Salimos del baño y nos vestimos para irnos, estamos  a unas cuántas horas fuera de la cuidad y queríamos regresar antes que oscureciera.

Estamos a punto de subir al auto cuando vemos que cerca de la casa hay un hombre en una moto y nos estaba observando.

Hyun-Su, se le queda mirando al hombre con una expresión de odio, aquel tipo se sonríe y se va en su moto.

— ¿Lo conoces?.

— Si, es uno de los hombres que trabajan para mi padre.

— ¡Ese hombre trabaja para tu padre! — me puse nerviosa al saber que a aquel hombre estaba al servicio de ese señor que daba tanto miedo — ¿Porque estaría aquí?.

— No lo sé, sube al auto te llevaré a tu departamento — el chico reflejaba en su rostro preocupación, el sabía algo de aquel hombre y no me lo quería decir.

Todo el camino de regreso a la cuidad, Hyun-Su, se la paso pensativo, esa mirada preocupada me asustaba, pero más me asustaba que no me dijera ni una palabra. No sé si estaría actuando así por lo de aquel hombre que vimos o por lo que pasó anoche entre los dos.

Llegamos a mi apartamento y esta vez no fue como las otras veces que me dejaba hay parada y aceleraba su auto para irse, esta vez nos despedimos y él espero que yo entrara al edificio para después irse.

Yo sé que no era la gran cosa lo que hizo, pero al verlo esperar a que yo entrara me hizo sentir como si la relación entre él y yo mejoraría, espero que sea así.

✨Hyun-Su✨

Voy en mi auto hacia la mansión, después de haber pasado un momento tan especial con, Helen, ya presentía que mi padre me iba a dañar todo lo especial que había sido ese día. Al ver a uno de sus matones estar afuera de la casa vigilando, ya sentía que no era nada bueno lo que se nos venía.

Entro a la mansión y mi padre estaba en el salón sentado con una copa en la mano, estaba esperando que yo llegara.

— Ya llegaste hijo, no dormiste anoche en la mansión ¿Donde estabas? — mi padre movía suavemente la copa de vino que tenía en su mano para después beber un sorbo.

— Para que me preguntas si ya sabes a dónde estaba, sé que enviastes a uno de tus hombre a seguirme.

— El muy idiota se dejó ver por ti — susurra mi padre — Estoy preocupado por ti hijo, no quiero que hagas algo que pueda deshonrar a la familia.

— ¡Preocupado por mí! Tu nunca te has preocupado por mí, ni por mi madre ni tampoco te preocupastes por Min-Joon, no me vengas ahora con que te preocupa está familia; dime algo papá ¿De cual famila estás hablando? porque ya aquí no existe ninguna familia, tu la destruiste — frunzo mi seño mientras cierro mis puños al escucharlo reir haciendo que yo me molestara más ¿como podía existir alguien como él?, eso era lo que siempre me preguntaba.

— Hijo yo no destruí está familia, tu madre y Min-joon se destruyeron ellos mismos. Eso es lo que quiero evitar contigo, Hyun, no voy a permitir que el único hijo que me queda deshonre mi apellido — mi padre seguía con esa sonrisa de burla en su rostro, mientas que yo ya no podía con la rabia que sentía al verlo como se reía.

— ¡Si no fuera sido por ti papá Min-Joon todavía estuviera aquí! — le gritó conteniendo mis lagrima no podía demostrar debilidad delante de él.

— Estoy cansado de decirte que yo no tuve que ver en nada con lo de tu hermano.

— Tu lo mataste papá, ya deja de negarlo, todos en esta maldita mansión saben que tu lo mataste.

Mi padre se levanta lanza la copa que tenía en sus manos y me da un fuerte golpe en mi rostro haciendome caer al piso para luego patearme hasta cansarse.

— ¡Que esto te sirva para que aprendas hacer un hombre, Hyun! basta de tonterías, no quiero que salgas con esa chica y te lo advierto, si no me obedeces ella pagará las consecuencias. No crié a mi hijo para que ande con una don nadie, te vas a casar con una chica que sea de tu misma clase. Tu puedas hacer crecer este poderoso imperio que he creado, te quedó claro — mi padre arreglando su ropa y su cabello sale de la mansión dejándome en el suelo muy lastimado.

Trato de levantarme del piso pero el fuerte dolor me lo impide, mis labios sangraba igual que mi pómulo. Escucho venir hacia mí a la señora Jin-Min, estaba llorando y muy preocupada por mí. Ella era la ama de llaves de la mansión, pero yo le tenía cariño, la trato como mi segunda madre; será porque desde que mi hermano y yo éramos pequeño la señora Jin-Min nos trataba como a sus hijos y todavía se preocupa por mi a pesar que ya crecí.

— ¡Joven Hyun! Levantese porfavor — ella me ayuda a levantar y me lleva hasta mi habitación.

Me levanto la camisa y había hematomas por todas partes de mi abdomen y mis costillas.

— Tienes que ir al hospital joven Hyun, está muy mal esos golpes.

— Tranquila, estoy bien, no te preocupes por mí y deja de llorar — le hago una pequeña sonrisa a la señora Jin–Min que estaba muy nerviosa.

Me doy una ducha para quitar toda la sangre de mi cuerpo y curar las heridas, mi padre siempre se aprovechó de su poder y nos golpeaba a mi hermano y a mí; pero más me dolía cuando golpeaba a mi madre, eso sí me llenaba de odio hacia él.

Me acuesto en mi cama y veo mi celular. La única voz que quería escuchar en ese momento era la de ella, de mi preciosa, Helen, pero no pude, no sé si me desmaye o me quedé dormido, solo cerré mis ojos un momento y ya no supe de mí. Cuando abrí los ojos ya había amanecido.

✨Helen✨

— ¿Porqué no viniste a clase ayer Helen? Nos tenías preocupadas, desde que andas con Hyun-su, te desapareces, no sabemos si estás viva o muerta, amiga.

— ¡No exageres Eun-Jin! Ayer si andaba con él pero no me pasó nada malo, mirame estoy bien — le digo a mi amiga mientras con mis manos le señalo mi cuerpo.

— El profesor pregunto por ustedes dos, tenían que entregar la tarea que él había mandado ¿Acaso se te olvidó Helen? Amiga ese hombre te tiene loca — dice Eun-Jin rodando sus ojos.

Se me había olvidado por completo lo de la tarea que teníamos que entregar, por lo menos ya estaba lista, hasta la de, Hyun-Su, por qué yo se la había hecho. Algo se me tenía que ocurrir para que el profesor me aceptará la tarea y me diera esa calificación.

Entro al salón y veo que, Hyun-Su, no había llegado, tampoco había llegado Alaia.

— ¿Donde estara Alaia? Ella siempre llega temprano — dice Eun-Jin extrañada.

En ese momento entra, Hyun-Su, con su mira hacia el piso, como si escondía algo en su cara. Se sienta y ni me voltea a mirar.

Sentí que estaba actuando así por lo que había sucedido, ya me iba a tratar con indiferencia porque ya había tenido lo que quería de mí; fui muy tonta por haber estado con él. En mi mente comenzó mi crisis existencial que me estaba volviendo loca.

— Señorita Duarte, Señor Kim, hoy si vinieron a clase, que irresponsabilidad de su parte de no entregar sus actividades ayer; si son así para una simple tarea como serán cuando estén atendiendo pacientes en el hospital — dice el profesor con una expresión muy seria.

Me levanto de mi asiento y Hyun-Su igualmente lo hace.

— Disculpe profesor, ayer me surgió un problema y no pude venir a clase — le digo con una pequeña reverencia, volteo a ver a Hyun-Su y el estaba parado como si nada y ni dijo una palabra.

— que No me interesa sus escusas de por qué no pudieron venir, lo único que espero es que no se repita otra vez. Traigan sus trabajos para corregirlos y darles su calificación.

Al escucharlo que nos iba a dar otra oportunidad agarro deprisa mi tarea y se la llevó, Hyun-Su la lleva también  parándose a un lado de mí.

El profesor comienza a corregir nuestra tarea mientras hacía varios gestos que me ponían nerviosa.

— ¿Que está pasando con ustedes dos? — el profesor nos ve y suspira — Señor Kim reprobó. Me sorprende de usted, es la primera vez que tiene una mala calificación, ya perdió su propio récord de buenas calificaciones. Usted señorita Duarte, no quiero ser tan estricto pero recuerde que usted está becada en esta universidad y si sigue con estas malas calificaciones la podrían retirar del programa de becas y tendría que regresar a su país, tiene que ser más responsable con sus estudios si quieres continuar en esta universidad — el profesor nos devuelve las tareas y me sentí tan mal al ver que había reprobado.

Las palabras del profesor me hicieron sentir terrible, él tenía razón por andar de aquí para allá había descuidado mis estudios y ahora estaba en peligro de perder la beca. También me sentí mal porque era la primera vez que tenía un mala nota, yo era el cerebrito de la familia y ahora soy la más bruta, todo eso era por culpa de, Hyun-Su.

Lo volteo a ver con desprecio y más me sorprendió porque él me estaba mirando con ganas de matarme, así que voltee hacia delante y no volví a verlo durante todas las clases, no quería que se pusiera pesado conmigo por haberlo hecho reprobar.