(Carta escrita, cuando InuYasha estaba en el hospital)

Mi chica de las sombras (Kagome):

Ahora que ya se quien eres, no sé como sentirme, la verdad es que no puedo describirlo, y es que no soy para nada bueno escribiendo, me siento extraño, como fuera de mi.
Desde la primera vez que ti vi, intuí que tenias algo especial, siendo solo tú, siendo Kagome, por eso me sentí tan cautivado y lo puedo entender todo, y es que siendo la chica de las sombras, despertaste en mi, a alguien que permanecía dormido, muy dentro de mi, en un lado muy oscuro, a tu manera tan perfecta, me rescataste, me hiciste sentir valorado y que sí valía la pena, tú, solo tú...
Gracias a ti dejé de ser invisible, sin siquiera proponérselo, me salvaste, me devolviste la confianza, y ahora estando en el hospital, y recapacitando respecto a todo y a las aclaraciones que me hizo mi hermano, puedo darme cuenta que estoy enamorado de ti, que me cautivaste con tus mitades, nunca creí que algo así de dramático pasaría, hasta hiciste que Sesshomarti se abriera y dejara de portarse tan distante conmigo, todo gracias a ti, muero de ganas de verte, espero que Koga te traiga pronto, quiero decirte a la cara que te amo, y tal vez jugarte alguna broma, porque eres muy torpe.
Cuando oí que eras tu la chica de las sombra antes de caer inconsciente, me sentí tan feliz y cerré los ojos pensando en tu sonrisa, creo que eso me dio la fuerza para luchar por mi vida, Kagome o mi chica de las sombras, o ex chica de las sombras, pero mía, eres la dueña de mi corazón, desde hoy y para siempre...