Taehyung la veía con una expresión de tristeza muy marcada en su rostro, le recordaba a esa veces en las que la veía armar sus teorías sobre él, no podía evitar pensar que se había enamorado de ella porque la veía tan llena de vida, como alguien que no se dejaba llevar, que podía crear sus propias reglas y seguir su camino, un potro salvaje de las praderas que veía en las películas viejas que gustaba disfrutar en las noches frías.

Le partía el corazón verla ahí, más cuando se sentó en el piso, tomó su celular y comenzó a escribir, pronto su teléfono celular empezó a sonar y Taehyung supo que era ella, pero no quería leer lo que le estaba enviando porque dolía lo que fuera que dijera, porque ella tenía razón, la extrañaba tanto que solo quería sentir sus besos, sus caricias, hacer el amor nuevamente con ella y volver a sonreír pensando que su encierro lo estaba protegiendo, pero no podía sacar de su cabeza que no tendría mucho tiempo por delante y que ella merecía llenar con su bondad el corazón de otra persona que tuviera suficiente vida para valorar y agradecer por ello.

─ Por favor vete, no te necesito ni te extraño, solo quiero estar solo como siempre lo estuve, ve y cuida de tu abuela que lo necesita, sigue disfrutando la vida con tus amigos y sonríe como lo hacías antes de conocerme, haz tu vida lejos de mí y olvídame, has como que no existí nunca ─ por fin abrió el micrófono que comunicaba con la puerta de carga, tomó el valor para correr a Hansen creyendo que eso bastaría para que ella se marchara, creyó que esas palabras eran lo suficientemente duras para lastimarla pero no conocía la maldad humana ni a lo que la chica había tenido que enfrentarse antes.

─ Eres muy ingenuo, crees que vengo porque me necesitas, pero no Taehyung, estoy aquí porque soy yo quien te necesita; soy yo quien quiere ver tu hermoso rostro cuando sonríe y cuando me explicas cada cosa que forma parte de tu proyecto, no importa que no te entienda nada de lo que me dices, el simple hecho de que me tomes en cuenta para hablar solo para ello me hace sentir especial, por eso te necesito ─ dijo la joven que se puso en pie para ver directamente a la cámara dónde sabía que Taehyung la estaba viendo.

─ No quiero hablar más contigo, no quiero que me necesites, entiende que no debes hacerlo porque... ─ por más fuerte que quisiera sonar, las palabras de Hansen le había tocado el alma, porque nunca pensó que se volvería tan importante para esa mujer autosuficiente y valiente que había admirado en las cámaras. Ella sin duda era esa persona que hubiera querido para siempre a su lado, pero no quería ser injusto.

─ No me importa, voy a quedarme aquí porque soy yo la que decide si se va o se queda, estoy en la calle, no te pertenece y ni tus poderosos tíos pueden sacarme porque no estoy haciendo daño a la propiedad privada, tampoco me va importar si llueve o nieva, me voy a quedar, ¿lo entiendes? ─ arremetió sin quitar la mirada de aquel sofisticado equipo de vigilancia, al terminar de nuevo se sentó en el piso, cruzó las piernas en posición de loto y sacó su teléfono celular.

─ Hansen... te amo, pero no me queda mucho tiempo ─ se vio obligado a confesar ─ me estoy muriendo y no es justo para ti que estés aquí a diario sabiendo que no tengo ningún futuro, que nuestro amor por más grande que sea está condenado a terminar de una forma en la que no quiero que lo vivas, porque te amo tanto que prefiero dejarte ir y saber que estarás con alguien que puede hacerte feliz, por eso quiero que pienses en mí como en un sueño, en un libro como ese que te gusta... ─ dijo el rubio que estaba dejando su corazón esas palabras, no había otra forma de hacerle saber que la amaba pero no la quería atar.

─ ¿Crees que eso me importa?, prefiero estar contigo hasta el final que creer que solo fuiste un invento de mi cerebro, quiero estar ahí cuando todo pase y espero que sea en mucho tiempo pero si no, quiero tener la certeza de que exististe y no fuiste solo una jugarreta, un sueño o un invento, entiende que prefiero tener un pedacito de ti que no tener nada, prefiero compartir contigo el tiempo no me importa si es mucho o poco que no saber más de ti, porque ese es el amor de verdad, porque a estas alturas ya es demasiado tarde, nunca voy a olvidarte... ─ Hansen no se dio cuenta en que momento sus ojos se llenaron de lágrimas por lo que estaba diciendo, por lo que él le había dicho, solo quería abrazarlo.

Fue esa la pauta para que la impotente mano de Taehyung tecleara el código de la puerta, es que nunca nadie hubo tan especial para que se ganará su corazón de esa manera, Hansen era lo más bello que pudo conocer y si ella estaba dispuesta sufrir a su lado por su enfermedad, él no se lo iba privar porque la necesitaba también porque haría que las cosas fueran más suaves para él, ella sería ese hombro que siempre necesitó tener, dónde podía derramar sus lágrimas cuando fuera necesario.

Hansen escuchó cuando el seguro de la puerta fue desactivado, se puso en pie y lentamente ingresó, pasó por la cápsula de desinfección por dónde tantas veces había pasado, su corazón se estaba acelerando cada vez más mientras se acercaba hasta el lugar dónde él solía permanecer, de alguna manera sentía que la estaba esperando en la entrada y no estaba equivocada, al abrir la puerta lo vio de pie, tenía sus ojitos hinchados porque parecía que también había llorado, pero le estaba sonriendo, no pudo evitar correr para abrazarlo, por fin estaban juntos de nuevo.