Tristan- Lancelot, siempre estuviste aquí.

Cuando el gran demonio cayó una cortina de polvo se soltó por el impacto.

Daphne cerro sus ojos para cuando los volvió a abrir, vio de que el gran demonio era una función de Gigantes y demonios.

Gigante1- Ay, no puedo recordar nada, ¿que estábamos haciendo?

Gigante2- Creo que estábamos en algún hechizo.

Tristan- ¿Que es lo que pasa?, ¿el hechizo afecto a los demonios y a los Gigantes?

Lancelot- Alguien los uso para crear ese monstruo y uso a la Raza de las Hadas para ese otro. Están convirtiendo en monstruos a todos las razas.

Hada1- Muchas gracias, ustedes son los que nos salvaron, ¿verdad?

Gigante1- Humano, ahora tienes todo nuestro agradecimiento

Gigante2- Si no es por ustedes no abríamos sobrevivido.

Lancelot- No me agradezcan, digamos que las cosas salieron bien, pero no importa tanto, tienen que marcharse antes de que los capturen. Al parecer su objetivo solo está dirigido hacia las razas no humanas.

Gigante1- Tienes razón. Y de nuevo humano, te debemos la vida, gracias. -Dijo y las demás razas se fueron.

Tristan- Ya entendí, capturan a todos menos los humanos, debido a que estuviste en tu forma de Hada en la pelea te vieron como objetivo. Ya se me había olvidado, tu mamá fue una vez la reina de la raza de las Hadas.

Lancelot solo quedo callado, pero Tristan se sorprendió al ver la cicatriz que el tenía en su frente, causando temor al recordar como el se la hizo.

Tristan- Oye, Lancelot, quisiera disculparme por...

Lancelot- Oye, Tristán...

Daphne se sorprendió llevándose sus manos a su boca al ver que Lancelot le lanzó un gran puñetazo en el rostro de Tristan haciéndolo caer.

Tristan- ¡¿Enserió esperaste tanto tiempo para golpearme así?!

Lancelot- Puede que nuestros padres sean amigos, pero tu y yo no somos nada de eso.

Daphne- Tristan... -Dijo y se acercó a él tomandolo de los hombros.

Tristan- ¡ENTONCES TE DEDICAS A GOLPEAR A EXTRAÑOS, LANCELOT FUE UN GOLPE DURO Y ME DOLIO MUCHO!

Lancelot- Por supuesto que va a doler mientras estas vivo, pero... si no te hubiera salvado antes, ya estarías muerto. ¿Que te hizo detener tu ataque a mitad de camino?

Tristan- ¿Que? -Mencionó sorprendió.

Lancelot- Te estoy preguntado, ¿que que fue lo que te hizo contenerte? Te paso lo mismo que conmigo, ¿no? -Tristan solo agacho su mirada.

Tristan- A veces... he sentido mucho miedo hasta de mi mismo... como si sintiera que me estoy transformando en alguien más. Pero... supongo que tu no puedes entenderlo, ¿verdad que no? Al final... ¡¿Que sabes tu de mi?!

Lancelot- No se nada. Y no me importa, tarado.

Tristan- ¡¿QUE?!

Lancelot- Eres libre de contener tu ataque cuando se te de la gana y morir... pero dime, alguna vez te haz puesto pensar en tu mamá. Dijiste que tu mamá y tu hermana estaban en problemas. Y yo no siento ningún odio hacia tu mamá y tu hermana, además ellas son personas muy cercanas a mi mamá.

Daphne sonrio mientras que veía a Lancelot.

(......)

Los suspiros y jadeos de ambas mujeres que se encontraban acostadas boca arriba se escuchaban en aquella habitación, más con la fiebre que ellas tenían más la esposa del Rey Hada.

El solo estaba preocupado mientras que le daba el liquido especial de su bosque a su suegra luego a su esposa.

Meliodas quien también estaba preocupado veía con esperanzas de algún alivio.

Diane estaba preocupada observando desde la ventana al estar en su estado gigante.

Meliodas tomó la frente de Elizabeth sorprendido al saber que la temperatura se había desvanecido.

Meliodas- Ya no tiene temperatura.

Hendrickson- Y ya recupero el color en el rostro.

King- Al igual que Tn. -Dijo sonriendo tomando la mano de su mujer.

Diane- Creo que la posición que trajo King esta funcionando.

Hendrickson- Entonce este es el Elixis antiguo de la Raza de las Hadas que tanto he escuchado. -Dijo admirando el frasco con el líquido.

King- Es el néctar de una flor que crece en la cima de una montaña... es una flor única.

Hendrickson- Déjame ver...

King- No, a ti ya no. -Dijo apartando el frasco del peliblanco.- Atención, esto es todo lo que puedo hacer por ellas, esto solo quebro la superficie de la maldición, el resto esta sepultado en lo profundo de su mente como un nido que crece poco a poco. Si podemos romperla aunque sea un segundo, Elizabeth y Tn se podrán curar por si mismas.

Meliodas solo quedo pensando, mientras que veía a las dos mujeres a su esposa y su hija.

King solo acariciaba el cabello de Tn, mientras que pensaba por igual en como romper la maldición que sucumbió la mente de su esposa.

Ban- Oye, capitán, ¿tienes alguna idea de quien pudo haber puesto la maldición en ellas?

Meliodas- Lo se y tampoco lo sé, hay demasiados posibles sospechosos por contar.

Ban- Eh si, no lo había pensado así, eh.

King- Ah, casi lo olvido, ¿saben donde se encuentra Daphne y Tristan? ¿No les paso nada malo?, no los he visto por aquí.

Hendrickson- Es que no están, ellos mismos trataron de curar la maldición que esta enfermando a sus madres, pero no pudieron hacer nada. Después salieron corriendo de la habitación y desaparecieron, debieron de haber estado traumatizados.

Meliodas- Esperen... ¿pudieron rastrearlos?

Mientras tanto Diane dejo de esperar y decidió sentarse.

Diane- Yo solo espero de que Elizabeth y Tn se puedan recuperar de esa maldición.

Gowther- Diane, ¿ya se te acabaron las píldoras para reducir el tamaño que te había dado Merlin?

Diane- Mm.. pues si, algo así, se me presentaron algunas cosas. -Dijo riéndose.- Pero no importa, Gowther, tu no tienes que estar aquí afuera también para que yo no esté sólita.

Gowther- Lamentablemente, no soy experto en maldiciones y tal vez sea capaz de entrar a la mente de Elizabeth y su hija pero no voy a poder romper sus maldiciones.

Diane- Supongo que yo también tampoco puedo evitar que mis amigos pasen por dolores a veces, pero... debe de ser mucho que peor para el capitán, King, Tristan y Daphne, ¿no lo crees? -Al decir eso se acordó de esos dos niños.- ¿Tristan y Daphne crecieron siendo buenos niños?

Gowther- Si, ambos son bondadosos como sus madres y fuertes como sus padres. Sin embargo lo único que le hace falta tener a esos niños es...

Meliodas- Diane.

Diane- ¿Eh?, Capitán pero... ¿QUE?, ¿esa es Elizabeth? -Dirigió la mirada a Meliodas quien cargaba a Elizabeth.- ¿Y Tn? -Luego miró a King quien cargaba a Tn.

Meliodas- Gowther, quiero que rastrees el poder mágico de Tristan y Daphne.

Gowther- Claro, Capitán.

Meliodas- Tienes que ser muy preciso con la distancia y dirección. Diane, pon atención, necesito que hagas el envío.

Diane- ¿El... envío?

(....)

Lancelot- Hay algo que no entiendo, porque si de verdad estás tan asustado de pelear, decidiste venir con Daphne a enfrentar esos monstruos, sabes que pudiste haber pedido apoyo de alguien más que no sea Daphne, tu papá es el capitán de los Caballeros legendarios después de todo o el padre de Daphne quien es el Rey Hada.

Tristan- Si, tienes razón, solo tenía que decirle a papá lo que pude ver en el alma de mamá de seguro que, el hubiera venido a salvar a mamá sin tener ningún problema como yo pero... aun con eso...

Daphne- Yo también... decidi no decirle nada a mi abuelo y a mi papá, porque quería derrotar... bueno, queríamos derrotar al enemigo ambos, por lastimar a nuestras madres. Se que no soy muy buena peleando, pero estoy mejorando, tal vez me convierta en alguien mejor en un futuro. Pero todo eso... solo para ayudar a los demás, más a mi familia. -Mencionó decidida, teniendo la mirada de Lancelot.

En eso Lancelot se sorprendió al escuchar una voz en su mente.

Lancelot- ¿Que?, ¿que mire al castillo?

En eso cuando el miro los dos que lo acompañaban giraron a ver también. Solo para sorprenderse al ver un gran ejército de caballeros vacíos avanzar a gran velocidad donde ellos.

Daphne- ¡Viene un gran ejército! -Exclamo con un poco de miedo y asombro.

Lancelot- Ay, ¿enserió enviaron caballería pesada únicamente para tres niños? ¡Oigan!, son mucho de ellos tenemos que irnos ya.

Tristan- ¡Si!, ¡ESCANOR! -Llamo el y a lo lejos se escucho como un caballo blanco corrio donde su dueño.

El caballo empezó a cabalgar rapidamente hasta llegar donde Tristan quien se subió a su caballo y empezó a ir donde el ejército de monstruos.

Daphne- ¡Tristan!

Lancelot- ¡Oye, espera!

Ambos vieron como el peliblanco estaba derrotando al ejército ser derrotado pero era nada más uno que tres que el derroto.

Lancelot- Daphne ¿puedes activar tus alas?

Daphne- No... todavía estoy en practica con eso... -Dijo decepcionada en eso ella suelta un gemido de sorpresa al ser como Lancelot la tomó.

Lancelot- Sujetate. -El la cargo y se convirtió en Hada la que normalmente estaba para llevarse encima a la chica y ponerla encima del caballo.

Tristan- ¡Daphne! -El dijo sorprendido al verla delante de él.

En eso Lancelot se puso debajo del caballo para empezar a volar como podía cargando al caballo.

Tristan- ¿Que?, ¿que paso?, ¿estamos volando?

Lancelot- ¡Ninguno de ustedes están volando, eres un maldito idiota, Tristan!

Tristan- Ay con razón, Lancelot, ¿quien lo iba a decir?

Lancelot- ¿En que estabas pensando cuando te lanzaste tu solo contra toda esta horda?

Daphne- ¡Vamos Lancelot tu puedes!

Tristan- ¡Pon más fuerza! ¡Sube, sube ¿que no vez que quieren matarnos?!

Lancelot- Podría hacerlo si te bajaras del caballo ahora mismo. Ay malditasea...

Daphne lanzó un rayo de luz que derroto a varios monstruos pero en eso un puente de hielo se formó haciendo que el caballo de Tristan tocara suelo.

Tristan- ¿Que esta pasando?, ¿por que estamos en un camino de hielo? Claro, un puente de hielo, bien Lancelot, no sabia que podías hacer eso.

Lancelot- Vamos hacia el castillo y dejemos estos inútiles, ¿a quien le importa quien haya techo esto?

Tristan- ¡Si, ya entendí! -Daphne se acomodo y solo observaba como todos los Caballeros vacíos fueron derrotados por los picos de hielo que se reflejaban.

Daphne- Si Lancelot no hizo ese poder, ¿quién nos ayudó?... -Pensó admirada como el frío se apoderó del lugar.

Pero los monstruos que sobrevivieron empezaron a lanzar esferas de oscuridad.

Daphne- "¡Arca!" -Exclamo e hizo que 5 monstruos quedarán encerrados y destruidos.

Tristan- "¡Contraataque!"

Lancelot empezó a lanzar sus flechas esquivando también los ataques.

Loa rayos de luz de Daphne se reflejaban mientras que ellos trataban de detener los ataques.

Tristan al observar que estaban cerca protegió como pudo a Daphne abranzandola y protegiendo su cabeza al chocar contra el muro del castillo, ya dentro Tristan alzó su mirada separándose un poco de su sobrina.

Daphne- ¿Este es el castillo?

Lancelot- Si... llegamos a tiempo.

Tristan- Aquí debe de estar el sujeto que puso las maldiciones a mi mamá y mi hermana.

El se bajo del caballo para alzar sus manos tomando la cintura de Daphne ayudandola a bajar.

Tristan- Perdóname, nunca fue mi intensión ponerte en peligro por salvar a mi... -Le dijo a Lancelot mientras alzaba a Daphne.

Pero ella cayó al suelo al perder el equilibrio gracias a que Tristan la dejó caer accidentalmente ya que Lancelot lo tomó de las orejas.

Lancelot- ¿Quien te dijo que estoy haciendo esto por ti?, de todas formas también tenía que venir a este castillo. De una manera más inteligente por si me lo pregunta.

Daphne suspiro y se levantó mientras que veía el castillo.

Daphne- Entonces, ¿también tienes a alguien aquí salvar? -Le pregunto mirando al rubio quien la miro.

Lancelot- Para nada, solo es para desahogarme.

Tristan- ¿En serio?

En eso unos aplausos con sonido metálico gracias a la armadura se escuchaban en el gran salón.

Xx- Aplaudo sinceramente el coraje y proactividad que demostraron ustedes tres, les doy la cordial bienvenida al castillo de edimburgo. Del Reino de Lyonnes, el príncipe Tristan, del Reino de Benwick, el príncipe Lancelot y del bosque de las Hadas la princesa Daphne. Me disculpo... creo que no me he presentado apropiadamente. Yo soy el rey del nuevo reino de Edimburgo, Deathpierce.