En la casa del importante empresario Kim Namjoon, el día estaba empezando como cada mañana, hacía tiempo que no se presentaba a su oficina porque había estado de sol a sol en el laboratorio de la familia, donde se trabaja en la cura para Taehyung, pero este día quería volver a su vida habitual luego de entregar su versión del suero beta, estaba bajando muy temprano a la cocina para tomar un café, con aquel atuendo elegante que consistía en un traje gris hecho a la medida, con una camisa negra bajo el saco y matizado con una corbata gris.

Era aún muy temprano y su hijo seguía durmiendo, JK había estado encargándose de él equipo que tendrían en la casa de la playa a la que pensaban llevar a Taehyung y por lo mismo estaba agotado, Namjoon tomó su desayuno y salió hasta su vehículo, tenía planeado hacer una parada muy importante para él, la mansión Kim de Taehyung, hacía mucho que no visitaba a su sobrino y también quería visitar la tumba de su hermano y cuñada, sentía esa necesidad de hacerlo porque pese a saber que había sido estricto con la seguridad, el lupus se estaba burlando de ellos.

Minutos más tarde, el hombre de cabello gris se encontraba en un hermoso jardín techado con plantas de interior de daban ese toque verde y acogedor al lugar, en el lado este de la gran fortaleza, al frente había dos pequeños nichos forjados en mármol fino y tras los que se reguardaban las cenizas de los señores Kim, al pie de estos había otra placa en la que los visitantes podían dejar flores o simplemente sentarse, qué era el caso ahora, Namjoon estaba sentado con la espalda pegada a la pared en la que los nichos estaban.

─ No hemos encontrado el químico qué causó todo esto pero si el que lo puede revertir, es una enfermedad química que bloquea el sistema inmune, antes creímos que lo mataba pero no, lo bloquea y ahora ha mutado para comenzar a hacer daño pero estamos luchando para no fallar, ese niño siempre fue como mi hijo Hansung, no voy dejar que se vaya sin dar batalla ─ decía dirigiendo sus palabras a su hermano que ya no estaban con él ─ solo ayúdanos a que soporte un poco más, no dejes que se rinda tan rápido ─ pidió con el semblante triste el médico.

Así la visita a las tumbas fue pasando entre recuerdos que llenaban el espacio de nostalgia, Namjoon fue hasta donde su sobrino se encontraba y lo vio durmiendo profundamente, el pequeño Tan estaba a un lado de la cama, en su cojín y al ver al mayor llegar salió corriendo a su encuentro, este le sonrió y lo tomó en sus brazos para responder al saludo y cariño que estaba recibiendo por parte del peludo, pero estaba en eso cuando pudo ver que su sobrino estaba abriendo los ojos lentamente para dirigirle la mirada a él, no se veía cansado y menos cuando una relajada sonrisa apareció.

─ La privacidad nunca fue una opción, ¿no es así? ─ dijo con algo de sarcasmo y diversión el menor mientras se empezaba a sentar en la cama, lugar en el que Nam puso a la mascota para luego sentarse él, no pudo evitar que le causara gracia lo que estaba escuchando por parte del rubio porque ahora había muchos oscuros en las grabaciones y era porque el chico estaba necesitando de aquello que no podía tener antes o que no le hacía falta porque no sabía lo que era la intimidad.

─ Nunca antes hubo necesidad de ello, hasta que cierta chica de cabello corto, crop tops, pantalones baggy y una hermosa sonrisa llegó a esta casa de una manera tan inesperada pero oportuna y el señorito empezó a apagar las cámaras primero para ocultarla y después para tener esos momentos de secretos entre ambos, es una historia muy hermosa ─ reclamó sin llegar al enojo el señor Kim que no podía evitar sentirse bien estando ahí, siempre la compañía de Taehyung había sido un aliciente para él, en esos días de mucho estrés cuando las cosas no salían como las pensaban.

─ Me alegra que lo reconozcas, ella me hace muy feliz y sé que hay cosas que quizá nunca voy a vivir pero ella llena mucho de aquello que en algún momento quise o desee, ella por si sola es un sueño vuelto realidad para mí, la amo y realmente pensé que nunca iba sentir sentimiento como este ─ aclaró el joven para que su tío entendiera lo que esa joven significaba para él, que las cosas no eran tan sencillas como un capricho cualquiera porque el rubio lo que menos tenía eran sentimientos banales como el capricho.

Namjoon siempre había entendido las necesidades humanas que el menor iba tener estando encerrado, pero nunca imaginó que sería alguien tan dulce y amorosa como Hansen la que iba llegar a su vida, ella llenaba cada necesidad que él tenía y lo hacía con paciencia y amor, era protectora y amorosa, tanto que pensaba que si hubiera llegado antes Taehyung habría estado mucho mejor para este momento pero las cosas no son como uno quisiera y la vida pone sus propias reglas, unas muy difíciles de cumplir pero siempre lleva esa felicidad en dosis pequeñas, tan pequeñas como una ilusión que día a día se va haciendo más grande hasta que llena todo el espacio.

Por un momento Taehyung y Namjoon se volvieron esa familia que siempre habían sido, hacía tiempo que no convivían y que necesitaban para sonreír, nunca olvidaban que eran una familia feliz que se debía a ellos, Jin era quien más tiempo pasaba con el rubio porque era el médico de cabecera, pero Nam era quien más pendiente pasaba de las cámaras y quien corría cuando una emergencia se daba, eran un equipo en que las labores estaban muy bien repartidas para que nadie estuviera sobrecargado con nada.