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32

—Jungkook está durmiendo ahora...

—No es para menos, estaban súper gritones — se burló Jimin mientras dejaba una taza de chocolate sobre la mesa y se sentaba junto a su creador para comer algo.

—Te compraré unos audífonos, tranquilo, es el precio que debes pagar por vivir aquí — dijo divertido.

—Es lo justo, me gusta vivir aquí y si el precio es escuchar como te dan como cajón que no cierra, está bien lo acepto.

Taehyung rió abiertamente ante las palabras de su amigo, sin duda alguna fue una buena decisión convertirlo y hacerlo parte de su familia, Jimin era bueno, le hacía bien tenerlo cerca.

—Me encanta — respondió descarado.

—Aun no entiendo como es que tiene tanta energía, yo estaría agotado, sin poder levantarme de la cama.

—Ya basta, dejemos de hablar de mi vida privada — dijo antes de comenzar a comer— quisiera un poco de sangre...

—¿Antojitos?

—Puede ser, no lo sé, este es mi primer bebé — respondió acariciando su abdomen y observando hacia el piso, perdiéndose por completo.

Jimin era muy listo, no debía indagar mucho para saber que algo estaba ocuerriendo, Taehyung estaba ahí junto a el pero era claro que su mente se encontraba en otro sitio.

—¿Que es?

— Jungkook...

—¿Pasa algo con el?

— Estoy asustado Jimin, no sé que pasará y por primera vez temo por el resultado.

—Debes ser más claro Tae, quiero ayudarte pero no entiendo del todo.

— Convertiré a mi Alfa, lo haré un vampiro pero no sé si es lo correcto, si pongo su vida en riesgo o si el resultado no será favorable para el.

—¿Porque no lo sería? Significa una larga vida juntos, los tres, no deberías asustarte tanto.

—Jimin...— lo llamo — me encantaría que fuera como yo, como tú, que su vida continuara lo más normal posible, pero cabe la posibilidad de que no sea así, de que todo cambie por completo— respondió.

Jimin lo observaba atento, creyendo saber dónde se dirigía esa conversación y cuál era la preocupación de Taehyung con todo lo que venía.

—Te asusta que sea como Yoongi, que no pueda volver a ver la luz del día...

—Si.

—No tienes nada que temer, Jungkook será capaz de aceptar cualquiera que sea el resultado.

—¿Y si no es así? No quiero que me odie, que con el tiempo se arrepienta de la desicion, no es fácil adaptarse a la oscuridad, creeme lo viví con Yoongi, el esta bien, pero hubo un momento en que no lo estaba, a pesar de haber querido que lo convirtiera, el resultado lo estaba matando.

—¿Se arrepintió?

— No lo hizo, pero no lograba convivir con la idea de que no podía ver la luz del día, de que las posibilidades de caminar bajo el sol se habían esfumado para el, fue difícil.
Una vez se vuelve real,  y te das cuenta que ya estás en esta vida debes aprender a lidiar con tus demonios.

—Aun asi Yoongi siempre te agradecerá por la oportunidad de vida que le diste, el me lo dijo, lo salvaste.

— ¿Te dijo también lo duro que fue la primera vez que probó la sangre?

Jimin se quedó en silencio, esa parte no la conocía pero suponía que había sido algo complejo por la mirada que le estaba dando Taehyung.

—Cuentame...

— El lo hará en algún momento, espero, pero la sola idea de beber de alguien lo tenía enfermo, no queria comer, le suplique que lo hiciera, que no me dejara, era lo único que tenía en ese entonces, y no queria perderlo.

—Lo logró, está conforme, está feliz con lo que le diste...

—Fue dificil, no queria perderlo, era mi primera creación y estaba seguro que se volvería mi mejor amigo y no me equivoqué, se volvió parte de mi.

— Yoongi te ama, eres su Rey, su hermano, jamás te culparía por lo que es.

— Lo se, ¿Pero que pasa si con Jungkook no es así, si me odia luego de verse en su destino?

— El también te ama, y la sola idea de ser parte de ti por siempre, estoy seguro que lo hace inmensamente feliz, no debes preocuparte, más bien prepararte para una larga y feliz vida junto a tu familia, junto a nosotros que jamás te dejaremos, nos tendrás contigo siempre.

— Gracias... — dijo dándole un abrazo a Jimin.

No sabía cuánto necesitaba escuchar esas palabras hasta que Jimin las dijo, le hacían sentir aunque sea tan solo un poco mas tranquilo con lo que venía.

A partir de mañana todo cambiaría y esperaba que tal como decía Jimin, solo fuese para bien, que fuesen felices.

Una vez se separó de el, Jimin comenzó a caminar hasta la salida de la cocina, pero se detuvo justo en el humbral de la puerta para observar a su amigo.

—Yo también estoy muy agradecido, me devolviste a la vida, no me dejaste morir aún cuando no merecía esta oportunidad— dijo sonriendo — Eres bueno, mereces cosas buenas, no eres el maldito rey despiadado que piensas, eres más, eres mejor y eres mi hermano y te amo por eso— reconoció — gracias por darme una segunda oportunidad— finalizó antes de salir de ahí y dejar a Taehyung completamente emocionado por sus palabras.

—¡Malditas hormonas!

Reclamo en voz alta antes de secar unas pequeñas lágrimas que habían escapado de sus ojos y comenzar a caminar escaleras arriba al encuentro de su pareja.

Lo vió sobre la cama, aún dormido, con la sábana cubrir solo su pelvis, completamente maravilloso, era perfecto.

Cada parte de él era gloriosa y lo invitaba a querer tocar, a querer morder y saciarse de el.

Caminó en silencio, sin despertarlo, al menos no así, quería hacerlo de otra forma, una más divertida.

Ingresó por los pies, deslizándose  hasta estar frente a la intimidad de su hombre, la tomó entre sus manos y comenzó a masajear de arriba abajo, viéndola despertar casi de inmediato y sonriendo ladino antes de llevarla a su boca y comenzar a devorar con ansias.

Quería tenerlo una última vez así, mientras era un alfa, un humano, la despedida de esa existencia que abriría paso a una más, una que esperaba fuese superior y gratificante para su destinado.

Lo deslizó por su boca con tal esmero que lo sintió removerse sobre la cama, suavemente, soltando un jadeo ronco que hizo  un recorrido  completo por su columna vertebral y que lo incentivo a ir aún más rápido, más placentero.

—Que haces, bebé travieso — dijo con voz grave — que rica forma de despertar a tu alfa — jadeo mientras ponía su antebrazo sobre sus ojos.

Taehyung se separó levemente para sonreír complacido por la reacción antes de sacar su lengua y lamer a lo largo del falo, poniendo real atención en la punta.

—Quiero tenerte así una última vez antes que ocurra el cambio, tu solo disfrútalo, amor, me encargaré de complacerte.

Jungkook asintió sin decir ninguna palabra, su miembro dolía y pedia atención, necesitaba más de esa exquisita sensación de los labios de su vampiro rodeándolo por completo.

El mestizo deslizó su boca hasta el muslo del lobo, dónde encajó sus diente, provocando un respingo del contrario, bebió de él unos segundos antes de volver a tomar su longitud y succionar sin descanzo, buscando la liberación de ese hombre que lo estaba volviendo loco con los sonidos roncos y sensuales que salían de sus labios.

— ¡Dios! Necesito comerte, gira tu cuerpo cariño, ambos podemos jugar este juego.

Taehyung entendió de inmediato, separándose levemente para poder subir sobre el cuerpo del lobo pero dejando su propia intimidad sobre el rostro de este mientras  volvía a su trabajo de engullir el goteante y grueso pedazo de carne que lo tenía hambriento.

Jungkook no esperó más para copiar la acción de su luna, llevando el desatendido miembro de este a su boca  mientras jugaba peligrosamente con uno de sus dedos al rededor de la entrada de Taehyung, tentandola a pedir ser llenada.

La habitación se llenó por completo de jadeos y suspiros, de los morbosos sonidos de sus bocas al devorarse entre si, al estar dándose placer mutuamente, buscando el climax de ambos, queriendo sentir la escencia del otro en su bocas.

Dos de los dedos de Jungkook ingresaron sin contemplaciones a la apretada entrada de Taehyung y comenzaron su labor de follarlo mientras su boca no se apartaba de su miembro.

La sola acción pareció llevar a ambos al límite, los movimientos comenzaron más desenfrenados, desordenados y más intensos, haciendo que el orgasmo se hiciera presente más rápido de lo que pensaban y más arrasador de lo que había sido hasta hoy.

Saborearon sus orgasmos, complacieron a los instintos recelosos que pedían tal acción y no se detuvieron hasta que la última gota fue retirada de sus intimidades.

El pelinegro no quiso esperar más y separó el cuerpo de su mate para dejarlo boca abajo en la cama mientras se ponía sobre el y restregaba su intimidad entre sus nalgas volviendo a endurecerse de inmediato, pidiendo por follar a Taehyung como a ambos les encantaba, fuerte y profundo.

Se dejó ir en el interior del vampiro, llenadolo de golpe, haciendo desaparecer su falo en su interior y sin perder tiempo, comenzó a entrar y salir de el sin descanso, mientras sus labios besaban los hombros y el cuello de su destinado, dejando las marcas de sus besos sobre su piel.

Taehyung era un mar de gemidos en ese momento, el nombre de su alfa no dejaba de salir de sus labios sin descanso, pedía por el con insistencia.

—No te detengas alfa, te sientes tan bien — afirmaba embelesado por las sensaciones.

— No planeo hacerlo, voy a llenarte de mi, voy a darte mi nudo y voy a renovar esa bonita marca que tienes en tu cuello— respondió llevado su mano hasta el cuello de Taehyung, entre este y la mandíbula para sostenerlo mientras seguia arremetiendo en su interior.

Su mano restante sostenía con firmeza  el muslo de Taehyung quien lo había levantado levemente, haciendo que su trasero quedara empinado y recibiera cada penetración de mejor forma, más profundo.

—Cuando todo esto cambie, cuando sea un vampiro, beberé de ti, te follarte y beberé tu sangre, tal como a ti te gusta hacerlo conmigo — embistió con fuerza — Quieres eso, bebé, seré tu desastroso vampiro — ingreso aún más fuerte que la vez anterior.

—Puedes hacer conmigo lo que te plazca, soy tuyo, Jungkook, te pertenezco — respondió jadeante.

El alfa se separó de el para ponerse de rodillas y levantar el cuerpo de su mate hasta dejarlo con su trasero en pompa, piernas separadas y su rostro pegado a las sábanas.

La maldita curva de su cuerpo lo estaba volviendo loco y sin reparos volvió a penetrarlo, esta vez sosteniendo las caderas con fuerza y azotando el delgado cuerpo en cada empuje, disfrutando de follarlo y de los gloriosos sonidos complacidos que salían de los labios de Taehyung mientras lo veía cerrar sus ojos y apretar en puños las sabanas cada vez que tocaba su próstata sin descanzo.

Unos segundos más bastaron para que ambos cayeran al inevitable abismo del orgasmo mientras Taehyung enderezaba su cuerpo y ladeaba su cabeza dando acceso a su cuello.

Jungkook encajó sus dientes en la piel, renovando la marca al mismo tiempo que su nudo expandía el interior de su luna y lo comenzaba a llenar con su escencia por completo, sintiendo ambos cuerpos incendiarse luego de el encuentro que estaba llegando a su fin.

Sus respiraciones se encontraban agitadas, y las sonrisas en sus rostros solo develaban la perfección de aquel momento que acababan de vivir.

Se mantuvieron unos minutos así mientras el nudo bajaba, en silencio mientras descendían de su orgasmo.

—Es todo, cielo, eres mío, siempre será así, ahora continua con lo planeado.— dijo tranquilo antes de comenzar a salir del interior de Taehyung ahora que su nudo comenzaba a bajar.

Un jadeo salió de los labios del vampiro ante la sensación de la intimidad de su alfa abandonar su cuerpo.

Se dejó caer por completo sobre la cama y giró su cuerpo, quedando de lado mientras veía a su destinado recostarse junto a el en la misma posición y observarlo con una dulce sonrisa.

—Estoy asustado— reconoció al fin.

—No debes estarlo, todo saldrá bien.

—¿Y si no eres feliz con el cambio?

—Sere feliz estando contigo, nada de lo que pase cambiará eso, es lo que quiero, estar siempre a tu lado y vivir una larga vida junto a nuestro cachorro, los tres.

Taehyung asintió hacia el, con sus ojos brillantes, a punto de soltar algunas lágrimas, pero dispuesto a darle lo que su alfa pedía.

—Esta bien— dijo enderezando su cuerpo y subiendo a horcajadas sobre el contrario— Debo beber de ti casi por completo y luego debes ... Beber mi sangre, cuando estés a punto de morir, cuando estés en tu último soplo de vida— guardo silencio — si algo sale mal-

—No lo hará — lo interrumpió — volveré a ti, no debes temer.

El vampiro se acercó hacia el y lo besó profundamente, mientras contenia sus lágrimas y trataba de recomponerse para lo que venía.

Sus labios descendieron con besos suaves hasta el cuello del lobo, dónde besó con delicadeza una última vez, antes de que sus colmillos se clavaran en la piel y comenzará a beber de su pareja, a drenar la vida de este, esperando que todo fuese favorecedor para ambos.

Jungkook sostuvo con fuerza sus caderas, pero al pasar de los segundos poco a poco su agarre se debilitaba y su piel se volvía aún más pálida de lo que era, avisando que la vida estaba abandonandolo por completo.

Cerró sus ojos y dejo de respirar.

Taehyung se separó rápidamente  y mordió su propia muñeca antes de separar los labios de su destinado y dejar caer su sangre dentro de estos, esperando que el bebiera de ella aunque fuese solo un poco y que el cambio se hiciera.

Sus ojos desprendían lágrimas, Jungkook no tenia ningún indicio de hacer lo que seguía y la ansiedad lo estaba consumiendo por completo.

Si no lo lograba, si el cambio le había costado la vida a su alfa, el no podría seguir existiendo y se maldeciria por siempre de haber acabado con el amor de su vida.

Su cabeza se recostó sobre el pecho de Jungkook, intentando escuchar su corazón.

No había nada.

Su cuerpo comenzó a temblar, lo había perdido, estaba perdiendo a su alfa.

—Por favor— suplicó apenas — vuelve a mi— sollozo sobre su pecho sin poder contenerse.

Un sutil movimiento se presentó en el cuerpo del pelinegro,su garganta dió a entender que su sangre había sido ingerida, al menos solo una porción de esta,  que esperaba fuese suficiente para devolverlo a la vida.

Se recostó a su lado y lo cubrió con las sábanas, antes de rodearlo con sus brazos y recostarse sobre su pecho nuevamente.

—Puedes con esto, no vas a dejarme ¿Verdad? No vas a dejarnos — dijo apenas audible, colapsando por las emociones y dejandose ir en la oscuridad.

Ambos cuerpos estaban sobre la cama, pacíficos, sin algún indicio de que la vida estuviese fluyendo en ellos.

Jimin y Yoongi entraron en la habitación, habían escuchado el llanto de Taehyung y esperaron pacientes su momento para hacer presencia.

Los vieron allí, y los observaron unos segundos.

—Algo está mal Yoongi...

—No lo esta, esto toma tiempo.

—Pero Taehyung...

—Solo está dormido, las emociones lo deben haber superado, debemos ser pacientes.

—Tengo miedo...

— No lo tengas Jimin, confía en Taehyung, confía en JungKook, ambos sin fuertes, solo debemos esperar...

El menor asintió hacia el mientras extendida una manta para cubrir ambos cuerpos y salir de la habitación.

La espera debía hacerse, aun era muy pronto para saber el resultado y confiaban en que la pareja volvería a ellos, serían lo suficientemente fuertes.

Tenian un cachorro por le que luchar y una larga vida por vivir juntos, aún no era su tiempo.

Al menos eso es lo que querían creer.


Espero les haya gustado el capítulo, ya estamos en la recta final de esta historia, les agradezco por quedarse.

Este capitulo es dedicado a  ANDREA_JK1997joongAdi
Gracias por leerme ❤️

🌸ErLith_🌸

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