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Parte 6 Encuentro

(El Maestro del Agua llega )

(parte 2)

***

No me importa lo que hagas mientras no involucres a su alteza.

Una mariposa plateada  apareció en el hombro de Shi Qing Xuan. Aguas Negras soltó unos series de risas despreocupadas. — No lo estoy involucrando, su alteza se metió solo en donde nadie lo llama. No es mi culpa.

No me provoques.

—Hua ,Hua estás siendo irracional— Sin ninguna muestra de miedo, Shi Qing Xuan miró aquel espejo de agua, el cual mostraba a He Xuan y Xie Lian— Fuiste tú quien rompió nuestro acuerdo primero, no puedes culparme.

—Pero, todo fue de acuerdo al plan. El cielo envió a alguien a investigar, aunque no estaba previsto que su alteza fuera uno de los investigadores, también saliste beneficiado. En cuanto a los demás, solo es cuestión de tiempo.

—Y nos ha dado la oportunidad de ver lo importante.

En el espejo de aguas, suaves ondulaciones aparecieron reflejando toda la corte celestial, principalmente la corte celestial.

Hasta hace un momento, el lugar estaba ruidoso y lleno de chismes. De repente, el silencio se instaló cuando las puertas se abrieron. Por ellas, el Emperador del Cielo, Ju Wu ingresó.

El máximo dios marcial y el más poderoso de todos caminó con pasos seguros y con la frente en alto, lleno de confianza y un aura que brillaba de grandeza. Una vez que se sentó en su trono, una sonrisa se formó en su bello rostro.

—Me alegró de verlos a todos.— Su mirada vagó por el salón como si saludara a todos los dioses, pero principalmente se detuvo en el lugar donde estaba Xie Lian y sin ningún cambió de emoción pasó de largo.

Xie Lian había notado aquello y se preguntó si el Emperador quería discutir algo con él, pero como no le hablo, considero que esos asuntos no serían tratado hoy.Tal como imagino, Jun Wu no habló sobre la desaparición del Señor de la Tierra o su escapé con Hua Cheng. Como si hubiera olvidado de aquellos asuntos, tocó un tema diferente.

Se trataba de la gran cacería de los dioses marciales. Un gran evento que involucra a los principales dioses marciales y a los dioses elementales, aunque estos últimos no participan directamente, la organización y los premios eran preparados por ellos, en ocasiones había pequeñas demostraciones de poder.

En la celebración pasada, el Señor del Agua WuDu llamó la atención al hacer unos espectáculos con grandes olas, incluso logró que tuvieran forma de dragones, pero lo que hizo honor a su nombre, fue como humilló al Señor del Trueno en un pequeño combate de practica. 

—En algunos días les pasaré la lista de los participantes. General Pei, Señor del Agua les pediré algo de su tiempo para puedan ayudarme con la tarea—Dijo Ju Wu mirando hacia el balcón del segundo piso.

Inmediatamente, Pei Ming y Shi WuDu se levantaron —Por supuesto, majestad. — Estuvieron de acuerdo y  juntaron su manos para aceptar la orden.

—Además—Continuó el dios marcial, retirando su mirada y enfocándose al frente  —Esta vez quiero hacer una modificaciones, normalmente solo los dioses marciales de mayor rango participan, pero este año, quiero que los que no participen vengan como espectadores, incluso habrá un pequeño concurso para medir la fuerzas de nuestros dioses guerreros.

Sus palabras ocasionaron un gran disturbio en la corte celestial, algunos estaban emocionados, otros eran muy perezosos para expresar su opinión. Pero todo tenía sus propios pensamientos sobre el asunto.

— ¡Suena interesante!

—Eso parece—Respondió instintivamente Xie Lian a quien le hablaba sin prestar atención. —Esta cacería es un evento que ocurre cada cien años. Era para ampliar la influencia de los dioses marciales, pero ahora será una celebración que incluso los dioses comunes pueden participar apoyando algún dios marcial.

—¿Planea su alteza participar?—Preguntó He Xuan sin estar realmente interesado. Vio que le pasaban un bollo de carne, pero negó con la cabeza.

—Si hubiera sido en el pasado tal vez lo haría—Xie Lian también rechazó la comida— No soy tan fuerte como solía hacer —Admitió sinceramente.

— ¿Tiene mi señor alguien en mente para apoyar?

—No, pero sí su alteza decide participar. Apostaría por usted.

Xie Lian se sintió un poco avergonzado "Como era despearse de un dios de la fortuna, tiene mucho dinero para desperdiciar "

—Y ¿A quién patrocina el Señor del Agua?

He Xuan frunció las cejas al escuchar esa pregunta. — Seguramente al General Ming Guan— Ese hombre, era otro sujeto al cual no podía soportar y disgustaba solo con verlo.

—Su alteza capaz no lo sepa, porque no ha estado en el cielo cientos de años, pero actualmente se dice que Pei Ming es el dios marcial más fuerte por debajo de su majestad.

— ¡bum! Ni siquiera se ve tan fuerte. Apuesto que solo presume, porque el Señor del Agua lo respalda.

Al escuchar eso, Xie Lian realmente sudo frío. Había ofendido dos veces a una persona influyente — ¿El Maestro del Agua es su amigo? ¿Lo habré ofendido también?

—Eso dicen, pero no se preocupe su alteza, a Shi WuDo no le importa realmente si alguien ofendió a Pei Ming, mientras no sea él mismo, no moveré un dedo sobre usted.

— ¿En serio? Qué alivio.

—Sí, sí. No se contenga su alteza si ese Pei Ming viene a molestarlo. Solo golpéalo.

Una sonrisa rígida se formó en los labios de Xie Lian. — Je je, mi señor no tendría suficiente vida para sobrevivir si hago eso.

— ¡No se preocupe por su alteza, yo le ayudo!

He Xuan estaba de acuerdo y se daba la ocasión estaba dispuesto a gastar algo de esfuerzo con tal de ayudarlo. — Cuente conmigo.

De repente se quedaron en silencio, tanto He Xuan como Xie Lian sentía que algo no estaba bien con su conversación. Ambos miraron a su costado y se casi saltaron al ver una tercera persona a en el medio de los dos.

— ¿Qué pasa?—Detrás de ellos estaba la Señora del Burdel de la Alegría. Shi Qing Xuan parpadeo confundido mientras cordia un bollo de vapor— ¿Por qué me miran así? ¿No le daremos una paliza a ese tal Pei Ming?

Los rostros del Señor del Viento, como del Príncipe Heredero perdieron color. Estaban en la corte celestial, con el Emperador y cientos de dioses cerca y este demonio apareció a su lado como si estuviera paseando por por el jardín una tarde común.

Rápidamente, He Xuan se quitó su túnica externa y la colocó sobre la cabeza de Shi Qing Xuan y lo empujó hacia un pilar cercano para evitar que alguien lo notara, mientras tanto Xie Lian hacía de pantalla para bloquear la vista de los demás.

— ¿Qué haces aquí? Te dije que quedaras en mi palacio —Alarmado, He Xuan no pudo evitar querer atacar a este demonio, pero se contuvo para no ser descubiertos.

Shi Qing Xuan hizo una serie de pucheros. — Cuando desperté no estabas, así que vine a buscarte. Además parece que las cosas se podrán divertidas aquí— Se asomó por detrás del pilar para ver, pero He Xuan tomó el cuello de su túnica y lo tiró por detrás de nuevo.

— ¡Ten más cuidado, soy una dama!

La voz ruidosa de la dama atrajo alguna mirada, poniendo nervioso a Xie Lian y He Xuan. Afortunadamente solo fue un momento ya que no pudieron ver al fantasma femenina.

—Señorita Qing Xuan, esta es la corte celestial. La eliminaran si la descubren—Preocupado, Xie Lian miró y notó que He Xuan tenía problema en contener a la jovencita.

Obstinada, Shi Qing Xuan dijo— ¡La Lluvia Carmesí, vino hace unos días a jugar con su alteza! ¿Por qué no puedo? Es injusto.

—"..."

— ¡No eres como él!—Aunque no grito ni alzó la voz, He Xuan mostró ira en su tono de voz. No lo entendía, pero su corazón estaba agitado y sus manos temblaban con la sola idea de que alguien descubriera que había un demonio entre ellos.

Sentía miedo, pero no por él. Sino por la pequeña cosa que estaba a su lado.

Como si pudiera leer su alma, Shi Qing Xuan borró su sonrisa. — ¿Estás preocupado? —No pregunto sino que afirmo viendo el rostro del Maestro del Viento. He Xuan no le respondió, pero para Aguas Negras fue evidente esa emoción en sus ojos.

—Estoy en una piel humana, nadie notara que soy un demonio—Dijo Shi Qing Xuan pueden comprobarlo —Inclinó la cabeza como si quisiera que le den una palmadita.

He Xuan miró su rostro y admiro sus rasgos .Sus largas pestañas que ocultaban sus bellos ojos, su piel blanca como la porcelana y sobre todo sus delgados labios rosados. No había mucha diferencia entre su apariencia femenina y masculina, cualquiera que lo mirara le sería difícil saber que no era humana.

— ¿Pero no tienes el aura de un dios?— Le recordó Xie Lian.

—Eso no es un problema. — Shi Qing Xuan abrió sus ojos y su sonrisa se amplió.— En el mercado de la Ciudad Fantasma hay cosas muy útiles, entre ellas píldoras que asemejan el aura de un dios. Míreme bien su alteza y verá que lo tengo.

"Por supuesto eso solo funciona con supremos"

Pero nadie necesitaba saber eso, así que Shi Qing Xuan no lo mencionó. Inocentemente dejo que ambos dioses comprobaran sus palabras.

Efectivamente cuando Xie Lian y He Xuan lo examinaron y no sintieron que fuera un demonio y como cualquier dios emitía un leve resplandor de luz.

Inconscientemente ambos dejaron escapar una exhalación de alivio, en cambio Shi Qing Xuan aprovecho que He Xuan no lo retenía para mostrarse un poco en el salón, su mirada viajó por su entorno para terminar en el segundo piso.

"Ge"

De repente, Shi WuDo sintió que alguien lo llamaba. No miró hacia un costado, porque sabía que no habían sido Pei Ming ni Ling Wen. Bajo la cabeza hacia el piso inferior donde reconoció que el hazme ir de los tres reinos parecía hablando con alguien, pero por el enorme pilar de la habitación le impedían ver quién era.

Notando que la atención del dios elemental fue captado por algo, Pei Ming tuvo curiosidad y bajó sus pestañas para ver Xie Lian. — ¿Ahora tienes curiosidad por el ahora?

—Imposible—Shi WuDo retiró sus ojos inmediatamente y fingió tomar su té.

Pei Ming río. Nunca se aburría de esta persona, solo su hermosa apariencia era de su agrado, sino que encontraba su forma orgullosa de actuar bastante agradable. Cuando era mortal se encontró como muchas mujeres arrogantes y todas cayeron solo cuanta cuanta palabra dulce de su boca. Este era un verdadero desafío. 

—Shui-Shixiong ¿Quieres que te de un masaje para que te relajes? Seguro tienes los músculos tensos, después del largo viaje. Te prometo que la pasaras bien

El tono coqueto y junto con las insinuaciones ocultas detrás de palabras hizo que Shi WuDo hiciera una mueca de desprecio. — Si estás aburrido, ve al reino mortal a divertirte. No tengo tiempo para perderlo contigo.

— ¿Por qué no lo dejas?— Rara vez bromeaba Ling Wen y cuando lo hizo era como si se estuviera hablando  del clima. —Se pondrá molesto después.

— ¡Oye!

—Ciertamente.

—Ustedes dos, se supone que son mis amigos. — Pei Ming mostró una expresión de dolor — Que dos bellezas me traten así hiere mi orgullo.

—Oh.

Ling Wen apenas levantó la comisura de sus labios y Shi WuDo lo ignoro.

—"..."

Tras decir algunas palabras más, Ju Wu se retiró dando por finalizada la reunión. Los dioses comenzaron a salir de a poco. Xie Lian y He Xuan decidieron esperar hasta que todos se fueran para sacar a la niña, sin embargo, el inquietó Shi Qing Xuan se adelantó haciendo que sus corazones casi se detuvieran.

He Xuan reaccionó rápido y sujetó su muñeca  girandolo de forma brusca. Al encontrarse sus ojos por un momento creyó ver que los ojos verdes de la joven eran oscuros y un abismo oscuro salía de su cuerpo.

En el momento en que vio que el Emperador del cielo se retiró, Shi Qing Xuan planeaba convertir aquel brillante salón en un charco de sangre, sobre todo cuando vio que su hermano se marchaba,  pero para su sorpresa, fue detenido antes de que pudiera hacer algún movimiento. Viendo que era He Xuan, tuvo que reprimir su deseo asesino y comportarse.

— ¿Qué? No iba a ir a ningún lado—Se quejó, ocultando sus ojos detrás de sus cabellos — Si tanto quería que esté a tu lado, solo tenias que decirlo He-Xiong. No me escaparé.

Aunque había algo que le inquietó, He Xuan ocultó sus pensamientos en lo profundo de su mente y golpeó al frente de esa pequeña cosa inquieta. — Te dije que te quedaras quieto.

Acariciando su cabeza, Shi Qing Xuan oprimió sus labios. Podía sentir como detrás suyo Shi WuDo se iba junto con ese tal Pei Ming, si corría podía alcanzarlo, pero no lo hizo.

"Los han salvado por ahora"

— ¡He-Xiong tengo hambre! Llévame a comer algo.

—No, nos vamos en este mismo instante — He Xuan no tenía tiempo para seguir con su parloteo y juegos.Tomó la muñeca de Shi Qing Xuan para arrastrarla fuera del salón dorado.

Xie Lian quería preguntar la razón por la cual estaba la Qing Xuan en cielo, pero viendo que el Señor del Viento tenía prisa y era lo más seguro que se llevará a al demonio lejos no los detuvo.

Gracias al hechizo de acortamiento de distancia. He Xuan logró salir del cielo rápidamente sin ser detenido por algún dios. En un parpadeo los elegantes palacios y el resplandor del cielo fueron reemplazados por un bosque y caminos de tierra. Por el color del cielo, en la noche temprana pronto llegaría.

Pero He Xuan no le prestó atención a eso. Incrédulo miró a su alrededor, este lugar le era familiar, pero más que eso, había configurado el hechizo de acortamiento de distancia a un lugar cercano a la Ciudad Fantasma, no esta area. La única forma de que pudiera pasar esto era que alguien cambiará sus destinos.

Miró hacia atrás con sospecha. Shi Qing Xuan solo sonreía con inocencia, no dijo nada ni fingió para dispersar las dudas del dios. Solo tomo la mano de Maestro del Viento.—¡He-Xiong vamos a beber algo! Esta noche habrá luna llena.

El hecho de tomarse las manos se volvió algo casi natural, ha He Xuan no le importo, ni siquiera cuando Shi Qing Xuan cambió a su forma masculina. Todo lo que podía hacer era dejarse llevar por esa pequeña mano.

—Te lleve al cielo—Le recordó— Ahora dime ¿Dónde está el maestro de la Tierra?

—No seas impaciente —Shi Qing Xuan río —Cuando lleguemos a ese lugar te lo diré.

El Señor del Viento no tenía más opción que creerle y seguirlo. A medida que transcurrían por un camino, comenzó a darse cuenta que tal vez conocía este lugar, la sanación que tenía era la misma de cuando regresaba a casa después de mucho tiempo, pero este lugar no era su hogar.De repente los pasos de ambos se detuvieron frente a un gran edificio. Sus ojos de se ampliaron al reconocerlo.

Con los últimos rayos del sol ocultándose en el horizonte, el rostro de Shi Qing Xuan quedó ocultaba bajo una sombra. — La Terraza de vino de Cascada. (1)

Dentro del gran palacio del Señor del Agua, Shi WuDo tenía planeado recostarse en su cama, como dios no estaba cansado, pero todavía quería tener el placer de recostarse en ella, sin embargo, sus pasos se detuvieron a mitad de un gran pasillo.

— ¿Se te ofrece algo, General Pei?—Se dio la vuelta y con su abanico cubrió sus labios. Pei Ming se hizo el desentendido.

—Pues viene a hacerte compañía. Beber solo es aburrido ¿Por qué mejor no te dejas que te sirva?

Shi WuDo no solía beber con frecuencia, hacerlo de vez en cuando no le importaba. El licor era algo bueno, le hacía olvidar la cosas y a pasar el tiempo, sin embargo, prefería hacerlo solo que con compañía, sobre todo con Pei Ming

Como si pudiera leer sus pensamientos, Pei Ming dijo. — Prometo quedarme quieto y no molestarte, Me gusta ver tu perfil pensativo —Por supuesto no diría, que a medida que ponía se  ebrio y revelaba un rastro de un tinte rojo era su parte favorita.

—Está bien

Finalmente, después de pensarlo un rato. Shi WuDo asistió la propuesta, el coqueteo del dios marcial no movía ni un poco su corazón, pero la idea de que alguien lo atienda no era mala idea. 

Cambió la dirección de sus pasos a una habitación que servía para sala de estar. Ahí una serie de almohadones fueron acomodados cerca de una ventana donde se podía ver la capital imperial.Una mesa también estaba ahí.

La habitación era elegante y llena de tesoros. También era cómodo, porque tenía todo a la vista. Licores almacenados y bocadillos a la vista. Pei Ming se acomodo en el lugar de siempre, pero al ver que Shi WuDo estaba pasmado en la entrada preguntó.—¿Qué pasa?

El Maestro del Viento no ocultó su expresión. Sus ojos estaban abiertos y fijos en el jarrón de vino que estaba sobre la mesa. A su alrededor estaban un abanico que decía viento "Ge he venido a verte"

"¿Está aquí?"  Algo pálido, Shi WuDo corrió fuera de la habitación dejando a un confundido Pei Ming.

—¡Shui-Shixiong!

"Ese niño, realmente se atrevió a venir aquí ¿Acaso perdió la cabeza? "

No tenía miedo, ni estaba preocupado, pero todavía sería malo que alguien lo descubriera. Buscó en su habitación privada, pero no estaba ahí, tampoco lo halló en el jardín. Se apresuró en ir por su pasillo que conectaba dos parte de su palacio, cuando de repente unas manos llegaron a su hombro.

Antes de que se dieran cuenta, un cascabel sonó en el aire y una túnicas negras ocultaron su visión por un momento. Para cuando reacciono había alguien abrazándolo.

Era un joven con una cabeza más baja que el. Ocultaba su rostro en su pecho, pero sabía quién era. Involuntariamente el trago duro, sintió frío, no porque el cuerpo de aquella persona estaba helado, sino  porque su alma se cristalizó como un cubo de hielo.

—Ge, he venido a verte. — Un sonriente Shi Qing Xuan reveló su rostro. Sus manos que estaban aferrándose a la espalda del Maestro del Aguas, se movieron para sacar de entre sus propias ropas una daga y la alzó con toda intención de apuñalar a la otra parte.

—Ge no sabes cuánto tiempo he ansiado ... .Matarte, al igual que todos los dioses en este lugar ¿Qué debería hacer?

(1) Por si no lo recuerda. Este fue el lugar donde el destino de  SQX y HX   fue cambiado

Hola queridos lectores. Lamento la demora, llevo días intentando escribir este capitulo, pero nada me gustaba. Espero que les haya gustado.

Ademas, me gustaria contarle que inicie una nueva historia sobre estos dos. Se llama Todo por ti, la encontraran en mi perfil. fa denle una oportunidad

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