Veo esta vida como una viña balanceándose, balancea mi corazón a través de la línea. En mi rostro parpadean señales, buscalo y lo encontrarás. Viejo, pero no tan viejo. Joven, pero no tan audaz y no creo que el mundo se venda, sólo estoy haciendo lo que nos dicen. Me siento tan bien haciendo lo incorrecto y me siento tan mal haciendo lo correcto. Podría mentir, podría mentir, podría mentir... Todo lo que me mata, me hace sentir vivo. Últimamente he estado, he estado perdiendo el sueño. Soñando con las cosas que podríamos ser, pero cielo, he estado, he estado rezando mucho. Dije: "No más contar dólares". Estaremos contando estrellas. 

Counting Stars — One Republic

12 de septiembre de 1975

Nos encontrábamos Remus y yo en la biblioteca buscando información para poder convertirnos en Animagos y también nos pusimos a pensar en algo que nos ayudara para que nadie nos pillara cuando deambuláramos por los pasillos de noche. De pronto se me ocurrió una buenísima idea o al menos en mi cabeza era demasiado buena.

—Remus —él levanto la mirada de su libro para verme con una pequeña sonrisa.

—¿Qué ocurre Lex? —le sonreí mientras dejaba mis libros.

—Tengo una idea para poder deambular por los pasillos sin ningún problema —él me miro para que siguiera contándole—. Un Mapa con todos los lugares de Hogwarts, con las personas que haya dentro de Hogwarts, o sea todo. Así como todos los pasajes secretos que se esconden dentro de estos muros y la ubicación de cada persona en el terreno, y que sea representada por un punto. También podríamos hacer que fuera capaz de identificar con precisión a cada persona, y que no se deje engañar por animagos, pociones multijugos, o capas de invisibilidad, incluso los fantasmas de Hogwarts deberían estar en el mapa —Remus me miro sorprendido, pero con una gran sonrisa.

—Es una idea genial Lex... Debemos ir a decírselo a los chicos —asentí con una sonrisa, los dos recogimos todo y fuimos hasta la habitación de los chicos.

—Chicos, tengo una idea —habíamos llegado y los tres me miraron.

Éramos los Merodeadores, estaba muy feliz de que los cinco fuéramos un gran grupo. Casi siempre solíamos merodear por el castillo y hacer bromas. Esos momentos eran maravillosos, al igual que pasar tiempo con los demás. Pasar tiempo todos juntos como una gran familia era algo realmente increíble.

—La verdad es que su idea es muy buena —les dijo Remus con una gran sonrisa posicionándose a mi lado.

—Habla Stafford —Sirius dejó de escribir una cosa para prestarnos atención al igual que James y Peter.

—Un mapa... 

—¿Un mapa? —James me interrumpió confundido mientras se colocaba bien las gafas, voltee los ojos divertida.

—James deja que termine por Merlín —Remus se sentó en su cama y yo seguí de pie.

—Vale Lunático —ese mote se lo había puesto Sirius debido a las transformaciones que tenía Remus una vez al mes —Continúa Lex.

Cabe destacar que desde que nos enteramos, casi todos los días iba con Madame Pomfrey para que me diera pequeñas clases y ella estaba encantada por eso. Así que, desde ese momento yo era la que le curaba las heridas en cada transformación que tenía. Llegaba demasiado herido así que cuando eso pasaba, yo lo curaba y lo dejábamos descansar mientras nosotros lo cubríamos en las clases.

—Gracias Sirius... Como decía, había pensado en crear un mapa con todos los lugares de Hogwarts; las aulas, los pasillos, y todos los rincones del castillo, también que muestre cada centímetro del terreno (excepto la Sala de los Menesteres). Así como todos los pasajes secretos que se esconden dentro de estos muros y la ubicación de cada persona en el terreno, y que sea representada por un punto. También podríamos hacer que fuera capaz de identificar con precisión a cada persona, y que no se deje engañar por animagos, pociones multijugos, o capas de invisibilidad, incluso los fantasmas de Hogwarts deberían estar en el mapa.

James, Sirius y Peter me miraron impresionados mientras que Remus me miraba con una sonrisa de puro orgullo.

El primero que abrió la boca fue James.

—Wow, eso es asombroso... Eres asombrosa Lexi —me dijo él con una gran sonrisa.

—Concuerdo con James, así se nos hará más fácil hacer las bromas o salir a escondidas —Sirius me aplaudió orgulloso.

—Lexi eres impresionante —Peter estaba con la boca abierta.

—Gracias, gracias —les hice una pequeña reverencia mientras sonreía—. Pero eso no es todo, ya podemos practicar para convertirnos en animagos, así que hoy debemos comenzar con ello y con el mapa.

—Lexi y yo, empezaremos con el mapa mientras vosotros investigáis y memorizáis el Castillo —dijo Remus con una sonrisa, los tres asintieron con una sonrisa.

—Menos mal que es sábado —Sirius habló mientras se tumbaba en la cama.

—Debemos empezar ya entonces... Sirius levántate —James saltó encima de él, logrando que soltáramos una carcajada todos. 

Los amaba demasiado.

—¡Ahh! ¡Gordo bájate! —Sirius intentó quitárselo de encima, pero James era más fuerte.

—¿Me acabas de decir gordo? —James se hizo el indignado. Los miré divertida, estos dos no iban a cambiar nunca, y siendo sincera no quería que lo hicieran nunca.

—Venga James, Sirius tiene razón, estás un poco gordo —los cuatro menos el ofendido de James nos reímos.

—Bueno no dices lo mismo cuando estoy encima de ti mientras dormimos —me sonrió divertido, maldito pervertido. A veces tenía unas ganas de tirarlo por las escaleras, pero luego recordaba que podía quedar más idiota y los que sufrirían las consecuencias serían sus padres, Mia y Charlus.

—Me das asco —hice una mueca de desagrado y él negó divertido.

—Di lo que quieras Lexi, pero los dos sabemos que te gusta —me dijo acercándose a mí, me abrazo por los hombros.

—Dilo por ti, porque tú eres el que insiste en que duerma contigo —le devolví la sonrisa divertida y salí de allí para ir a la Sala de los Menesteres.

A veces James era un poco idiota, pero que se le podía hacer.

—Lexi, espera —me giré para ver a Remus que corría hacia mí.

—¿Qué ocurre?

—James a veces es idiota, pero sabes que te quiere, ¿no? —colocó su brazo en mis hombros y juntos caminamos por los pasillos de Hogwarts.

—Si lo sé... Pero créeme que si tuviera que elegir entre Lily y yo, la elegiría a ella sin duda —susurre.

—No es cierto Lexi... Eres la tercera mujer a la que más ama, porque claramente la primera es su madre y la segunda es Mia, aunque se peleen como perros y gatos —soltamos una pequeña sonrisa—. Pero te ama Lexi, aunque deberías decirle lo que sientes.

—No gracias, prefiero que solo lo sepan Tessa, Marlene, Sirius y tú. Bastante con que lo sepáis vosotros y algunos de mi familia —suspire, era tan obvia que hasta varios de mi familia se dieron cuenta de que estaba enamorada de James. 

Estaba segura de que no era lo ideal para él, después de todo era una mala persona y una llorona según lo que me decía mi madre de pequeña y Liam el año pasado. Al final lograron su objetivo de que me lo creyera.

Mi relación con mi madre estaba mejorando poco a poco, es verdad que no podíamos lograrlo en horas, pero cada una ponía de su parte y es cierto que mamá ponía demasiado de su parte. A pesar de todo era mi madre, y siempre la perdonaría hiciera lo que hiciera. La quería muchísimo, incluso mi yo de niña la quería, por muchos malos tratos, siempre quise que ella estuviera orgullosa de mí y que me quisiera, así que jamás me rendí. Ahora las cosas eran diferentes y esperaba de todo corazón que siguieran así. 

—Y no olvidemos a la profesora McGonagall —me regaló una pequeña sonrisa, sonreí. Era cierto, incluso Minnie lo sabía, así que muy discreta no era por lo que veía.

—Exacto.

—Bueno, pero yo sigo diciendo que deberías decírselo, arriésgate y si él no siente lo mismo al menos podrás seguir adelante y ya conocerás a una persona que de lo mejor de él por ti... Porque si sigues así nunca podrás avanzar, siempre que intentes rehacer tu vida habrá algo que te diga, ¿y si él también siente algo por mí? Y entonces es cuando no podrás avanzar porque siempre tendrás esa duda en tu cabeza.

—Remus no quiero estropear una amistad desde pequeños —comenzaron a salirme pequeñas lágrimas.

—No lo harás Lexi, seguirás teniéndolo a tu lado, al igual que a Sirius, Peter y sobre todo a mí —me abrazó.

—¿Me prometes que siempre estarás a mi lado? —le dije mientras él me limpiaba algunas lágrimas.

—Te lo prometo Lex, pero tú tienes que prometerme lo mismo —asentí con una pequeña sonrisa.

—Te lo prometo Remus —los dos nos abrazamos.

Ninguno de los dos se dio cuenta de que tres personas estaban escondidas escuchando su conversación.

—James...

—Vámonos a memorizar —el azabache no quería hablar del tema y sus dos amigos lo entendieron.

Tú dijiste que siempre estaríamos juntos, sin ti me siento perdido en el mar. A través de la oscuridad, te esconderías conmigo, como el viento, seríamos salvajes y libres. Tú dijiste que me seguirías a cualquier lugar, pero tus ojos me dicen que no estarás allí. Tengo que aprender como amar sin ti, tengo que llevar mi cruz sin ti. Atrapado en el medio y estoy a punto de resolverlo sin ti. Y estoy harto de estar sentado en casa sin ti, mierda, me voy a ir sin ti. Voy a destrozar esta ciudad sin ti, voy como Bonnie y Clyde sin ti.

Without You — Avicii

NOTA DE AUTORA

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