Park no sabía que hacer o que pensar.

Estaba distraído y algo nervioso. ¿Por qué había dejado ir al rebelde? Se supone que tenía que atraparlo. Se supone que tenía que llevarlo y entregarlo.

¿Por qué no actuó? ¿Por qué mintió?

Se sentía mal consigo mismo, se había preparado para esto, había personas que confiaban en él, era su trabajo, pero no había hecho las cosas como debía.

Era una decepción, para él mismo, para sus compañeros y para sus superiores.

— Park, ¿Que sucede?— Una voz femenina llamó su atención.

— ¿De qué hablas?

— Estás actuando extraño, antes estabas cayado porque estabas concentrado en las calles, pero ahora solo estás perdido en tu cabeza... ¿Está todo bien?

— Si, yo... Solo estoy pensando.

— ¿Es por lo del rebelde?— Habló esta vez Wang.

— ¿Por qué lo dices?— Frunció el ceño, algo nervioso. ¿Se habían dado cuenta de su mentira?

— Se escapó y comenzaste a actuar así desde que lo perdimos... Escucha, se que eres bueno en lo que haces, pero no siempre las cosas salen bien, se escapó ¿Y qué? Ya lo atrapará algún otro guardia, mientras nosotros seguimos buscando por esta zona, no es tu culpa.

Oh, solo era eso...

— Lo sé, solo me molesta haberlo perdido cuando lo tenía tan cerca.

— Habrá más oportunidades, tranquilo.

Park solo asintió y volvió a mirar por la ventana.

(...)

¿Cuanto había pasado? Dos horas tal vez...

Las calles parecían vacías, pero era normal, o eso creía, pues no había nadie alterado.

Choi estaba increíblemente concentrado en una de sus correas mientras le hacía y deshacía nudos. Wang seguía concentrando en las calles y Shin estaba... ¿Dormida?

Vaya equipo, agradecía que tenían buena reputación porque sino fuera así... No sabría que pensar.

Todo era tan aburrido que estaba a punto de decir que volvieran a la base. Más un movimiento lo alertó, tanto a él como a Wang.

— ¡Allí!— Dijo, alertando esta vez a Choi y despertando a Shin.

Los cuatro bajaron rápidamente del vehículo y corrieron hacia donde una chica se había metido.

Parecía ser un bar, cerrado y viejo, pero ella se había escondido allí.

Wang abrió la puerta, notando que no solo estaba esa chica allí, sino que también habían dos niños.

Los pequeños lloraban mientras se escondían detrás de ella, aunque esta solo parecía ser una adolescente.

— ¡Por favor, no nos hagan nada! No soy una rebelde, mis hermanos habían escapado y solo fui a buscarlos, ellos no entienden todo esto, y no podía dejarlos solos en la calle, por favor...

Ninguno de los guardias escuchó.

Shin fue directamente a por los niños, quienes lloraban más fuerte al ser separados de su hermana. Wang esposaba a la chica quien lloraba mientras pedía perdón por sus actos.

Choi revisaba el resto del bar, vigilando que nadie estuviese escondido.

Y Park... No sabía que hacer.

¿Deberían arrestar a tres niños por una equivocación?

¿Que sucedería con ellos?

Nunca se había oído que soltaran en libertad a rebeldes, pero estos niños no podían serlo, ni siquiera deberían saber lo que era ser un rebelde. Y por supuesto que unos niños pequeños no entenderían la ley, no tenían la culpa de huir de su casa y ser atrapados.

Pero no podía ayudarlos, no podía liberarlos o seria catalogado como traidor al tratar de ayudar a un rebelde.

Aunque ya lo había hecho.

— ¡Park!— El llamado de Wang lo trajo nuevamente a la realidad.

— Dime.

— Lleva a la rebelde y a sus hermanos a la camioneta, iré a ayudar a Choi mientras Shin registra a los niños.

Park solo asintió y tomó a la chica por los hombros mientras mantenía a los niños a su lado, las cadenas los conectaban así que era imposible que uno se le escapara.

Mientras caminaba hacia la camioneta sentía los llantos de los niños, y el temblor del cuerpo de la chica.

¿Tan terrible era ser arrestado? No los dañarían, solo los tendrían atrapados.

¿No era así?

— Por favor, nosotros no somos rebeldes, siempre respetamos la ley, por favor...— Ella hablaba tan bajo que apenas era audible, estaba seguro de que también lloraba.

Su corazón estaba acelerado.

¿Por qué se sentía tan mal? Solo estaba respetando la ley y haciendo lo que le habían enseñado.

Solo faltaban unos pocos metros paga llegar a la camioneta y los niños lloraban aún más fuerte.

No podía hacer eso... solo eran niños.

Rápidamente se desvió, mirando hacia atrás. Sus compañeros aún estaban dentro del edificio, era bastante grande y el proceso de registro tardaba.

— Caminen y no hagan demasiado ruido.— Dijo bajo pero con un tono determinado.

Ella sólo asintió, sin entender que sucedía.

Al llegar al costado de un edificio un poco más alejado, miró a su alrededor chequeando que no haya ningún guardia cerca, y sacó unas llaves de su bolsillo.

Con suma rapidez abrió las cadenas de los niños y de la adolescente. Bajó un poco su máscara y acercó su rostro al de la chica, obligándola a mirarlo.

— Mírame y escucha.— Ella asintió. — ¿Cual es tu nombre? Responde rápido.

— Sohyun.— Respondió ella asustada.

— Bien Sohyun, ahora correrás con tus hermanos lo más rápido y lo más lejos que puedas y te esconderas. Tendrás que llevarte las cadenas, no puedo quedarmelas o sabrán que te ayudé.— Ella asintió desesperada. — Esperaré diez segundos y comenzaré a gritar y a disparar, parecerá que un grupo de rebeldes te ha rescatado, no entres en pánico, no te asustes, no pares y no des la vuelta, solo corre con tus hermanos y si sabes de alguien cerca de aquí pide ayuda para esconderte.

Ella volvió a asentir.

Jimin se alejó un poco y le hizo señas. Contaría hasta tres.

Uno...

Ella se acercó a él y lo abrazó, susurrando un gracias en su oído.

Dos...

Tomó las manos de sus hermanos mientras uno de ellos, el cual parecía un poco más grande, cargaba las cadenas.

Tres...

Park hizo una seña y ellos empezaron a correr.

Él comenzó a caminar rápidamente hacia la camioneta, notando que sus compañeros aún no salían. Mientras tanto comenzó a contar hasta diez en su mente.

Desarreglo un poco su ropa y su cabello, y al momento en que terminó de contar, se echó a correr a la dirección contraria.

Y comenzó a gritar mientras disparaba unas dos veces.

— ¡Hey! ¡Quietos ahí!— Siguio corriendo.— ¡Deténgase, ahora!— Dobló a un callejón y esperó.

Unos cuantos segundos después, sus compañeros fueron a su ayuda.

— ¡Park! ¡¿Qué sucedió con los niños?!— Dijo Shin exaltada.

— Un grupo de rebeldes, cinco tal vez, me vieron solo con ellos y atacaron, se los llevaron.— Decía "Enojado"

Para dar un poco más de realismo a su actuación, casi comenzó a correr hacia el vehículo, los demás lo siguieron.

— ¡Esos hijos de puta! — Maldijo Wang enojado.

Una vez estuvieron los cuatro dentro del vehículo, Wang comenzó a conducir apresurado hacia donde Park le indicaba dónde habían ido los rebeldes.

Un tiempo después, el grupo se había rendido. Shin notificaba el altercado, obviamente recibiendo un regaño por parte de los superiores. Park debería prepararse para conseguir un castigo, pues había perdido cuatro rebeldes en lo que iba de su jornada.

Desgraciadamente, antes de terminar su horario, Choi logró ver a un rebelde escribiendo las paredes con mensajes de su estupida rebelión. No le permitieron ayudar esa vez.

Vio como capturaban al hombre, lo esposaban y lo subían a la parte trasera del vehículo.

Wang los dirigió a la base, donde más guardias los esperaban, recibiendo al hombre. Tratándolo como una bestia, una basura y poco más. Como si no fuera humano y no tuviera sus mismos derechos.

Y aunque al llegar no solo le gritaron que era una decepción para todos ellos ahí, que estaba entrenando para tener lo que él tenía y muchos solo podían soñar, sino que también lo encerraron en una habitación blanca por 24 horas, aludiendo que de esa manera aprendería a ser más responsable.

Él no pudo pensar en nada de eso. Solo pudo enfocar su mente en esos cuatro rebeldes que dejó escapar, deseando que nadie los hubiera encontrado y que estuvieran bien en sus hogares. Y esperando que al hombre que habían atrapado no le hicieran daño, que lo trataran de buena manera, que recibiera su condena, pero que lo trataran como un igual, pues solo era un hombre común y corriente -Igual que ellos- Que solo había escrito una pared. No había dañado a nadie.

Pues en su entrenamiento nadie nombraba esto.

Y desde su perspectiva, los monstruos parecían ser otros... Unos con doble cara.

(...)

Decidan:

Tae y Yoongi salen a buscar a Jimin ➜

Tae y Yoongi NO salen a buscar a Jimin ➜

Hola, ¿Como están?

Piensen bien que hacer, porque es MUY importante para la historia ❗

Por otro lado, estoy actualizando hoy porque mañana me voy a vacunar, así que para distraer los nervios me puse a escribir. Me dan miedo las agujas, o bueno, cuando se trata de medicina me dan miedo, porque cuando me hago tatuajes o piercings no jajaja.

Deseenme suerte...

Nos vemos ♡

-Yaz.