Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

33.

✧Antes de comenzar a leer les pido disculpas por no publicar durante estos...creo que dos meses. :(

Estuve demasiado ocupada por lo que no tenía tiempo ni de escribir, pero ahora finalmente puedo retomar la escritura de este libro. ¡Viva!

Sin más que decir las dejo con su lectura. <3

-----------------------------------------------------------

Obito me sostenía del cuello con su mano derecha, él me miraba de arriba hacia abajo como si estuviera analizándome y eso me causaba un escalofrío. Todo se había complicado en el momento en que Obito había absorbido al Juubi, convirtiéndose así en el jinchuriki de este.

Habíamos intentado detenerlo en el momento en que todavía no podía controlarlo, pero fue demasiado tarde y él logró mantener la calma. Por un descuido mío he terminado en esta posición, yo no sabía exactamente que me haría Obito. Él podría matarme en este momento, pero por alguna extraña razón no lo hacía, quizá quería hacer sufrir un poco más a mis amigos y familia.

—¡Deja a mi hermana!

—Les mostraré a todos tus seres queridos la desesperanza poco a poco. —mencionó Obito mientras comenzaba a elevarse y sin soltarme del cuello, causando que cada vez comenzara a respirar con más dificultad. —Me quedaré con la mitad del chakra del Kyuubi y luego iré por tu hermano. Yo completaré el Ojo de luna.

—Como...si fuera a dejarte... —mencioné casi de manera inaudible, la falta de aíre me estaba afectando bastante y si no hacía algo en este momento sería perjudicial para mí. —...le prometí a Kurama que lo protegería...no pienso dejar que me lo arrebates.

—¿Te hiciste amiga del Biju? —preguntó con una sonrisa de burla mientras hacía más presión en mi cuello causando que mi respiración cada vez sea más lenta. —Es magnifica la resistencia que tienes. Es igual a la de tu madre cuando le quité su Biju.

—¿Qué...?

—Oh. ¿No lo sabías? —preguntó formando una sonrisa tétrica. —Yo soy el causante de la muerte de tus padres.

Me quedé muda, pero no por el hecho de que me costaba respirar, sino por lo que acababa de decirme. Él fue el que mató a mis padres, él es el causante de que con Naruto no creciéramos junto a ellos; esta persona nos los arrebató.

El Uchiha al ver mi expresión sonrió satisfecho y presionó aún más mi cuello causando que poco a poco comenzara a perder la conciencia, sin embargo, un golpe hacía el mayor causó que me soltara y comenzara a caer, pero antes de que pudiera llegar al suelo he sido sostenida por unos brazos fuertes. Unos brazos que no tenían la intención de soltarme por ningún motivo hasta que me encontrara bien y sabía perfectamente a quien pertenecían aquellos brazos.

Mi novio: Hyuuga Neji.

—Como siempre causando algún problema. —mencionó mientras me presionaba contra su pecho. Quizá antes me hubiera molestado con sus palabras e inmediatamente le hubiera reprochado, pero ahora me sentía tan bien el estar a su lado que cualquier cosa que me dijera no me molestaría.

Neji había dado un salto esquivando uno de los ataques de Obito, el Uchiha no le importaba en lo más mínimo el estar siendo atacado por los demás de la alianza o por el hecho de que mi mellizo estaba cerca de él.

Obito tenía un objetivo fijo y ese éramos Neji y yo.

—Ya puedo moverme por mis medios. —le informé al Hyuuga a lo cual él asintió y me dejó con suavidad en el suelo para luego esquivar otro ataque de Obito. —¿Qué haremos con él?

—Sus ataques cada vez son más constantes y rápidos. —informó mientras volvíamos a esquivar otro ataque. —Ni siquiera podemos acercarnos.

—Tengo una ligera idea de que podemos hacer, pero estoy segura de que no te agradará.

—Te conozco demasiado y sé exactamente a que te refieres. —soltó un suspiro agotador mientras presionaba un poco su puño al darse cuenta de mi idea. —Quizá antes me hubiera negado completamente, pero supongo que en este momento es la única opción que tenemos.

—Gracias por comprender. —sonreí de medio lado mientras le daba un abrazo y con un movimiento rápido lancé un Kunai personalizado hasta Obito para teletransportarnos. —¡Espero que te gusten los golpes de un Hyuuga y una Uzumaki!

Junto a Neji hemos atacado en conjunto a Obito, pero de un momento a otro el Uchiha me lanzó lejos dejando solamente a Neji peleando con él. El Hyuuga golpeaba a Obito con sus palmas de manera rápida y audaz; dándonos así alguna esperanza de que él pudiera dejarlo sin poder moverse y así acabar con esta miserable guerra.

Al momento en que Obito cayó al suelo algunos sonrieron y otros se acercaron para ver cómo se encontraba el Uchiha. Sasuke y Naruto se encontraban un poco más alejados debido a que Obito anteriormente los había mandado lejos para que no molestaran; ambos al ver a nuestro enemigo caer han comenzado a acercarse con toda la velocidad que podían.

Pude ver claramente como Obito no se movía y en cómo algunos felicitaban a Neji por vencerlo, sin embargo, esa felicidad no duró demasiado porque una fuerza extraña nos mandó a volar y para que yo no me hiciera daño me había ayudado Kurama.

—Gracias, Kurama. —agradecí con una pequeña sonrisa, pero mi sonrisa se borró al ver como Obito sostenía a Neji con fuerza por su cuello. —No...

—Dolor. Desesperanza y odio. —mencionó el Uchiha mientras miraba fijamente a Neji para luego posar su vista en mí. —Me preguntó qué cara pondrás cuando otra persona que quieres muera en mis manos.

—No...detente. —dije al borde del colapso al ver como mi novio respiraba cada vez menos y en como Obito formaba una esfera negra para acercarla a él. —¡Detente!

Grité con todas mis fuerzas y cerré mis ojos con la esperanza de que él se detuviera. No logré oír nada por lo que he abierto nuevamente mis ojos, encontrándome con la sorpresa de que la esfera negra estaba a tan solo centímetros de la cara de Neji debido a que la mano de Obito estaba siendo sostenida por unas cadenas; cadenas que provenían de mi cuerpo.

Estas cadenas eran las mismas que mi madre había utilizado cuando detuvo a Kurama para que yo pudiera obtener el chakra de este. Yo no podía creer el hecho de que había despertado aquel poder, que ahora el poder de mi madre estaba dentro de mí y gracias a eso he podido salvar a la persona que amo.

Me coloqué de pie mientras me dirigía a Obito, el cual seguía siendo sostenido por mis cadenas, lo miré fijamente y con una expresión seria, y una vez quedé demasiado cerca de él le he quitado a Neji.

—Cada vez más te pareces a tu madre y padre. —decía Obito con calma. —Pronto tendrás el mismo destino de ambos: La muerte.

Mis cadenas habían desaparecido y entonces Obito comenzó a elevarse mientras nos miraba a todos con una expresión seria. Él había anunciado que era el momento de poner en marcha el plan ojo de luna por lo que pronto los demás dormirían eternamente mientras que, a Naruto, Killer Bee y a mí nos decía que moriríamos en el momento en que nos extrajera nuestro Biju; en el caso de Naruto y yo, nuestra mitad del Biju.

Naruto y Sasuke habían llegado a nuestro lado, he podido notar claramente la tensión entre el Uchiha y el Hyuuga al verse, pero no le tomé demasiada importancia; en este momento no debíamos distraernos por esas cosas.

—Naruto. ¿Te parece si unimos fuerzas? —le pregunté a mi mellizo a lo cual él no dudó en estar de acuerdo y entonces miré a Neji, el cual al tan solo ver mi expresión comprendió de inmediato y se alejó. —Ya es momento de darle una lección a Obito.

—Así se habla, hermana.

—Ustedes dos no tienen remedio. —soltó Sasuke con un bufido mientras se colocaba en medio de ambos y ante nuestras miradas confundidas él simplemente se limitó a sonreír de medio lado. —Lo resolveremos los tres juntos.

Con Naruto nos miramos unos segundos con sorpresa, pero inmediatamente hemos mostrado una gran sonrisa y en cuestión de segundos hemos unido fuerzas junto a Sasuke; formando así un gran poder.

—Quien diría que algún día estaría uniendo fuerzas contigo, Sasuke. —dije de manera alegre a lo cual él simplemente me mostró una sonrisa, pero inmediatamente borró esa sonrisa de su rostro al oír las palabras de Naruto. —Ya te he dicho que entre Sasuke y yo no habrá nada, hermano.

—Deberías decir lo mismo de Neji.

—En eso estoy de acuerdo.

—Ya dejen ese tema de lado. —rodeé un poco los ojos para así ver a Neji, el cual me veía con una pequeña sonrisa y eso me ha hecho sonreír también. —Nunca pienso dejarlo.

—Deberías reconsiderarlo, hermana.

Hice oídos sordos ante la petición de ambos de dejar al Hyuuga para así concentrarme en nuestro enemigo que teníamos enfrente. 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro