Capítulo II
Hello there! Acá otro capítulo de esta historia, estoy publicando los que ya tengo adaptados así que por eso voy rápido. Las otras historias voy lento porque me cuesta un poco escribir últimamente con tanta cosa que hacer jeje.
Anakin se encontraba en una cirugía, mientras que Padmé salía de una cuando encontró a Sabé cansada con un alto de papeles interminables.
- ¿Algo en que pueda ayudar?- preguntó Padmé auqnue también estaba bastante cansada.
- ¿Puedes convencer al doctor Skywalker de no hacerme revisar todos estos documentos?- preguntó Sabé y Padmé la miró pidiendo disculpas con la mirada.
- Lo siento, sabes que la doctora Shaak Ti está trabajando en conjunto con él para mejorar la seguridad del hospital- dijo Padmé y Sabé asintió.
- Si no le debiéramos la paz de la república a ti y a tu esposo, consideraría matarlo por darme todo este trabajo- dijo Sabé y Padmé se sentó a su lado.
Padmé observó que eran los certificados de antecedentes de todo el personal médico que trabajaba en el lugar.
Padmé tomó el de Palo y lo retiró y Sabé negó.
- Sé que Shmi no quiere que su hijo se preocupe, ¿Pero por qué esconder a Palo? ¿No será más sospechoso?- preguntó Sabé y Padmé negó.
- Digamos que Palo ha hecho muchas cosas malas- dijo Padmé y Sabé asintió- Y Anakin no está en su mejor momento precisamente, si Anakin ve este certificado de antecedentes, lo despedirá, y Palo necesita el trabajo, no está acá solo porque mi familia lo había contratado para hacerme daño, él realmente necesita el trabajo, sino no se habría quedado- dijo Padmé y Sabé asintió.
- ¿Esto lo sabe Shmi?- preguntó Sabé aún no muy de acuerdo
- Lo sabe todo, cada cosa que pase en mi vida se la he contado a Shmi y a ti- dijo Padmé y Sabé la miró comprendiéndola.
Si Shmi le decía que no lo dijera, comprendía por qué Padmé no lo hacía. Pero aún así, Anakin merecía saber que la madre biológica de su hijo estuvo causándole problemas a Padmé. Esos problemas se habían resuelto obviamente, pero había pasado mucho tiempo sin que Padmé se lo dijera.
- ¿Has sabido algo de lo que mencionó Palo? ¿Clovis?- preguntó Sabé y Padmé negó escondiendo su rostro entre sus manos.
Le daba escalofríos pensar que ese hombre pudiera estar vivo. Palo no tenía como probarlo y los Naberrie ya no confiaban en él, pero ella no sabía como decírselo a Anakin.
- Padmé- dijo Sabé poniendo una mano sobre la mano de su amiga- Sé que Anakin está obsesionado con la seguridad, me he dado cuenta, pero debe saber que Clovis está vivo- dijo Sabé.
- Se lo diré, cuando sea el momento- dijo Padmé pensando en su hogar.
El tratamiento de Shmi iba muy lento, y su casa ya no era lo que fue alguna vez, ella no quería añadir otro factor de estrés a su hogar.
Ambas se quedaron trabajando allí hasta que Padmé vio salir a Anakin del pabellón. Él pasó de largo hacia la sala de descanso, probablemente para tomar una ducha. Ahsoka que había sido su asistente salió de allí con la cabeza baja.
- ¿Estás bien?- preguntó Padmé presintiendo lo que había pasado.
- Lo estoy, era una cirugía casi imposible- dijo Ahsoka más tranquila de lo que estuvo la primera vez que un paciente murió frente a ella- Pero Anakin no lo está- dijo Ahsoka y Padmé asintió. Si había notado eso.
Padmé apretó la mano de Ahsoka y se puso de pie para ir a ver a su esposo. Sabía que debía darle privacidad, pero no quería dejarlo atormentarse solo.
Sabé asintió y se quedó con Ahsoka, Sabé dejó su trabajo allí y fue con Ahsoka para prepararle un té para poder calmarla.
Padmé fue a la sala de descanso, y sintió la ducha correr. Cerró la puerta de la sala de descanso, aunque nadie iba allí a esas horas y entró al baño junto con Anakin.
Ella se sentó en el borde de la tina mientras él se duchaba en silencio.
- Sabes que no fue tu culpa- dijo ella y Anakin la ignoró un poco más.
Padmé sabía que él no la ignoraba porque no quisiera hablarle, sino que la ignoraba porque se sentía demasiado mal por la vida que había perdido en la cirugía.
- Tenía cuatro hijas pequeñas Padmé- dijo Anakin cortando el agua de la ducha y saliendo de allí para secarse.
Padmé tomó la toalla y le advirtió con la mirada que la dejara ayudarlo. Él suspiró y dejó que ella lo ayudara a secarse aunque era perfectamente capaz de hacerlo solo, pero entendía que a veces a ella le gustaba esa intimidad del matrimonio, él también solía hacerlo cuando ella estaba cansada, una forma que ambos habían descubierto de ahondar en la intimidad de su matrimonio.
- Estás tenso- dijo Padmé tocando los músculos marcados en el abdomen de su esposo
- Esas niñas quedaron sin padre, y sin madre por culpa de la guerra Padmé- dijo Anakin y ella lo abrazó con fuerza- Su madre murió por un disparo de los malditos separatistas, y su padre murió en mis manos en la sala de emergencias, su hermana mayor deberá hacerse cargo de ellas- maldijo Anakin y Padmé tuvo una idea.
No se la comunicó de inmediato a Anakin, porque él estaba demasiado tenso, y si las cosas no iban bien, eso solo lo afectaría más.
Anakin se vistió y Padmé tragó pesado cuando vio que él portaba un arma en su maletín. No dijo nada y lo cubrió, pues estaba con el seguro y bastante bien guardada. Anakin también tenía un arma en su oficina, para ser precisos un arma de alto calibre guardada en una repisa. Ella intentó no sentir escalofríos cada vez que veía un arma, la guerra se había ido, y no volvería, eso era lo que ella intentaba pensar, a pesar de que Anakin y muchos en su entorno y en el hospital no pensaban así.
La doctora Shaak Ti había aceptado que Anakin y otros médicos, como Rex portaran armas siempre y cuando no fueran durante sus turnos de trabajo, y no pudiera manipularlas nadie más. Ella creía firmemente que era necesario, pues el peligro acechaba siempre. Padmé comprendía ese punto de vista, pero eso nunca había pasado antes en el hospital, y él saber que su esposo, que otros doctores estaban preparados para ir tomar un arma y matar enemigos le provocaba escalofríos.
Aún así lo comprendía, la guerra aún dolía y dolería por muchos años, y comprendía por qué se había tomado esa decisión.
- Gracias por estar siempre a mi lado- dijo Anakin abrazando a Padmé por la espalda y besando su cabello.
- Siempre estaré a tu lado- dijo Padmé dándose la vuelta y besándolo.
Salieron de la sala de descanso, y Padmé observó como Anakin se molestaba porque los guardias de la recepción de hospitalizados no estaban.
Padmé sabía que estaba mal que ambos guardias salieran a la vez, pero ella intentaba comprenderlos, no era como si tuviera opinión respecto a la seguridad del hospital, pero cuando sugería algo solían decirle que ella era demasiado suave con respecto a criticar el trabajo ajeno.
- Ani- dijo Padmé sin poder evitar interferir- Seguramente solo salieron al baño, o a comprar algo de beber- dijo ella y Anakin la miró molesto.
- ¿Ambos?- dijo Anakin casi con sarcasmo- Ángel, comprendo que salga uno, lo entiendo y lo podría aceptar ¿Pero los dos? ¿Sabes todo lo que podría pasar porque no hay guardias acá? - preguntó él
- Seguramente fueron solo unos minutos- mintió Padmé que había pasado hace más de media hora por allí y no los había visto
- Unos minutos son suficientes para que alguien pueda entrar acá a las salas de hospitalización, hay niños acá Padmé, personas de la tercera edad, personas en cuidados intensivos, personas que no pueden caminar, personas en coma, mujeres embarazadas o mujeres que recién dieron a luz- dijo él en tono molesto- Solo unos minutos es suficiente para que alguien pueda entrar y hacerles daño.
- Ani, no ha pasado nada, solamente fueron unos minutos- dijo ella entendiendo el punto de vista de Anakin, pero queriendo disminuir su mal humor.
- Siempre has sido demasiado blanda con el trabajo de los demás, pensé que comprendías que la perfección es lo mínimo que espero- dijo Anakin y ella lo miró enojada.
- Estoy segura de que ellos salieron por una razón importante- dijo Padmé molesta.
Cuando los guardias llegaron, miraron asustados al doctor Skywalker, o más bien al general Skywalker, porque ellos habían sido parte del escuadrón de Anakin durante la guerra.
- General- dijeron ellos formándose frente a él.
- ¿Por qué motivo abandonaron su puesto?- preguntó él y su voz sonaba bastante seria.
- No tenemos excusa señor, fuimos a hablar por teléfono- dijeron ellos y Padmé maldijo internamente. ¿Acaso Anakin jamás dejaba de tener la razón?
- ¿Hablar por teléfono es más importante que proteger la vida de todas las personas en este hospital?- preguntó Anakin molesto- ¿Algo grave le ocurrió a algún familiar de ambos? ¿No pudieron turnarse?- preguntó él
- No tenemos escusa señor- dijo uno de ellos- Estábamos aburridos y pensamos que no demoraríamos mucho- dijo uno de ellos.
- Vayan por sus cosas, están despedidos- dijo Anakin y ellos se formaron haciendo un saludo militar
- Si general- dijeron ellos saliendo cabizbajos de allí.
Padmé quedó sorprendida, comprendía que ellos se habían equivocado, comprendía que no deberían haber salido ambos. ¿Pero despedirlos?
- Anakin, es demasiado, fueron parte de tú escuadrón, ellos solo cometieron un error- dijo ella y él negó.
- Como parte de mi escuadrón deberían haber sabido que no podían fallar, una simple falla puede poner la vida de toda esa gente que está allá adentro en peligro- dijo él de forma inflexible.
- Pero Anakin- gritó Padmé intentando interceder por los dos guardias.
- Pero nada doctora Naberrie- dijo él haciendo gala de su autoridad y Padmé se sintió herida, pero no lo demostró- Vivimos una guerra, y no podemos permitirnos errores, el paciente que acaba de morir en mi sala de quirófano, tenía dos disparos en los pulmones, un disparo en el hígado y un disparo en una válvula del corazón que lo mantenían en coma, esperamos a que su cuerpo comenzara a recuperarse para sacar la última bala, aún sabiendo que era imposible que él lo lograra, era un militar que había servido en la guerra, y le dispararon los separatistas dentro de un hospital cuando invadieron Coruscant. Él ya estaba en casa, ya estaba con su familia, había sobrevivido a la guerra y los separatistas atacaron el hospital, murió su esposa, casi mueren sus hijas, y él quedó en coma hasta hoy, que murió en esa sala, no voy a aceptar peros cuando se trate de proteger a la gente, ellos no hicieron su trabajo, y deben asumir las consecuencias, ¿He sido claro? Soy el jefe de esta unidad, la directora Shaak Ti me encargó la seguridad de todo este hospital y no vas a cuestionar mis decisiones por más que seas mi esposa ¿Ha quedado claro doctora Naberrie? - preguntó él muy molesto.
- Si doctor Skywalker- dijo Padmé saliendo de allí molesta.
Sabía que Anakin estaba estresado, atormentado, y molesto por la cirugía. Pero le había dolido que él le recordara que era su jefe dentro del hospital y no su esposo. A veces olvidaba que él siempre sería un buen profesional.
Cuando dobló el pasillo, se encontró a Palo y él la abrazó entendiendo que ella necesitaba un abrazo.
- Creo saber qué estás pensando respecto a las niñas- dijo Palo intentando desviar el tema, pues era obvio que Padmé no hablaría de lo herida que se sentía.
- ¿Cuándo llegaste a conocerme tanto?- preguntó Padmé y él sonrió.
- Estoy enamorado de ti ¿Lo recuerdas?- preguntó él
- Tú no me amas Palo, y aún así, sabes que no tienes oportunidad conmigo- dijo Padmé y Palo asintió.
- Lo tengo muy claro- dijo él mirando a Padmé.
En un principio se había acercado a ella por conveniencia trabajando para los Naberrie, pero ahora, conviviendo con ella, viendo lo valiente que era, viendo lo buena, amable y gentil que era, no pudo evitar caer perdidamente enamorado de ella. Padmé pensaba que era una broma, pero él realmente se había enamorado de ella. Aunque él sabía que Padmé nunca lo correspondería, menos cuando se enterara que él sabía quién había matado a su sobrina, y no hablaba por miedo.
Padmé y Palo fueron al departamento de familia del hospital general de Coruscant, porque tenían una sugerencia que hacer. Las cuatro niñas que Anakin mencionaba habían quedado huérfanas, seguramente irían a un refugio, pero, Palo y Padmé conocían a un matrimonio joven que buscaba desesperadamente adoptar y estaban seguras de que ellas no dudarían en hacerse cargo de las niñas.
Saché y Yané se habían casado hace poco, y querían adoptar. Yané quería una casa llena de niños como siempre había soñado, y Saché estaba feliz con la idea. Tal vez, si todo salía bien, ellas podrían hacerse cargo de las niñas.
- Todo saldrá bien- dijo Palo luego de que hicieron la sugerencia y el departamento de familia dijo que se comunicaría con ellas.
- Eso espero, esas niñas merecen un hogar lleno de amor luego de lo que sufrieron- dijo Palo y Padmé aceptó que él pasara su brazo por sobre sus hombros en un abrazo.
Palo sabía que debía aprovechar la oportunidad, que debía ganar terreno para que Padmé lo tomara en cuenta, pero ya no haría las cosas mal, aceptaría que en su destino no estaba el que ella lo amara, y haría las cosas bien.
- Padmé, escuché lo que ocurrió con los guardias- dijo Palo y Padmé suspiró.
- ¿También crees que soy demasiado blanda no es así?- preguntó Padmé sabiendo que Palo era como Sabé algunas veces, era directo y eso era algo que la había hecho retomar su amistad por decirlo de cierta forma con él.
- Si, tú eres demasiado blanda y aceptas todo, es por eso que muchos del personal se aprovechaban de ti- dijo Palo y Padmé suspiró.
- Hasta que Anakin llegó a enmendar las irregularidades y perdí bastante personal- dijo Padmé casi con sarcasmo
- Y él, tampoco está del todo bien, está siendo demasiado estricto, pero sabes por qué lo está haciendo, sabes que lo que te digo sobre el estrés post traumático puede ser cierto- dijo Palo y Padmé asintió.
- Lo sé Palo, lo sé ¿Pero qué puedo hacer? Shmi está muriendo, mis hijos están asustados por la guerra, su padre quiere protegerlos, quiere protegernos a todos ¿Qué puedo hacer?- preguntó Padmé y Palo la abrazó.
- Buscaremos una solución ¿Está bien?- preguntó Palo y Padmé asintió- Dale esto a los niños por cierto- dijo Palo sacando de su maletín dos paletas grandes de dulce.
- ¿Seguro que no quieres que les diga que se lo envías tú?- preguntó Padmé- Luke no te conoce, pero Leia estaría feliz de saber de ti- dijo Padmé
- Es mejor que no, solo diles que tú las compraste- dijo Palo y Padmé sonrió.
- Está bien- dijo Padmé- Gracias- dijo ella y juntos firmaron para salir de turno y Palo llevó a Padmé hasta cerca de su casa.
Padmé no se dio cuenta de que justo por allí pasaban Obi- Wan y Satine.
- Satine ¿Por qué Padmé acaba de bajar del automóvil de Palo?- preguntó Obi- Wan que conocía bien a Palo.
- Seguro viste mal querido- dijo Satine sonriendo mientras Ayra dormía en sus brazos
- Estoy seguro de lo que vi- dijo Obi- Wan mirándola confundido.
- Cariño, estoy segura de que viste mal- dijo Satine y Obi- Wan pareció aceptarlo.
Eso había estado cerca, pensó Satine. Padmé debería tener cuidado en su amistad con Palo, porque en cuanto Anakin se enterara de lo que pasó con Palo y Teckla y todo lo que no sabía, Palo iba a adornar el piso del hospital si las cosas no salían bien.
Satine miró a su hija y besó su frente. El regreso de la guerra de Anakin y Obi- Wan estaba siendo más complejo esta vez, para ambos, y tanto ella como Padmé no sabían como afrontar la situación.
Ni siquiera sabían si había una situación o si eran ellas realmente las que lo imaginaban. Solo esperaba pronto todo volviera a la normalidad, porque iba a desmayarse si encontraba una escopeta bajo la cama nuevamente. Realmente agradecía haber estado con Padmé ese día, porque ella no tenía idea de como manipular un arma.
Definitivamente, eran días complejos, pero todo mejoraría. Tenía fe de eso.
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