Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 17 | Hannah [Primera parte]

-Hannah-

Logan se ha ido a duchar y a cambiarse mientras Colton, Steph y yo salimos del lugar.

— ¡Haynes! —grita alguien a mis espaldas. Colton alza la mano y saluda a quien sea que le haya gritado. 

— ¿Qué hay, Jeff? —dice y sé que la persona que le gritó está acercándose.

—No mucho. ¡Lerman está mejor que nunca! —dice el chico que se ha acercado a nosotros. Noto, claramente, que se trata de otro boxeador. Son impresionantes. Su espalda siempre es angulosa y sus caderas estrechas.

Jeff tiene rasgos afroamericanos, lo que le da un aspecto exótico y llamativo.

—Es el favorito éste año —dice Colton y noto un destello de orgullo en su voz. Una sonrisita se forma en las comisuras de mis labios. Apenas puedo disimular el gusto que me da que lo de Colton sea competencia sana.

—Que no se confíe, que yo también me he preparado —dice Jeff cruzándose de brazos.

Colton rueda los ojos al cielo. — ¿Viste lo que hizo?, ¡Noqueó a Jason!, ¡en tres golpes!; no se lo digas, pero creo que éste es su año.

—El año pasado pudo haber sido su año —dijo Jeff haciendo una mueca de tristeza—. De no ser por aquel problema en el que estuvo implicado, estoy seguro que habría ganado. A tan pocos días de la final, debió ser devastador para él. Todo ese desgaste emocional y físico… No son las mejores condiciones de ser derrotado.

 Todo mi cuerpo se tensa y aprieto la mandíbula. Me obligo a mantener la boca cerrada para no preguntar todo lo que quiero saber acerca de lo que pasó. Me digo a mi misma que voy a  preguntárselo a él cuando estemos a solas.

Unos brazos fuertes se enredan en mi cintura con seguridad y el aroma a loción, desodorante y jabón me inunda. Un beso suave es depositado en mi mejilla y sonrío. —Hola, hermosa —susurra la voz tranquila y ronca de Logan justo en mi oreja, y un escalofrío recorre mi espina dorsal.

 Me giro sobre mi cuerpo y enredo mis brazos alrededor de su cuello. —Hola, ahí —susurro parándome sobre mis puntas para dejar un beso fugaz en sus labios.

— ¿Irán a la fiesta de inicio de temporada? —pregunta Jeff a mis espaldas.

— No lo sé —dice Colton—, ¿qué dicen ustedes?

—Yo digo que quiero pasar tiempo con Hannah —dice Logan y me ruborizo.

—Yo digo que vayamos a esa fiesta un rato —propone Steph.

Logan me mira y me pregunta—: ¿Quieres ir?

Me encojo de hombros y sonrío. —Suena bien.

—Vamos entonces —una sonrisa fácil se desliza por sus labios y me guiña un ojo—. ¿Te quedas en mi departamento hoy?

Siento el rubor extendiéndose por mi rostro al recordar lo que estuvimos haciendo en su camerino. Ni siquiera quiero imaginar qué puede pasar si estamos los dos solos en su departamento. Me encojo de hombros, intentando lucir despreocupada y asiento.

De pronto, su mirada se oscurece varios tonos y toda sonrisa se desvanece de sus labios. El aliento escapa de mis pulmones y mi corazón comienza a latir con fuerza ante la intensidad de su mirada.

Media hora más tarde, estamos entrando a una discoteca abarrotada. Las luces de neón inundan todo el lugar. La música electrónica retumba en las bocinas mientras avanzo hasta la barra, tomada de la mano de Logan. — ¿Bailas? —medio grito en su oído.

Él me mira con horror y niega con la cabeza. —Ni de broma —me responde medio gritando.

Una sonrisa traviesa pinta mis labios y tiro de él hacia la pista de baile.

— ¡Oh, no, cariño!, para eso tengo que estar muy borracho —dice tirando de mí.

— ¡Oh, vamos! —pido y soy consciente de que estoy haciendo un puchero ridículo.

Él rueda los ojos pero me sigue hasta el bullicio de gente sudorosa y danzante. Comienzo a balancearme al ritmo de la música, con toda la intención de lucir sexy, pero no estoy segura de estar lográndolo. Nunca he sido una experta en el arte de la seducción. Soy más bien, torpe y ridícula. Sus manos se anclan a mis caderas y me atrae a su cuerpo, envolviendo sus brazos en mí en un gesto posesivo.

Enredo mis brazos en su cuello y comienzo a balancearme al ritmo de la música. No me importa que esté sonando una canción que no se baile de ésta manera. Lo único que quiero es que me sostenga el resto de la noche.

Besos dulces y apasionados son depositados en mis labios y los correspondo con avidez. No me importa si la gente está viéndonos, ni siquiera me importa si ya no estamos bailando.

—Necesito una bebida ahora mismo —masculla Logan contra mi boca. 

Una risa idiota brota de mi garganta y nos encaminamos directo a la barra. Logan pide whisky y yo una piña colada. Colton y Steph se han perdido en la multitud desde hace rato, así que buscamos un lugar apartado para poder tontear un rato más antes de marcharnos.

Casi al fondo del lugar, encontramos un par de pubs privados. Logan es el campeón de la pelea, así que lo dejan entrar sin decir nada. Nos sentamos en los sillones de cuero y Logan no ha parado de decirme lo mucho que le gusta mi vestido.

Después, comienza a señalar gente disimuladamente, diciéndome quiénes son novatos y quienes llevan años boxeando.

— ¿Tú eres un veterano, entonces? —pregunto terminándome mi segunda piña colada.

Logan niega con la cabeza. —Aunque no lo creas, soy relativamente nuevo. Apenas entré al campeonato hace dos años. Éste es mi segundo año.

Mis cejas se disparan al cielo, con asombro. — ¿Sólo dos años y ya eres el favorito para ganar el campeonato?

Noto cómo su mirada brilla con diversión y sonríe. — ¿Quién te ha dicho que soy favorito?

—El amigo de Colton, Jeff, lo mencionó —digo.

Sacude la cabeza y sonríe. —He entrenado box desde los catorce, pero nunca intenté nada. Siempre me llamó la atención pero nunca traté de entrar a algún torneo o campeonato. No fue hasta que conocí al entrenador Davis que me decidí a intentarlo.

—Eso es bastante impresionante —digo, porque realmente lo pienso.

Logan se encoge de hombros y niega con la cabeza. —No lo es —dice, medio sonriendo.

—Para cualquiera lo es —digo, acercándome un poco más a él.

Su brazo se envuelve en mi cintura y me acerca aún más. Casi estoy sentada sobre su regazo.

— ¿Te he dicho lo bien que te ves en ese vestido? —murmura dejando un beso ardiente en el punto donde mi cuello y mandíbula se unen. Un escalofrío recorre mi cuerpo mientras aprieto el material de su camisa en un puño.

— ¿Dónde está tu puñado de putas, Lerman? —dice una voz masculina a mis espaldas y siento a Logan tensarse por completo. Hundo la cabeza en el hueco de su cuello, intentando que note lo poco que me importan los comentarios de otras personas.

—Vete a la mierda —espeta Logan, enredando sus brazos a mi alrededor de forma posesiva.

Una risa resuena detrás de mí y ni siquiera quiero ver al idiota que está a mis espaldas. —Debe ser fabulosa en la cama para que sólo la tengas a ella ésta noche.

Logan se pone de pie de golpe, interponiéndose entre el imbécil que está hablando y yo. Me pongo de pie de inmediato. Lo único que puedo ver es la espalda de Logan, pero sé que está furioso. Irradia ira por doquier.

—Repite eso y te sacaré la mierda —lo oigo decir. Todo mi cuerpo zumba del miedo. No quiero que se meta en problemas por mi culpa. Enredo mis dedos en su muñeca y le doy un apretón suave.

—Déjalo —susurro para que sólo él me escuche—. No te metas en problemas. Por favor, vámonos.

Logan no se mueve. Sigue enfrentando al tipo. —Logan —digo con más firmeza—, por favor.

Siento cómo se tensa aún más, pero termina envolviendo sus dedos entre los míos, apretándolos con demasiada fuerza. Tiro de él, alejándolo de la escena y me sigue.

— Te amarraron bien la correa, ¿no es así, Lerman?

Logan suelta mi mano y todo sucede tan rápido que apenas puedo registrarlo. Logan estrella su puño contra el rostro del chico, el cual está claramente borracho. Éste cae sobre la mesa, haciendo estrellar las botellas de cerveza en su espalda. Un jadeo colectivo inunda la estancia. Sus amigos miran a Logan con miedo y coraje.

—No te metas conmigo —la tranquilidad con la que habla me pone la carne de gallina. ¿Cómo puede sonar tan sereno y… satisfecho?

Todo mi cuerpo tiembla y no sé si es por el coraje que está invadiéndome, por el miedo o por la adrenalina. ¿Acaso tiene que arreglarlo todo con golpes?, ¿Siempre será así?...

Me giro sobre mis talones y me echo a andar en dirección a la salida. Estoy confundida, aterrorizada, molesta y ni siquiera sé muy bien el motivo.

— ¡Han! —lo escucho gritar a mis espaldas, pero no me detengo.

— ¡Han, espera! —grita y aprieto el paso. Estoy cerca de la salida.  Necesito un momento. Necesito unos minutos a solas para ordenar mis pensamientos y está siguiéndome. Necesito estar sola.

El aire helado me golpea el rostro en cuanto salgo del lugar. El silencio es un claro contraste con el interior de la discoteca. — ¿Puedes decirme qué diablos hice ahora? —espeta la voz de Logan a mis espaldas y me giro sobre mis talones para encararlo.

— ¿Tanto te molesta que digan que estás con alguien? —Suelto antes de que pueda pensar en mis palabras.

— ¡Estaba defendiéndote! —espeta. Está furioso, puedo verlo en su expresión.

— ¡Estabas defendiéndote a ti mismo! —Casi grito—, ¡lo golpeaste porque dijo que te tenía atado de una maldita correa, no porque me hubiese dicho zorra!

Un destello de una emoción que no puedo reconocer surca sus facciones y aprieto los puños. ¡Eso es!… Estoy molesta porque estaba probándole al mundo que nadie lo controla. Que nadie lo domina. Que nadie es su dueño. Que es tan libre como le plazca y que puede botarme en el momento en el que le plazca sólo para probar su punto.

—Eso no es cierto —dice, pero noto la vacilación en su mirada.

— ¿No? —Lo reto—, ¿no fue por eso, Logan?, ¡si tanto te cuesta desprenderte de tu libertad, adelante!, ¡eres libre!

Le doy la espalda. No sé qué hacer. Me siento impotente.

Creía que él realmente quería algo en serio conmigo, pero si no está dispuesto a sacrificar un poquito de su libertad, ¿cómo se supone que va a darme mi lugar como… como lo que sea que soy en su vida?

— ¿Estás terminando conmigo? —su voz tiembla ligeramente.

Mi corazón da un vuelco furioso dentro de mi pecho cuando lo dice. Me giro para mirarlo y siento las lágrimas picando en mis ojos. —N-Ni siquiera sabía que teníamos algo —susurro con un hilo de voz

Él desvía la mirada, avergonzado. —Asumí que… —se aclara la garganta—, que estábamos juntos. Asumí que teníamos una relación. Yo asumí que eras…, mi novia.

Mi corazón late con fuerza, pero me obligo a mantenerme en mi lugar. Una parte de mí quiere correr a abrazarlo y la otra, la más orgullosa, quiere que sea él quien se acerque, porque aún sigo furiosa, porque aún sigo sintiendo que va a dejarme a la menor provocación.

—N-No puedes decir que soy tu novia si vas a estar probándole al mundo que no le perteneces a nadie —mi voz suena inestable por el torrente de emociones encontradas que me invade.

—Te pertenezco a ti —susurra con la voz entrecortada y todas mis defensas caen en ese momento—. Te pertenezco a ti, Hannah. Y si tú me dejas, quiero que me pertenezcas. Quiero… —niega con la cabeza. Sé que está tratando de encontrar las palabras correctas para decir, pero no sabe que ha dicho las únicas que quería escuchar.

—Ven aquí —susurro con un hilo de voz, pero no se mueve.

 ven aquí —susurra y es todo lo que necesito para caminar tropezando con mis propios pasos.

Me atrapa cuando me abalanzo sobre él en un abrazo intenso. Mis pies dejan de tocar el suelo cuando me eleva y envuelvo mis brazos en su cuello, besando sus labios con ferocidad. Nunca había sido tan inestable en mi vida. Nunca me había sentido al borde de las emociones como me siento en éste momento. Jamás había estado furiosa, eufórica y feliz al mismo tiempo.

Me aterroriza el poder que tiene Logan sobre mí. Me horroriza lo que puede provocarme. Me perturba el modo en el que saca lo peor y lo mejor de mí..., todo al mismo tiempo.

—Vamos a casa —murmura contra mi boca—. Aún no termino contigo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro