Se había detenido a medio camino, no podia ir y solo amenazar a Zaphiri sin tener algo con que verdaderamente le importara para hacerlo sufrir. Tampoco debía ir sin un plan, las cosas hechas por puro impulso casi siempre le salían mal al final. Camus necesito una semana para realizar su venganza en contra de Athena ¿Cuanto tiempo le tomaría a él?, ¿Dos? Puede que hasta tres, la ventaja que él tenia era que la presa estaba ya estaba cazada solo tenia que ir a recogerla.

No sabia como hacerlo, no contaba con la experiencia necesaria y tampoco quería dejar a Mystoria tanto tiempo solo, debía investigar. Volvió a su casa frustado tirando todas las armas que tenia al suelo. Kardia al escuchar el alboroto bajo eīncontrándose a su hijo tirándose de los cabellos sin saber  que hacer. Puso una mano en su hombro con cariño.

- ¿Te arrepentiste?

- No... solo que, no sé como hacerlo. Quiero acabarlo, hacerlo sufrir, a él y al Patriarca; bañarme en su sangre si es necesario, pero no sé como.

-Como madre debería evitar que hicieras esa locura, pero eres igual de testarudo que Milo. Te daré un consejo: utiliza la forma más sencilla que encuentres- dio la vuelta hasta quedar frente a él tomándolo con fuerza de los hombros, dándole apoyo- muchas veces los planes más elaborados fracasan. Busca algo que con solo nombrarlo lo haga desesperarse, un ser querido, alguien de su familia, su padre, hermano, tío, pareja, Quien sea pero que le afecte, que no sepa que hacer. Muchas veces con solo nombrarlo basta, pero Zaphiri necesitara pruebas, busca a tu objetivo si es necesario amenazalo a él también. Conozco muy poco a mi primo pero estoy segura que la única persona que de verdad es importante para él es Krest Baudin, llevan juntos más de 15 años. La ultima vez que supe de ellos vivian en Mikoros, ahora no sé más.

- Eso es más que suficiente, gracias.

Pospondria su derramamiento de sangre un día. El día siguiente se la paso con Mystoria, mimandolo cuanto pudiera, llenándolo de besos, pero aun así pensando en sus planes, como evitar que siguieran lastimando a su familia. Le dio la excusa más estúpida que se le ocurrió a Mystoria para que no sospechara nada, pero su amado cubito azul lo quedo mirando raro igual.

Aun con la indecisión en su cuerpo viajo a Mikoros para buscar a Krest. Lo encontró mucho mas rapido de lo que imagino, ese enanito cascarrabias estaba peleando con un sujeto mucho más alto que él sin demostrar miedo o siquiera intimidarse, tendria una pequeña fiera contra quien pelear. Cuando la discusión termino, lo siguió por la espalda hasta que estuvo en un lugar en el que hubiera menos gente, cuando estaba apunto de noquearlo se llevo el susto de su vida.

- ¿Que hizo Zaphiri esta vez?- ni siquiera lo miro, tal parece que no era la primera vez que lo venían a buscar.

- Lo siento por esto, pero es personal.

No dejo que se defendiera, simplemente lo noqueo y lo saco de la vista de las personas antes de que se desatara el caos en su contra. Nadie se dio cuenta cuando el castaño desapareció. Kardia le dijo que le llevara a su casa una vez que lo tuviera, que ella le mostraria en donde dejarlo. Casi se va de espaldas al ver una habitación equipada para la tortura bien oculta en el entre techo de su casa.

- Créeme esta casa está mejor equipada de lo que piensas.

Lo dejo solo, para que hiciera su trabajo. Miraba el pequeño cuerpo del frances en el suelo, ahora que se daba cuenta ¿Que tenía su familia con los franceses? La mayoría estaba emparejado con uno.

Suspiro, tenia que seguir con su plan, torturar a Krest para que Zaphiri soltara la lengua. No se sentía capaz de hacerlo, era un inocente no tiene nada que ver ahí, estaba casi en la misma posición que estuvo él con Athena, sabia como se sentía que te utilizaran como un chantaje. Estuvo a punto de herirlo, pero se arrepintió, simplemente lo volvio a sedar. Saco fotos de él en el suelo, ya tenia las pruebas no era necesario que lo lastimara.

Kardia lo vio irse, le sonrio con cariño, una sonrisa que Écarlate no supo como interpretar.

- Tenias razón Milo, sera mejor que nosotros. Antares morirá con él.

~•~

Hades estaba a un pelo de torturarlo él mismo si ese niño no se dignaba a aparecer de un buena vez.

- ¿Donde demonios estabas mocoso?

- Terminando algo ¿Donde esta?

- Por acá, sigueme.

Las manos le temblaban, ahora tenia todas las intenciones de sacarle sangre y hacerlo sufrir, por haber dañado a la persona que más amaba, esa furia le recorría todo el cuerpo y lo hizo aún más al tenerlo en frente, ni cuenta se dio cuando Hades dejo la habitación.

- ¿Tanto me hicieron esperar por un mocoso? Te me haces familiar, ¿Nos hemos visto antes?

- Solo necesitas saber que te haré pagar lo que hiciste.

- ¿Y que hice? ¡Solo hice mi trabajo, ademas ese niño no murio! El idiota de mi jefe me debe estar buscando para matarme, pero sabe que ¡No dejare que ni tú o ese idiota me mate, tengo que asegurarme de algo antes! - forcejeaba una y otra vez contra las  cuerdas que lo mantenían amarrado a la silla.

El pelirrojo lo miraba serio, ¿Asegurarse de algo antes? Claro la seguridad de su pareja, despues de eso dejaría que hicieran lo que quisieran con él. Pobre si tan solo supiera, ante la atenta mirada de Zaphiri le mostro las fotos que tenia de Krest. Se deleito al ver su mirada de terror, de susto porque cualquier cosa podrían pasarle a su enanito.

- Coopera si no quieres que algo malo le pase.

- ¡No te diré nada. Suelta a Krest desgraciado. Mi enano no tiene nada que ver aquí!

- No lo haré hasta que hables.

- ¡Tú maldito hijo de...!

- ¡ A mi madre no la insultes!- le tiro los cabellos con fuerza hacia atras obligandolo a levantar la cabeza- ¡Ya mate a alguien por harcelo, no creo que quieras ser el segundo! Ahora respondeme ¿Por qué sigues en esa organización cuando Athena y Poseidon están más que tiesos y bajo tierra?

- ¿Por qué? La respuesta es obvia, por él. Si no me quedaba con ellos algo le harian a Krest, pero te les adelantaste. Escúchame mocoso, si le tocaste un solo pelo ¡Te juro que si logro soltarme de aquí te hago mierda!

- Esta ileso.

Ni él mismo sabia como pero la rabia se le fue en un segundo, se puso en su lugar, por muy absurdo que sonara. Imagino ese tipo de amenaza la posible la muerte de un ser querido, para evitarla quedarse en un lugar que no le gusta. Lo vivio, soporto mucho daño para que Mystoria estuviera bien y lo seguiría haciendo el tiempo que fuera necesario.

- Te propongo algo, si me ayudas a terminar con el Patriarca  te llevo al lugar en donde está, y prometo mantenerlo seguro el tiempo que dure esa caceria.

Lo penso un momento parecía que le decía la verdad, que no lo estaba engañando. Al fin podría deshacerse de la alimaña de Saga y tener la vida tranquila que siempre quizo con su enanito. Acepto aunque no convencido en su totalidad. Como prometió lo había llevado a una casa mas o menos grande, llevándose la sorpresa de encontrarse a una prima que no veía hace años, y hay entendió porque ese niño se le hacia tan familiar.

- Tu enano esta en el sillon, va a dormir por unas horas más.

No espero a que lo dejaran entrar, corrió en busca de su pareja.

- ¿Como sabias que iba a volver con él?

- Lo supuse.- se encogio de hombros- por cierto, Mystoria pregunto por ti, le dije que no habias podido ir por que te dio diarrea.

- ¡Mamá!

- ¿Qué? Ahora ve a prepar tu plan, si es necesario les ayudare, sé manejar un arma mejor de lo que piensas.

Por primer vez en mucho tiempo, no se negó a su ayuda en algo así, porque estaba seguro que necesitaria toda la que fuera posible.

💫

¡El final se acerca!

Zaphiri iba a sufrir, iba a correr su sangre pero mejor que ayude a terminar con el principal problema 😉

Écarlate no es tan sanguinario como sus tíos.

ScorpioNoMilo. 💕