar por ti.

-¡Oh, cierto! Si usted así lo desea por mi esta bien, ¿a qué horas pasaría?

-A las 8:00am, tengo que resolver algunas cosas antes de la rueda de prensa.

-Bien, entonces lo espero Adrián.

-Pase buenas noches Violette

-Igual usted.

Corté la llamada con una sonrisa en el rostro, no sé ni porqué estoy sonriéndo, pero es algo que no puedo negar, desde que la conocí me sentí ciertamente atraído por ella.

A la mañana siguiente me levanté temprano como es costumbre, me duché y me cambié. Lo bueno es que aquí tengo varios de mis trajes, algunos hasta sin usar.

Bajo al comedor a desayunar, allí ya se encuentran mis padres, mi padre leyendo el periodico y mi madre una revista. Donde curiosamente yo salgo en la portada, son tantas veces las que he salido alli, pero esta vez no sé por qué motivo. Mis padres levantan la vista al sentir mi presencia, al instante me sonríen.

-Buenos días -saludo sentándome en una silla frente a mamá.

-Buenos días hijo -responden mi saludo

Una de las sirvientas me traen el desayuno. Me dispongo a comer tranquilamente, pero la curiosidad me gana y le pregunto a mamá;

-¿Por qué salgo en la portada?

Ella me ve y luego a la revista y sonríe.

-¡Oh! Al parecer ayer dijiste que estas en una relación amorosa con Violette. Y eso lo toman como una confirmación de lo que dijo el modelo.

Sabía que esto bien podría beneficiar o poner peores las cosas. Pero de algo estaba seguro, ese hombre no se saldrá con la suya, de eso me encargo yo.

-Hoy les daré más de que hablar -sonrío maliciosamente.

Cuando termino mi desayuno me despido de mis padres prometiéndoles que por la tarde traiga a la Señorita Violette a cenar para poder conocerla más de cerca.

Subo a mi auto y conduzco fuera de la propiedad de mis padres. Primero pasaré por su casa que está un poco cerca de la de mis padres, después pasaré por la mía, allá tengo mi portafolio y varios documentos importantes.

Llego a la residencia de ella, hago sonar el claxón, salgo del auto mientras espero pacientemente por ella. Quién a los segundos sale, se ve hermosa, trae un vestido tallado a su cuerpo, color azul y una chaqueta negra, tacones y cartera negros y unos lentes de sol. El cabello suelto, dejando ver los hermosos risos que se le forman.

-Se ve usted hermosa Violette.

Ella sonríe timidamente.

-Gracias, usted también se ve bastante bién Adrián.

Yo solo le sonrío y asiento, rodeo el auto y abro la puerta de copiloto para que ella suba, lo hace y me da una sonrisa en agradecimiento. Cierro la puerta con cuidado y subo al auto, arranco y conduzco a mi casa.

-Primero pasaré por mi casa si no le molesta Violette -dije sin quitar mi vista de la carretera

-No hay ningún problema.

-Mis padres quieren conocerla, van a preparar una cena en honor a usted.

-Eso sería estupendo, varias veces he visto a la Señora Williams -dijo sonriéndo.

-Lo es.

Esa fue la única conversación que tuvimos de camino a mi casa.

-Vamos -le dije cuando llegué a casa.

Bajo del auto seguido por ella, frunzo el ceño al ver un auto que no es mío y que conozco muy bien de quién es.

-Ven -llamo a Violette, ella se acerca a mi. La tomo de la cintura mientras caminamos a la entrada, ella se tensa al instante -Tranquila.

Abro la puerta y entramos, tal y como lo imaginé, en el recibidor allí se encuentra Tiffany.

-¡Entonces es cierto! -grita furiosa al vernos entrar.

-¿Qué haces aquí?--- pregunto mirándola con seriedad.

-¡No puedo creer! ¡¿Me cambiaste por esta zorra que se acuesta con cuanto hombre se le aparezca?!

-¡Cállate! -suelto a Violette y me acerco a Tiffany -En tu miserable vida le vuelves a llamar así, la vas a respetar, esta también es su casa y no voy a permitir que vengas a insultarla en su propia casa. Ahora vas a tomar tus cosas y te vas a largar de mi casa.

-¡¿La prefieres a ella que a mi?! ¡Te será infiel cada que tenga oportunidad!

-Te dije que te callaras, ella no es así. Además vienes a criticar a Violette cuando tú me fuiste infiel diversas veces, yo no soy estúpido Tiffany, yo sabía bien eso. Escuchame muy bien Tiffany y grábatelo en tu cerebro; la prefiero a ella una y mil veces. Ahora ¿qué esperas para marcharte? Nos estas atrasando.

-Te arrepentirás Adrián. Te lo aseguro -dijo saliéndo de mi casa.

-Palabrerías -susurro mientras camino a mi despacho en busca de mi portafolio.

Vuelvo a la sala donde se encuentra Violette sentada en uno de los sofá con la mirada perdida. Me voy a sentar a un lado de ella, tomo su cara delicadamente, haciéndo que me mire.

-Escucha Violette, no dejes que las palabras de los demás te afecten, al menos no el de una persona que no quieres y mucho menos sabes que todo son puras calumnias, las personas siempre estarán hablando de ti, buscarán el más minimo error y si no lo hallan lo inventaran. En este momento tienes que ser fuerte y no derrumbarte, tienes que saber que hablarán de ti y la mayoría no serán cosas buenas. Tienes que estar preparada e ignorar cada una de esas palabras.

Ella escucha atentamente mis palabras.

-Es muy dificil, toda mi vida he estado escuchando criticas respecto a mi persona. Todas esas palabras no me afectaban mucho, pero... ahora si, de mi reputación dependen mis negocios y lo que me pone más mal es que todas esas calumnias son completamente una farsa.

-Bien, entonces levanta el rostro y vayamos a dar esa entrevista. Respondes a cada una de sus preguntas. Pero tienes que tener presente que puede que esto empeore las cosas o las mejore.

-Vamos -se levanta decidida y camina hacia la salida, yo imito su acción y salgo de casa.

Al llegar a mi empresa, observo que varios reporteros ya se encuentran esperando por nosotros. Cuando nos ven entrar, sin molestarse en disimular nos toman fotos, pero no preguntan nada.

Tomo a Violette de la cintura guiándola hacia el ascensor. Ella a permanecido en silencio y parece que está en otra galaxia, ida en sus pensamientos.

A de ser muy dificil su situación; tener que casarce con alguién que no amas y no conoces nada en lo absoluto, no es nada grato. A parte de que ha perdido a varios de sus socios y eso le ha causado grandes bajas a sus empresas.

-Tranquila, todo esto pasará y se convertirá en un amargo recuerdo. Sólo será cuestión de paciencia y esfuerzo -le dije tratando de animarla

-Nada es seguro -dijo soltando un largo suspiro.

-Nada lo es en la vida. Ahora sal de ese mundo y concentrate en lo que dirás a la prensa, no olvides nada de lo que diremos.

Ante mis duras palabras ella me observo seriamente y asintió.

-No te preocupes. Recuerdo cada frase de lo que diré.

-Eso es excelente. Si te equivocas la única que saldrá perjudicada será usted, Violette. Yo no, así que una vez más, concentrese.

Ella tensó su mandíbula y asintió.

Las puertas del ascensor se abrieron dejándonos en el último piso. Ambos salimos y caminamos hacia mi oficina, me fijo que mi secretaria ya se encuentra en su lugar de trabajo.

-A mi oficina, ahora -le ordeno.

-Enseguida, Señor Williams.

Entro a mi oficina seguido de Violette y mi secretaria. Me siento en mi silla giratoria, enciendo el ordenador mientras le ordeno a mi secretaria lo que tiene que hacer.

-¿Qué tengo en mi agenda?

-Después de la rueda de prensa, tiene una videoconferencia con el Señor García, seguido de eso tiene un almuerzo con el señor Hoffman para tratar la inversión en Alemania...

-Muy bien, cancela lo de que tengo que hacer por la tarde y pásalo para el lunes de la próxima semana -interrumpo a mi secretaria.

-Pero Señor, hoy tiene una reunión con los directivos de la empresa.

-Pues paselo para el lunes.

-Pero...

-¡Señorita usted sólo acate mis ordenes!-exclamo irritado, ella bajó la cabeza avergonzada y asintió.

-¿Desea algo más? -pregunta

-No, retírese y vaya a hacer lo que le ordené.

-Con su permiso -dijo dándose la vuelta y retirándose de mi oficina.

-No deberías de tratar a los empleados así -la escucho decir.

-A veces es necesario hablarles de ese modo para que hagan las cosas de manera eficiente -dije sin voltear a verla.

-Cuando un empleado es tratado de mejor manera se siente más relajados y hacen mejor su trabajo.

-Lo único que lograría con eso sería tener una bola de empleados holgazanes, se necesita dureza para dirigir una empresa, si yo fuera blando no tomarían en serio mis ordenes.

-Si, pero...

-Silencio, no me pondré a discutir sobre como debo tratar a mis empleados. Ahora le agradecería si hiciera un poco de silencio, necesito trabajar.

Luego de una hora en la que ambos estuvimos en silencio, mientras yo trabajaba ella hacía lo mismo desde su ordenador. Mi secretaria entró avisando que ya todo estaba listo para la entrevista.

-Vamos -le dije a Violette.

Ella sólo asintió y se levantó de uno de los sillones que se encontraban en mi oficina. Paso mi brazo alrededor de su cintura, sin ser brusco le empujo para que camine fuera de mi oficina.

Entramos al ascensor ejecutivo mientras mi secretaria subía otro que es para los empleados que trabajan en el último piso.

Aparto mi brazo de su cintura y le tomo la mano. Ella se tensa al instante.

-Tranquila.

-Lo lamento, pero se me hará muy dificil adaptarme a estos simples roces con usted.

-Créeme a mi también, sin embargo lo intento. Deberías hacer lo mismo.

Ella se limitó a asentir con la cabeza, no dijo nada más durante ibamos en el ascensor.

La entrevista sería a fuera de
la empresa, justo al frente. El ascensor abrió sus puertas permitiendonos salir de él. Hale a Violette de la mano para que saliera de él, claro sin ser brusco.

-Sabes lo que vamos a decir ¿Cierto?

-Por supuesto, cariño -dijo sonriendo con falsedad.

-Muy bien.

Salimos de la empresa, los flash de las camaras nos segaron los ojos, y desde ya comenzaron las preguntas. Caminamos hacia el podio donde hay microfonos de los distintos canales de televisión.

-Muy buenos días, como se les comunicó ayer, el día de hoy les contestaremos todas sus dudas y sobre todo la Señorita Miller aclarará todo este escándalo que ha surgido. El que quiera hacer una pregunta levante la mano. Sin más que decir, pueden comenzar.

Una mujer levantó la mano, yo asiento y ella procede a preguntar;

-¿Usted y la Señorita Miller tienen alguna relación aparte de laboral?

Gracias por leer ❤❤

No pude (o más bien me dió pereza😁) revisar el capítulo. Cualquier error me lo notifican por favor.

He decido regalarles un capítulo en agradecimiento de esos 17K de lecturas y de los YA CASI 2K de votos. Los amo 😘😘 y mil gracias, son los mejores lectores que jamás imaginé tener.

¡PREGUNTA!

1.¿Qué creen que es lo que Alexandre busca de Violette?

Nos leemos el sábado😙😙😙

J.A