Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 8


Logan

—Joven— diferencio la voz de Selena aún en sueños, y la puñetera cabeza me va a explotar cuando el sueño empieza a desvanecerse poco a poco. Los repetidos toques en la puerta no ayudan más que a aumentar la migraña. Sin embargo, me niego a salir de la cama. Sé a la perfección que el efecto del alcohol sigue en mi sistema y lo compruebo cuando todo a mi alrededor se mueve de forma imposible de estar sobrio. Vuelvo a cerrar los ojos en un intento de lograr dormir otra vez, pero a diferencia de minutos tras la puerta ya no está siendo tocado, se abre de golpe chocando contra la pared, haciéndome abrir los ojos de golpe y gruñir por la punzada de dolor que me ha cruzado la sien. Obligándome a acostumbrarme a la luz que se filtra por las rendijas de las cortinas. Maldigo mientras la migraña me ataca ferozmente.

—Matt vete, quiero dormir— gruño reconociendo a mi viejo amigo. No tengo ganas de ver a nadie, de convivir con nadie. Necesito mi espacio.

Necesito estar solo, alejado de todo.

—Ya es suficiente ¿no? Son dos semanas desde tu ruptura y no me haces nada al respecto

Tan solo de escuchar ruptura el pecho se me oprime, causando que me falte el aire. Todo el sueño se ha esfumado sin esperanza de regresar. Sin querer hablar del tema me tapo el rostro con una almohada lleno de frustración, y esperando que entienda que no quiero hablar sobre ello. No me he admitido a mí mismo que la necesito más de lo que ella a mí, y más cuando ella me ha afirmado que la única forma en la que va a perdonarme es si la dejo continuar con su vida. Sin mí.

—Lo único que haces es beber y colocarte sin parar, maldita sea no te había visto así desde...

—Cierra la puta boca Matt

No necesito que nadie me diga lo que estoy haciendo. No quiero su maldita lastima, no quiero ver sus miradas de lastima cuando me ven. No quiero que nadie sienta lastima por mí. Es jodidamente espantoso pasar por los pasillos de St. Marie y sentir las miradas de todos sobre mi nuca.

¡Yo no necesito la compasión de nadie!

—¡No! Vas a escucharme quieras o no. Yo viví contigo momentos que no tendría que pasar nadie, y ahora estas aquí dejando que lo único bueno que tienes aparte de Megan se vaya

—¿Gabriela también te dejo a ti no? — farfullo quitándome la almohada de la cara. Es un golpe bajo, pero quiero que se calle de una maldita vez. No necesito a nadie que me de consejos. ¡Es mi puta vida!

—Sí, pero eso no era amor. Ella está bien y yo también. No nos ha afectado en nada, incluso seguimos hablando y tonteando. Lástima no poder decir lo mismo de Noah y tú.

—Noah está perfectamente bien sin mí

—Abre los putos ojos y sal de tu patético mundo de mierda, y por primera vez en tu vida ve más allá de tus narices. Noah cada día está más delgada, y el color de su rostro no ha regresado

Sus palabras resuenan en mi cabeza una y otra vez haciendo que lo primero que se me venga a la mente sea su enfermedad. Su mala alimentación está dando paso a una fuerte recaída en su salud. Todo por mí culpa. La mayor parte de las cosas que le pasa es por mi culpa. Y se siente malditamente espantoso ser el culpable de todas sus desgracias.

—¿Por qué lo hiciste?— me interroga en tono más suave. Ya no estamos compitiendo en gritos

—¿Hacer qué?

—Acostarte con Wendy— responde rápido

—Estaba molesto con Noah— gruño tratando de darle una respuesta que lo calle. Solo está logrando con cada palabra que quiera volver a sumergirme en una botella de Whisky lo que resta de tarde.

—¡Mientes!— salta— ¿A que le temes Logan?

—¿De qué coño hablas?

—No te acostaste con ella por estar molesto con Noah. Tenías miedo de lo que Noah estaba causándote

—No es cierto— miento.

—Es cierto

Lo había pensado varías veces ya, y había llegado a la misma conclusión. Temía lo que estaba haciendo conmigo. Temía de manera desmesurada lo frágil que me sentía a su lado. Empeoro todo cuando empecé a escuchar chismeríos sobre mí; de cómo había cambiado.

Sentí la necesidad de mostrarle a todo mundo que no había cambiado. Pero nunca conté que me arrepentiría al segundo de haber hecho lo que hice. El sentir asco de mí mismo.

Nunca conté que cuando Noah se enterara de la putada que hice, dolería tanto. Y peor aún, se marcharía.

—¿Y qué quieres que yo haga?— grazno

—Tú has sido el culpable de toda esta mierda ¿no? Entonces arréglalo, busca su perdón. Fumando porros y emborrachándote no vas a conseguir nada

<<Sin alcohol y porros tampoco consigo nada>>

—Ella me ha dicho que la única forma en la que va a perdonarme es si la dejo continuar su vida sin entrometerme— mi tono es seco, carente de sentir. No quiero seguir escuchándole, está despertando más molestia de la que ya tenía.

—Noah no está bien, tampoco tú. Lo sabes.— masculla en tono preocupado.

—Tarde o temprano va a recuperarse y se va a olvidar de lo que yo un día signifique en su vida. Y continuará Matt, será feliz y tendrá una hermosa familia sin un padre que este jodido. —Me esfuerzo porque mi voz se escuche fría y monótona. Como siempre ha sido.

—¿Y si no lo hace? Santo cielo, esa chica hizo por ti cosas que nadie haría. ¡Fue tu puto saco de box y antepuso tus necesidades ante las de ella! ¿No te das cuenta? No volverás a tener a nadie como ella nunca más en esta asquerosa vida. Hasta hace dos semanas estaba metiéndose a la boca del lobo por ayudarte.

—Lo sé maldita sea, ¡Lo sé! La perdí y lo único que puedo hacer para recompensarle todo el daño que le hecho es alejándome ¿entiendes? Es por su bien. Ella merece algo más que estar atrapada en un mundo lleno de cosas que incluso a nosotros nos da escalofríos. Ella no merece vivir con alguien que tiene más traumas que recuerdos felices. Me alejo por ella, no por mí.

Y lo digo completamente en serio. Ella merece ser feliz, verdaderamente feliz. No necesita que nadie de mi tipo destruya lo que ella es. Que destruya lo poco que yo no destruí.

—Eso es muy cobarde. Eso no es lo que haría mi amigo.

—No Matt, estoy intentado no ser el puto egoísta de siempre. Quiero su felicidad, ante todo. Yo no soy para ella. No soy la persona con la que tiene que pasar lo que le resta de vida, no soy el hombre con el que tiene que formar una familia, ni jurarse amor eterno ante un sacerdote, y colocar un anillo en su dedo angular.

—¿Y ella? ¿Qué es Noah para ti? ¿No era tú única salvación? ¿Tú ángel?

—Lo es y lo seguirá siendo— admito quedándome sin aliento—. Pero a veces uno tiene que renunciar a algo que simplemente no está en nuestro destino

—¿Te estás escuchando? Lo único que dices son gilipolleces. Si alguien hiciera la mitad de lo que esa chica hizo por ti, yo no dudaría en ponerme de rodillas y rogarle su perdón

<<Es por su bien>> me repito varias veces tratando de eliminar la angustia y la duda que me ha sembrado Matt. Ella se recuperará e ira la universidad. Se olvidará de mí, y conocerá a la persona correcta. A su alma gemela.

Siempre he sido reacio al dolor físico, pero el dolor emocional que me causa la perdida de Noah, puede conmigo.

Matt sale de la habitación negando con la cabeza claramente enfadado por las palabras que le he soltado. Seguramente si la busco y consigo su perdón volveré hacer de las mías. Hacer el mismo cabrón de siempre. Empezare de nuevo con el circulo mal sano en el que ella se olvida de si misma para preocuparse de mí. Y sé a la perfección que muchas veces, más de las que puedo contar con todos mis dedos que se ha pasado buscando la manera de ayudarme.

Y por estas razones son por las que nunca he querido tener nada. Si no tienes nada, no puedes perder algo.

Vivía sin necesidad de tener a nadie en mi vida, y espero de todo corazón volver a tener la fuerza para volver a vivir sin necesidad de la presencia de una persona. Sin la presencia de Noah para ser exacto. Pero sé que me estoy engañando. Esa irritante chica despertó cosas en mí que nunca quise vivir. En ocasiones me sorprendía imaginando una niña como Noah, con sus largos rizos castaños cayéndole sobre su mejilla, y mirándome con los ojos celestes idénticos a los de su madre; con la misma intensidad y brillo. Su pequeña voz llorona haciendo la misma cantidad de preguntas con las que mi... ángel acostumbra atacarme. Arrugando su naricita y teniendo la misma mente fantástica de Noah. Dejándome aturdido y replanteándome una y otra vez el tema en el que ella me ha dejado con la boca cerrada. Y teniendo su excesiva necesidad de tener todo a su alrededor controlado. E incluso su necesidad de querer simpatizarle a todo el mundo.

<<Maldita sea como la extraño>>

Quiero rogarle su perdón, y prometerle que nunca va a pasar de nuevo. Sé que nunca más volvería a engañarla, pero no puedo asegurar que no volveré a lastimarla. Soy experto en arruinar cosas, pero un perfecto inútil en arreglarlas. Esa es la razón por la que ni siquiera he podido arreglarme a mí mismo. No puedo arreglar nada en mi vida, y por alguna razón cuando Noah se involucró conmigo tenía la necesidad de poner todo en su lugar, y ella me enseñaba como sin siquiera darse cuenta. Su forma sabelotodo de ser me encantaba aunque en momentos daba a entender que no.

No hay día en el que no la imagine a mi lado, sonriéndome de esa forma tan dulce, pero lo dicho; solo son imaginaciones mías que probablemente nunca se vuelvan a cumplir. 


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro