Pov. Normal.

-Gold...yo...-Fred no sabia que responder, se quedó totalmente en shock.-Yo...creo que necesito...tiempo para pensar. Por todo lo que paso.-dijo el mayor desviando su mirada para evitar la del menor.

-Entiendo, solo quería decirlo. De verdad...no quiero que te vayas Fred.-siguió aunque sabia que Fred no quería escuchar mas.

Fred no contesto nada, por lo que Gold sólo se propuso a conducir hasta llegar a su casa. Ya en la casa, cada quien se fue a su habitación, pues obvio que no compartirían habitación, pero si estaban una al lado de la otra.

Por la noche, el albino apenas pudo dormir, no dejaba de pensar en lo que había dicho, no quería confesarse aún, de verdad no lo quería, él pensaba en esperar un tiempo para que Fred superará por completo a su ex, así no tomarlo de sorpresa y que este se estrezara. Creía que ahora que lo había dicho, todo iba a cambiar, no quería que Fred se fuera, pero ahora...¿Como podría convencerlo de quedarse con él después de haber dicho eso? No sabia que hacer...estaba tan...nervioso y arrepentido...No, no arrepentido, había dicho la verdad, Gold quería a Fred...solo que no sabia lo que el peli-negro podría pensar de él ahora... Gold es menor, quizás lo vea como un chico con hormonas alteradas, puberto, inexperto, confundido, que aun quizás ni sabe lo que quiere de verdad, caprichoso, entre muchas cosas que el albino se inventaba por su paranoia. Tendría que hablar con Fred por la mañana, no quería que se fuera o que malpensara de él.

Por otro lado, Fred tampoco conseguía dormir, estaba preocupado y algo alterado por lo que había pasado con Gold. Él era mayor que el albino, no podía pensar de otra manera que no fuera amistad con él. No sabia que hacer, pero si sabia algo, no podía quedarse en esa casa por mas tiempo; si se quedaba, sabia que seria incomodo. Dios, incluso pensaba que no podría seguir trabajando si él estaría allí, se sentía tan...incomodo en tan solo pensarlo. No podía quedarse allí, no quería...si lo hacia, quizás podría llegar a decir algo hiriente al joven Gold, y no quería hacerlo, no le quería romper el corazón, igual que se lo han roto a él. Se levanto de la cama, tomo una mochila y puso su ropa en ella, no mucha, pero era suficiente para unos días, tomo su celular, su cargador y salio con mucho cuidado, asegurándose de no hacer ningún ruido mientras caminaba por el pasillo hacia las escaleras, bajando con cuidado y llegando a la puerta principal, abriéndola con cuidado y cerrándola con el mismo cuidado de no hacer ningún ruido. 

Al salir de la mansión, pensó bien a donde ir, no sabia algún otro lugar que la casa de su hermana. Podría quedarse allí solo por esa noche, y mañana ir a tratar de quedarse con algún amigo, Nica, Chica, quizá con Bonnie si a Bon no le molesta, ya pensaría en algo. 

Solo se limito a caminar hasta la parada de bus mas cercana, por suerte no le paso nada al estar caminando solo en la noche. 

Tomo el bus, y en pocos minutos llego al edificio de departamentos de su hermana mayor. Fue directo al departamento de la chica y toco la puerta, siendo recibido por la novia de su hermana, Puppet.

-Fred, hombre, pasa.-se hizo a un lado para que el chico pasara.-¿Paso algo?-pregunto al ver la mala cara de Fred.

-...Yo...no te ofendas Pup, pero quisiera hablar con mi hermana. ¿Donde esta?-dijo poniendo su mochila en la pequeña sala del lugar.

-Esta en el baño. Ya sabes, síntomas y esas cosas. Siéntate, iré a ver como esta.-contesto la oji-violeta sonriendole a su cuñado y caminado por el pequeño pasillo que daba al baño y a las dos habitaciones que habían en el lugar.

Fred se sentó en el sofá, poniendo su mochila en el piso. No quería molestar a su hermana, y menos ahora que le vendrán muchos cambios, solo se quedaría esa noche y ya, nada mas. Lo sentía mucho por Gold, ya hablaría con él después...cuando se calmara un poco. Por alguna razón, tenia casi ganas de llorar, ¿es que acaso no puede tener una vida tranquila? es como si el destino estuviera en su contra, pero no iba a llorar...no lo haría, no allí.

-¡Fred! ¿Que paso? ¿sucedió algo con Gold? ¿Que hizo? ¿Estas bien? ¿Tengo que hablar con ese niño rico?-decía Francesca yendo al lado de su hermano y abrazándolo protectoramente.

-...estoy...no...no estoy para nada bien, Fran...me siento de la mierda.-correspondió el abrazo de su hermana y tan y como cuando eran niños, ocultaba sus pequeños sollozos en el pecho de su hermana mayor.

Francesca solo acaricio el cabello negro de Fred, diciéndole un "tranquilo", una y otra vez, mientras le daba una mirada a su pareja de "¿Podrías dejarnos solos?" cosa que Puppet hizo, sabia que ese era un momento familiar. 

Ya cuando Fred se calmo, le contó todo a Francesca, aunque no había mucho que contar. Pero ella entendía la razón de su hermano, estaba estresado y confundido, solo eso, pero no quitaba el hecho que Gold prácticamente había hecho llorar a su hermanito.

-¿Y que piensas hacer Fred? Debes decidir que hacer con ese niño.-dijo Francesca mientras se levantaba del sofá para ir a la cocina por algo de beber.

Un té de hiervas para tranquilizar los nervios de su hermano y uno de jengibre con menta para sus náuseas, producto de sus 5 semanas de embarazo.

-...no lo se...no quiero romperle el corazón, Gold de verdad me ha ayudado mucho y...no quiero herirlo.-contestó Fred con dolor y confusión.

-Sólo dile que no puedes corresponderle. Se directo, pero amable, diciéndole que solo lo vez como un amigo.-dijo la castaña desde la cocina preparando los tés

-...ese es mi problema Fran...ni siquiera se que siento. Si Gold no fuera menor que yo...tal vez...le diera una oportunidad...o no...no lo se.

La mayor salió de la cocina con las dos tazas y se volvió a sentar junto a su hermano.

-Fred, por favor dime que no te sigue gustando ese papanatas de Fox.

-¡No! Para nada. Ni siquiera tengo contacto con él. ¿Que tiene que ver Foxy aquí?

-Pues sólo quería asegurarme que no le quieres dar una oportunidad a Gold por Foxy.

-No Fran. Si no lo hago es por su edad, no por Foxy.-suspiro y tomó un sorbo de su té.

-¿Y que tiene eso? Bien dicen que para el amor no hay edad.-dijo la chica tomando un sorbo de su té igual que su hermano.

-Pero di cárcel Fran. Por dios, tiene la misma edad de Freddy. Salir con Gold sería como salir con Freddy. O al menos así lo siento yo.-decía viendo el líquido verde suave de su taza.

-Yo no le veo nada de malo. En ninguna situación le veo lo malo.

Fred se atragantó con su té y escupió.

-*cofcof* ¿Estas diciendo que si Freddy y yo quisiéramos algo, tu estarías de acuerdo?

-Seh, why not? Amor es amor.-contestó tranquila y bebiendo su té.

-Hahaha, estas loca mujer. Enferma.-reía el peli-negro por la actitud tan tranquila de su hermana.

-¿Que? Yo pienso que serian lindos.

-E ilegal.

-Hay países donde el incesto es legal~

-¿Que mosca te pico? Ese niño o niña tendrá una vida muuuy difícil.

-Ya calla. Mejor ir a dormir Fred, mañana veremos que hacer, ¿si?

-Si...mañana buscare en donde quedarme.

-No digas tonterías. Sabes que puedes quedarte aquí, ya lo has hecho antes.

-...mañana hablamos, ¿si?

Ambos hermanos se levantaron del sofá, Fred lavo ambas tazas que usaron y se fue a la habitación de invitados, mientras su hermana se iba a su habitación con su mujer.

Ya en la soledad de la habitación sencilla, en la que se había quedado más de una vez cuando estaba con Foxy, Fred volvió a pensar en todo lo que paso. ¿Podía darle una oportunidad a Gold?

Era menor que él y eso lo carcomia por dentro...¿que podía hacer?

Ni siquiera sabía que sentía por Gold...

Cuando está con el albino, se divierte y se siente tan cómodo, como si pudiera contarle de todo, aun siendo un niño ante sus ojos.

Un niño...

Eso era lo malo de esta situación

Ante los ojos de Fred, Gold era un niño.

Tenia la misma edad que su hermano y eso hacia que se sintiera...mal...

Es decir, son nueve años de diferencia, no dos ni tres, nueve años...

Sentía como si Gold no supiera lo que quería, quizá solo era una confusión, o eso pensaba Fred, porque no lo era.

Esa noche apenas pudo dormir, y se despertó muy tarde al día siguiente, obvio que su hermana no lo despertó, pues ella lo conocía y sabía que no había dormido casi nada.

Ya al medio día, Fred se levantó, se ducho y fue a la sala de estar, en donde estaba su hermana y Puppet, pues la castaña no había trabajado y Puppet era enfermera y le tocaba el turno nocturno. La castaña hizo que Fred se sentara frente a ella para hablar mientras él comía algo; al final de una conversación, llegaron al acuerdo que Fred se quedaría allí mientras pensaba que hacer, solo tenia que ayudar con la mudanza que harían, pues las chicas necesitarían una casa para el futuro niño o niña que vendría a la familia, obvio Fred estuvo de acuerdo.

Como era un poco más de medio día, Puppet y Fred decidieron ir a comprar algo para comer, pues la peli-gris no quería que su chica cocinara en su día de descanso, y menos cuando tenía tantas náuseas, además de que Francesca tenía antojo de sushi de calamar con mostaza y ketchup,  un antojo raro.

Al principio iba a ir solo Fred, pero la castaña convenció a su hermano de que la peli-gris lo acompañará, sin decirle muy bien el porque...

Y ese era que...Foxy podría estar por allí...no quería que Fred se lo encontrará sólo y pasara algo malo.

Iría ella, pero Puppet no la dejo, pues si la castaña veía al pelirrojo, seguro se lanzaría a golpearlo y no quería que algo le pasará a su mujer ni a su hijo.

Por otro lado, con Gold.

Al despertar temprano como siempre y no ver a Fred, asustado pensando que no lo quería ver, fue a la habitación que se supone ya era del mayor, pero vio que no había nadie tras unos minutos tocando la puerta sin respuesta alguna.

Eso...lo alteró.

Se culpo a sí mismo, no debió de haberse confesado, se sentía pésimo y...con miedo...

Pensaba que perdería a Fred...y no quería eso.

Se tranquilizó, relajo su mente y pensó en donde podría estar, y fue el lugar más obvio, con Francesca.

Habían ido allí en una ocasión cuando Freddy le quizo presentar a Golden y el rubio arrastró a su hermano con él, haciendo que sólo aumentará su mie...es decir, su "respeto", no miedo, por la castaña mayor, pues ella estuvo interrogando a Golden todo el día que estuvieron allí.

Tomó aire, y aprovechando un rato libre, tomó las llaves de unos de los autos y salio rumbo al departamento de la Fazbear mayor. Preparándose mentalmente lo que le diría, primero a la hermana protectora y después a Fred...

...Mientras...

Foxy había estado muy mal, había perdido todo lo que más había amado.

Porque si, él de verdad amaba a Fred pero su estupidez y lujuria lo hacía hacer cosas horribles, pensando que Fred no sabia nada...

Deseaba volver al tiempo y arreglar todo pero...era imposible...

...la había cagado y ya no tendría otra oportunidad...

O eso creía él.

Estaba sentado en una mesa del restaurante de comida japonesa, en donde su hermana trabajaba y allí ambos hablaban sobre lo sucedido.

Restaurante cerca de los departamentos de Francesca...

¿Que podría ganar?

¿el destino o la casualidad?

O quizás...

Algo más llegue a pasar...

■•■•■•■•■•■•

¿Huelen eso?

Huele a...a salseo con...con un toque de... ¿sadness?

No estaba muerta~

Estaba de parranda~

XD