Amo a mi mamá y a papá, pero no de la forma en que te amo a ti. Oh, por Dios, eres la niña de mis ojos, chica, nunca había amado a nadie como tú. Chico, oh, eres mi mejor amigo, lo grito a la nada. No necesito nada. Excepto un pastel de calabazas y chocolate. Oh Dios, nadie me complace más que tú. Oh, hogar, déjame volver a mi hogar, mi hogar está donde sea contigo.

Home — Edith Whiskers

William se levantó y lo primero que hizo fue verme.

—¡Maldita desgraciada! —Matthew le dio un golpe en la cabeza— ¿Y eso por qué? —preguntó él adolorido. Los demás comenzaron a despertarse por el grito de William.

—Imbécil, ¿por qué gritas? —Sirius se levantó de mala gana y yo automáticamente miré a James que seguía dormido.

—¡Lexi! —Peter fue el primero en darse cuenta de que estaba despierta y se acercó rápidamente hacia mí para abrazarme.

—Estoy bien Peter —le devolví el abrazo y miré como Tyler se acercaba a James con una sonrisa maliciosa—. Tyler, detente.

—Ni hablar, todos estamos en las mismas condiciones y lo único que quiero es vengarme de él por una broma que me hizo —rodé los ojos y mire a Remus que se acercó a mí con una sonrisa.

—Menudo susto nos has dado Lexi, he estado a punto de tirarlos por la Torre de Astronomía... Todos estábamos preocupados, pero por Merlín, sin duda fueron una pesadilla.

—Cállate Remus que tú también fuiste un insoportable —contraatacó Sirius.

—Maldita sea, no vuelvas a hacer eso de nuevo... Estas dos semanas fueron una tortura sin ti —me reí por la ocurrencia de Marlene y Dorcas también se acercó sonriente.

—Tampoco es como que quisiera hacerlo —abrace a Dorcas y todos miramos a Tyler.

—¿Qué le vas a hacer? —le pregunto Mia a mi hermano.

—Solo una pequeña broma... Asher necesito de tu ayuda —Asher se acerco divertido a Tyler, ellos dos juntos daban bastante miedo.

—¿Qué hago? —le pregunto Asher.

—Esto será interesante —dijo Andrew que estaba al lado de Matthew.

—Acabará mal —hablo Michael viendo divertido la situación.

—100 bromas que acabaron mal —dijo Finn riendo, todos lo miramos confundidos—. Yo me entiendo.

Tyler pintó la cara de James delicadamente y me miró.

—Necesito que hagas que él este vestido de princesa —podía hacerlo, pero no quería que James se enfadara conmigo. Eso no me lo creía ni yo, claro que quería ayudar.

—Lo haré yo, ella aún está un poco débil para hacer magia —William se acercó a Tyler y con un movimiento de varita James estaba vestido de princesa.

El vestido era rojo con mangas de encaje, ¿Cómo le podía caber? Era un misterio. Tenía una corona dorada y miré hacia abajo y también tenía unos tacones rojos.

—Pero, ¿por qué de princesa? —Remus miró hacia James con una expresión divertida y también confusa al mismo tiempo.

—Porque es la princesa de Gryffindor además le haré una foto para amenazarlo —miro a Asher— Asher, ¿listo?

Asher con una gran sonrisa asintió.

—Bien, adelante —Tyler agarró la cámara y empezó a grabar.

—¡JAMES! —Asher había colocado su varita en su cuello y James se cayó de la silla por el grito asustado. Tyler y Asher soltaron una gran carcajada al ver la situación.

—Maldita sea —se levantó adolorido, pero volvió a caerse por culpa de los tacones y todos soltamos una gran carcajada— ¡Qué demonios! —se miró y luego nos miró a nosotros.

—¡Sorpresa! —Tyler le gritó mientras le grababa y Marlene le hacía fotos.

—Maldito imbécil —James se quitó los zapatos y Tyler corrió fuera de la enfermería seguido de un James demasiado enfadado.

—Idiotas —dijo Remus mientras se golpeaba la frente.

—¿En serio te gustaba Potter? —susurro William que me miraba.

—Es idiota, pero es bueno —le contesté con una sonrisa.

—Bueno mujer, pero créeme que hay mejores —William era sobreprotector de eso no había ninguna duda.

Ahora tenía que lidiar con dos hermanos sobreprotectores.

—O mejor con nadie, mejor estar soltera hermanita —soltó a la par Matthew, estos dos me volverían loca.

—Vosotros dos sois unos sobreprotectores —les dije divertida mientras soltaba una pequeña risa.

—Solo cuidamos de nuestra pequeña hermana —William me abrazó—. Menudo susto me diste Lexi.

—Lo siento William.

—¿Estás bien? —nos separamos y yo le regalé una sonrisa.

—Sí —recordé mi encuentro con Lord Voldemort y mi sonrisa desapareció. ¿Por qué había tenido ese encuentro con él? ¿Por qué me quería? Todo el mundo me había dicho que era poderosa, pero no me decían nada más, pero lo más importante... Era hija de él.

Matt miró a los chicos.

—¿Nos dejáis un momento?

—¿Pasó algo? —William noto nuestro comportamiento, a él no se le escapaba ni una.

No quería decirle a nadie sobre ese encuentro, no quería preocuparlos, porque bastantes problemas tenían ya como para también añadirles otro más. Pero eran mis hermanos y ellos se habían unido a Voldemort para protegerme.

—Solo darnos unos minutos —Matt tampoco quería preocuparlo.

—De acuerdo —Marlene nos regaló una sonrisa y miro a los demás—. Vamos a buscar a James e impedir que mate a Tyler.

Todos salieron, pero Matthew nos miró por última vez demasiado preocupado y salió.

—¿Qué ocurre?

—Tuve un encuentro con Voldemort en sueños —él me miró demasiado preocupado, había algo más. Aún no le diría lo que Tom me dijo, no quería decirle a nadie que él me había dicho que era su hija, esperaría a que mi familia se dignara a hacerlo.

—Mierda —agarró su cabello con sus manos frustrado.

—¿Qué ocurre?

—Eso significa que está entrando en tu cabeza Lexi —¿Qué?

—¿Qué hacemos? —las personas que más me importaban estaban expuestas.

—Tendré que aprender Oclumancia, mierda debí prestar atención en esa clase donde explicaban como debía hacerse —en otra situación seguramente los dos nos hubiéramos reído.

—Pero, ¿eso no es peligroso?

—Es más peligroso que Voldemort esté entrando en tu mente —Matt me miro y luego miró hacia otra parte.

—Matt...

—Creo que eres más vulnerable cuando duermes... Remus me dijo que eras buena en pociones —era buena si, justamente estaba haciendo una nueva poción para Remus, para que no fuera tan peligroso en sus Transformaciones y otra para el dolor y el mal humor que tenía unos días antes de la Luna Llena.

—Si, pero...

—Los dos nos encargaremos de hacer una poción para que no duermas... Al menos hasta que sea bueno en Oclumancia y pueda ayudarte a impedir que siga entrando en tu cabeza.

—Vale...

—Pero, ¿qué te dijo?

—En resumen, me dijo que si no me unía a él, mataría a todas las personas que me importaban.

Matt se acercó a mí y colocó sus manos en mis mejillas.

—Te prometo que mientras yo viva nada malo te pasara —no me gustaba que él arriesgara su vida por mí.

—No quiero que te pase nada malo —lágrimas amenazaban con salir.

—Estaremos juntos ahora y siempre —me dijo mientras me abrazaba.

—Mi hermano, mi responsabilidad —susurré.

—Mi hermana, mi responsabilidad. Siempre te protegeré Lex, recuérdalo siempre —lo abracé más fuerte—. Te prometo que pronto te contaré todo lo que tienes que saber, pero ten un poco de paciencia —asentí.

Ni siquiera ellos pueden detenerme ahora, cariño, estaré volando por los cielos. Esas palabras pesadas ya no pueden detenerme. Querido, he resucitado de entre los muertos, ninguno de ellos sabe lo difícil que ha sido mi vida y ahora ya ni siquiera pienso en eso. Finalmente te encontré. 

Radio — Lana de Rey

NOTA DE AUTORA

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