—¿Esto es una broma, verdad? —ya había pasado una semana desde que los alfas menores tuvieran cada uno la conversación con sus padres, y estos, específicamente sus madres, decidieron jugar otra carta buscando que sus hijos se enamoraran.

—En vista de que los dos quieren irse a vivir solos pensamos que esta es la mejor forma, en vez de gastar en dos lugares ahorraremos dinero solo invirtiendo en uno, que ustedes deberán compartir.

—Por favor, tienen dinero para comprar veinte departamentos amueblados.

—No podemos ir por la vida gastando dinero innecesariamente, aquí tienen una casa, sus necesidades básicas cubiertas, pero aun así quieren irse, pues esa es nuestra condición.

—Pues gracias por nada, puedo trabajar y pagar yo mismo un lugar.

—Pero te tomara mucho tiempo Eithan, y al parecer ambos quieren irse de casa lo antes posible, asi que no veo porque no aceptar, en el pasado se llevaban bien y compartían muchas cosas...

—Bien dijiste madre, en el pasado, y ya es hora de que acepten el presente y dejen de querer de regreso algo que jamás regresara.

Que Eithan dejara a todos en medio de una conversación-discusión se estaba haciendo normal.

Dayit vio el lugar por donde el otro se fue, sintiéndose rechazado una vez más.

Al caer la noche, Eithan regreso a la casa, fue directo a la que se había vuelto su habitación, poco tiempo después recibió la visita de Eimy, su melliza era todo lo contrario a él, quizás porque era omega.

—¿Cómo estás? —Eimy se sentó en la silla del escritorio, mientras él se dejó caer boca arriba en la cama.

—Estoy bien

—No parecías estarlo cuando te fuiste esta mañana

—Solo estaba un poco molesto, ahora estoy bien asi que por favor no saques ese tema, no arruines mi humor

—Me temo que no puedo, porque no entiendo porque parece que tú y Dayit no puedan estar en un mismo espacio, ya ambos son adultos. Le dijiste a nuestros padres y padrinos que superaran el pasado ¿Pero lo han superado ustedes dos? Especialmente tú, ya que tanto quieres irte, aprovecha la oferta, ambos empezaran la universidad, es seguro que buscaran trabajo, y que se ignoraran la mayor parte del tiempo, pueden convivir en un mismo espacio sin problema, solo madura.

A estas palabras le siguieron unos largos segundos de silencio, cortados por un bufido —¿Ya te desahogaste? Si es así, puedes irte.

Le dio la espalda, pero Eimy no se fue enseguida, al ver que él no se giraría se puso de pie, sonando la silla a propósito. —Enserio que necesitas madurar. Aunque mi consejo caerá en oídos sordos, yo tú aceptaría, es lo que les conviene, porque aquí nuestros padres seguirán buscando la forma de que convivan y vuelvan a tener la relación que tenían antes de que te llegara la adolescencia.

Cuando Eithan escuchó el portazo, volvió a colocarse boca arriba, su hermana se había ido, pero ya le había agriado el humor, y lo peor es que sentía que tenía razón.

Al día siguiendo, sentado en el jardín, Dayit buscaba ofertas de empleo.

—¿Qué haces? —el celular casi se le cae por el susto, Eimy rio por su reacción mientras se sentaba a su lado.

—No te sentí llegar

—Me di cuenta, pero respóndeme ¿Qué hacías?

—Estoy mirando ofertas de trabajo, mientras más pronto consiga uno mejor.

—¿Por qué no solo aceptar la propuesta de nuestros padres, tendrán todo cubierto, y si aún quieren buscar empleo, pueden hacerlo con más calma.

—No soy el único que debe de aceptar esa propuesta, por mí no hay ningún problema, pero tu hermano está empeñado en no respirar el mismo aire que yo.

—Mi hermano es un idiota, de hecho creo que todos los alfas lo son, incluyéndote. —la omega se colocó de lado, para mirar mejor al alfa— Se sincero conmigo Day ¿Qué fue lo que paso entre tu y Than para que se lleven como lo hacen?

Dayit la miro unos segundos antes de volver su vista al frente, se llevaba bien con Eimy, entre los dos se tenían cierto grado de confianza, pero no podía decirle la razón por la que Eithan lo repudiaba.

—Ya lo sabes, le arruine el poder tener esa primera experiencia de adultos

—Esa razón no me convence, ya han pasado sus años, y apuesto que ambos ya han tenido esas primeras experiencias, tuvo que pasar algo más.

—Yo no las he tenido

—¿Disculpa?

El alfa se obligó a mirarla a la cara —que no he tenido esa primera experiencia.

Eimy lo veía como si le hubiese salido otra cabeza, se inclinó hacia él, notando mejor el ligero rubor que cubría sus mejillas.

Un fuerte carraspeo los hizo separarse asustados. —¿Interrumpo algo?

Eithan estaba frente a ellos, con las manos en los bolsillos y ese inexpresivo rostro al que se sumaba una ligera acidez en su aroma.

—¿Qué vas a interrumpir? —su hermana le pregunto de vuelta, cruzándose de brazos también.

—Quiero hablar con Dayit, a solas ¿Puedes dejarnos?

Eimy intercalo su mirada entre los dos, antes de ponerse de pie, no lo diría pero se sentía un poco intimidada por el aura de su hermano.

Eithan miro la dirección por la que su hermana se fue, y cuando estuvo seguro de que estaban solos, llevo su mirada al otro alfa, quien desvió la suya al verse descubierto mirándolo.

El alfa mayor dio unos pasos hacia el menor, respiro profundo antes de hablar —Aceptare la propuesta de nuestros padres, aceptare mudarme al mismo departamento que tú.

Dayit volteo a verlo rápidamente, no creyendo lo que acababa de escuchar.

—Pero que te quede claro que no lo hago por gusto, y que aunque vivamos juntos espero no verte ni la sombra.