Noah

—Tienes que mudarte de ropa ¿vale?

Asiento a la vez que Jake me retira la manta, y acto seguido sale de la habitación dándome privacidad para desvestirme. Mi cabeza no duda en recordarme que si fuese Logan quien me encontró no hubiese dudado un segundo en desvestirme y ponerme algo seco.

Me saco por la cabeza la camiseta blanca húmeda, y mis mejillas empiezan a teñirse al recordar que no llevo bracier. Con las mejillas sonrojadas tomo una sudadera, junto a un pantalón de algodón. Cinco minutos tras terminar de vestirme la puerta de mi habitación es tocada delicadamente seguida de la voz de Jake preguntándome si ya puede pasar.

Me sonríe de una forma tierna, pero no lastimera mientras atraviesa el umbral de la habitación.

—Necesitas alimentarte— menciona

Niego con la cabeza y me siento con las piernas cruzadas sobre mi cama. Me da una mirada enojada, y repaso en que Jake es guapo de una forma peculiar. Su cabello rubio no es ni lacio, ni rizado. Sus labios son bastante finos y sus ojos son de un iris extraño. Algo celestes con puntos impregnados de verde le dan un aspecto diferente. Probablemente tenga muchas chicas babeando tras sus pasos.

Mi móvil vibra sobre la mesita de noche y temerosa lo tomo.

13:43 HRS

Zed: Por el amor de Dios Noah responde mis mensajes. No tengo idea porque me ignoras.

Hago una nota mental diciéndome que tengo que responderle a Zed mas tarde. Ya me ha enviado cerca de veinte mensajes, o tal vez más. De los cuales no he respondido por no querer tocar un tema que sigue afectándome como hace seis días. He evitado a Zed tanto como a Logan, y lo último que quiero es volver a darle una esperanza a Zed.

—¿Te sientes mejor?

Afirmo, aunque no sea cierto. Pero rápidamente vuelvo a negar con la cabeza y Jake me lanza una mirada comprensiva. Estoy segura que parezco una niña haciendo berrinche cuando le quitan su juguete favorito.

—Jake— llamo su atención y me animo a preguntar. Sus ojos de ese iris tan extraño me ven, y me examinan un momento. —¿Por qué estas ayudándome?

—No lo sé— admite. No pregunto más, y simplemente me dedico a divagar en mi mente por unos segundos. Recuerdos buenos y malos me abofetean una y otra vez haciéndome pensar en que el mundo es cruel. La vida es cruel. Te coloca personas en tu vida que no puedes retenerlas, no puedes hacer nada para que se queden contigo. Y esa persona te arrebata simplemente un pedazo de tu ser que nunca volverá a ti, si esa persona no regresa con lo que te arrebato.

—Debí haber hecho algo muy malo para estar pagándolo así de caro— murmuro

—Nada de esto es tu culpa— me anima. Pero aunque no lo quieran ver ni ellos, ni yo, todo esto es completamente culpa mía. Todos me advirtieron que Logan no era para mí; que me alejara tan rápido como pueda de esas gemas grises, pero mi necesidad de ayudarlo me dejo estancada en un dolor que penetra hasta mis entrañas.

Desde la primera noche que llore lágrimas por su desplante tenía que marcharme. Pero no, me quede esperando a por más.

Siento como las lágrimas quieren volver a brotar sin control, pero me niego a volver a derramar más.

—Le di todo lo que tenía

Las palabras empiezan a brotar de mis labios, sin siquiera permitirme pensarlas antes.

—Me opuse contra todo mundo por él.— sin poder evitarlo una sonrisa dolida se posiciona en mi rostro, y me esfuerzo para que una lágrima no rodea mi mejilla—No me importaba en lo absoluto terminar sola si lo tenía a él. Lo amaba Jake, lo amaba más de lo que yo misma soy capaz de admitirme— la voz se me empieza a romper, pero sigo sin derramar una sola lágrima. —Nunca he querido formar una familia por más que mi madre me haya inculcado eso. Nunca quise usar un vestido blanco, y mencionar mis votos, ni que dos anillos fueran los que representen un amor para toda la vida. Son solo dos objetos, y un papel firmado oficializando que hemos contraído matrimonio tampoco significa nada. Pero Logan despertó algo en mí que me hacía ilusión el formar algún día una familia. Nunca quise tener hijos por miedo a fallarles...

—Noah escúchame—me irrumpe Jake casi gritando. —Vas a ser una excelente mamá, vas a tener una hermosa familia y vas a ser feliz, sin él ¿vale?

Niego con la cabeza.

—Siento que si no es con él, no es con nadie— admito tanto para él, como para mí, y una daga se empala en mi pecho haciendo que casi me falte el aire al recodar que ya todo lo que el despertó, solo serán sueños olvidados con el tiempo.

Jake niega con la cabeza, haciéndome saber que no está de acuerdo con lo que acabo de decir.

—No puedes hablar así de alguien que te ha hecho esto— me señala, y siento la enorme necesidad como veces pasadas de defender a Logan

—No puedes hablar si nunca te has enamorado

—Puede que no, pero sé que una relación no tiene que ser tan come mierda

—Jake por favor. —suplico con el labio inferior tembloroso—No quiero iniciar una pelea con una de las pocas personas que están conmigo— Sé que en el momento que empiece a atacar a Logan saldré como leona a defender a sus crías. No quiero iniciar una pelea, y dejar que una vez más por Logan pierda a una persona que realmente se preocupa por mí.

—Vale— accede y yo le regalo una sonrisa—pero tienes que prometer que vas alimentarte mejor

Hago una mueca y me da una media sonrisa.

—¿Te apetece salir a comer fuera? Yo invito— se ofrece

—Estoy desastrosa— intento reírme de mi misma, pero mi risa sale como un grito ahogado.

—Tomate tu tiempo, te espero abajo

Seguido sale de mi habitación.

Logan ni siquiera se hubiese marchado, y estaría todo el rato haciéndome bromas y terminaríamos por pedir una pizza para no desperdiciar tiempo. No puedo seguir comparando a Jake con Logan, él no me ha fallado. Probablemente el castaño en este momento debe estar entre los muslos de Wendy, la simple imagen formándose en mi cabeza me hacen sentir un asco descomunal. Mientras me deshago de la ropa que llevo puesta, me permito pensar más allá de esas dos gemas grises, y por un momento me doy cuenta que cuando me encuentro junto a Jake el dolor parece minimizarse.

Me hago un moño desarreglado y no me molesto en maquillarme. Tomo lo primero que veo y sin importarme nada, que no combine salgo de mi habitación.

—Te ves muy guapa— me elogia, y le sonrió sabiendo que es una mentira bastante gorda.

—No es cierto, pero gracias

Mientras nos montamos en mi coche, y Jake conduce me doy cuenta que muy pronto tendré que mandar mi expediente a Universidades. En especial a la WCU.

—¿Qué profesión vas a escoger?— pregunto terminando con el silencio en el que vamos.

—Administración de empresas— me suelta, y me río sin poder evitarlo. Se me hace muy difícil imaginar a Jake llevando zapatos de charol, y un terno cuando solo usa camisetas y vaqueros. —En cuanto termine mi año sabático voy a mandar mis expedientes a cualquier universidad que este lejos de esta ciudad. Si es fuera del país aún mejor.

—¿Por qué quieres irte?— de pronto se me ha despertado un deseo por saber más de este chico

—Necesito nuevos aires, olvidar y... superar cosas

No entra en detalles, y por su ceño fruncido sé que trata de un tema delicado, que espero algún día pueda contarme.

—¿Y tú? ¿Qué vas a estudiar?

—Medicina— afirmo con seguridad, a la vez que el me mira entre desconcertado

—Estaba seguro que por la cantidad de libros que tienes, seguirías fiología inglesa, o algo relacionado con letras

—Un día llegue a pensarlo, pero mi madre se encargó de abolir mi idea, junto a muchas otras.

—Y ¿A qué lugares vas a mandar solicitudes?

—A muchas, pero mi prioridad es la WCU

—Seguro lo harán, tu madre ha mencionado que te graduaras con honores. — alardea con tono burlón. Asiento y Jake aparca el auto.

A medida que nos acercamos al lugar reconozco que es el mismo pequeño restaurante de comida rápida donde Logan me trajo y nos encontramos a Wendy. Dónde me dijo que soy una gorda, y no le importaría darme una dieta que seguir.

—¿No te gusta el lugar? Podemos irnos a buscar otro sitio si...

Seguramente me encontraba haciendo un montón de muecas recordando el lugar.

—No, no está bien— grazno con la boca seca

Charlamos plácidamente, y me descubro riéndome y hablando cómodamente con Jake. Cuando la mesera nos toma la orden, pido una hamburguesa sin mayonesa, y con patatas junto a una soda mediana de fresa. Jake pidió alitas picantes asegurándome que son deliciosas junto a una cerveza, pero el recuerdo de Logan diciéndome que las hamburguesas son deliciosas hace que me atragante. Ha tratado de meterse en mi cabeza, y arruinar el apetito que se me está abriendo.

—Tu rostro ya casi ha sanado por completo— suelta en el momento que me llevo una patata a la boca.

Trago rápido para apresurarme en contestar.

—Supongo— admito medio avergonzada limpiándome las comisuras de los labios.

Me he acabado casi todo el contenido de mi plato, y  me quedo satisfecha. Durante el trayecto de regreso a casa, siento como los ojos empiezan a pesarme.

—Noah despierta, ya llegamos— suena la voz de alguien en un murmuro lejano. Acto seguido siento como me toman en brazos, y me acurruco más en sus brazos, dejando caer la cabeza sobre su pecho.

—Logan...

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Lo siento me he demorado muchísimo en actualizar, pero les prometo que antes de acabar la semana actualizare de nuevo, u hoy en la noche. 

Bueno, quiero decirles que el libro va a tener un montón de sorpresas, y espero no hacerlas llorar mucho xD.

Les quiero muchísimo. 

Nos leemos pronto!!! 

Con amor "Belén"