Salgo del baño tras Helen, ella no podía irse sin que le explicará lo que vio. Me coloco una toalla que solo cubre mis partes íntimas y corro hasta alcanzarla afuera de la casa.

— ¡Helen espera un momento, las cosas no son como te las estás imaginando! — lo único que pude sentir fue la mano de Helen golpear mi rostro. Tremenda bofetada me dio, ella es muy pequeña pero pega fuerte, casi hace que se me caiga la toalla que me cubría.

— ¡No seas idiota Hyun-Su! que quieres que me imaginé que estabas jugando cartas con esa mujer en el baño, que no paso nada. ¡Por favor! se lo que pasó ahí. Sabes que, Hyun-Su no te quiero volver a ver en mi vida.

— ¡Créeme! No paso nada entre seon–Jin y yo, vamos a dentro y aclaremos todo esto — la sujeto por la mano mientras ella solo me empuja y entra sola a la casa.

— Ahora que estamos aquí los tres aclaremos este asunto Seon–Jin, cuéntale a Helen lo que pasó.

—  No tengo por que darle explicaciones a esta mujer — seon– Jin detalla de pies a cabeza a Helen haciendo que ella se moleste y la quiera golpear. Sujeto a Helen lo más fuerte que puedo para que no golpee a Seon–Jin, esto hace que la toalla se intente caer otra vez, me la sujeto rápidamente para no quedar desnudo. Era fuerte lidiar con estas dos mujeres.

—  ¡Basta con ustedes dos! ¡Ya fue suficiente!. Helen tu cálmate y tu seon–Jin di la verdad — mi voz sonó fuerte, parecía que estaba regañando a un par de niñitas — Seon–Jin estoy esperando que hables.

— ¡Está bien, hablaré! pero solo porque tú me lo pides. entre Hyun y yo no  paso nada, yo entre sin su permiso al baño y comencé a besarlo — Seon–Jin me veía con sus ojos humedecidos tratando de no llorar haciendome sentir culpable — No entiendo porque te estás comportando así Hyun, me estás haciendo daño.

—  ¡Oh y hay viene el drama!  — dice Helen sonriendo al escuchar a Seon–Jin — El daño te lo estás haciendo tú solita por meterte con un hombre que no siente nada por ti — interrumpo a Helen que estaba siendo muy fuerte con la chica.

— ¡Yo si siento algo por ella! — Helen enseguida me voltea a mirar sorprendida — Seon–Jin por ti siento un gran cariño de amigos. Te conozco desde hace tiempo y  siempre estuviste hay para mí. Siempre te voy a querer como una gran amiga.

— Hyun, yo no te quiero como amigo, tu sabes lo que siempre he sentido por ti. Todas esas noches de pasión que tuvimos no te lo decían — seon–Jin hablaba y Helen hacia una fuerte respiración inflando su pecho para contenerse.

— ¡Lo siento! pero eso es lo que puedo sentir por ti.

— ¡Ya veo!, entonces te enamoraste de esta mujer. Ya me quedo claro, Hyun. Ya no tengo que hacer nada en tu vida ni aquí, mejor me voy — al ver que ella se iba en ese estado, intento detenerla pero Helen no me deja hacerlo y Seon–Jin se va triste. 

— Hyun-Su, ¿ por qué no me dijistes que esa chica estaba enamorada de ti? ¡pensé que solo era tu amiga hasta que ella nombró las noches de pasión contigo! — iba a comenzar a explicar mi relación con Seon–Jin hasta que el frío me hizo recordar que estaba en toalla.

Le digo a Hele que espere en la sala, que cuidado que se vaya a ir y entro a la habitación a vestirme el frío me estaba matando.

                     ✨ Helen✨

Ya ni se que pensar de lo que vi en ese baño, ya escuché de parte de esa mujer que todo fue un mal entendido, pero yo sigo con mi presentimiento que si pasó algo y eso me molesta mucho. Veo a Hyun-Su salir del cuarto, ya se había vestido; y como siempre su ropa era de color negro, aunque viéndolo bien el negro lo hace ver más guapo y sexi.

— ¿Ya estás mejor?  ¿Ya se te paso la ira?.

— No, todavía estoy molesta por lo que  vi, eres un chico fácil.

— No soy un chico fácil, lo que pasa es que Seon–Jin y yo fuimos amantes por mucho tiempo. Ella solo quería que me sintiera mejor — en eso veo que se toca su frente como si le doliera la cabeza.

Me le acercó y lo toco — ¡Hyun estás ardiendo en fiebre! — le digo mientras él se tumba en el mueble.

Busco rápido medicina y le doy para bajarle la fiebre. Busco en su cuarto una manta y lo arropó. Él seguía acostado en el mueble de la sala estaba temblando de la fiebre. Me preocupaba que tardará tanto en bajarle la temperatura, así que coloque su cabeza en mis piernas y comenzé a colocarle compresas humedas en su frente. Eso lo recordé de mi madre que nos colocaba compresa húmedas en la cabeza a mi hermana y a mi cuando teníamos fiebre.

Él dormía y yo seguí intentando bajarle la temperatura, hasta que lo logré. Ya eran de madrugada y el sueño me vencía. Lo dejo en el mueble y voy a la habitación para dormir en la cama. Apenas mi cuerpo siente las suaves sabanas comienzo a quedarme dormida. Abro mis ojos al sentir unas manos que me abrazan, volteo y veo a Hyun  acomodar su rostro en mi espalda y abrazarme fuerte.

— Helen, si eres cruel, me ibas a dejar dormir en ese mueble tan incómodo y con este frío, aqui junto a ti es más comodo dormir.

Sonrió al escucharlo. Él estaba causando en mí estragos, emociones que nunca había sentido, este chamo despertó ese lado romántico que no pensé que tenía.

Despertamos los dos abrazados, era tan lindo abrir mis ojos y que sea él lo primero que vea. Me estoy volviendo tan cursi esto era tan cliché, pero creo que está vida con él me encanta.

Nos levantamos de la cama a preparar el desayuno. Mientras él hacía los panqueques yo me lo comía a él a besos, cada vez que pasaba por mi lado no podía evitar darle un beso, no era mi culpa que se viera tan bien sin camisa, el culpable era él por andar así por la casa.

Después que desayunamos fuimos a la mansión a terminar de buscar algunas cosas de Hyun y de su madre. Al llegar a la mansión entramos y Hyun subió al cuarto a buscar las cosas mientras yo lo esperaba en la sala. Me sorprendo al escuchar de una de las habitaciones una risa que se me hacía conocida. La puerta se abre y sí estaba en lo cierto, esa risa era de alguien que conocía. veo salir de aquel cuarto al padre de Hyun junto con mi amiga Alaia.

Ella me ve y yo la veo, nos quedamos asombradas las dos, ¿Qué hacía mi amiga con el viejo asesino? ¿Que estaba pasando aquí?.