Destinados 22
Sungyo tuvo que regresar a Busan, aunque no quería tenía que hacerlo.
Pero lo había encontrado, había encontrado a su otra mitad.
Pero... Jimin?
Por años estuvo esperando la reencarnación del Omega, jamás había pasado por su cabeza que la reencarnación de la que fue su pareja, regresará también.
Pero aún así, ciegamente su lobo también quería a Jimin para él, o sentía que debía ser suyo Si o Si, la sensación era extraña.
Su orgullo había sido dañado por el alfa Min, cuando esté le había arrebatado el que él creía, era su nueva pareja en aquel tiempo.
Observa los papeles que tiene en sus manos, y sólo frunce mas el entrecejo cuando ve que es una carta de los del concejo.
Sungyo los odia, él realmente odia a ese atajo de viejos decrépitos que se creen la mamá de tarzan, sólo porque son los elegidos por la luna para formar una comisión de viejos líderes.
A veces creía que la luna se equivocaba al elegir a aquellas personas.
Gruñe molesto, porque lo que menos quiere es ir y verles las caras, para que le estén jodiendo con que "necesita una pareja estable".
Bien, la necesita pero no quiere una omega, quiere a su pareja de vuelta, y está estaba en Daegu, no Busan.
Jimin se removió entre los brazos del alfa, había dormido tan cómodo la noche anterior, que no quiere levantarse, pero sabe que tiene que.
Había pedido a Yoongi que le visitará aquella noche, para prepararle una cena, porque el omega también quería cortejar al alfa.
Al tener la cabaña sola, aquella había sido una muy buena oportunidad, de mostrarle al alfa sus aspectos culinarios.
Taehyung se encontraba en la ciudad junto con Jungkook, ambos estaban asistiendo a la primer cita con el médico que vería el parto de Taehyung.
Al parecer al haberse ambos saltados la primera cita, les había tocado ir cuando tan solo el feto tenía dos meses.
“Buenos días, amor” le dijo Yoongi con voz ronca, al estar él también recién despertando.
“Buen día Yoonnie” dice Jimin, aún con su cabeza metida en el hombro y cuello del alfa.
Esta a gusto así, aparte el delicioso aroma de Yoongi, lo adormece siempre.
“Cómodo?” pregunta él alfa.
Jimin sonríe en grande y se acomoda más cerca del calor que Yoongi emanaba mientras asiente.
“Que hora es?” pregunta en un murmullo Jimin.
“Hummm, son las –se voltea a ver el reloj que está en la mesita de noche, del lado derecho–. Las 8:45 a.m”
Jimin se levanta de un solo tirón, Yoongi le ve extrañado.
“oh, es que Tae dijo que regresaba hoy a las 9, así que tengo que preparar el desayuno y eso” le explica Jimin, mientras se levanta de la cama.
Yoongi aún recostado en ella, observa como el omega se movía en el cuarto, buscando ropa para colocarse.
Degusta cuando esté quita la camisa enorme y de color blanco, que había usado como piyama, la noche anterior al momento de dormir, y admira la belleza del cuerpo de su Omega y su pecho se contrae en satisfacción y orgullo.
Silenciosamente se levanta de la cama y camina de puntillas hasta estar cerca de Jimin, para luego abrazarlo por la espalda y colocar su cabeza en la curvatura del cuello de Jimin, dejando besos pequeños en aquella zona.
Jimin se retuerce levemente, porque aquellos besos le causan cosquillas, pero aparte de eso, porque también puede sentir la prominente ereccion del mayor restregándose sobre sus glúteos.
Y Jimin no quiere pensar en cosas que, por los momentos no se puede hacer.
No aún.
Yoongi se detiene cuando Jimin deja de forzajear, entonces el Alfa se aparta del Omega rápidamente.
El aroma de Yoongi se había hecho rápidamente muy fuerte.
Diablos.
Yoongi retrocedió en sus pasos.
Joder, como fue que se había olvidado de que estaba próximo a su celo?
Con tantas cosas en la cabeza, a Yoongi se le había pasado por alto aquel pequeño pero importante detalle.
Ahora entendía la necesidad de su lobo de estar cerca de su Omega.
Jimin se giró a verle, con su boquita abierta y sus manos semi cubriéndola, viendo asombrado a Yoongi.
“Y-yoongi?” Jimin intento acercarse al alfa.
Yoongi retrocedió en sus pasos. Alejándose del Omega.
El aroma de las orquídeas y los lirios haciéndose cada vez mas intenso ante el olfato del alfa, los caninos de Yoongi picaban.
“Jimin, no te acerques más, por favor” pidio, o más bien rogó el alfa.
Jimin detuvo sus pasos, sintiendo su corazón martillar, su Omega se había encogido de lugar cuando escucho el rechazo del humano, aunque su lado lobuno estaba más que en contra con las decisiones del humano.
“Hyung, tú estás...?” la pregunta quedó en el aire cuando Yoongi había salido corriendo de la habitación.
Jimin reaccióno rápidamente y le siguió, su pulso aún acelerado por las fuertes feromonas que el Alfa iba dejando a su paso.
“Jimin, cariño, mira se que... —Yoongi trago grueso–. Esto es difícil, pero no te haré nada que no quieres, y se que esto no es lo que quiera aún, así que me iré y pasaré mi celo en la cabaña, no te preocupes si, no es la primera vez que pasa esto”
Yoongi no le dio tiempo para que el omega respondiera, él solo se giró sobre sus talones y camino hasta la puerta de entrada de la cabaña, abriéndola rápidamente para luego correr y cambiar, huyendo del lugar.
Podía escuchar los aullidos del lobo, con cada patada que daba.
Jimin se sintió vacío en aquel instante.
Una de sus manos se instaló justo en su corazón, el cual latía rápidamente como si hubiera corrido una maratón.
Su otra mano se instaló justo debajo de su pecho, en su estómago.
Mordio su labio inferior y detuvo sus inmensas ganas de llorar.
Indirectamente había sido rechazado.
Pero también sabía que Yoongi lo hacía por su bien, porque a pesar de todo el alfa aún no terminaba el cortejo y Jimin aún no daba la respuesta final, sabía que no podría ayudar a su alfa a pasar su celo porque Yoongi respetaría las reglas del cortejo, y porque él tampoco pondría un solo dedo encima suyo, sin su consentimiento.
“Pero... pero yo quiero ayudarte alfa”
Aquella voz baja y aterciopelada había abandonado sus labios, su Omega raramente se manifestaba, y que este dejará que su voz se escuchara, significaba que muy en el fondo él también quería complacer a Yoongi como su pareja.
Pasar un celo sin tu pareja, para un Alfa, u Omega, era sumamente doloroso, las intensas ganas de apareamiento del Omega eran intensas, y las enormes ganas de tener sexo del alfa, era insufribles.
Inhaló fuertemente en el aire, sintiendo el delicioso aroma de Yoongi aún impregnado en el aire, y un calambre en su vientre le atacó, su entrada lúbrico y el calor le azotó.
Oh por todos los dioses, él también había entrado en celo. Maldición.
A pasos lentos Cerro la puerta con llave, no tenía que preocuparse por si Tae llegaba tarde y él no podría abrirle, Taehyung tenía llave.
Se encaminó a pasos lentos, sintiendo el roce de su ropa interior, molestarle.
Entro a su cuarto y el aroma del preticor, sólo lo hizo jadear más y lubricar aún más, que se sintió asquerosamente húmedo allí atrás.
Corrió a la cama y se tiró sobre ella, retiro la camisa que se había puesto, y atrajo las sábanas hasta su nariz. El aroma del alfa estaban impregnadas en aquellas sábanas y cama.
Él sólo podía gemir de gusto y satisfacción por aquello, el dolor en su vientre haciéndose cada vez más fuerte.
Necesitaba, Jimin necesitaba a su Alfa ahí a su lado, repartiéndo besos y caricias.
Aquel sólo pensamiento lo hizo jadear, cuando otra contracción se hizo presente.
Maldito celo.
Y malditas ganas de apareamiento.
Y no solo era Jimin, Yoongi estaba igual de afectado que él Omega.
Y ambos solo deseaban tener al otro a su lado, para poder satisfacer sus necesidades y poder unirse en uno.
Tal vez si Jimin....
Hi~ a donde van sin votar y comentar ahhh(?)
Se adivinan lo que vendrá a continuación no es así(?)
SIGUEN SIN SUPERAR EL ARTE DE CB DE BTS???
Bc me, I can't🤧🤤😳😳
Gracias por sus votos, por seguirme en mis dos cuentas, gracias por todo~
Nos seguiremos leyendo~
MinMin👑🐾
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