POV Jisoo

Días después

- Me alegro de que ya estés un poco mejor. - Dije tomando entre mis manos la suya dejando un beso. - De verdad Rosé, te juro que no se que hubiera hecho sin ti, tal vez yo me hubiera ido contigo

- No digas esas cosas mi amor, si eso hubiese pasado, tendrías que salir adelante por nuestra hija

- Hablando de ella. - Sonreí. - Te tengo una sorpresa. - Caminé hasta la puerta y la abrí, mi padre estaba sosteniendo a nuestra pequeña hija. Me la entregó y fui nuevamente hacia Rosé. - Apenas me la entregaron hoy por la mañana después de todo el procedimiento para tenerla conmigo ¿Puedes cargarla? ¿O aún duele tu brazo?

- Sí, sí puedo, dámela. - Me acerqué y se la entregué en sus brazos. - Dios mío, es tan hermosa. - Dijo mientras acariciaba su rostro. - Por fin Jisoo, por fin estamos juntas las tres

- Rosé yo...no sé si sea el momento indicado pues por todo lo que acaba de pasar. Pero ahora que las tengo aquí a las dos, no quiero separarme de ustedes, de ti, de mi hija. Hace unos días Lisa me dijo que planeaba casarse con Jennie, así que, hablamos y pensamos que tal vez, podría ser una boda doble. Quiero que formemos la familia que siempre añoramos, por eso me atrevo a decirte que, ahora sí, te cases conmigo

- Que hermosas palabras Jisoo, yo también quiero formar una familia contigo y nunca separarme de ti. Creo que mi respuesta es obvia, claro que acepto casarme contigo mi amor. - Me acerqué a ella, la besé y le di un fuerte abrazo

- Cuidado con la niña ¡Auch! Duele Jisoo

- Perdón, perdóname. - Las dos comenzamos a reír

Seis meses después

-  Me concedería ésta pieza señora de Kim. - Me levanté de mi asiento y extendí mi mano

- Claro que sí, esposa mía. - Tomó mi mano y caminamos hasta la pista de baile, puse mis manos sobre su cintura y ella enredo sus brazos en mi cuello y  comenzamos a bailar a un ritmo lento. - Te amo Jisoo. - Decía en mi oído mientras
bailábamos. De pronto la música dejó de sonar, me alarmé al igual que Lisa y Jennie, quiénes venían caminando hacia nosotras

- ¿Qué fue lo que pasó? - Preguntó Jennie

- Yo pedí que quitarán la música. - Voltemos rápidamente hacia atrás y ahí estaba Seulgi, la madre de Rosé y Jennie. Sinceramente se veía fatal, al parecer le había afectado demasiado la muerte de Irene, y como no, si ellas eran amantes, al parecer se había enamorado de ella

- Señora ¿Qué hace aquí? Si piensa que arruinará nuestra fiesta de boda está muy equivocada. - Habló Lisa

- Lisa tiene razón ¿Qué es lo que quiere? Es mejor que se vaya de una buena vez

- Yo se que ustedes dos, Jisoo, Lisa, tienen razones de sobra para odiarme, después de todo el daño que les he hecho, en especial a ti, Jisoo

- Señora, este no es el momento, estamos festejando nuestro compromiso

- No podía perderme del casamiento de mis dos hijas. Yo solo venía para felicitarlas, desearles que sean felices

- No creo en tus palabras mamá. - Dijo Rosé. - Nos hiciste mucho daño, en especial a mí

- Créeme hija, estoy arrepentida de todo el mal que te hice. - Decía mientras derramaba lágrimas. - Es mejor que me vaya, solo quería decirles eso y despedirme de ustedes. - Nadie dijo nada, solo la observamos caminar a la salida

- Oigan, creo que la fiesta ya debe terminar. - Dije

- ¿Por qué amor? - Me preguntó Rosé

- Nuestro vuelo a Japón sale  dentro de tres horas, debemos de estar antes en el aeropuerto

- Lisa y yo no nos quedamos atrás, nosotras nos vamos de luna de miel a Hawái. - Habló Jennie tomando la mano de Lisa. - ¿Nos vamos?

- Espera Jenn, antes de irnos, me gustaría hablar contigo. - Se acercó a Jennie y la tomó del brazo. - Regresamos en unos minutos, ya está todo listo para irnos, no tardaremos

******

POV Rosé

- Vamos Jenn, baja del auto. - Ella solo permanecía inmóvil. - Ésta puede ser la última vez que veamos a mamá

- ¿Mamá? A ella no se le puede considerar madre, una madre no le hace daño a sus hijos Rosé

- Se que ella cometió muchos errores, pero hay que saber perdonar, yo no me quiero ir sin antes despedirme bien de ella. - Bajé del auto. - ¿Vamos?

- Vamos. - Jennie bajó también del auto y entramos a la casa. Estaba todo oscuro, supuse que tal vez ya estaba dormida pero en el comedor se escuchaba como hablaban, así que fuimos allá

- Haber hija, cuéntame ¿Cómo te fue en la escuela? - Mamá estaba hablando sola, estaba sentada en la silla en el comedor y en las sillas de los costados habían dos muñecas. - Que bueno Jennie, me alegra mucho que te diviertas. - Hablaba mientras sonreía. - Rosé hija, prometo que iremos a pasear en la tarde, Para divertirnos un poco. Jin, que hermosa familia tenemos ¿Verdad?

- Mamá. - Hablé. Ella miró hacia atrás, nos miró y sonrió

- Hijas, vengan por favor, siéntense conmigo, vamos a cenar

- No mamá, solo venimos a despedirnos. - Dijo Jennie

- Pero ¿Por qué? La cena está lista, les hice su comida favorita ¿recuerdan cuando estaban niñas?

- Mamá, Jenn y yo nos vamos de la ciudad por unos días, nos vamos de luna de miel. Jisoo y yo iremos a Japón y Jenn y Lisa a Hawái

- Cuando regresen, pueden venir y pasar tiempo juntas ¿Cuándo vendrán a visitarme?

- Ya no volveremos jamás aquí, nos iremos a vivir a la ciudad de Busán. - A pesar de todo, me estaba doliendo mucho decir todo ésto. - No volveremos a verte

- Adiós mamá. - Jennie me tomó de la mano para salir de ahí. - Rosé, mamá está mal, se está volviendo loca ¿La viste? Habla sola, está enferma. - Dijo subiéndose al auto

- Lo sé, pero papá se hará cargo de ella. No sabes cuánto me duele verla así

- No es momento de ponernos tristes, nos acabamos de casar con las mujeres que más amamos, tienes una hija muy hermosa, es momento de ir por nuestra felicidad

- Tienes razón. No hay que dejar esperando a nuestras esposas

******

- Ya está todo listo para irnos al aeropuerto. - Dijo Jisoo acercándose a mí con la pequeña Eunbi en brazos. - Te toca. - Extendí mis brazos para cargarla. - Llevaré las maletas al taxi, vámonos

Después del pequeño recorrido en taxi hacia el aeropuerto por fin llegamos. Ya estábamos a punto de abordar, así que era momento de despedirnos.

- Hermanita. - Habló Jennie. - Espero que se la pasen muy bien en su luna de miel, agranden la familia, denle a mí pequeña sobrina un hermanito o hermanita

- Que cosas dices Jenn.  - Sonreí. - Lo mismo digo para ustedes. - Le guiñe el ojo. - Pásenla genial, espero verte pronto. - Acorte la distancia entre nosotras para fundirnos en un cálido abrazo. - Nos vemos

- Al fin somos felices mi amor, tú y mi hija, son lo más preciado que tengo en la vida. - Dijo Jisoo entrelazando nuestras manos. El avión ya había despegado, ya estábamos en camino a Japón. - Te amo

- Yo muchísimo más

Después de más de dos horas y media de vuelo, por fin habíamos llegado a la ciudad de Tokio. Saliendo del aeropuerto tomamos un taxi para ir a nuestro hotel.

- Llevaré a la niña a una de las habitaciones. - Habló Jisoo sostenido en sus brazos a nuestra pequeña hija, la cual estaba profundamente dormida

- No tardes, te esperaré en nuestra habitación. - Caminé y abrí la puerta. Dejé las maletas a un lado, después podríamos desempacar. Me senté sobre la cama esperando por Jisoo

- Llegué. - Jisoo entró por la puerta, cerrando ésta. Me levanté, caminé hacia ella ,enrede mis brazos en su cuello, ella puso sus manos sobre mi cintura y me fue guiando a la cama. Desabotone su blusa y la quité dejándola en el piso, bajé mis manos ahora al botón de sus pantalones, metí mi mano en ellos tocando su semi erecto miembro, Jisoo cerró sus ojos, sintiendo el placer que le estaba proporcionando. Siguió dejando besos por todo mi cuello. Sus manos se posaron sobre mi pantalón, desabrochó mi cinturón y después desabotonó mi pantalón para bajarlo. Con la palma de su mano derecha comenzó a acariciar mi intimidad. Después levantó mi blusa, quitandola también junto con mi sostén, ahora acariciaba mis pechos con sus manos y también los mordía y besaba. Bajó sus pantalones junto con sus calzoncillos, dejándome ver su gran miembro el cual ya estaba totalmente erecto. Me dió la vuelta, recostándome sobre la cama en cuatro, tomó su pene y comenzó a llevar su mano de arriba a abajo. Quitó mis bragas, las dejó a un lado para después posicionar su miembro sobre mi entrada, comenzando a frotarlo suavemente para después meterlo por completo sin previo aviso

- ¡Ah sí Jisoo! - Gemi mientras movía sus caderas a un ritmo lento. Paró sus movimientos para volterme y estar frente a ella. Me aferré fuertemente a ella por la cintura y volvió a entrar en mi. La atraía más a mí, tomando su trasero para guiarla también con los movimientos y arañaba su espalda por la gran excitación que estaba sintiendo. El orgasmo estaba cerca, podía sentirlo, en cualquier momento lo haría

- ¡Agh! Ya me voy a venir. - Dijo con la respiración agitada. Trato de salir de mi, pero la detuve

- Házlo. - Paró los movimientos y nos quedamos mirando fijamente. - Te amo, quiero ser tuya por completo. - Tomé su rostro con mis manos y dejé un tierno beso en sus labios. Volvió a moverse pero ahora aún más rápido. Escuché como de su boca salían ligeros gruñidos, indicando que el orgasmo estaba por llegar

- ¡Agh sí! - Dijo mientras mantenía cerrados sus ojos. Unas cuantas embestidas más y por fin se vino. A los cuantos segundos después lo hice yo también. - Te amo, te amo Rosé. - Decía mientras besaba por todas partes de mí rostro y cuello. Salió de mi y tomó las cobijas para taparnos con ellas y me abrazó fuerte por detrás

- Sabes Jisoo, he estado pensando que, cuando regresemos a Corea, podrías meterte a estudiar

- ¿Enserio? Con veintiséis años, casada, con una hija de seis meses y tal vez... - Con su mano acarició mi estómago. - Tal vez si todo sale bien, con un bebé más

- Mi amor, nunca es tarde para salir adelante. Yo sé que tienes el trabajo asegurado con tu padre, pero podrías salir adelante por tu propia cuenta. Eres alguien muy inteligente, sabes demasiado

- Eso te lo debo a ti, tú me enseñaste desde que éramos unas niñas, casi toda la primaria y la secundaria

- ¿Lo ves? A mí me gustaría verte como toda una profesional. Promete que lo pensarás

- Está bien, prometo pensarlo

Seis años después

- ¡Felicidades mami! - Gritaron al mismo tiempo su hija Eunbi quien ya tenía seis años y su pequeño hijo Donghyun de cinco años de edad

- Gracias mis amores. - Jisoo cargó a cada uno en sus brazos y dejó besos por el rostro de sus dos hijos

- Felicidades a la graduada de ingeniería. - Rosé se acercó a Jisoo, con un ramo de rosas. - Te lo dije ¿Recuerdas aquella tarde cuando éramos niñas? Te estaba enseñando una lección de matemáticas. - Dijo mientras observaba como su esposa llevaba puesto aquella toga de graduación

- Te dije, esto es muy fácil la matemática es fácil

- Y te dije que algún día serías una ingeniera. - Se acercó a ella y dejó un beso

- No mami, deja a mami Jisoo. - Dijo Donghyun ese niño era el consentido de Jisoo, más que nada porque le recordaba a su pequeño hijo fallecido, Taeyang. El niño era todo un celoso de su madre

- Es mía. - Dijo Rosé sacando la lengua

- Mami mala. - El niño hizo un puchero

- No llores Donghyun, te la dejo, te la regalo. - Tomé en mis brazos a Eunbi. - Yo me quedo con Eunbi

- Vayan a jugar niños. - Los dos pequeños salieron corriendo por todo el jardín de la universidad en la que Jisoo estudiaba. - Mira nada más la hermosa familia que hemos formado. - Dijo Jisoo mientras observaba a sus hijos jugando

- Siempre soñé con ésto, estar así junto a ti, con nuestra familia, al principio, pensé que sería imposible por todos los obstáculos que enfrentamos. No sabes cuánto te amo Jisoo

- Desde pequeñas, nuestro destino era estar juntas, ahora todo se cumplió, todos nuestros sueños se hicieron realidad. Te amo Rosé, mi pequeña Rosé.

Espero que les haya gustado esta historia. Quiero agradecer a todas esas personas que apoyaron, votaron y comentaron mi historia.

Tengo otra idea para otro fanfic, pero como ya dije, entré a la escuela y la verdad no me gustaría publicarla y dejarla abandonada porque la verdad la escuela consume mucho de mi tiempo. Si todo sale bien este semestre, espero subir la nueva historia a principios de Diciembre. El tiempo pasa volando, así que esperen.

Se despide Jisoocristo7u7 💕