-Si, estábamos demasiado cerca.-le digo a Mile que desde que entramos no ha parado de hacerme preguntas, tanto sobre Bairon como de mi querido jefe.

-Si, eso ya lo sé, lo que me interesa es saber que hubieras hecho si no hubiera aparecido yo.-habla está mientras se tira en mi cama.

-No lo sé.-dije frustrada, dejando caer mis manos sobre mis muslos.

-Pero no me habías dicho que Bairon te llamaba la atención.-me dice.

-Si, y este es un capullo pero no sé lo que me pasa cuando estoy con el siento una conexión electrizante, y si tenía ganas de besarlo joder.

<<Porque está súper sexy debes admitirlo>>

-No es el momento.-digo respondiendo a mi conciencia.

-Perdona si te he molestado solo quería ayudarte.-dice Mile.

-No es contigo tranquila, me estoy volviendo loca ya hablo hasta conmigo misma.-dejo salir un suspiro.

-Pues mi deber como mejor amiga es cuidar de ti, así que te voy a dar mi opinión. -dice la morena.-Branly está cañón pero es un inmaduro, egocéntrico y un gran hijo de puta; puede que contigo sea diferente aquí todos cambian por la persona correcta, pero yo no me arriesgaría, así que yo tu conocería más a Bairon es un chico super lindo y además te ha invitado a comer helado. ¿Acaso eso no era lo que tú de pequeña decías que un hombre debería darte para que le dieras una oportunidad?

-Tienes razón en todo lo que dices. Branly y yo somos polos opuestos además. De discutir solo serviriamos para follarnos y, todo estaría bien si yo no buscará una relación estable. Estoy cansada del suelta y coge. -hablo mientras me acomodo la almohada en la cabeza.

-Exacto more, debes saber que decisión tomar. Recuerda que son hermanos no vallas a crear un conflicto porque te conozco.-dice mi amiga tirándome su almohada a la cara.-Te lo dejo de tarea, me voy a mi cama mañana hay que trabajar.

-Descansa y sueña con el Ruscher mayor.-la molesto.

-¡Calla!-me grita mientras sale y cierra mi puerta.

(...)

Pase algo de trabajo para dormirme mi cabeza estaba repleta de pensamientos. Así que odio la alarma por sonar. Me levanto a duras pena de la cama y me miro en el espejo.

<<Estas horrible>>

Tú igual, le respondo. Pero esta vez me aseguro de decirlo para mi misma, no puedo seguir dejando que la gente piense que estoy loca.

Entro al baño para realizar mi rutina y cuando termino de ducharme salgo al oír mi teléfono sonar.

Llamada entrante de número desconocido:

-Si.-contesto.

-Buenos días.-esa voz me resulta conocida.

-¿Quién habla?-pregunto curiosa mientras miro al clóset pensando en que ropa usaré.

-Soy tu jefe, llevas dos minutos tardes, mueve el trasero y ven.-pero y este de dónde saco mi número.

-Ya estoy llegando.-miento.

-No seas mentirosa si te estoy mirando por la ventana. -no puedo evitar dirigir mi vista hacia el ventanal y es mentira.-¿A que miraste?-se oye risas.

-Eres un imbécil.-cuelgo.

Guardo su número para tenerlo. No me culpen el fue quien llamó. Unos segundos después entra un mensaje:

Mensaje de My jefe Imbécil:
Lo de que llevas dos minutos tardes es cierto, ven que ya quiero verte.

Es un idiota, primero juega conmigo y luego dice que quiere verme, me va a volver loca. Me visto con un vestido rojo vino y unos zapatos altos negros. Me coloco solo rímel, y un pintalabios ya que voy tarde. El pelo lo dejo suelto ya que no me peiné anoche y esta indomable.

Salgo rápidamente y como es de esperar Milena está tragando en la cocina.

-Llegamos tarde ¿lo sabes?-digo metiendo una tostada completa en mi boca.

-Yo no, no empiezo hasta las 10.-dice muy tranquila.

-¡Y entonces por qué dejas que yo sí llegué tarde!-le reclamo.

-No te puedo estar despertando todos los días, tendrás que ser más responsable. -habla mientras salgo pitando.

-¡Ajan, tienes razón!-digo cerrando la puerta y terminando de tragar la tostada.

En el ascensor iba mardiciendo el no haber tomado algo de jugo, estoy atorada. Respiro profundo y trago varias veces para ver si se aliviaba.

Llegué a la garita del conserje y le pido algo de agua. Genial más retraso.

Cuando me sentí viva nuevamente comencé a caminar, rezaba porque algún taxi pasará pero como hoy me levanté con el pie izquierdo. No pasaba nada así que llegue a la empresa caminando.

¿Saben cómo estoy? Sudando la gota gorda.
Necesito tener mi propio auto.

Entro rápidamente a la oficina y no estaba. Me acomodé y comencé con lo que tenía encargado para hoy. Diez minutos después llega el muy imbécil.

-Buenos días.-dice sonriendo.

-Dias, buenos para quien los tenga.-lo miro mal.

-Alguien está de mal humor.-se sienta en su silla.

-¡El problema es que yo amanecí perfectamente pero mi jefe Imbécil me dijo que iba llegando tarde así que me mate para estar aquí y tú llegas 10 minutos después que yo y a decirme buenos días!-me altero.

-Es que debes estar a tiempo, yo soy el jefe puedo llegar a la hora que quiera.-dice recostándose y subiendo los pies en la mesa, sonriendo.

Decido dejarlo de lado porque sino acabaríamos una discusión sin final. La rabia me subía y me bajaba pero yo ahí, firme a la causa sin mirarlo, concentrada en los papeles.

-¿Hoy tengo alguna reunión?-habla más serio.

-Si, tienes una a las 11. -le comunico.

-Perfecto, cancelala.

-Imposible, es una de los clientes más importantes que tiene la empresa no puedes hacer eso.

-¿Y quién lo dice?-habla apoyándose en mi mesa.

-Como tú digas señor.-digo al darme cuenta que no gano nada.

-Esta bien, no la canceles.-dice sonriendo.-Debo hacerte caso.

-Ok.-me limitó a responder.

&Pero necesito un favor.-habla acercándose demasiado para mi gusto.-Necesito que terminemos lo que Milena nos interrumpió. Quiero ese beso ahora.

Holaaa,

¿Que opinan de este capítulo?

¿Pasará algo entre estos dos?

Jsjsjsj nos vemos en una nueva actualización.

No olviden dejar su estrellita y sus comentarios ❤️😃