Capítulo 36
En cuánto llegamos a applebee's, Logan se sienta y pide un café mientras espera que yo hable con el señor Ja... bueno, mi futuro jefe. Nos saludamos cordialmente y me dirige hasta su oficina. Me explica que trabajare de cuatro a diez de la noche de lunes a viernes, y hasta doce o más los viernes. Las horas extras serán remuneradas, y los sábados y domingos no tengo que trabajar. No tengo ningún reclamo ni con la paga ni el horario así que firmo mi contrato. Le agradezco y por último me dice que mañana tendrá listo mi uniforme.
No me importa tener unas horas de sueño menos, si voy a tener una buena paga por un empleo de medio tiempo. Me despido de mi ahora, oficialmente jefe, y cruzo el pequeño pasillo que nos separa de dónde se encuentra Logan. Cuando me siento en la silla de enfrente me repasa con la mirada de pies a cabeza, cautelosamente.
Me causa gracia su reacción de alivio cuando se asegura que no me falta un solo pelo.
Mientras nos encaminamos hasta mi primera clase del día, le platico sobre cómo va a ser mi trabajo, y que fuera que no puedo servir alcohol por ser menor de edad, soy una mesera común.
—¿Cómo vas a regresar a la residencia casi a media noche? ¿Y si te pasa algo? En los bares siempre hay borrachos que quieren pasarse con las camareras y ...
—Es mi trabajo y mi decisión — gruño cuando veo a dónde quiere llegar. No va a hacerme cambiar de opinión para que no trabaje.
Su entrecejo se frunce y se calla tal cual niño enfurruñado. He de admitir que no me gusta que se enfade por algo tan simple como mi trabajo, pero no pienso cumplirle el caprichito no presentándome a trabajar.
—Nos vemos luego— le digo cuando ya hemos llegado a mi clase de química. Giro cuando creo que no me va a responder, pero sorprendiéndome me toma del antebrazo para evitar que eche andar más. Me planta un beso en la frente, y murmura contra mi frente algo como: "pasare a recogerte"
Asiento absorta en el estallido de emociones que me causa su cercanía. Me separo de sus brazos y siento como gruñe. Le regalo una sonrisa antes de entrar a mi clase y perderle de vista.
Trato de poner la mayor atención al maestro de química, pero mi mente no hace más que pensar pros y contras de la presencia de Logan. Se me pone los pelos de punta y me duele el pecho de solo pensar que va a marcharse y no regrese nunca. En dos días ha revivido absolutamente todo, y sinceramente, no quiero volver a regresar a ser una persona que da pena. No quiero que vuelva a destrozarme el corazón y aunque estos dos días que me acompañado no he hecho más que andar con pies de plomo, no puedo evitar fantasear con Logan. Siento que vuelvo a respirar desde que llego. Y por muy mal que suene, si necesitaba perderse completamente para reaccionar, me alegra, y más aún que regresé aquí, conmigo. Ya que me ha buscado porque no había persona alguna con la que pudiese sentirse mejor.
Pero su cercanía a ratos solo hace crecer mis temores, e inseguridades. Soy un estallido de emociones junto a él que durante el mismo segundo me siento segura e insegura. Me reconforta y lástima. Aunque tampoco voy a negar que desde que me confesó gran parte de su vida, mis sentimientos se intensificaron. Siempre quise que lo hiciera y al escucharle, se me ha abierto una llaga y trato de no pensar en ello, porque se me hace completamente terrible tremendo suceso. Tampoco saco el tema a flote por ahora. Abra tiempo para hablar cuando lleguemos a un acuerdo más allá de un "Iremos despacio" y nos estabilicemos, sin embargo, me pone de los nervios saber que tan peligroso puede ser el mundo donde está involucrado Logan, y que su padre sea uno de sus jefes.
Pero por ahora, no quiero dañar los pocos días que nos quedan por compartir mencionando temas que son dolorosos para Logan. Sé que le duele hablar de su madre y que nadie salvo yo, con dos o tres personas sabemos la verdad del asunto. Ha hecho mucho abriéndose conmigo, y por ahora es mejor dejarlo estar. No quiero que terminemos gritando y lanzándonos hacia la yugular cada que se nos sale algo de las manos.
Para cuando llega fisiología, mi última clase de hoy, me encuentro contando los minutos para que la hora termine. Cuando la maestra da por terminada la clase, soy la última en guardar mis apuntes con la esperanza de calmarme un poco. Sé que Logan está esperándome fuera, pero una extraña sensación no ha dejado de regodearme desde que entre a esta clase.
—Noah...— grita una voz conocida a mi espalda. Giro y encaro a Jake que se acerca dando grandes zancadas. Su expresión de alivio cambia drásticamente a una de rabia cuando observa atrás de mi espalda. No tengo que ser adivina para saber quién causo rabia en Jake. Y no necesariamente porque sé que Logan vendría a por mí, sino porque cuando estamos dentro de un mismo lugar mi cuerpo reacciona.
Jake se abre paso a empujones cuando Logan me rodea la cintura con el brazo.
—Quítale las manos de encima— vocifera Jake con evidente rabia en la voz.
—¿Qué coño haces aquí? — preguntan los dos al unísono. En otro momento me haría gracia, sin embargo, estoy aterrada, clavada al suelo de cerámica sin saber a quién contestar primero. Sabía que tarde o temprano se cruzarían, pero no tenía por qué ser ¡Temprano! ¡Tan temprano!
Sé que la vida te hace jugarretas, pero estoy empezando a pensar que conmigo se empeña; me ha escogido como su conejillo de indias entre los millones de personas de las que puede escoger.
—Logan ¿podrías darnos unos segundos? — le pregunto en tono de voz muy bajito
—Ni de coña — responde
—¿Estás loca? ¿Qué demonios te pasa? ¡¡Es el mismo tío que se follo a otra!! — grita exaltado Jake. — Por quien dejaste de comer semanas, por quién llorabas, por quién gritabas y tuviste ¡Dos putas crisis! — agradezco que no haya estudiantes deambulando. —¿Qué coño te pasa?
—Será mejor que cierres la puta boca— le espeta
—¿Estás tan chiflada para volver a creerle a este capullo? — vuelve a preguntar Jake
—Por segunda vez, cierra el pico Miller— amenaza Logan en tono frío. Para estas alturas Logan respira pesadamente y tiene el cuerpo completamente tenso.
—Te estás comportando como una ingenua, ¡Como una jodida ingenua! — me grita Jake. Sus palabras me enojan y escocen a tiempos iguales. Logan trata de abalanzarse contra Jake, pero le sujeto de la camiseta para evitar que lo haga.
La mirada de Jake destila furia, y toda hacia mí.
—Tienes que dejarme hablar— alcanzó a pronunciar por fin. Por unos segundos Jake parece ablandarse; cierra los ojos unos segundos, y para cuando vuelve abrirlos tiene la mirada más serena.
—Puedes contar conmigo siempre Noah
No puedo mover un solo pie para decirle que no puede darme a escoger. Seguido se marcha dejándome con un sentimiento de culpabilidad enorme y sin convencerme del todo porque ha reaccionado de esta manera.
Entierro el rostro en las manos y luego de unos segundos siento a Logan rodeándome con sus brazos.
—Es mi único amigo— digo con la voz rota — no quiero que deje de serlo
—Nadie en su sano juicio va a querer alejarse de ti, ángel, nunca— me alienta, sin embargo, siento cierto veneno en su voz al dirigirse a Jake.
No puedo evitar que mi pecho se hinche porque sus celos siguen siendo algo distintivo en él.
Asiento apretándome con más fuerza contra su pecho. Sé que no estamos cumpliendo lo que he dicho de ir lento, pero ahora no puede importarme menos. Logan me estrecha con más fuerza y quiero quedarme así por mucho tiempo.
Minutos luego recuerdo que estoy abrazando y reconfortándome en la misma persona que me ha hecho tanto daño, y reacciono alejándome de su cuerpo.
—¿Qué pasa, ángel? — pregunta con una mueca dolorida posada en el rostro. Probablemente ha cambiado, pero no puedo volver a lanzarme al vacío confiando que me atrapara cuando este por aterrizar.
—Yo... necesito mi espacio ¿vale? — titubeo y cierta desesperación empieza a brotar dentro de mí al esperar su reacción.
Asiente sin dirigirme una palabra, da media vuelta echándose a andar con los hombros caídos y el cuerpo tenso. En cuanto llego a mi pequeño cuarto de residencia me tumbo directamente en la cama. Mi cabeza no deja de dar mil vueltas.
Cuando creo que por fin la tormenta se ha ido, viene un tornado a empeorar todo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro