No había podido encontrar un café abierto hasta alrededor de las 8:00 am, por lo mientras me había quedado estacionada frente al café para perder un poco de tiempo dentro del auto sin morir de frío mientras abrían el café.
Mientras esperaba a que abrieran, veía los guantes que Sherlock me había dado con la excusa de que eran para que no me diera frío y no estuviera titireteando por el  frío, haciendo el molesto sonido de titireteo con los dientes según Sherlock; a veces me daba gracia la manera en que Sherlock trataba de ser amable a su manera, después de un par de minutos me había dado cuenta que ya estaba en servicio el café, por lo que me puse rápidamente los guantes para bajar del auto con la intención de ir por un merecido café para mí debido a que me habían despertado demasiado temprano.

Cuando entré al local ya habían un par de personas formadas por lo que simplemente me puse detrás de uno de ellos esperando mi turno pacientemente hasta que estuve frente al mostrador, iba a comenzar a decir mi orden hasta que una voz me interrumpió repentinamente.

-La señorita tomará un capuchino y un cupcake de chocolate y por mi parte un café negro por favor.

El chico del mostrador solo asintió para posteriormente decirle a mi conocido que podíamos esperar nuestra orden sentados, por lo que con un gesto me indico que nos sentaramos en una mesa cerca del centro del local.

-¿Se supone que esto es un tipo de disculpa? Porque no pienso aceptarla si es lo que estabas esperando, te pagaré por el capuchino y el cupcake --mencione mientras comenzaba a sacar mi cartera dispuesta a pagar por lo que había comprado para mí hasta que Andrew negó dirigiendome una mirada que decía "No"--

-No es necesario que lo pagues, acéptalo como parte de mi disculpa sé que me pase pero también admite que  te lo tomaste muy enserio, soy tu profesor después de todo y tengo derecho a llamarte la atención si no prestas atención a la clase.

-Oh gracias por mencionarlo, bien, si estamos hablando sobre ello entonces no tendrías porque estarme comprando un café porqué eres mi profesor y se podría malinterpretar. Se que mi actitud puede ser infantil pero sabes que también tengo razón y prefiero entonces guardar mis distancias contigo.

-Si así lo deseas está bien, pero debo decir que eres una compañía interesante y también supongo que querrás saber a qué me refería esa vez con Sherlock ¿O me equivocó?

-Pues no te equivocas, en verdad quiero saber a qué te refieres, pero algo me dice que no me lo dirás así de fácil porque tú empleador no te lo permite ¿O también me equivocó Andrew?

-Tienes toda la razón,mi empleador desea que todo se lleve con un tiempo establecido, no quiere que todo sea tan rápido y no es en quien estás pensando; inclusive dijo que te cree un poco más madura si no fuera por tu apego a los Holmes.

No emití algún otro comentario y simplemente después de unos minutos nos dieron nuestra orden, cada uno estaba tomando su orden en silencio mientras de vez en cuando veía a Andrew de reojo tratando de pensar quien era su "empleador" descartando a Moriarty por su reciente comentario. Seguimos así un rato hasta que mi mirada se cruzó con el reloj que estaba colgado en la pared indicando exactamente las 8:30 por lo que me pare abruptamente de mi lugar sorprendiendo un poco a Andrew.

-Perdona voy tarde a una reunión, te veo luego en clases, tal vez llegué un poco tarde a tu clase hoy pero al menos ya te estoy avisando --dije mientras tomaba mis cosas rápidamente esperando una respuesta por parte de él para irme--

-Bien, pero te quedarás a hacer un trabajo extra por ello y no acepto un no por respuesta, es el precio por tu entrada tarde.

No tuve más remedio y accedí moviendo la cabeza como un si, para que después él hiciera un gesto con la cabeza indicando que me podía ir; no lo pensé ni un minuto y salí rápidamente del local hacia el auto entrando y encendiendolo para dirigirme hacia donde tenía la reunión con Anthea llegando hasta un lugar un tanto  pomposo a mi consideración haciéndome sentir inclusive que no estaba vestida de la manera correcta puesto que tenía puesto unos leggins, unos tenis y mi cazadora de piel. No tuve de otra y simplemente estacione el auto cerca de ahí quedándome unos minutos en el auto soltando un suspiro para animarme a mi misma viendo después la hora en mi celular indicando que faltaban unos 5 minutos para nuestra reunión por lo que rápidamente me eche un vistazo al espejo para salir del auto y dirigirme hacia la entrada entrando al lugar donde se encontraba un hombre detrás del recibidor quien al entrar pareció escanearme con la mirada haciéndome sentir un tanto incómoda hasta que habló.

-¿La señorita Susan supongo no? Ya la están esperando señorita, en un momento la guían a su mesa --dijo para después nuevamente quedarse callado mientras le indicaba a alguien que me guiará a la mesa en donde esperaba Anthea--

Después de unos minutos me guiaron a la mesa en donde Anthea estaba sentada con un vaso de agua frente a ella, mientras recorrían mi silla para que me sentará quedando frente a la castaña quien ahora no tenía la vista puesta en el celular sino hacia mi.

-Buenos días Susan.

-Buenos días Anthea, disculpa la tardanza pero me había encontrado a un conocido y perdí la noción del tiempo.

-Lo sé, estoy al tanto de ello al igual que el señor Holmes.

-Vaya y yo que creí que eso de mantenerme vigilada ya se había acabado, en fin, dile a Mycroft que Sherlock está molesto y que probablemente lo moleste en el transcurso del día o de la semana y que está entretenido con el caso.

-Bien, el señor Holmes mando esto para ti --dijo mientras extendía hacia mi una carpeta color negro que obviamente recibí mientras un camarero se acercaba hacia nosotras--

-¿Desean ordenar ya?

-Ordenaré por la señorita, el señor Holmes envía esto para ustedes --dijo mientras le extendía algo al camarero mientras yo abría la carpeta sin saber que le daba para después ver cómo se iba el camarero--

-Vaya, al parecer hoy todos saben ordenar por mi --dije mientras comenzaba a leer los documentos dentro de la carpeta--

-Oh espero no te moleste, el señor Holmes me dio una lista de tus platillos favoritos, los que odias y los alimentos a los que eres alérgica --dijo mientras me veía teniendo una sonrisa en su rostro para que yo dejará de leer un momento los documentos--

-Si que me sorprenden y tú más Anthea, aún no sé cómo es que aguantas trabajar con Mycroft --dije para volver a retomar mi lectura--

-Te acostumbras después de un tiempo, después de todo trabajar con el señor Holmes es interesante y sobretodo se preocupa mucho por ti y por Sherlock aunque odia admitirlo. En fin, debo irme, únicamente el señor Holmes esperaba que te diera la carpeta para que pudiera retirarme y por cierto, no te preocupes, la comida ya está pagada --dijo sonriéndome para levantarse de su asiento-- suerte.

-Gracias, espero verte pronto Anthea --dije de manera sincera mientras veía como Anthea salía del lugar dejándome sola en aquella mesa mientras seguía leyendo los documentos que venían dentro de la carpeta que estaba en mis manos, a decir verdad cada párrafo que leía empezaba a sorprenderme a tal grado que comencé a estresarme--

Iba a seguir leyendo los documentos hasta que llegó mi comida por lo que decidí dejarlos de lado para empezar a comer ya que había comenzado a sentir a mi estómago gruñir y más por el reciente estrés que estaba presentando el hambre en mi incrementaba. Mientras comía comenzaba a enlazar ciertas cosas que aún me sorprendían que pudieran ser ciertas ya que no creía que pudiera llegar a ser posible, algo dentro de mi además me decía que ni siquiera mi abogada sabía sobre esto y que se algún modo debía notificarle puesto que me había dicho que era mejor no cometer tonterías hasta que sucedería algo con Konor.
Konor además era algo más que me preocupaba,puesto que no parecía presentar respuesta alguna desde el accidente y eso me tenía estresada ya que según había oído no le daban muchas esperanzas de despertar; en cuanto al informante de Sherlock ahora también mi informante, no había habido mucho avance desde lo que me había dicho la última vez y un par de cosas más de las que ya empezaba a enlazar con lo que recién leía.  Mi cabeza era un mar de preguntas y la principal de estás era ¿Sherlock ya lo sabría? ¿Qué debía hacer yo en este caso? Mi vista se enfoco en el plato frente a mi mientras terminaba de comer suspirando, para después de unos minutos sacar mi celular viendo la hora decidiendo que era hora de irme ya que tenía clases; me levanté de mi asiento pues como tal y como había dicho Anthea la comida ya había sido pagada a cortesía del señor Holmes.

Salí del lugar agradeciendo la atención para dirigirme al auto con algo de calma mientras comenzaba a cruzar la calle casi chocando con un ciclista con quién emití un rápido "lo siento" para seguir mi camino pues el ciclista no había dicho nada y sólo siguió hacia adelante. Después de ese pequeño incidente me metí al auto encendiendolo para después irme pues aún tenía clases que atender y no podía descuidarlas, iba conduciendo tranquilamente hasta que mi celular comenzó a sonar indicando que tenía una llamada. Obviamente no iba a contestar pero la llamada era demasiado insistente y no tuve de otra más que atender poniéndome rápidamente con una mano los manos libres para contestar.

-¿Diga?

-Espero no estar interrumpiendo Susan, pero no te encontramos en Baker Street y necesitamos hablar contigo. ¿En dónde estás?

-Estoy camino a mi escuela ¿Sucedió algo Ariana? --dije mientras seguía conduciendo intentando centrar mi atención en el camino--

-No tenemos muy buenas noticias Susan, apareció un familiar de Konor y lo pusimos al tanto del asunto. Bueno en si fue Scotland Yard ,y el abogado del familiar se contacto conmigo.

-Entiendo ¿Pero por qué eso es malo para mí? Dime qué no es lo que estoy pensando, por favor --suspire frustrada mientras seguía escuchando a mi abogada por medio de la llamada aún conduciendo hasta parar en un semáforo en rojo aprovechando así para seguir oyendo que me decía--

-Siento decepcionarte Susan, pero sí, el familiar te puso una demanda y quiere que Scotland Yard te arreste ya. Lestrade me llamo y dijo que tratarán de ser lo más discretos posibles esperando que cooperes con ellos, escucha trataré de hacer un trato con el abogado del familiar de Konor, a mi tampoco me gusta como se están llevando las cosas a cabo pero te aseguro que al final de todo esto estarás libre, yo sé que tú no tienes nada que ver con ésto.

Oír eso no me hizo nada de gracia pues me había distraído un poco hasta que varios autos comenzaron a pitar indicando que avanzará pues el semáforo ya estaba en verde  y el auto estaba en la fila inicial.

-Carajo, permíteme unos segundos Ariana ahora estoy conduciendo.

-¿No prefieres que te llame en otro momento? Prefiero llamarte en otro momento, debiste haberme dicho desde un principio para que no te interrumpiera.

-No, este momento es perfecto, en un rato estaré en clases y más tarde tendré que ir a Scotland Yard y...

Vaya que la suerte no estaba de mi lado pues al avanzar unos pocos  metros con el auto otro auto que no se de dónde salió y que había intentado frenar en vano chocó con mi lado izquierdo. Me sentía aturdida pero escuchaba como Ariana decía mi nombre, el sonido de su voz me lastimaba por lo que me quite los manos libres para que así el sonido de su voz no me lastimará. Todo daba vueltas y era borroso, después de unos minutos empecé a escuchar como las personas se acercaban y también había comenzado a notar un dolor en mi pierna izquierda y en mi cuello, definitivamente no era mi día de suerte y eso lo sabía perfectamente, sinceramente lo que menos quería ahora era una visita larga al hospital.
No sé cuántos segundos o minutos habían pasado pero cuando menos me había dado cuenta ya me estaban subiendo a una camilla mientras sentía un dolor en el cuello, mientras trataban de ver si estaba consciente o no, al sentirme mareada había cerrado los ojos pero me daban pequeños golpes en la cara tratando de ver si estaba consciente o no, lo siguiente que sentí fue una presión en el cuello suponiendo entonces que me habían puesto un collarín. Ahora no quería pensar en absolutamente nada y sólo quería descansar, todo mi alrededor ahora era insignificante incluso la charla con Anthea.