Ya han pasado dos semanas de que fui atacada por aquellos hombres que casi nos matan a Eun-Jin y a mí. Me levanto temprano hoy me verá el médico en el hospital para revisar mi herida " Solo espero que esté todo bien y pueda seguir con mi vida normal ".

Salimos del apartamento para buscar un taxi que nos lleve al hospital a la señora Choi y a mí. Escucho la corneta de un carro cerca de nosotras, volteo y veo que era Hyun-Su.

— Pensaban irse sin mí — dice saliendo del carro, la verdad, todavía no me acostumbro a la nueva aptitud de Hyun-Su conmigo. Después de ser un idiota ahora es tan amable.

Nos vamos en el carro al hospital. Por todo el camino la señora Choi y Hyun-Su hablaban como grandes amigos, ni siguiera me dirigieron una palabra. Sonrio al escuchar hablar con tanta confianza a ese par.

llegamos al hospital y me pongo un poco nerviosa, solo quiero escuchar que el médico diga que todo está bien.

— ¿Señorita, Helen Duarte? — pregunta la enfermera del consultorio.

— Si soy yo.

— El doctor la está esperando — entro al consultorio y veo al doctor preparar todo para mi chequeo.

Después que el médico reviso mi herida, me dijo que ya estaba todo bien, eso me hizo tan feliz ya podía volver a mi vida. Afuera Hyun-Su y la señora Choi me esperaban ansiosos de saber que me había dicho el médico.

— ¿Qué te dijo el doctor? — Hyun-Su, estaba más nervioso que yo.

— ¡Ya estoy bien ya puedo seguir con mi vida normal!.

— ¡Me alegro mucho Helen que puedas regresar a tus actividades! — dice la señora Choi.

— Que les parece si vamos a comer algo — propone Hyun-Su, yo asiento. Había pasado mucho tiempo encerrada en el apartamento y quería salir a distraerme.

— Chicos No los puedo acompañar, tengo que ir al restaurante ayudar a mi hermana, estos días nos va muy bien que ya no podemos con tantas personas que van a comer — responde sonriendo.

Íbamos caminado y hablando por el pasillo del hospital para salir, de pronto me sorprende ver que Hyun-Su de detiene y su rostro tiene un semblante de odio. Vuelvo mi mirada al frente para darme cuenta que teníamos delante a nosotros al  padre de Hyun-Su.

— Hijo ¿Que estás haciendo en el hospital? ¡No me digas que estás enfermo! — el padre del chico estaba con varios hombres vestidos todos de traje, recordé lo que me había contado Eun-Jin que el padre de Hyun-Su era médico y dueño de varios hospitales de Seúl.

— Lo que estoy haciendo aquí no es tu problema.

— Ya veo hijo, andas de nuevo con esa  mujercita. Creo que no aprendieron la lección — al escuchar a ese hombre hablar se me revuelve el estómago. Sentí tanta rabia que no pude controlar mi ira y actúe como solo Helen Duarte sabe actuar.

Me le acercó al viejo desgraciado y le dejó caer una fuerte cachetada en su cara — Está mujer tiene nombre, me llamo, Helen, no mujercita — le doy otra cachetada esta vez más fuerte — Y esta es por lo que nos hizo a mi amiga y a mí, cobarde idiota —  las miradas de todos estaban en nosotros, los hombres que estaban con el padre de Hyun-Su se quedaron atónitos. Por más que ese hombre estuviera furioso por las cachetadas no podía haceme nada delante del montón de personas que nos veían, no iba a revelar su verdadera personalidad delante de todos.

Hyun-Su me toma de la mano y nos vamos de hay. Pude ver en su rostro  una sonrisa de satisfacción.

Después de haberme calmado Hyun-Su nos lleva al restaurante de la señora Choi. Él quería probar la comida del restaurante y dale su gusto bueno.

Llegamos al restaurante era muy cálido el ambiente, todo estaba muy lindo. La señora Choi nos da una mesa cerca de la ventana que daba hacia un hermoso jardín con muchos árboles de cerezos que habían comenzado a florecer por la primavera que ya había comenzado.

— Helen, hoy hiciste que me sintiera orgulloso de ti — ya sabía por donde iba Hyun-Su al decir eso — Nunca pensé que fueras capaz de golpear a mi padre enfrente de todos, me gustó la cara que tenía, estaba furioso — la risa de Hyun-Su era incontrolable.

— Ese señor se merece eso y mucho más. Él no puede ir por la vida haciéndole daño a la gente sin recibir su castigo.

— ¡Entonces tu eres su castigadora!  — el chico seguía riendo.

Hyun-Su se quedó por un momento serio después se tanto reír. Se veía preocupado y eso me extraño mucho; si estaba feliz hace un rato por que de pronto está preocupado.

— Helen, estos días voy ausentarme un poco de ti,  estoy investigando algo que descubrí de mi familia. Ahora no te puedo contar de que se trata hasta que tenga las pruebas.

— Hyun-Su me asustas, dime qué es lo que estás investigando. Debería saberlo para ayudarte no crees.

— No te quiero involucrar en esto, mira lo que te paso por mi culpa. No quiero que tengas que ver con nada de esto; así que si no sabes de mi por varios días no te preocupes. trataré de llamarte o escribirte pero si no me comunico contigo no pienses mal.

— ¡Ya me preocupastes!, no puedo dejar que hagas una locura.

— No te preocupes estaré bien — como no me iba a preocupar si ya de tratarse se su familia ya era preocupante y más si era con su padre.

Después de comer fuimos a un festival  al parecer se le llama " El festival de las flores de primavera de Youido" lo celebraban para darle la bienvenida a la primavera. Habían muchas personas observando la belleza de los más de mil seiscientos árboles de cerezos, azaleas reales y otra flores que estaban floreciendo, se veía tan hermosa todas esas flores; de seguro que a mi mamá le fuera gustado ver este festival, la mayoría de las chicas llevaban puesto el hanbok que es un traje típico de Corea ¡todo en el festival era hermosisimo!, Hyun-su me miraba sonriendo al ver lo emocionada que estaba.

Al terminar el festival regresamos al apartamento. El ambiente entre Hyun-Su y yo había cambiando, todavía tenía en la mente lo que me dijo en el restaurante. Por más que tratará de controlar mis emociones no podía evitar estar preocupada, y como a mí eso de disimular no se me da, mi cara lo reflejaba todo.

— ¡Ya Helen! Deja de tener esa cara de preocupación, ya te dije que estaré bien. No hagas que me arrepienta de haberte contado — Hyun-Su me da una de esas fulminantes sonrisas haciendo que yo también sonría.

Me siento en el sofá y él se acuesta colocando su cabeza en mis piernas mientras que con su mano acariciar mi cara.

— Por que mejor de estar preocupada sin necesidad, porque mejor no me das muchos besitos — me dice mientras frunce sus labios para que lo bese. Me río mirando como es esta faceta extraña de Hyun-Su.

— ¡No te besaré no seas tan estupido!

— ¡Me dijistes estupido! Oye sin insultos, no sabes que hay muchas mujeres que se mueren por probar estos labios.

— ¡De verdad!, bueno ponte en promoción y le dices a todas esas mujeres que te besen te parece.

— ¡Que malvada eres Helen!, está bien no te besaré si no quieres — sonrío al escuchar mi nombre salir de sus hermosos labios. Él cierra sus ojos y cruza sus brazos en su pecho estaba indefenso delante de mí. Inclinó mi cabeza hacia él y lo beso

Cada día que pasa y comparto más con Hyun-su más siento que crece este sentimiento por él.  Es algo que me aterroriza, no quiero estar enamorada sola y mucho menos sufrir por alguien que no me quiere. Tal vez estas dudas vengan por culpa de mi infancia y ver a mi mamá  sufrir por mi papá. No quiero una vida así, no permitiría por nada de este mundo tener una vida así.