El tiempo pasa tan rápido que a veces ni notamos lo rápido que termina un día para comenzar otro, Será por lo ocupado que tenemos nuestros días que no percatamos lo rapido que va el tiempo. Ya han pasado más de un año  que llegue a estudiar a este país. Un años que conocí a muchas personas buenas que considero parte de mi familia. Un años que conocí a Hyun-Su, apesar que al principio cuando lo conocí me caía tan mal; pero como dicen del odio al amor solo hay un paso.

Apesar de tantas cosas malas que me han pasado viviendo en este país también me han pasado cosas tan buenas de las que hoy no me arrepiento de haber tomado esa decisión de venir a estudiar aquí, una de esas cosas buenas es haber conocido a mi Hyun-Su.

Hoy habíamos quedado en comer en el restaurante de la señora Choi, él me pidió que fuera muy arreglada y me colocará un hermoso vestido morado que me había comprado, me pareció extraña su petición, pero hice lo que me pidió. Al llegar al restaurante Hyun se me acerca y me abraza, y da un tierno beso para después verme de los pies a la cabeza.

— Helen, estás muy hermosa. No cabe duda de que mi novia es la mujer más bonita del mundo — Hyun hace que me sonroje mientras se me vuelve a acercar para besarme.

Me toma de la mano y vamos adentro del restaurante, me sorprende ver a Eun-Jin y su novio, también estaba Joon y Mike, la señora Choi que tenía en sus brazos a sebas y por supuesto el amigo de Hyun el señor Park, que últimamente lo veo rondado por este restaurante. Hyun le dice a todos que se acerquen y que presten atención. Todos se acercaron a nosotros dos esperando escuchar lo que iba a decir mi loquito. Mi corazón latía rápido mientras él me veía sosteniendo mis manos.

— Hoy quiero decirle delante de todos ustedes  a esta hermosa mujer que es lo mejor que me ha pasado, que me alegra mucho que dañará mi auto, por que así fue que la pude conocer — todos comenzaron a reír al recordar el incidente  que provoque con el auto de Hyun — Disculpa por no haberte expresado mis sentimientos por ti antes, tu sabes lo difícil que se me hace decir lo que siento — Hyun estaba súper nervioso, siempre le ha costado hablar sobre sus sentimiento y ahora lo estaba haciendo —  Quería decirle que la amo y que quiero estar con ella el resto de mi vida — hace una pequeña pausa y me mira tímidamente — ¡Helen! ¿Quieres casarte conmigo?.

Todos quedaron sorprendido en especial yo, Hyun no era para nada romántico y me había propuesto matrimonio delante de todos.

— ¡Claro que si me quiero casar contigo! — le digo mientras todos gritaban y aplaudían como locos — Tendré que prepárame psicológicamente para aguantarte toda mi vida, Hyun, pero creo que podré con eso.

— Yo soy el que se tiene que prepararse  psicológicamente para soportar lo escandalosa que eres — reímos los dos, pero que se va hacer así es el amor y nadie es perfecto.

—  Me alegro mucho que por fin me digas que me amas Hyun. Pensé que no sentías nada por mí.

— Sabes cómo soy Helen, no estoy acostumbrado a expresar lo que siento, pero eso no quiere decir que no te quiera. Ahora ya lo sabes — me sentí muy feliz en ese momento. Hyun me había dicho que me ama y lo mejor  me había propuesto matrimonio, ahora lo que faltaba era fijar la fecha de la boda. Para mí sorpresa ya Hyun tenía la fecha.

La boda sería el veintisiete de julio, ese día era mi cumpleaños y Hyun decidió esa fecha porque fue el día en que nací, y para él había nacido el amor de su vida. No sabía que Hyun le gustaba lo cliché.

Todavía faltaba algunos años para graduarnos en la universidad y ahora me iba a casar con ese hombre que tanto amaba, definitivamente que mi vida se había vuelto una locura.

Los meses pasaron volando mientras estábamos muy ocupados con los estudios y con el trabajando en los hospitales que le dejaron a Hyun de herencia. Los preparativos para la boda estaban casi listos, aunque me faltaba lo más importante, el vestido.

Ya faltaban dos semanas para la boda y todavía no tenía mi vestido, esos días Hyun actuaba extraño como evitandome, cuando lo llamaba siempre decía que me llamaría luego que estaba ocupado. La actitud que tenía apenas faltando dos semanas para la boda me hizo pensar que tal vez se había arrepentido de casarse conmigo.

Ya estaba preocupada lo suficiente con la boda y con el comportamiento de Hyun, ahora mi madre me llama para decirme que no podía venir al matrimonio. Era muchas cosas juntas que tenían mis nervios al borde de la locura.

En la noche Hyun me llama diciéndome que fuéramos al cine, me pareció extraño después de tener varios días evitandome ahora me invita al cine ¡Que extraño es este hombre! En el cine actuaba muy extraño, veía su celular a cada momento, se levantó en medio de la película varias veces para contestar una llamada. Me tenía al borde de golpearlo hasta con el empaque de las palomitas.

Después que terminó la película le digo para ir a comer algo y él se niega diciéndome que mejor regresemos al departamento. ¿Que rayos le pasa a este hombre? Pensé.

Vamos al apartamento y en mi rostro se podía ver el humor que tenía, Hyun lo nota pero no dice nada. Entro a mi cuarto y me sorprendo al ver un hermoso vestido de novia puesto en la cama. Era hermosísimo, tenía brillo y pedrería ¡amo el brillo en un vestido! Era corte sirena y tenía un hermoso y largo velo con una pequeña corona. Salgo corriendo de mí cuarto a llamar a Hyun y preguntarle si el fue quien lo compro.

— Hyun, ¿Tu fuistes el que trajo ese vesti.... — no termino de decir la palabra al ver a mi madre, mi hermana y Laura mi mejor amiga de la escuela en la sala con Hyun.

Al vernos comenzamos a gritar y abrazarnos las cuatros. Estaba muy emocionada de ver a mi familia. Mi madre me engaño al decirme que no iba a poder venir, ella me quería dar esa sorpresa y traerme el vestido que ella misma diseño.

—  ¡Que malos son me engañaron todos! — les digo secando mis lágrimas de la emoción.

—  Hija si te decíamos  que veníamos para tu boda no iba a ver emoción cuando nos vieras.

— ¡Mamá! claro que me iba alegrar mucho verlas así supiera que venían. Por eso Hyun se comportaba así conmigo, ¡pensé que ya no se quería casar por como estaba actuando!.

— Helen, si me atrevería a dejarte con todo ya listo para la boda, tendría que esconderme bien lejos de ti. Porque tú de seguro me matas —  dice Hyun y todos nos reímos mientras Hyun me abrazaba.

Ya llegó por fin el día de mi boda, la iglesia estaba decorada con muchas orquídeas morada, ¡se veía tan lindo!. Al entrar a la iglesia acompañada de mi madre y mi hermana que me llevaban al altar, ver a Hyun parado esperándome con un hermoso traje negro me hizo sentir  la mujer más feliz del mundo, mientras caminaba por el pasillo de la iglesia se vinieron a mi mente todos los recuerdos que tenía desde el primer día que vi a Hyun–Su. Las peleas que tuvimos por su auto,  cuando trabaje decorando su biblioteca, nuestro primer beso, lo amargado insoportable y tierno que puede ser. Todo lo que él había hecho por mí para verme feliz, no había duda ese hombre era el amor de mi vida.

Después del  ¡Si Acepto! nos fuimos a la fiesta a celebrar. Todos bailaban, nadie se podía quedar sentado en una fiesta, esa era una de las reglas de cómo divertirse de mi familia.

Hyun me toma de la mano y salimos afuera para estar un poco más solos. Nos sentamos cerca de una linda vista hacia la cuidad, Hyun me da un beso y me acerca a él para abrazarme. Así es como quiero estar toda mi vida con él, feliz.

No sé si ustedes creen en el destino, pero como se le puede llamar a esto. Dos personas que vivían tan pero tan lejos en diferentes países se encontraron y se enamoraron. El destino es un misterio, así como separa personas también las une. Si estamos con la persona que no es para nosotros el destino nos separa, pero si conseguimos a esa persona que si era para nosotros, así esté en el fin del mundo lo encontraremos. Esto fue lo que pasó con nosotros dos.

Helen Duarte y Kim Hyun-Su  si estaban destinados 💕💖

                       FIN ✨💖