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Capítulo 7: Historias cortas

Ha pasado un año desde nuestra primera misión con Tomioka, yo Kocho Kanae, me he hecho más fuerte gracias a los entrenamientos con él, Sabito tenía razón, Tomioka es el mejor maestro que he visto, sus consejos y guías son muy eficientes, tanto así que ahora a mis 16 años, estoy siendo ascendida a pilar, desde este momento seré conocida como pilar de la flor.

- Y con esto mis pequeños, hemos terminado esta ceremonia, por favor llévense bien con sus nuevos compañeros.

- Si – Los demás pilares dijeron al unísono.

- Bien, Kanae, Kyoujuro, ahora son pilares, aprendan de sus compañeros.

- Si – Ahora ambos respondimos.

Con esto el patrón se retira, siendo guiadas por sus hijas. Al cerrarse las puertas solo nosotros cinco quedamos en el jardín.

- Es un placer conocerte pilar de la flor, Kocho Kanae, espero trabajar contigo en el futuro, mi nombre es Rengoku Kyoujuro

Rengoku se presenta conmigo, estábamos al frente del portón mientras los otros pilares están atrás de nosotros.

- Igualmente, Rengoku san, espero contar contigo en el futuro, Pilar de la llama.

Y le devuelvo el saludo.

Ahora nos levantamos y al girarme observo a Himejima llorando, a su lado se encuentra Tomioka y Uzui.

- Ha pasado un tiempo Himejima san, me alegro mucho ver que te encuentras bien – Saludo a Himejima.

- Es bueno saber que te encuentras bien, rezare por tu salud – Himejima, aun llorando, me responde.

- Tú debes ser el pilar del sonido – Me dirijo a Uzui – Esas joyas son muy llamativas. Mi nombre es Kocho Kanae y será un placer trabajar contigo.

- Estas joyas son igual de llamativas que yo, todo debe ser extravagante – Me responde Uzui – Mi nombre es Uzui Tengen.

En lo que me presento con Uzui, escucho como Rengoku se está presentando con Himejima. El que no se ha presentado, y no es que sea necesario, es Tomioka. Él está parado sin decir nada, solo nos está observando, sobre todo a Rengoku, es como si estuviera extrañado de algo.

- Bueno Tomioka san – Me dirijo a él – Ahora que ambos somos pilares ¿Puedo llamarte por tu nombre?

Tomioka parece sorprendido, no sé qué es lo que estaba pensando, pero lo saque de sus pensamientos.

- Está bien.

- ¡Muchas gracias Giyuu san! – Le sonrió - ¡Ah! Tú también me puedes llamar por mi nombre.

- ¿Segura?

- Si no hay problema.

- Muy bien, Kanae.

¡Bien! Parte de mi plan está empezando, ahora necesito que Giyuu pase más tiempo con nosotras, también le pediré ayuda a Makomo y Sabito.

Ahora Giyuu se me queda viendo de manera extraña.

- ¿Qué pasa? – Le pregunté.

- Nada. Felicidades por tu nombramiento.

- ¡Muchas gracias Giyuu san!

- Así que tú eres el famoso pilar del agua, Tomioka Giyuu, desde hace mucho tiempo quería conocerte.

A mi espalda, Rengoku se acerca a nosotros.

- No creo ser tan famoso.

- Ja ja que modesto eres.

- Es verdad – Me meto en la conversación – Rengoku san tiene razón, eres muy modesto Giyuu san ¿No sabes cuantos cazadores te admiran?

- No

En eso podemos escuchar la risa de Uzui.

- Todos en la organización han escuchado hablar del asombroso Pilar del agua – Comenta Uzui.

Giyuu solo pone una cara de confusión.

- Mira Giyuu san, muchos cazadores desean tener una misión contigo – Le informo a Giyuu.

- ¿Por qué? – Me pregunta.

- Porque nadie ha muerto bajo tu liderazgo, siempre tienes tiempo de darles consejos a los novatos, aparte de que eres el pilar más joven de la historia ¿No es suficiente razón para querer hacer equipo contigo?

Giyuu parece pensarlo un poco.

- Bueno, debo dar el ejemplo a los de menor rango ¿No?

- Ja ja, realmente me agradas, perdón por no presentarme antes, soy Rengoku Kyoujuro y tienes razón, nosotros los pilares debemos ser un ejemplo para los demás.

Y por alguna razón Giyuu suelta una ligera sonrisa. Qué lástima que no estés aquí Shinobu.

- Así es – De repente Giyuu nos mira con determinación – Nosotros, que somos considerados los más fuertes de la organización, debemos usar nuestras espadas para proteger a los más débiles.

¡Vaya! A veces Giyuu lanza frases muy profundas, pero tiene razón, yo siempre protegeré a Shinobu y a las niñas que hay en mi finca. Volteo para ver a Rengoku y no puedo describir su rostro.

- ¿Estás bien? – Le pregunte a Rengoku.

- ¿Eh? Si, estoy bien – Y Rengoku sonríe – Solo que me recordaste a una persona Tomioka san.

Y Giyuu vuelve a sonreír, ahora recuerdo otra razón por la que se quiere hacer equipo con él, y esto va más para el género femenino de la organización, todas quieren ver esa sonrisa y debo protegerla, esa sonrisa debe ser solo para Shinobu y sus seres más cercanos.

- Giyuu san ¿Tienes algo qué hacer más tarde? – Le pregunto.

- La verdad no. Makomo y Sabito están en el pueblo, así que estaba pensando quedarme en mi finca.

- Entonces ¿Po qué no pasas un rato en mi finca?

Giyuu parece pensarlo.

- Prepararé unas galletas y sirve para que Shinobu te pueda preguntar unas dudas que tiene sobre el nuevo estilo que le has estado ayudando a crear.

- ¿Cómo que nuevo estilo? – Himejima de repente pregunta.

- Después de hacer equipo con él hace un año – Empiezo a explicarle – Hemos estado entrenando con Giyuu san y mi hermana ha desarrollado un estilo único que utiliza venenos a base de glicinas.

- Así que es tu hermana la que acaba con los demonios utilizando venenos, que extravagante – Comenta Uzui.

- Vaya no sabía eso – Ahora Rengoku comenta.

- Así es – Me fijo en Giyuu – Giyuu san es un gran maestro, algún día deberías unirte a nuestros entrenamientos, Rengoku san.

- ¡Me encantaría! – Rengoku responde de forma muy efusiva.

- Eres bienvenido Rengoku san – Fue Giyuu quien respondió – Y Kanae, si no te molesta, con gusto responderé las dudas de tu hermana.

- ¡Bien andando!

Nos despedimos de los demás pilares y nos dirigimos a la finca mariposa.

. . .

Hoy en la mañana, mi hermana Kanae fue ascendida a pilar, yo Kocho Shinobu, me siento muy orgullosa de mi hermana, sabía que podría hacerlo, ella es increíble, aunque debo reconocer que Tomioka también, después de darme una idea de cómo derrotar a los demonios, mi hermana lo convenció para ayudarnos con nuestro entrenamiento. Ahora soy capaz de hacerles frente a los demonios y todo gracias a él, me pregunto ¿Qué estará haciendo?

"Tu hermana tiene razón Shinobu, te ves hermosa cuando sonríes."

- ¡Ah! – El grito del paciente al que le estoy vendando el brazo me trajo de vuelta a la realidad.

- Lo siento.

¿Por qué no puedo dejar de pensar en eso? Ha pasado un año y no puedo sacarme eso de mi cabeza.

- ¿Te encuentras bien? Tu rostro esta roja – Y sin querer, vuelvo a presionar el vendaje - ¡Ah!

- Perdón.

Termino de vendar al paciente y me retiro inmediatamente de ahí, esto es culpa de Tomioka, cuando lo vea me las pagara.

- Ara ara Shinobu ¿A dónde vas con tanta prisa?

Puedo escuchar la voz de mi hermana por el pasillo.

- Nee san, bienvenida.

- Estoy de vuelta.

- ¿Cómo te fue en la ceremonia? ¿Estaban los otros pilares? ¿Alguna nueva misión?

- Tranquila Shinobu, me fue muy bien, si estaban los otros pilares y no hay misión por hoy.

De repente mi hermana comienza a caminar a la cocina y me hace una seña para que la acompañe. Ya en la cocina, mi hermana saca unas galletas de la alacena.

- Shinobu ¿Puedes llevar estas galletas a nuestro invitado?

- Si claro ¿Quién es?

- Es un pilar, está esperando en el salón de té.

- ¿Un pilar?

- Si ¿Puedes hacerle un poco de compañía en lo que preparo el té?

- Nee san ¿No sería mejor si tú le haces compañía y yo preparo el té?

- Hazme este favor ¿Sí?

Y mi hermana me pone unos ojos de cachorro, esto me molesta un poco ¿Quién es pilar aquí? Si su invitado es otro pilar, debería ser ella quien lo atienda.

- Está bien nee san – Me resigné.

- Muchas gracias.

Mi hermana me sonríe antes de empezar a preparar el té, yo solo salgo de la cocina para dirigirme al salón, solo espero que no se tarde demasiado.

Al llegar a la puerta del salón doy un suspiro, sin querer cierro los ojos al deslizar la puerta.

- Lamento mi intromisión, pero mi hermana le envía...

Y cuando abro mis ojos, el que está sentado esperando es.

- ¡TOMIOKA!

- Kocho.

- ¿Q-Qué haces aquí?

- Tu hermana me invito a comer unas galletas con té.

¡NEE SAN! Ahora entiendo porque insistía en que yo trajera las galletas.

- ¿Te encuentras bien Kocho?

- ¿Eh? Si es solo que... ¡Arg!

Tomioka solo me mira confundido ¿Por qué mi hermana no me dijo que se trataba de Tomioka?

- Perdón Tomioka san, es que mi hermana no me dijo que se trataba de ti – Le digo después de tomar una gran bocanada de aire para tranquilizarme.

Me adentré al salón y cierro la puerta.

- Está bien – Solo eso me contesta.

Coloco las galletas sobre la mesa en un plato y se las acerco a Tomioka, hice eso para que empiece a comer y largarme de aquí, pero él ni siquiera las toca ¿Será que está esperando el té? Bueno, si va a esperar puede hacerlo solo.

Me dirijo a la puerta cuando Tomioka me llama

- ¿Kocho?

- ¿Sí? ¿Qué sucede Tomioka san?

Le doy la espalda, no me atrevo verlo a los ojos.

- Me comentó Kanae que tienes unas dudas con tu estilo.

- ¿Qué?

- ¿Cuáles son tus dudas?

¿Dudas? ¿Con mi estilo? ¿Qué le dijo Kanae a Tomioka?

- Me gusta cómo me visto, no tengo ninguna duda.

Puedo observar cómo Tomioka frunce el ceño.

- Me refiero a tu estilo de combate.

¿Qué? Él no hablaba de mi ropa, pero creí que... ¡Ah! Estúpido Tomioka.

- No, no tengo dudas, creo saber cómo mejorarlo.

Así que nee san lo trajo con esa mentira, ya hablare con ella.

- ¿Segura? Kanae me dijo que las tenías.

- No, en serio estoy... Espera un momento.

¿Escuche bien?

- ¿Puedes repetir lo anterior?

- ¿Qué si estás segura?

- ¡Después de eso!

- Que Kanae me dijo que tenías dudas.

Si, escuche bien.

- ¿Desde cuándo llamas a mi hermana por su nombre?

- Desde hoy.

Me empiezo a enojar, a veces Tomioka me saca de quicio cuando no da una respuesta contundente.

- ¿Por qué?

- Porque ella me lo pidió.

Y llevo mi mano a mi frente, hay ocasiones que me dan ganas de golpear a Tomioka.

- ¿Estás enojada? – Me pregunta Tomioka.

¿Enojada? ¿Por qué debería de estarlo? No me importa lo que hagan Tomioka y mi hermana.

- No – Le contesto – Veo que su relación ha mejorado.

- Así es.

Algo no me gusta.

- ¿Y ella te llama por tu nombre?

- Si.

Acaso mi hermana ¿Se está enamorando de Tomioka?

- ¿Y no te molesta?

- No.

¿Por qué me siento así? ¿Qué es este dolor que siento en mi pecho? No sé qué me está pasando y me quedé en silencio.

- ¿Kocho?

Tomioka me llama, pero lo hace con mi apellido ¿Por qué de repente no quiero que me llame por mi apellido? Si tan solo.

- Y sí...

Y si le pido que también me llame por mi nombre.

- También me...

¡No! No puedo pedirle eso. Tomioka solo me observa, expectante a lo que le iba a decir.

- Nada, olvídalo.

- Ara ara ¿Qué le ibas a pedir Shinobu?

Detrás de mi aparece mi hermana, ni siquiera escuche cuando abrió la puerta. Ella lleva una bandeja con tres vasos con té, me sonríe y se acerca a la mesa.

- Ven Shinobu, tomemos té y comamos las galletas juntos ¿Sí?

Mi hermana se sienta enfrente de Tomioka.

- No quiero interrumpir – Le contesto – No quiero molestarlos.

- No eres ninguna molestia ¿Verdad Giyuu san?

Así que mi hermana en verdad lo llama por su nombre, eso quiere decir que su relación va aumentando.

- No lo es – Responde Tomioka.

- ¿Ves? Vamos siéntate junto a mí.

Mi hermana me señala el cojín que está a su derecha y sin muchas ganas le hago caso.

Empezaron a platicar de la responsabilidad que tienen como pilares, además, mi hermana le pidió consejos a Tomioka para su nueva posición. Yo no intervine para nada en su conversación, no me sentía en posición de opinar algo.

- ¿Shinobu y yo podemos seguir entrenando contigo, Giyuu san?

De repente escuche mi nombre.

- No tienes por qué preguntarlo, al igual que le dije a Rengoku san, ustedes siempre serán bienvenidas – Respondió Tomioka.

Mi hermana se gira para observarme y me sonríe, después dirige nuevamente su mirada hacia Tomioka.

- ¿Qué te parece si entrenamos un poco Giyuu san?

- Por mí no hay problema.

- Excelente ¿Puedes esperarnos en el jardín? Shinobu y yo iremos por unos shinai.

Tomioka se levanta y se dirige al jardín. Cuando nos quedamos solas.

- Shinobu, antes de irnos, quiero que me digas ¿Qué te ocurre?

- No me...

- Se sincera por favor.

Doy un gran suspiro y me sincero con mi hermana.

- Me siento rara cuando los escucho hablándose por sus nombres. Nee san ¿Acaso a ti te gusta Tomioka?

Mi hermana solo me sonríe.

- Giyuu san es un chico muy apuesto ¿No?

No le respondo, pero ella parece obtener una conclusión, porque me sonríe aún más.

- Tranquila Shinobu, tu hermana está de tu lado.

- ¿Eh?

- Yo le pedí a Giyuu san llamarnos por nuestros nombres porque ahora somos pilares y somos amigos, no por otra razón. Aquí la verdadera pregunta sería ¿A ti te gusta Giyuu san?

Siento como si me estuviera quemando, de repente me dio mucho calor.

- Ara ara Shinobu, eres muy honesta.

- Yo...Yo no lo sé.

- Entonces deja que tu corazón responda con el tiempo. Por el momento vamos al jardín, nos están esperando.

- Si, tienes razón.

- Pero Shinobu, si tu corazón te dice que si, entonces tu hermana te ayudara con todo lo que pueda.

Y finalmente puedo sonreírle a mi hermana.

- Muchas gracias nee san. Pero no te ilusiones, no creo que me guste alguien tan tonto como Tomioka san.

No quiero que mi hermana tenga la idea equivocada.

- Yo opino lo contrario ¿Sabes por qué?

Y me le quedo viendo, esperando su respuesta.

- Eso que sentiste en todo este momento se llama "Celos".

¿Celosa? ¿Yo?

- ¡No es cierto!

- Ara ara, te ves muy linda.

- ¡NEE SAN!

Sali del salón, no quiero seguir con esta conversación, además Tomioka nos está esperando y no quiero que... ¡No! No me estoy apresurando por el tonto de Tomioka, por mí que se quede ahí solo. Volteo para ver a mi hermana y ella solo me sonríe ¡Maldición! Caí en su trampa.

. . .

El día de hoy, tenemos una misión con el pilar del agua, yo Masachika Kumeno, estoy emocionado, no porque tenga la oportunidad de estar otra vez con el pilar del agua, si no, porque en esta ocasión Sanemi también está con nosotros, si no mal recuerdo, para Sanemi, es la primera vez que hace equipo con el pilar, estoy seguro de que aprenderá muchas cosas.

- No veo la razón del por qué estás aquí.

Bueno, eso sería el caso si Sanemi no fuera tan enojón, si tan solo fuera más esa persona amable que sé que está ahí, pero que ante los demás lo oculta.

- Fueron las ordenes de Oyakata sama.

Fue la simple respuesta que el pilar del agua dio.

- ¿Por qué tanto respeto a ese hombre?

- ¡Sanemi!

- ¿Qué?

Una cosa es que insulte a los demonios y a las personas que no son de su agrado, pero insultar al patrón es pasarse de la raya.

- No deberías hablar así de Oyakata sama – Le digo.

- ¿Porqué? Alguien que envía a morir a los demás, mientras él se queda en su hogar sin hacer nada, no merece respeto.

No puedo responderle, ya que nunca he visto al patrón en persona, así que no se si es como lo dice Sanemi.

- Oyakata sama no puede salir de su hogar por su débil estado.

De repente el pilar del agua nos empieza a explicar.

- Al parecer hay una especie de maldición en su familia.

- ¿Qué quieres decir con eso? – Le pregunto al pilar.

- No me hagan mucho caso, pero se dice que los varones Ubuyashiki no superan los 30 años.

Tanto Sanemi como yo nos quedamos asombrados, no sabíamos nada de eso.

- ¿Cómo que maldición? – Pregunta Sanemi.

- Al parecer fue impuesta por el demonio original, Muzan.

- No lo puedo creer – Responde Sanemi – ¿No será algún invento de su parte?

- No lo creo – Ahora el pilar responde – Si lo vieras en persona, notaras que su estado físico es débil, en estos momentos, tiene que ser guiado por sus hijas ya que perdió la visión.

¡Cielos! ¿Qué clase de maldición le impuso ese demonio? Si esto es verdad, entonces no debería quedarle mucho tiempo de vida.

- Tal vez este enfermo, pero eso no quita que debamos respetarlo, de seguro no siente nada cuando alguien muere.

- Ya, Sanemi, no sigas con esto – Intento tranquilizar a Sanemi.

- Déjenme preguntarles ¿Recuerdan el nombre de todas las personas con las que han hecho equipo? – El pilar del agua nos pregunta.

- No – Ambos le respondimos.

- Yo tampoco – Nos dice el pilar – Pero Oyakata sama sí. El recuerda el nombre de todos los cazadores que han estado en la organización durante su gestión. Ese es su modo de honrarlos.

Por primera vez desde que conozco a Sanemi, se ha quedado sin palabras, al parecer no se esperaba esa respuesta. Por mi parte, lo que nos acaba de informar el pilar, me hace respetar al patrón aún más.

La noche cayo y realmente agradezco mucho al patrón al enviarnos con el pilar del agua, jamás imaginaria que no estaríamos enfrentando a la primera luna inferior en esta misión.

Este demonio claramente está por encima de los otros demonios a los que nos hemos enfrentado, tanto Sanemi y yo tenemos dificultades para acercarnos a él, estuve a punto de perder una pierna si no fuera por el pilar del agua.

- ¡Maldición! ¿Qué clase de técnica es esa? – Un Sanemi muy enojado pregunta.

Esto es muy raro, cada vez que estamos a punto de acercarnos al demonio este desaparece y reaparece detrás nuestro, en solo cuestión de segundos.

- Ja ja ja ustedes no son rivales para mí – La luna inferior se burla de nosotros.

- ¡Maldito!

Sanemi se vuelve a lanzar contra el demonio

- Respiración del viento. Octava postura: Primer corte vendaval.

Nuevamente el demonio desaparece.

- ¡Sanemi, detrás de ti!

Le grité a Sanemi, pero no reacciona a tiempo, debido a la postura que realizó lo dejo muy expuesto.

- Respiración del agua. Sexta postura: Torbellino Sinuoso.

El pilar del agua fue al rescate de Sanemi, sin embargo, el demonio volvió a desaparecer para aparecer a la espalda del pilar, en un giro rápido, el pilar del agua logró esquivar el ataque. Con su espada levanta un poco de polvo y tierra y toma del hombro a Sanemi para retroceder.

- ¡No necesito tu ayuda!

Sanemi le grita al pilar, pero este ni se inmuta, sigue observando al demonio.

- ¿Se encuentran bien? – Les pregunto a ambos en lo que me acerco a ellos.

- Lo estaremos cuando derrotemos a ese sujeto – El que me respondió fue Sanemi.

Si no descubrimos cómo le hace para siempre colocarse a nuestra espalda, o al lado contrario de donde lo vemos, estaremos acabados. Por más que lo pienso, no logro descifrar su poder.

- ¡No avanzaremos si nos quedamos aquí sin hacer nada!

- Sanemi, no podemos ir a lo loco – Le digo.

- Entonces ¿Qué? ¿Nos quedaremos aquí?

- Shinazugawa san tiene razón – Sorprendentemente, el pilar del agua le da la razón a Sanemi – ¿Pueden atacarlo juntos? Quiero ver algo.

Me pregunto si habrá descubierto la habilidad de este demonio.

- Está bien, vamos Sanemi.

- Si.

Y los dos nos lanzamos contra la luna inferior, utilizamos nuestras posturas de viento para tratar de asestar un golpe contra este demonio, pero la historia se repitió, al momento de estar cerca de él, simplemente se desvanece y aparece atrás de nosotros, tratamos de cubrirnos uno al otro para evitar ser atacados por este sujeto.

Algunas piedras vuelan hacia nosotros, me doy cuenta de que es el pilar del agua quien las lanza.

- ¡Qué demonios estás haciendo! – Sanemi se enojó porque una piedra casi le da a él.

De repente el pilar del agua corre hacia nosotros y con su espada vuelve a levantar tierra y polvo.

- Ya veo.

Fue lo único que dijo el pilar antes de ponerse enfrente de nosotros.

- ¿Cómo se encuentran? – Nos pregunta el pilar.

- Hemos estado mejor – Es lo que puedo responderle en estos momentos.

- Oye – De repente Sanemi toma del cuello al pilar – ¿Cuál era la idea al arrojarnos piedras?

- He descubierto como lo hace – El pilar del agua, sin ningún cambio en su rostro, nos dice.

- ¿Cómo? – Inmediatamente le pregunto.

- Es como un espejo.

Tanto Sanemi como yo nos quedamos con la duda en la cara.

- Desde el principio se me hizo raro que siempre se aparecía a nuestra espalda, pero cuando levanté el polvo pude notarlo.

- ¿Qué? – Sanemi pregunta.

- Tanto las partículas de polvo como las rocas que arroje lo atravesaron.

- No entiendo – Le digo al pilar.

- Lo atravesaron porque él no estaba ahí, estaba a nuestra espalda, al lado contrario.

Entonces eso significa que el demonio que estamos viendo ¿Es una ilusión?

- ¡Pero él está ahí parado! – Sanemi parece molestarse.

- Eso es porque esa habilidad solo la activa cuando lo vamos a atacar, pude ver como las partículas de polvo chocaban con algo cuando nos acercábamos.

No entiendo del todo lo que nos trata de explicar el pilar, y al ver como Sanemi aprieta los dientes, puedo concluir que él tampoco.

- Bien ahora yo iré primero, levantare una cortina de polvo y quiero que se fijen en el polvo, no en el demonio – Nos empieza a decir el pilar y se voltea a vernos – Les confió mi espalda.

- Esper...

No pude terminar lo que iba a decir porque el pilar se lanzó contra el demonio, va arrastrando su espada para general polvo y cuando estuvo cerca del demonio, hizo un ataque de abajo hacia arriba.

El demonio volvió a desaparecer y fue cuando pude ver lo que el pilar nos explicaba, una silueta se formaba en el polvo, definitivamente las partículas de tierra chocaban con algo, algo con forma humana.

Sanemi fue más rápido que yo y su reacción fue asombrosa, cuando esa silueta se posiciono en la espalda del pilar, Sanemi ya estaba demasiado cerca.

- Respiración del viento. Segunda postura: Garras de viento purificador.

Sanemi realiza cuatro cortes verticales cortando al demonio en cuatro, uno de esos cortes fue en su cuello.

- ¿Cómo? – El demonio se pregunta.

- Cometiste el error de usar esa táctica contra nosotros tres – El pilar de agua le explica al demonio que se está desintegrando.

Ya veo. Si solo hubiera sido uno de nosotros, el demonio acabaría ganando, pero cuando son más los oponentes, debió cambiar la estrategia, ese fue su error.

- Aun así, fue un oponente muy difícil – Hago ese comentario.

- Ni tanto – Sanemi trata de sonar duro, pero le doy un golpe en la espalda.

- ¿Y esta herida?

Aunque Sanemi no lo quiera admitir, si no fuera por el pilar del agua, esa herida pudo haber sido peor. Esperaba el clásico reclamo de Sanemi, pero este nunca llego, ya que Sanemi estaba asombrado viendo al pilar del agua rezando por el demonio.

- ¡Maldito! – Sanemi vuelve a sujetar al pilar desde su cuello – ¿Por qué rezabas por ese bastardo?

- Porque sí.

Esa fue la explicación del pilar, Sanemi no lo tomo muy bien porque en su frente y manos aparecieron unas venas en señal de que está muy enojado.

- Eres un...

Sanemi levanta su puño, iba a golpear al pilar. Rápidamente, sujeto a Sanemi por la espalda para tratar de tranquilizarlo.

- ¡Suéltame Kumeno! ¡Voy a golpearlo!

- Ya, tranquilo, el enemigo ya no está.

- Veo que odias mucho a los demonios – El pilar del agua se dirige a Sanemi – No sé qué te habrán hecho en el pasado, pero no todos los demonios son malos.

- ¿Qué? – Fui yo quien pregunto aun sometiendo a Sanemi.

- Algunos demonios tratan de vivir en paz con los humanos.

- ¡Es mentira! – Sanemi, que se trata de zafar de mi agarre, le dice.

- Otros fueron convertidos en demonios contra su voluntad.

Sanemi deja de forcejear y creo saber la razón, eso último que dijo el pilar del agua, puede que le recuerde a su madre.

- Se vieron obligados a atacar a sus seres queridos y cuando llegan a morir, su arrepentimiento no los deja descansar.

Ahora Sanemi baja los brazos.

- Por eso rezo por cada demonio que derroto, la muerte es el primer paso para su redención, espero que logren reencontrarse con sus seres queridos y tener una segunda oportunidad en este mundo.

- ¿Tú crees eso?

En el tono de voz de Sanemi puedo detectar algo más que ira u odio, suena como ¿Esperanza?

- Si – Fue la respuesta del pilar antes de pasar por nuestro lado.

Sanemi solo se le queda viendo, no lo insulta ni le mira mal.

- Creo que tenías razón Kumeno.

- ¿En qué? Sanemi.

- No es tan mal pilar.

Una ligera sonrisa aparece en el rostro de Sanemi, yo solo le doy un ligero golpe en su espalda. Íbamos a caminar para alcanzar al pilar cuando este se detiene de golpe.

- ¡Ah! Es verdad – El pilar se gira hacia nosotros – Escuche que te gusta el Ohagi, busquemos una tienda, yo invito.

El pilar del agua nos sonríe antes de dar media vuelta y seguir caminando. Me estoy aguantando la risa y observo a Sanemi, las venas en su frente vuelven a aparecer.

- ¡Retiro lo dicho, lo odio!

Ya no me pude aguantar y me empecé a reír, realmente agradezco que el pilar del agua estuviera aquí, espero que tengamos más misiones con él.

. . .

Me encuentro caminando hacia la finca del agua, yo Kanronji Mitsuri, junto a mi maestro Rengoku, nos dirigimos para tener un entrenamiento con el famoso pilar del agua.

He escuchado varias historias de él, que es muy fuerte a pesar de su edad, también que se convirtió en pilar a la edad de 14 años, misma edad que yo tengo en estos momentos, me gustaría convertirme en pilar, así tal vez pueda conseguir cumplir mi deseo.

Al llegar a la entrada de la finca, una jovencita con el uniforme estándar de los cazadores y un haori sin mangas color purpura, nos recibe.

- Buenos días pilar de la llama, mi nombre es Makomo – Ella hace una reverencia.

- Buenos días Makomo san, mi nombre es Rengoku Kyoujurou, ella es mi estudiante Kanronji Mitsuri – Mi maestro me presenta – Venimos a tomar parte del entrenamiento de Tomioka san.

Makomo me mira a los ojos y no puedo dejar de pensar que se ve hermosa, sus ojos color cian y su carita blanca la hacen ver como una muñeca, me gustaría abrazarla.

- Si, pasen por favor, los chicos ya han empezado a calentar.

- ¿Los chicos? – La pregunta salió de mis labios.

- Si, Giyuu y Sabito.

¿Eh? Makomo llama por su nombre al pilar del agua ¿Acaso ellos son...?

Makomo nos empieza a guiar por el pasillo que hay aun lado de la casa, para llegar al patio trasero, a lo lejos, se puede escuchar el choque de dos espadas de madera.

Al llegar al patio, rápidamente diviso al pilar del agua, gracias a la descripción de mi maestro y a ese haori lo reconocí, está practicando con otro chico, me imagino que es el tal Sabito que Makomo menciono.

Cuando se dan cuenta de nuestra presencia, ellos inmediatamente dejan de hacer lo que estaban haciendo para acercarse a nosotros.

- Gracias por venir Rengoku san.

- No, gracias a ti por invitarnos Tomioka san.

¡Cielos! El pilar del agua es guapo, uno de los rumores acerca de él resulto ser verdad, me pregunto ¿Qué otros rumores serán ciertos? De repente, el pilar del agua me mira con sus profundos ojos azules ¡Kya! ¡Es tan lindo!

- Supongo que ya conocieron a Makomo, él es Sabito, mi tsuguko.

- Mucho gusto pilar de la llama, mi nombre es Sabito, es un placer – El chico con la cicatriz se presenta, también es guapo.

- Igualmente, Sabito san, yo soy Rengoku Kyoujurou, ella es mi estudiante Kanronji Mitsuri, es un placer.

Y ambos hacemos una pequeña reverencia.

- Es un gran honor conocer al pilar del agua – Me empiezo a dirigir a ellos – Como mi maestro ya les dijo, mi nombre es Kanronji Mitsuri, no es necesario que sean formales conmigo, estaré bajo su cuidado en estos entrenamientos.

Makomo me sonríe y Sabito tiene un aura tranquila, el único que permanece serio es el pilar del agua ¿A-Acaso estará enojado? Traté de ser lo más cordial que pude ¿Por qué?

- ¡Ah!

¡Es verdad! No utilice ningún honorifico con él, debe pensar que soy una igualada.

- Di-Discúlpeme gran pilar del agua, no era mi intención ofenderlo.

Inclino mi cabeza para disculparme con él.

- Pf, ja ja ja – De repente, Sabito se empieza a reír.

Ahora ¿Qué hice? Creo que, al ver mi cara de confusión, Makomo se acerca a mí.

- Ignora a Sabito, no se burla de ti, se burla de Giyuu – Makomo me coloca una mano en el hombro – Y Giyuu casi siempre tiene esa cara, así que no te preocupes, además, a Giyuu no le gusta que sean tan formales con él.

- ¿En serio? – Le pregunto a Makomo mientras observo al pilar del agua.

Y algo realmente hermoso ocurrió, el pilar del agua me sonrió, se ve tan lindo.

- Bueno – Mi maestro se aclara la garganta – ¿Ya somos todos?

- Todavía faltan las hermanas Kocho – Contesta el pilar del agua.

Cuando estaba por preguntar quiénes eran estas hermanas, una voz se escucha por el pasillo.

- Perdón por la demora.

Dos chicas se acercan a donde estamos, mi maestro me las presenta como Kocho Kanae, pilar de la flor y Kocho Shinobu, su tsuguko. Esto es increíble, hay tres pilares aquí y dos tsuguko, seguramente Makomo debe estar en un nivel de los más altos, me siento fuera de lugar en estos momentos.

- Bien ya estamos todos, empecemos – El pilar del agua empieza a caminar al centro del jardín.

Un par de horas han pasado y por primera vez en mi estadía en la corporación, me siento sin aliento, no digo que mi entrenamiento con mi maestro haya sido fácil, pero en estos momentos, mantenerles el ritmo a tres pilares fue excesivo.

Nos fuimos rotando de compañeros cada cierto tiempo, solamente el pilar del agua entrenaba con dos personas al mismo tiempo, a todos les fue dando consejos sin excepción, incluso mi maestro se sorprendió cuando el pilar del agua lo corrigió con una postura y mi maestro menciono querer enterrarse en un agujero.

Ahora es mi turno con Tomioka, el me pidió llamarlo normalmente, eso me hizo muy feliz. La tsuguko del pilar de la flor y yo, estamos tratando de acertarle un golpe a Tomioka, pero se nos está complicando muchísimo. Kocho es muy rápida, ella es increíble, mientras tanto yo, solo cuento con una gran flexibilidad y una fuerza que asusta a los hombres.

- Has mejorado mucho, Kocho – Tomioka hablo de repente.

Kocho no respondió, de hecho, le dio una mirada algo extraña y siguió atacando a Tomioka, vi una oportunidad de atacarle, gracias a un movimiento de Kocho, Tomioka me está dando la espalda, es ahora o nunca.

Con mi espada le lanzo una estocada tratando de golpear su espalda, justo cuando mi hoja estaba por alcanzarlo, Tomioka da un salto esquivando mi ataque.

- ¿Eh?

¿Cómo lo hizo? ¿Cómo supo que lo atacaría? Mi espada sigue de largo y una sorprendida Kocho tuvo que esquivar mi ataque.

- ¡Oye! – Kocho me grita.

- Lo siento.

- ¡No te distraigas, arriba de ti!

- ¿Qué?

Y cuando levanto mi cabeza para observar, Tomioka está por asestarme un golpe desde el aire. No puedo reaccionar, lo único que hice fue cerrar los ojos esperando el golpe, pero solo un pequeño golpecito en mi cabeza me hace abrir los ojos.

- Buen intento – Tomioka me felicita.

Por alguna razón mis piernas pierden fuerzas y me dejo caer.

- ¿Cómo? ¿Cómo sabias que te atacaría? – Le pregunte a Tomioka.

- Yo te guie a hacerlo – Me responde – Al colocarme en esa posición, viste la oportunidad que te había creado y caíste en mi trampa.

- ¿En serio?

Y Tomioka solo asienta.

- Tú también Kocho – Ahora Tomioka se dirige a ella – Buena reacción al esquivar ese ataque sorpresa.

- Hm – Fue lo único que respondió.

Tomioka me extiende la mano para ayudarme a levantarme, es todo un caballero.

- Puedo hacerte una observación, Kanronji san.

- ¿Eh? ¡Si claro Tomioka san!

De repente Tomioka se coloca atrás de mí y toma mi mano que sostiene mi espada.

- Creo que sería más eficiente que movieras tu espada de esta forma.

Puedo sentir mi cara arder, el rostro de Tomioka está muy cerca del mío y su mano está sujetando la mía, él me está guiando mientras me enseña cómo debería mover mi espada. ¡Kya! Parece que estamos bailando, él tan cerca de mí, si girara a la derecha mi cabeza, sus labios estarían tan cerca de los míos ¿Podría besarlo? ¡Mitsuri! ¿En qué estás pensando?

Giro mi rostro un poco para verlo mejor, esos ojos, esos labios, ese cabello. Se que me está diciendo algo, pero no logro escucharlo bien, estoy embobada mirándolo.

- ¿Qué opinas Kanronji san? – Me pregunta.

- ¡ACEPTO!

En poco tiempo después de decir esa tontería, puedo sentir las miradas de todos en mi dirección ¡Qué vergüenza!

Tomioka se separa y me dedica una ligera sonrisa, Makomo tenía razón, no siempre tiene la cara seria, me gusta más este Tomioka que sonríe. De repente mi instinto me alerta del peligro, cómo si un demonio estuviera cerca, observo para todos lados tratando de buscar de donde proviene este instinto asesino cuando mi mirada se cruza con la de Kocho Shinobu.

Ella está con una cara de pocos amigos, mira muy enojada hacia nuestra dirección y el aura que desprende me pone los pelos de punta.

- ¡Tomioka san! – Kocho llama a Tomioka – Estoy pensando en una nueva postura ¿Me podrías ayudar?

- Si.

Tomioka va en dirección de Kocho quien sigue sin quitarme la mirada de encima.

- Ara ara – De repente la pilar de la flor se acerca a mí, siendo acompañada por mi maestro.

- Bien, tomemos un descanso – Sabito es quien sugiere el descanso – iré por unos bocadillos.

- Deja te ayudo Sabito – Fue Makomo quien se ofreció.

Ambos se fueron y nosotros solo nos sentamos en el pórtico de la entrada

Kocho por fin ha dejado de verme ¡Qué bueno! Me sentía un poco incomoda. Ahora está practicando con Tomioka.

- Ja ja ese fue un gran entrenamiento ¿No lo crees Mitsuri? – Mi maestro me pregunta.

- Si lo fue.

Todos estábamos descansando a excepción de Kocho y Tomioka, ellos siguen practicando esa postura que menciono Kocho, mientras Makomo y Sabito fueron por algo de comer. Ahora que observo mejor Kocho, ya no emite más esa aura desagradable, ahora emite algo más cálido, algo más...

- ¿Acaso es amor?

- ¿Quién sabe? Mi hermana aún no aclara sus sentimientos – La pilar de la flor me dice.

Ahora entiendo esa mirada que me arrojo.

- Pues con la mirada que me hecho, yo diría que ya lo sabe.

- Pero ella lo niega, aunque gracias a ti, pude ver un lado de mi hermanita que jamás había visto – Empieza a reírse.

- Tal vez se sintió amenazada por ti Mitsuri – Mi maestro me hablo.

- Yo, yo no quiero llevarme mal con nadie – Les digo.

- Eres muy tierna Kanronji san – Kanae me toma de la mano – Estoy segura de que nosotras podremos llevarnos bien.

- ¿En serio?

- Si, pero – Kanae me sonríe – Si te llegas a convertir en un rival en el amor para mi hermanita, espero que entiendas que yo la apoyare.

- Me parece lógico.

- ¡Bien! ¿Estas ocupada esta noche? – Me pregunta Kanae.

- No ¿Por qué?

- Bueno, Makomo, Shinobu y yo vamos a ir a cenar al pueblo y tener una noche de chicas ¿Te gustaría ir?

Me empiezo a emocionar, es la primera vez que me invitan a salir a cenar, y tener una noche de puras chicas, me parece genial.

- ¡Claro me encantaría!

Mi maestro tenía razón en venir aquí, no solo pude ser entrenada por una celebridad en la corporación, también encontré a mis primeras amigas, estoy segura de que este día será el mejor de mi vida.

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