－Tranquila －dije distanciando su mollera de mi pecho. Luego desplace mis manos a su rostro. Mis dedos pulgares limpiaron las lágrimas que bajaban por sus mejillas rojas.

Yo solo miraba sus ojos verdes grisáceos inundados de lágrimas

"A pesar de que estaban en esas condiciones, seguían siendo lindos"

－Todo va a estar bien Diana, te lo prometo. Además, me tienes a mi ¿No? －dirigí con gentileza－. Yo siempre estaré para ti, si me necesitas－ exprese mirándola con una sonrisa, mientras que sus pupilas estaban llenas de lágrimas. Lo hice con el objetivo de que ella sintiera confianza y seguridad conmigo.

－Gracias Louis－ dijo tratando de recobrar su voz－ Pero...supongo que eso no durara mucho －replico sollozante, mientras que, con sus palmas de sus manos, limpia sus ojos para que ya no cayera ni una lágrima más.

－ ¿Por qué dices eso? －pregunte observándola con atención a lo que comento

Ella estaba a punto de decirme. Pero en ese momento escuchamos la manecilla de la puerta de cedro abriéndose. Y Diana y yo regresamos a ver detrás de nosotros.

－¡¡Hola!!－dijo abriendo la puerta y dejando ver su uniforme color azul crema y una gorra tono negro－¡¡Ya llegué!!－realizando lo contrario del acto antes mencionado. Y por último colocando su típico impermeable amarillo, en un conchillo junto a la puerta.

Mi padre había llegado de trabajar. Él se encarga de entregar paquetes a todo New York, todos los días. Entra desde las 8 de la mañana y llega a casa a las 8 de la noche. A mí no me gusta su trabajo, porque dice mamá que conduce un auto en mal estado y no tiene seguro.

"Pero bueno, trabajo es trabajo"

－¡¡Papi!! －grite, mientras que me paro de la alfombra y corrí a darle un abrazo muy fuerte a mi padre.

－¡¡Hola, Campeón!! －dijo a la vez que me carga y me posa en su brazo derecho mientras que con la mano izquierda la aprovecha para alborotar mi cabello

Mi papá alza su mirada y observa a Diana sentada en la alfombra, un poco triste.

－Hola Diana ¿También quieres un abrazo? －estirando su brazo izquierdo para que ella lo abrazara y la cargara.

Ella se paró, correspondió al abrazo de mi padre y la cargo. Mi padre era muy bueno, siempre aceptó a Diana como una más de nuestra familia.

Desde que ella entró a nuestras vidas, mis padres le dan amor paternal y maternal. Y yo lo entiendo, ella lo necesita mucho, y ahora más que nunca por todo lo que está sufriendo.

"Yo la considero como a una hermana menor"

－ ¿Como has estado Diana? －pregunto mi padre observando a Diana con una gran sonrisa.

－Bien señor Jonathan－ dijo abrazando la cabeza de mi padre.

－ ¿Y tú Louis? －dijo mientras giraba con esfuerzo su rostro hacia mí. Ya que Diana estaba apretando muy fuerte su cabeza al punto que no lo dejaba hacer ni un solo movimiento.

－Bien, papi－ dije viendo sus ojos negros.

Mi padre tenía cabello lacio castaño, ojos color negros y piel pálida. Mientras que yo solo saque el cabello rizado y ojos color grises de mi madre y cabello color castaño y piel pálida como la de mi padre. Y éramos la familia Jhons. Si así es me llamo Louis Jhons. El apellido de mi padre es Hall, y el de mi madre es Jhons. Mi apellido es de parte de mi madre.

－Me da gusto por los dos－ dijo liberándose de Diana y nos dio a cada uno un beso en nuestra frente y nos bajó al suelo

－¡¡Ya llegué, querida!!－ dijo gritando con el propósito que mi madre le contestara

"Y sí que funcionó"

－¡¡Que bueno, amor!! Estoy en la cocina, enseguida voy. ¡¡Ya casi esta la cena!!－ grito desde el lugar mencionado.

Mientras que mi padre prefiere ir a la cocina a verla. La verdad yo no lo seguí, la última vez que lo hice no dejaban de besarse.

"Guácala"

－Creo que ya tengo que irme...—expresó Diana con su rostro triste, mirándome con un poco de pena.

－ ¿No, por qué? ¿No vas a quedarte a cenar con nosotros? －dije caminando a ella y terminando observando sus ojos－ Además tus padres tienen que venir a recogerte, no puedes irte tu sola.

－Si. Si puedo, Louis. Solo vivo a un par de pasos de tu casa. Además, tengo mis propias llaves de mi casa－ dijo sonriéndome.

－Oye... ¿Qué es lo que tenías que decirme? －dije mirándola con curiosidad. Mientras que en su rostro se borró la sonrisa que había dibujado anteriormente. Para colocar una de tristeza en sus labios.

－Es algo complicado. Si te lo digo te pondrías triste y yo no quiero que te pongas triste－ replicó mientras que me mira con melancolía.

－Dímelo. No importa －dije tomando sus manos－. De todos modos, si no es hoy, va a hacer mañana－dije dibujando una leve sonrisa en mi rostro antes de que se desvaneciera.

－Está bien, te lo voy a decir. Pero ¿Prometes no ponerte triste? － dijo mostrando una expresión de desesperación y se notaba ojos cristalinos.

  "Aparentaba que quería llorar"

－Sí, lo prometo －prometí, todavía con mi rostro de felicidad

－Me...Me voy a mudar －dijo en voz baja, al final ya sacando lágrimas de sus ojos.

－ ¿Qué? ¿Por...por qué? ¿A dónde? －dije mientras se desvanecía la sonrisa que tenía en mi rostro hace unos momentos.

－¡¡No sé por qué vamos a mudarnos!!¡¡ Los escuché...Escuché a hablar a mis padres esta mañana!!! ¡¡Nos vamos a mudar a Londres!! －exclamo cerrando los ojos, tratando que no cayera ni una lagrima más de sus ojos. Pero eso no fue posible ya que su llanto era más fuerte.

"No, no puedo creerlo...no lo creo"

－ ¿Sabes cuándo? －dije preocupado.

－No lo se－dijo abriendo los ojos llenos de lágrimas y mirándome

"Me quedé pensando en que decir por un momento. Estaba sorprendido y luego de un segundo, respondí"

－ ¡Esta bien! －exclame pausando－. Vamos a hacer esto...trata de conseguir más información sobre esto, ¿Vale? －coloco mis manos en sus hombros, me agachó y la veo a los ojos. －Mientras tu...trata de calmarte, todo estará bien, ya lo veras. Sólo es un plan que tienen tus padres, la posibilidad que se muden es baja. —le sonreí leve.

—Tu papá tiene un buen trabajo, es uno de los mejores trabajos de New York. Se encargan del transporte comercial y mientras a tu mamá, ella ya tiene mucho trabajo. Sobre los casos que está defendiendo en el bufete de abogados. ¿O no? －pausé －No puede abandonarlos, así como así －dije dándole una sonrisa muy leve.

－ ¿Y si es cierto? ¿Qué vamos a hacer? －pregunto aun con sus ojos llenos de lágrimas.

－Pues...haremos que los días que faltan para irte. －exprese －. Sean los mejores de tu vida. Además, podemos seguir comunicándonos por medio de cartas o correo electrónicos y llamadas telefónicas －dije mientras mantenía mis manos en sus hombros.

－ ¿En serio? －me miro.

－ ¡Sí! Le diré a mamá o papá que nos haga un correo y nos dé un número telefónico para ti y para mí. ¡Y así podremos seguir hablándonos! －dije tratando de sonar con ánimos.

－ ¿Y, las cartas? －dijo colocando una cara de felicidad muy leve. Casi como si no lo estuviera haciéndolo.

－Pues...el primer día que hablemos por teléfono, me dirás tu dirección y ya podre enviarte cartas －dije pensando dándole una sonrisa.

－Tu siempre piensas en todo. Por eso te quiero －dijo mientras me abraza y yo se lo correspondo.

－Diana...－pause－ Trata de conseguir más información, cualquier dato, es importante. En especial la fecha, por favor. Entre antes sepamos la fecha, podremos planear muchas cosas antes de que te vayas－ dije todavía abrazándola.

－Está bien－ pauso－. Pero Louis...－pregunto al mismo tiempo que rompe el abrazo y me mira.

"Mi idea era muy buena pero no estaba seguro de que iba a funcionar"

－ ¿Qué pasa? －la mire.

－Está bien que vayamos a hacer todo eso, pero...nada volverá a hacer igual. No volveremos a vernos －agacho su cabeza y al momento en que lo hizo dejo caer una gota de lagrima al suelo.

－Pues si todo sale bien. Podemos volver a vernos. Bueno cuando seamos grandes, siempre y cuando mantengamos la comunicación entre nosotros －dije tomado su barbilla con mi mano derecha, sujetado y haciendo un pequeño movimiento leve hacia arriba, para que sus ojos chocaran con los míos y viera mi sonrisa.

"Ella solo me sonrió a la acción que realice"

－Ahora ¿Qué te parece si te quedas a cenar con nosotros? －pregunte tomando sus manos para dirigirnos a la cocina.

Gracias a todos los lectores por llegar a este capítulo espero que les hayas gustado. Me dan inspiración para continuar esta historia. Ya saben voten, comenten y recomienden. Gracias 😁 💫😊

*Diana en multimedia*

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(CAPITULO EDITADO)