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Capítulo 10

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POV's DIANA

—Por cierto, no me he presentado, deberás pensar que soy un maleducado chismoso —bromeo

—No, por supuesto que no...

—Me llamo Francis Cox, hijo del dueño del local. Aunque no presumo mucho por eso. Mucho gusto —me estrechó la mano

—Mucho gusto, Francis —le estrechó la mano también —¿Cuántos años tienes? — pregunte por curiosidad

—Tengo 17 años —me sonrió

—¡Ah, eres menor que yo! —le dije

—Si —afirmo —. Los cumplí en diciembre — me comentó

—Ah, bueno —dije —No quiero sonar chismosa, pero tengo mucha curiosidad. ¿Te puedo hacer algunas preguntas? —pregunte

—Está bien, pero ¿Depende qué asunto? —me comentó mirándome curioso

—En primera ¿Tu papá te dejo a cargo de la tienda? —curiosa

—Si —dijo—Bueno...no —pauso —Para ser honestos dejaron a cargo a Louis, pero soy encargado de que el haga todas sus tareas —me sonrió

—Ah —pause—Y hablando de él... ¿Me podrías decir, porque lo encontraron en la calle?

El solo me miró serio

—¿Por qué quieres saber eso? —me dijo con una voz tranquila

—Bueno es que...

—Discúlpame, pero eso no puedo decírtelo —me dijo un poco de pena

—¿Por qué?

—Es que...—miro atrás. Louis lo estaba viendo con seriedad y luego me miró preocupado— me pidió de favor, que nunca comentará de su vida a nadie que él conociera...lo siento

—Pero yo soy su amiga...

—Lo siento, pero no, hasta que él me diga...que eres su amiga te diré. Además, no quiero traicionarlo, me llevo muy bien con él, como para que me deje de hablar...—me miró con melancolía

—Está bien...

"Bueno...al menos lo intente..."

—¿Y tú por qué te interesa tanto la vida de él? —me preguntó confuso

—Eh bueno, verás yo solo quiero ayudarlo —comente

—¿En qué?

—Eso es lo que precisamente quiero saber, por eso te pregunto...—

—mmm —se quedó pensando —¿Qué te parece sí...? — lo interrumpieron

—¡¡Francis!! —dijo en voz alta

Francis solo quedó inmóvil al ver qué Louis lo observaba serio, detrás de él.

"Ay, creo que lo va a regañar por mi culpa 🙂😐".

—¿Puedes venir un momento? —le ordenó Louis

—Ah sí, enseguida voy —tartamudeo. Salió de la recepción —Lo siento, será para la próxima —camino hacia Louis y me guiño el ojo.

Le sonreí

POV's LOUIS

—¿Que pasa —me dijo Francis

—¿Qué estás haciendo? —dije serio

—No, nada—me dijo serio

Entrecierro los ojos

El solo desviaba la mirada

—¿Qué te está preguntando? —le pregunté

—Solo las técnicas de combate —comentó serio.

Me quedé callado

Él se veía nervioso

—¿Seguro? —pregunte —No me mientas...—lo regañe

—Está bien...— confesó —Me pregunto sobre ti...

—¿Y que le dijiste? —pregunté

—Nada relevante —me miró

—¿Por qué algo me dice que eso no es cierto? —reclame

—Está bien, está bien. Solo dije que trabajas aquí, por qué mi papá te encontró en la calle —confesó—¿Estás molesto? —me pregunto preocupado

—Ya te dije que no puedo sentir nada de eso...—pauso un poco —. Y en segunda estoy en desacuerdo que le hayas comentado eso...

Me mira arrepentido

—Ya habíamos hablado de ello —le recodé

—Sí, lo siento —me dijo arrepentido mirando el suelo—. Te prometo que es la primera y última vez que hablo de ello...

"Por qué algo me dice no lo va a hacer"

—Ahora, ve y mira el inventario. Al parecer el jefe dejó esta nota en el tablero de actividades, antes de irse —le dije —¡Por cierto!... ¿Cuándo llega del viaje? —pregunte

—La próxima semana —me dijo tranquilo —¿Por qué?

—Tengo planes este fin de semana —le comenté dándole la espalda para poner una pesa en su lugar.

—¡Ay no Louis, lo siento! Papá me dijo que tú debes de quedarte este fin semana en horas extras —me recordó

—¿Por qué? —pregunte regresando a ver a Francis detrás de mí

—¿Si recuerdas lo que pasó la semana pasada, ¿verdad? —preguntó

—Si

—Es por eso...todavía está molesto por lo que hiciste —me dijo con una sonrisa en sus labios

—¡No es para tanto! —reclame arrojando una de las pesas que estaba ordenando por peso en su lugar.

Que todo el gimnasio se quedó en silencio

—Pues ya ves —pause —. Al menos no estarás solo, yo también me quedaré —me dijo para animarme —¿Y qué planes tienes? ¡Que no invitas...! —reclamo

—¡Es algo que no te importa—pause — ¡Y aunque te lo dijera, todavía eres muy chico para eso! —explique —¡Como para venir conmigo...! — justifique alzando una pesa de 15 kilos.

—¡Ay, solo podrías decirme que no podía! —me dijo —¡No decirme que todavía soy un niño, como dices tú! En pocas palabras ofenderme...

Yo solo lo mire serio

—Otra cosa —me dijo mirando la recepción —Puedes atender a la señorita que está en la recepción, tengo que ir al inventario...como dices tu —me explicó yendo a la bodega —Falta unos minutos para que llegue el entrenador y le enseñe...a tu amiga...—me sonrió en el marco de la puerta trasera y se fue.

—No es mi amiga —murmuré cerrando los ojos.

Luego los abrí y me dirigí a la recepción

Llegué y entré por una puerta de paso y ella solo veía mis movimientos. Y por último me senté...

—¿Cómo estás? —me pregunto

No contesté

Los dos nos miramos sin decir nada

—¡Nunca pensé que tú trabajabas aquí! —opino

—¡Y yo nunca pensé que vendrías a molestarme! —le dije sarcásticamente frío

"Humor negro...vamos a ver si lo soportas"

Ella solo me miró tranquila.

Solo puso su cabeza de lado

"Que tanto me mira"

—¿Te gusta el humor negro? —me pregunto

"Pero...que mierda"

—¡Si te gusta! —me dijo con una sonrisa burlona —¡Lo sospechaba!

"Me cansa los oídos de tanto escucharla"

—¿Te puedes callar? —dije serio

—Deja lo pienso...mmmm —dijo con ironía—Ya se...No

"Paciencia...no, ya no pude"

—¿Por qué no te vas a la...? —iba decirle hasta que vi al entrenador, entrando al local

—Buenos días, disculpe el retraso —se disculpó dándome la mano —Pero ya estoy aquí

— Si gracias por venir —pause, le estreché la mano y luego mire a Diana—. Aquí está su primera alumna —dije entre dientes

"Ella solo me observa con una sonrisa de oreja a oreja"

—Ah, está bien—dijo el entrenador—Ven conmigo...

El entrenador se la llevó y empecé a pensar en algo curioso...El plan de Eva era traerla al centro comercial, pero ¿para qué?

"Si, al fin de cuentas, Diana vino a hacer otra cosa. No tenía sentido"

Después de unos minutos Diana empezó a entrenar lo más simple de la clase, que son las técnicas.

Estuve mirándola, pero nada relevante parecía una chiquilla pataleando por un berrinche.

Su mirada se topó con la mía

Yo la desvié y ella sonrió

"Quiero mirarla de nuevo"

Una voz sonó en mi cabeza

Resistí a la orden


(NOTA DEL AUTOR: POR FAVOR DE PONER LA SIGUIENTE CANCION, JUSTO EN EL MOMENTO EN QUE SE INDICA)

"Cállate, carajo"

Luego, dentro del local empezó a sonar una canción...Moonlight de Kali Uchis si no me equivoco.

Lo más curioso de esto, es que, en el gimnasio nunca habíamos puesto algún audio para el público.

"Ya tenía mis sospechas de quién podría ser"

Por eso mejor fui a ver.

Camine hacia otra mini recepción que estaba a lado de la bodega y Francis estaba dentro, con teléfono en mano.

—¿Qué estás haciendo? —pregunte acercándome a él

—Pues aquí reproduciendo música para los clientes de la tienda —pauso —Como dice en la lista de actividades...—dijo enseñándome la hoja

Tome la hoja y la mire

------Actividades para realizar mientras esto fuera:-----

Revisar el inventario que llegó el martes

Para mejor ambiente en el gimnasio integraremos música que los clientes recomienden (Obedecer y tomar en cuenta las recomendaciones de los clientes. Buena experiencia en el gimnasio, un cliente feliz)

Louis queda a cargo de la recepción y del local

Francis debe checar los impuestos

Deje de mirar la lista y mire a Francis

—¿Es enserio? —dije serio

—Son órdenes del jefecito —justificó alzando los hombros

—¿Y a quien le preguntaste para reproducir esa canción? —pregunté

—Tu amiga —me dijo —Bueno yo le pregunté...

Después de ello mire a Diana

Mi cabeza empezó a sincronizar la música, con sus movimientos de práctica

"¿Es hermosa verdad?"

Cerré los ojos y traté de borrar esas palabras de mi mente

"No te resistas"

Cuando esas palabras no se borraban, mire a Francis

"Nos gusta y tú lo sabes"

—Ella no es mi amiga... —dije frío. Apretando los dientes. Para no dejar salir los insultos

Francis me miró asustado

"Necesitamos hablar Louis"


—¿Estás bien? —dijo Francis preocupado

—Si estoy bien —dije resistiendo el dolor de cabeza

"Ve a un lugar solo"

Cansado de esa voz dentro de mi cabeza decidí irme a un lugar solo y ponerle fin a ese asunto

—¡Tengo que estar solo...! —murmure con dolor

—¿Estas bien? —contesto Francis, preocupado.

Y me dirigí a la bodega. Un lugar que siempre está solo y oscuro. Y aparte es el único lugar que las cámaras de seguridad están en mantenimiento.

Entre y cerré la puerta con seguro

Me adentré más a la habitación para que Francis no me escuche...

"¡¿Ahora sí que quieres, de que quieres hablar! Ya estamos solos"

Ya no escuché más esa voz que provenía de mi cabeza

"¡¿Ahora no quieres hablar?! Me has estado jodiendo todo el puto día" dije resistiendo el daño que me provocaba 

"No debo decirte que quiero..."

"Tú y yo necesitamos hablar de un asunto, en persona. O en este caso personalidad con personalidad"

"¿Qué quieres?"

"Ahorita no es el momento adecuado, será en otra ocasión"

"¿No me vas a decir nada? Por lo menos una puta pista"

"Cállate"

"No me callo, me has estado causando dolor de cabeza, idiota"

"Yo ya dije"

El dolor me causó que cayera de rodillas al piso

"No me gusta hacerte daño Louis, pero tenía que hacerlo. Tenía que hablar contigo"

Pauso

"Los dos somos la misma persona y a mí también me duele"

El dolor poco a poco desapareció y ya cuando me recupere del dolor me levante.

Me recargué en una de las paredes y me senté en el piso. Estuve aquí como 15 minutos más, pensando lo que me dijo mi voz interna.

"¿Qué era lo que quería, maldita sea? Se supone que habíamos hecho un estúpido trato"

"Se supone que él no debía regresar"

Después de pensar tanto...Me levanté y fui a dónde estaba Francis.

Cuando salí, él solo me miró serio

—¿Ya estás bien? —me pregunto con una sonrisa

—Si estoy bien —respondí ya más tranquilo. Y me senté en una silla, junto a él —Estoy bien... —murmuré mirando pensativo a Diana sentada en el suelo del gimnasio

Después de una media hora después, Diana por fin se fue. Y comencé a hacer mis deberes del trabajo sin que ella me estuviera viendo.

8:30 p.m

Ya cuando terminó, fue como 2 horas más tarde y mi turno había terminado.

—Francis ya terminé mis deberes... ya me voy —replique

—A si, está bien...Ya te puedes ir...—pause —Yo me encargaré de cerrar el local —me miró con gentileza —Necesitas ir a casa a descansar —me dio su mano, para despedirnos.

Pero yo no se la di

—No te preocupes—me dijo con pena, volviendo a poner su mano a su lado derecho — Nos vemos mañana, hermano.

—Si está bien

—Es que, en la mañana, mire en las cámaras de seguridad que le estrechaste la mano al instructor. Y pues...quise hacer lo mismo —me comentó

—Lo hice, por qué no tuve de otra —pausé seco —Tu papá observa las cámaras de seguridad cada vez que vuelve de los viajes que tiene. Y si no tengo un cambio...tú sabes lo que me va a hacer...— justifique

—Si, lo entiendo— dijo apenado

—Bueno, ya me voy —dije dirigiéndome a la puerta de entrada

—Adiós —dijo Francis

Después de salir del edificio me dirijo a mi moto en el estacionamiento, que está a lado del edificio.

Todas las calles estaban oscuras, lo único que resaltaba, de ellas. Eran las lámparas que las iluminaban.

Entre más me acercaba a mi moto, notaba una silueta conocida en la esquina, me acerqué más y vi a Diana parada allí, sola"

"Pero si se debió ir hace unas horas"

"¿Por qué está aquí?"

Diana nota mi mirada en ella y me voltea hacia mi

—¿Qué haces aquí? —pregunte serio

Ella no respondió

—Te hice una pregunta ¿Qué haces aquí? —mientras me acercaba más a ella, serio.

—Está bien, está bien —dijo mientras topaba con la pared asustada

Luego de ver su reacción pare en seco

"Mi propósito nunca fue que me tuviera miedo"

"Pero lo hiciste"

—Estoy aquí por qué Eva se fue y me dejó. Me tardé mucho en las prácticas que no me di cuenta. Y estoy aquí para tomar un taxi, pero no ha pasado ninguno —dijo desviando la mirada asustada de la mía

"Yo lo arreglo"

"No, no lo hagas"

—Disculpa, no fue mi intención asustarte —soné serio y arrepentido.

Esas fueron las palabras que salieron de mi boca sin que yo lo pensará. En esos milisegundos, sentí que no era yo. No sentía mi cuerpo y luego volví a tener control de él.

"Mi otra personalidad, tomó el control por unos milisegundos, fue extraño"

Diana solo me miró más tranquila

"Pensé claro en lo que iba a decir..."

—En esta calle nunca lo encontrarás. Por este lugar no circulan los taxis por la noche —comente serio, desviando la mirada por las esquinas. Observando a algunos pandilleros con prostitutas al otro lado de la calle —. Es mejor que vayas a otra calle a conseguir taxi... —recomendé

—Es que...— me dijo

—¿Es que... que? —pregunte serio

Ella agachó la mirada

—No sé dónde estoy —me comentó

—¿Cómo qué no?

(Nota de la escritora: Por favor de poner la canción de Love Me Like You Do de Ellie Goulding en esta parte no se arrepentirán)

—¡No! —dijo ya cansada—!¡No sé a dónde ir! ¡Ni siquiera sé a dónde puedo conseguir un taxi! —replicó —¡Contento!

Al escuchar lo salió de su boca, no sabía qué hacer. Ella no podía estar aquí. Tampoco podía dejarla, era muy peligroso.

Y por lo que veo, los pandilleros que estaban al otro lado de la calle la estaban mirando con morbosidad.

"Llévala a su casa, no te cuesta nada"

"No, no voy hacer eso"

"Obedece o te arrepentirás"

Empecé a sentir dolores de cabeza

"Está bien está bien"

Me dirigí a mi moto

—Te voy a llevar a tu casa —exclamé serio

—¿Qué? —dijo Diana sorprendida

—¿Estas sorda, o qué? —quitando el casco del manubrio—Te voy a llegar a tu casa —dije mirándolo —No puedes quedarte aquí...

Diana solo se quedó inmóvil a mi respuesta

—¿Te vas a quedar allí? —dije tronando los dedos y la hice reaccionar

Ella se acercó y le di el casco

—¿Y qué hay de ti? —pausa —¿No tienes otro casco? —pregunto preocupada

—No —dije subiendo a la moto —Sube —comenté serio

Ella se puso el casco y se montó atrás de mí. Su tacto me estremeció.

—"Sin contacto físico" —exclame

—¡A si! —Busco un lugar de dónde sostenerse, para no caerse —¿Pero de dónde me sostengo? —pregunto nerviosa

Pensé en algún lugar de la moto, pero no había ninguno.

—Está bien...dame tus manos—me las enseño por detrás de mí. Tomé sus manos y las puse en la superficie de mi cadera —¡Aquí, solo la superficie! ... ¡no más! —dije viéndola de reojo por detrás

—Ok —confirmo Diana

Después de explicarle.

Encendí la moto

—Esta es la dirección de mi casa —me explico dándome un papel —Me lo dio mi tía, para dárselo al taxi que me llevará —justificó

"Leí la dirección y se me hacía conocida, ¿pero no sé por qué? Al último la puse en un compartimiento pequeño de la moto y avance dirigiéndome a esa dirección"



¿QUE LES PARECIO ESTE CAPITULO?

¿EMOCIONANTE?



*QUEJAS AQUI PORFAVOR* *LES SONRIE *


Nos vemos en el siguiente capitulo, con amor Dael.

 Besos virtuales

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