38.
Advertencia: Lemon.
---------------------------------
Hinata había sido tan amable de llevarme a la habitación de Neji, pero para sorpresa de ambas él no se encontraba ahí.
—Es posible que Neji nii-san esté conversando con mi padre. —mencionó Hinata con amabilidad. —Si quieres puedes esperarlo aquí.
—Está bien. Lo esperaré. —dije con una sonrisa mientras ingresaba a la habitación de mi novio, pudiendo apreciar lo sencillo que era su cuarto. Aunque aun así era mucho mejor que el mío. —Gracias, Hinata.
Hinata abandonó el cuarto dejándome completamente sola, yo tomé la decisión de esperar a Neji sentada en su cama, pero como tardaba tanto en volver y a mí no me gustaba esperar; comencé a ver cada detalle de su cuarto.
—Le agradecería que no insistiera con su invitación.
—Simplemente será una salida.
Oí dos voces que provenían desde fuera de la habitación, al oírlas he podido reconocer claramente la voz de Neji mientras que la otra voz se trataba de una mujer; la cual le insistía en salir.
—Lo lamento, pero debo de rechazar esa invitación. —la rechazó de manera educada. —Si me disculpa, iré a mi cuarto.
—Si quieres podemos estar en tu cuarto y beber algo o simplemente conversar sobre todo tipo de cosas.
La manera en que lo había dicho me provocó molestia y repulsión, aquella mujer se le estaba insinuando a mi novio.
—No es una buena idea. —volvió a rechazarla de manera educada, pero por su tono de voz pude notar que se estaba irritando. —Con su permiso.
La puerta de su habitación fue abierta, pero antes de que él notara mi presencia, la mujer que tanto le insistía se había abalanzado sobre él para así darle un beso.
Lo único que me tranquilizó en ese momento fue el hecho de que Neji la separó inmediatamente y la sacó de su cuarto sin siquiera ser educado. Él frotó un poco sus labios para luego darse media vuelta y así percatarse de mi presencia, y al verme palideció.
—No tienes que verme de esa manera. Yo entiendo lo que sucedió. —le he dicho con suavidad, causando que él soltara un suspiro de alivio para luego encaminarse hasta donde me encontraba. —Vine a verte y Hinata me permitió esperar en tu cuarto.
—Entiendo. —asintió mientras colocaba suavemente sus manos en mis mejillas para luego depositar un pequeño beso en mi frente, pero al tenerlo tan cerca y el a ver visto esa anterior escena, no he podido evitar besarlo en sus labios. —Imaginé que sentirías celos.
—Solo un poco. —pronuncié cerca de sus labios con las intenciones de volver a unirlos. —Tú también sentirías celos si otro chico me besara.
—Supongo.
Pasé mis manos detrás de su cabeza acariciando levemente su cabello, mientras que él tenía sus manos en mi cintura y me dedicaba leves caricias que me hacían estremecer. Sin poder resistir más la tentación de tenerlo tan cerca y que me dedicara suaves caricias, lo he besado con un poco de intensidad.
Yo estaba tomando la iniciativa en este punto y pensé que él me apartaría, pero para mi sorpresa no lo hizo, es más, profundizó aquel beso para luego recostarme en su cama y así comenzar a descender dejando leves besos húmedos por mi cuerpo.
—Neji. ¿Podemos...?
No terminé de formular mi pregunta debido a que él había comenzado a besarme con ferocidad, dándome a entender que al igual que yo tenía ganas de unirnos mutuamente. Empezamos con unas suaves caricias y unos besos húmedos, pero con el pasar de los minutos hemos querido más que hasta incluso comenzamos a despojarnos de nuestras ropas, pero antes de que me quitara mi ropa interior, él se había apartado para buscar algo entre sus cajones.
Desde donde me encontraba no he podido distinguir de que se trataba, pero en el momento en que se acercó y me lo mostró he soltado un suspiro aliviada. Yo había olvidado lo más importante al momento de realizar esta situación, pero afortunadamente él lo había recordado y eso se lo agradecía; aún no estábamos preparados para traer a este mundo una nueva vida.
Nuevamente las caricias se hicieron presentes hasta que finalmente nos quitamos nuestras últimas prendas para quedar sin nada. Aprecié el cuerpo de mi amado por varios segundos, era demasiado afortunada de tenerlo como pareja y me encantaba que todo de él sea solo para mí.
—¿Estás lista? —me preguntó con algo de duda en el momento en que se acomodó entre medio de mis piernas pudiendo sentir el roce de su intimidad con la mía causando que soltara un suspiro de placer.
—Sí.
Afirmé sin algún rastro de duda y entonces él había comenzado con lo suyo, introduciéndose en mi interior causando que soltara un leve quejido de dolor debido a que era mi primera vez. Nos hemos quedado unidos sin hacer algún tipo de movimiento para que así yo me pudiera acostumbrar a él y en el momento en que ya no he sentido dolor, lo he mirado para así darle la aprobación de que podía comenzar a moverse.
Y así lo hizo. Él comenzó a moverse de manera lenta, pero con el pasar de los minutos fue aumentando su ritmo haciéndome sentir una agradable sensación.
Seguí sintiendo a Neji por varios minutos más, hasta que finalmente él había terminado. Salió de mi interior con suavidad para luego depositar un casto beso en mis labios y así recostarse a mi lado para luego atraerme a él en un cálido abrazo.
—Neji. —le llamé con suavidad mientras acariciaba su larga cabellera. —Te amo. No lo olvides, ¿sí?
—¿La leíste? —preguntó refiriéndose así a la carta que me había escrito hace bastante tiempo. Yo he asentido dándole a entender que había leído todo lo que ha escrito para mí. —Todo lo que te he escrito es verdad.
—¿Podrías decirme en voz alta lo último que has escrito?
Neji me apretujó en su pecho a tal punto que me costaba respirar y al estar tan cerca de él he podido oír como su corazón palpitaba con rapidez.
—Te amo, Uzumaki ____.
Al escuchar esas palabras salir de su boca, mi corazón comenzó a palpitar con rapidez y entonces me alejé un poco de él para poder verlo, notando así que se encontraba algo avergonzado y al verlo de esa forma no he podido evitar sonreír.
—Siempre estaré a tu lado, Neji. —dije con sinceridad mientras acercaba mi rostro al de él, pudiendo sentir su respiración. —Yo elegí estar contigo y será para siempre.
—Gracias. —agradeció sinceramente mientras formaba una pequeña sonrisa para luego posicionar una mano en mi mejilla y así comenzar a acariciarla con suavidad. —Gracias por quitarme ese odio en mi interior y enseñarme varias cosas.
Nos hemos sonreído mutuamente para luego darnos un cálido beso de amor.
—Hay algo que me gustaría proponerte. —comenté al momento de separar mis labios de los de él. —Quiero que nos vayamos un tiempo de Konoha.
—¿Irnos de Konoha?
—No sería para siempre. Solamente serían unas semanas, tal vez. —le dije mientras lo miraba directamente a los ojos, notando como me miraba confundido y al verlo de esa forma he dudado un poco. —Quiero salir de Konoha y así conocer otros lugares. Quiero ver si alguien necesita de nuestra ayuda.
—Ya veo.
—Aunque si no quieres venir conmigo lo entenderé. —le dije mientras formaba una sonrisa algo forzada. —Yo no tengo problema en ir sola. Y...
—Ni hablar. No te dejaría ir sola. —me ha dicho seriamente mientras me atraía a él, dejando mi rostro en su pecho para que así pudiera oír los latidos de su corazón. —Iré contigo. También me gustaría ver otros lugares.
—Me alegro de que quieras ir conmigo.
—Iría contigo a cualquier parte del mundo. —me ha dicho de manera sincera haciéndome soltar una leve risita. —Nunca te dejaría sola.
Neji me había alejado de su pecho para que pudiera verlo a la cara, él me miraba con una sonrisa sincera y entonces depositó un casto beso en mi frente para luego acurrucarse conmigo.
❀❀❀
Kakashi-sensei, quien ahora era el sexto Hokage había aprobado nuestra solicitud de hacer un viaje para ver cómo se encontraban los demás lugares luego de la guerra.
—Díganme en qué momento acepté esto. —habló mi mellizo con algo de celos. —Yo no recuerdo darte el permiso de irte, hermana.
—Porque no necesito tu permiso.
—¿Cómo qué no? —preguntó mientras me miraba con superioridad y he rodado los ojos al ya saber lo que me iba a decir. —Soy el mayor por lo que deberías de hacerme caso.
—Hinata. —pronuncié el nombre de la muchacha con algo de cansancio. —¿Podrías encargarte de él?
—Por supuesto, ____-san. —respondió de manera amable para luego ver a su primo. —Por favor cuide de Neji nii-san.
—Lo haré. —dije con seguridad mientras le mostraba una gran sonrisa y entonces sentí como Neji colocaba una mano en mi cabeza para alborotar mis cabellos. —Creo que es hora de irnos.
—Todavía no he dicho que sí.
—Cuidaré de ella, Naruto. —le anunció Neji. Sus palabras fueron firmes y seguras a lo cual mi hermano simplemente mordió su labio con frustración. —No dejaré que nada malo le suceda.
—Bien. Ya pueden irse. —dijo malhumorado mientras se acerca a mí, él me miró molesto, pero segundos después ya estaba abrazándome y dándome vueltas. —Te voy a extrañar. Espero que me escribas y que tu viaje no dure demasiado, hermana.
—No durará demasiado, hermano. —le he dicho con una leve risa y en el momento en que dejó de darme vueltas le he extendido mi puño. —Nos vemos mi tonto y querido hermano mayor.
—Nos vemos mi tonta y querida hermana menor.
Ambos nos hemos sonreído mientras chocábamos puños para luego seguir con nuestro camino.
—Son lindos, ¿verdad? —pregunté mientras veía a mi hermano irse junto a Hinata y notaba como mi mellizo intentaba sostener la mano de la Hyuuga. —Quien diría que ellos terminarían juntos.
—Supongo que los Hyuuga tienen una debilidad por los Uzumaki. —mencionó mientras comenzaba a caminar y al oír eso no he podido evitar soltar una pequeña risa. —Espero que Naruto cuide de ella, así como yo cuido de ti.
—Él de seguro lo hará. —dije con seguridad mientras sostenía la mano de Neji con suavidad. —Espero que su amor florezca como el de nosotros.
Neji me miró con una media sonrisa y presionó mi mano con suavidad; ahora ambos nos iríamos por un tiempo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro