Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 51: El demonio del resentimiento (Parte II)

Estábamos atacando a la primera luna creciente con todas nuestras fuerzas, yo Shinazugawa Genya, no dejaba de apoyar a mis compañeros a larga distancia.

Desde que este demonio comenzó a atacar con más fuerza, me he visto en la necesidad de quedarme un poco atrás y junto a Tamayo, apoyábamos a Masachika y a Yae que fueron a la vanguardia.

Además, esa voz que escucho en mi cabeza no deja de alterarme.

"¿Qué estas esperando Kokushibo? ¡Acabalos de una buena vez!"

Esa voz, definitivamente es la voz de Muzan.

Desde que me tragué la espada de la primera luna superior, he sido capaz de escuchar por medio de la telepatía como Muzan le habla y ordena a Kokushibo reunirse con él de inmediato.

Al parecer, algo muy grave ocurrió con Muzan, porque no ha dejado de ordenarle que termine rápido con nosotros y que lo alcance lo más pronto posible.

Sin embargo, desde que me tragué esa espada, mi cuerpo llega a convulsionar y en ocasiones me quedo quieto sin poder moverme, por lo que me dijo Tamayo, mi cuerpo no puede soportar este poder que acabo de obtener.

- Respiración del viento. Primera postura: Torbellino de polvo.

La voz Masachika me trajo de regreso a la realidad y vi como intentó cortar el cuello del demonio como si fuera un torbellino de cortes, pero este sin moverse de su lugar lograba contrarrestar todos los ataques de mi compañero.

El demonio de repente empujo a Masachika haciéndolo retroceder un par de pasos para girarse hacia su derecha y detener la espada de Yae que iba directo hacia su costado.

- Tch.

Yae parecía frustrada ante la imponente defensa de la luna demoniaca, y no es para menos, ya que desde hace un buen rato no hemos podido asestarle un golpe directo.

- Respiración del vie...

Maschika se acercaba por la espalda del demonio, pero este tomó a Yae por la muñeca y giró junto con ella para estrellársela a Masachika. En cuanto ambos chocaron, los dos quedaron muy desprotegidos y más la espalda de Yae.

- Se acabo.

El demonio estaba por asestar un golpe horizontal hacia mis compañeros, por lo que apunté mi rifle a su rostro y le disparé, aunque estaba sudando y veía borroso intenté apuntar adecuadamente. La bala de glicina salió a gran velocidad, pero Kokushibo solo levantó un poco su espada para desviar la trayectoria de mi bala.

- ¡Maldición! ¿Acaso no tiene puntos ciegos? – Me pregunté.

Esto es demasiado frustrante, a pesar de que mis disparos son más rápidos y estos siempre se dirigen hacia el demonio, sin importar a donde se dirija, la primera luna superior con sus reflejos logra desviar mis balas lejos de él.

A diferencia de los disparos de Yae, que él simplemente esquivaba, en mi caso siempre utiliza su espada para desviar la trayectoria de la bala. Este demonio en verdad es fuerte y observador, basto solo ver una vez como mis balas se dirigían automáticamente a él que cambio de estrategia para defenderse de mis disparos.

La luna superior dejó de mirarme fijamente para centrarse en Yae y Masachika, colocó su espada por enfrente de él y estaba esperando a que mis compañeros fueran los que inicien con el ataque.

- ¿Qué están esperando? ¿No piensan atacar?

La luna superior les preguntaba a mis compañeros y estos no le respondieron, solo se pusieron en guardia.

- Bien, entonces yo iniciaré.

El demonio dio un par de pasos hacia adelante.

- Respiración de la luna. Segunda postura: Flores de perlas iluminadas por la luna.

El demonio lanzó varios cortes ondulados alrededor de Masachika y Yae, estos intentaron defenderse de todos los golpes, pero pude ver como recibían varias heridas por todo su cuerpo y estas empezaron a sangrar.

- ¡Maldición!

Nuevamente apunté mi rifle en contra del demonio y le disparé. Y como ha estado pasando todo este tiempo, Kokushibo desvió mi bala de glicinas con su espada. Sin embargo, en esta ocasión tuve que poner una rodilla al suelo y comencé a vomitar.

- Ya deberías darte por vencido.

- ¡Nunca!

Kokushibo solo negaba con la cabeza.

- De todos los que estamos aquí, claramente tu eres el más débil.

- Tch.

- Me doy cuenta de que eres consiente de eso.

El demonio comenzó a caminar hacia mí.

- No posees un talento nato, no puedes utilizar una técnica de respiración, por lo que tu única opción es devorar partes de un demonio como un carroñero.

Todos los ojos del demonio me miraban detenidamente.

- Y a pesar de que devoraste una parte de mí, no puedes controlar el poder que acabas de obtener.

- *Cof* *cof*

- En verdad eres débil.

Kokushibo de repente dio un ligero paso hacia atrás para esquivar la espada de Yae.

- ¡No te atrevas a hablarle así a Genya!

- ¿Por qué? Si no he dicho ninguna mentira.

- ¡Tú no sabes todo el esfuerzo que le ha puesto Genya para llegar hasta aquí! – Yae le apunta con su espada – ¡No tienes ningún derecho a criticarlo!

- Aun así, eso no quita el hecho de que sea...

- ¡¿Acaso tu naciste siendo fuerte?! – Yae lo interrumpió – ¡¿No hubo alguien a quien no pudieras superar?!

Por alguna razón, el demonio entrecerró sus ojos y pude sentir un instinto asesino emanar de su cuerpo, después como que se calmó un poco y el demonio le respondió.

- Deberías cuidar tus palabras mujer, he sido considerado contigo, pero eso puede cambiar.

- Que caballeroso eres.

- Es cuestión de honor y...

De repente, Kokushibo se giró sobre su eje para detener a Masachika.

- Y tus distracciones no te funcionaran.

- Je.

Masachika sonrió un poco de lado al verse descubierto.

- Realmente no tienes puntos ciegos ¿Verdad? – Pregunta Masachika.

- No.

Kokushibo empujó un poco a Masachika y así lograron separarse. En cuanto el demonio dio un paso hacia adelante, este se vio rodeado de flores e ilusiones.

Antes de que pudiera deshacerse de esa técnica, Yae ya había comenzado a correr en su contra y lanzó un golpe horizontal para atacar su cuello. Kokushibo, aun estando de espaldas hacia ella, solo se agacho un poco para evitar ser cortado.

Ahora que la luna superior estaba agachada, intentó dar un golpe en diagonal hacia Yae para cortarla por la mitad.

*Bang*

Yae logró defenderse con su rifle y al estar cerca de Kokushibo este recibió el disparo en toda la cara, o eso pensaba yo, ya que logré ver como el demonio se había protegido con su espada al último momento.

- Respiración del viento. Segunda postura: Garras de viento purificador.

Masachika intentó dar cuatro golpes verticales aprovechando que el demonio estaba agachado. Sin embargo, Kokushibo rodó hacia su derecha esquivando así los golpes y rápidamente se colocó en una postura battsu.

- Respiración de la luna. Octava postura: Cola giratoria del dragón lunar.

El demonio realizó un simple corte frontal, pero fue tan grande que logró golpear a los dos al mismo tiempo, si ambos no se hubieran defendido con sus espadas, en estos momentos estarían partidos a la mitad.

- Arte de sangre demoniaca. Olor de la ilusión sangrienta, sueño visual.

Nuevamente la ilusión de Tamayo nos rodeó a todos y dejamos de vernos los unos a los otros por un momento.

- Joven Genya, tengo algo que podría funcionar.

De repente, Tamayo se había acercado a mí y me dijo eso, yo giré el rostro rápidamente al escuchar esas palabras, pero eso fue un gran error de mi parte.

- Jamás te distraigas en la batalla.

Pude sentir un escalofrío por toda mi espina dorsal.

- Primera postura: Luna oscura - Santuario nocturno

Toda la ilusión de Tamayo desapareció después de que Kokushibo pronunció su técnica.

- ¡Genya kun!

No sé qué fue lo que pasó, pero después de escuchar el grito de horror de parte de Yae, comencé a ver como el mundo se estaba invirtiendo, ahora el suelo estaba arriba y el cielo abajo.

. . .

La sangre del joven Genya había caído en mi rostro mientras veía como la parte superior de su cuerpo giraba por los aires y su parte inferior caía de lado. En cuanto todo el cuerpo del joven Genya había caído completamente al suelo, Kokushibo se acercó para rematarlo.

- No tengo razón para dejar que un falso demonio como tu siga con vida.

La luna superior estuvo a punto de cortar el cuello de Genya si no fuera por la oportuna intervención de Masachika. Este estaba semi arrodillado, con una de sus rodillas tocando el suelo como soporte, mientras sujetaba su espada con ambas manos para frenar el ataque de Kokushibo, una la tenía en la tsuka y la otra en la parte posterior del acero.

- Lo siento, pero no puedo dejar que lo mates.

- Compañerismo ¿Eh? Un acto honorable sin lugar a duda.

El demonio dejó de presionar para dar un paso hacia atrás y echar su cabeza también hacia atrás, todo eso para esquivar el disparo que la joven Yae había ejecutado.

- No solo es compañerismo, este joven es mi familia, es mi hermano menor.

- ¿Hermano menor? – Kokushibo parecía un poco enojado – Ni siquiera comparten sangre, ¿Por qué lo llamas hermano menor?

- No necesitamos compartir sangre para llamarnos hermanos, tal vez tu no lo comprendas, pero ¡Yo defenderé a mis hermanos menores hasta la muerte!

Masachika comenzó a avanzar mientras atacaba al demonio, por alguna extraña razón Kokushibo estaba retrocediendo y solo se limitaba a defenderse. El cazador estaba atacando desde varios ángulos, pero ninguno de sus ataques lograba alcanzar su objetivo.

- ¡No te olvides de mí!

La joven Yae también se acercó hacia ellos y comenzó a apoyar a Masachika. Esto era bueno para mí, ya que poco a poco los tres se fueron alejando del joven Genya, por lo que aproveché la oportunidad para acercármele.

- Joven Genya, ¿Se encuentra bien?

- Por... por favor, ayúdeme a juntarme de nuevo.

Puedo darme cuenta de que el joven Genya no se regeneraba como nosotros, por lo que deduzco que debe unir las partes cortadas para que pueda regenerarse por completo.

- Entendido.

Cómo pude cargue la mitad del cuerpo del joven Genya en mi espalda y caminaba en dirección de donde estaban sus piernas. Al llegar, dejé suavemente al joven cazador y le ayudé a unirse.

- Tamayo san...

- ¿Sí?

- Antes habías dicho que tenías algo que podría ayudarnos. ¿Qué es?

- Es una técnica demoniaca que no hace mucho invente al estudiar la sangre de un demonio.

El joven Genya me miraba atentamente mientras su cuerpo comenzaba a juntarse.

- Y esa técnica ¿Cómo podrá ayudarnos?

- Esta técnica introduce unas diminutas semillas en el cuerpo del oponente, después, crecerá un enorme árbol que inmovilizará al enemigo, estoy segura de que les dará el tiempo suficiente para cortarle la cabeza.

- Entonces ¿Por qué no la ha utilizado?

Una pregunta bastante razonable.

- Por qué tengo que acercarme a Kokushibo, pero al ver tu habilidad, quizás tú puedas implantar las semillas de otra manera.

- ¿Cómo? – Me pregunta.

- Te daré un poco de mi sangre y combina mi técnica con tu rifle.

- Pero ese demonio logra desviar todos mis ataques.

- Con eso es más que suficiente, tus balas al chocar con la espada de Kokushibo se desprenden un poco, al hacer eso, sin duda las semillas caerán a su cuerpo.

El joven Genya se veía un poco asombrado, pero después sonrió para sí mismo y asintió.

- Bien, ¡Hagámoslo!

- Si

Me hice un pequeño corte en el brazo y lo acerqué a la boca del joven Genya para que pudiera beber de mi sangre.

. . .

Tanto Yae como yo atacábamos a la luna superior sin descanso, entre los dos intentábamos crear una abertura en la defensa del demonio, pero este no parece inmutarse ante nuestros ataques.

Por alguna razón que desconozco, el demonio se dedicó a defenderse después de decirle que protegería a Genya por considerarlo mi hermano menor, debemos aprovechar estos momentos ya que la luna superior parece tener un conflicto interno.

- Respiración del viento. Cuarta postura: Tormenta de Polvo Ascendente.

Realizaba varios cortes por todas direcciones, pero estos eran repelidos por la espada del demonio. Alcancé a ver como Yae apuntaba con su rifle a la cabeza del demonio, sin embargo, la luna superior solo inclinó un poco su cabeza para evitar que la bala le diera.

- Tch.

Yae comenzó a acercarse.

- Respiración de la roca. Quinta postura: Rueda de piedra firme.

Yae había saltado por arriba de la cabeza del demonio y comenzó a lanzar varios disparos por todos lados, mientras que con su espada lanzaba varios tajos que Kokushibo bloqueaba.

En cuanto Yae aterrizó, se dio media vuelta para continuar con su ataque, pero el demonio se había anticipado a ella y ahora él ya estaba muy cerca de Yae.

- Respiración de la luna. Décima postura: Guillotina penetrante - Hiedra lunar.

Kokushibo lanzó tres ataques verticales que parecían grandes garras descendiendo hacia Yae, ella alcanzó a hacer dos disparos y con su espada detuvo el tercer golpe, pero la fuerza era tal que termino por retroceder varios metros.

- ¡AH!

Yae gritó al chocar con una barda y se quedó semi inconsciente recargada sobre esta. Kokushibo envainó su espada por lo que me imagino que la atacara a distancia con esas posturas tan peligrosas que tiene.

- ¡No te lo permitiré!

Comencé a correr hacia el demonio, no puedo permitir que le haga daño a Yae, sin embargo, alcancé a ver como el demonio sonreía ligeramente y este giraba levemente para ahora estar de frente.

- Primera postura: Luna oscura - Santuario nocturno.

El ataque de Kokushibo me tomó por sorpresa, intenté detenerme de golpe para evitar ser cortado, pero lamentablemente no pude hacerlo, ya que vi como mi mano izquierda estaba volando por los aires.

- ¡Ahhh!

Llevé mi mano cortada hacia mi pecho y comencé a retroceder, pero el demonio no me dio oportunidad y comenzó a atacarme sin piedad.

- Cuarta postura: Luna nueva en el cielo oscuro.

Apenas pude ver como varios cortes iban hacia mí y no se me ocurrió otra forma de defenderme que colocando mi espada por enfrente y tratar de amortiguar cada golpe con ella.

Esto no terminó bien para mí, ya que mi cuerpo tenía nuevos cortes por donde salía bastante sangre.

- A este paso morirás desangrado – Me dice el demonio.

- *Ha ha*

- Hiciste un buen esfuerzo, te felicito.

El demonio se relajó un poco en lo que yo ponía una rodilla al suelo.

- Si fueras un demonio, esa mano que acabas de perder se regeneraría al instante.

Kokushibo se hace un ligero corte con su espada y me muestra como su sangre cae de su muñeca, después de eso el demonio envainó su espada.

- ¿Por qué no te conviertes en demonio y le juras lealtad a esa persona? Si lo haces conseguirás un gran poder y nadie podrá detenerte.

Yo no podía creer el ofrecimiento que me acaba de hacer, por supuesto que jamás lo aceptaría. Por lo que corté un poco de la manga de mi traje de cazador y comencé a vendarme la mano cortada.

El demonio seguía observándome mientras yo utilizaba mis dientes para amarrar con fuerza la tela y tratar de evitar desangrarme.

Kokushibo solo suspiró y bajo su mano.

- Si que eres necio.

Con dificultad me puse de pie y volví a colocar mi espada frente a mí, apuntando al demonio.

- Si eso es lo que quieres, no me queda más opción que cumplir con tu decisión.

Kokushibo volvió a desenvainar su espada.

- Morirás justo aquí y ahora.

Antes de que pudiera dar si quiera un paso al frente, Kokushibo giraba sobre su eje y repelía una bala de glicina de Yae.

- Te hubieras quedado en el suelo – Le dice Kokushibo a Yae.

Yae también se ve en malas condiciones, por lo menos está mejor que yo.

- Lo siento, pero soy una mujer de las montañas.

- ¿Y eso qué?

- Que no soy de las mujeres frágiles que obedecen a los hombres sin dudar, yo soy independiente y hago lo que creo es correcto.

No podía ver el rostro de Kokushibo, solo vi como ladeó un poco su cabeza.

- Entiendo, a ti también te iba a ofrecer convertirte en demonio, pero me doy cuenta de que tampoco aceptaras.

- Lamento decepcionarte – Le responde Yae con sarcasmo.

- No, así está mejor.

De repente la atmosfera cambió radicalmente y sentía como si mi corazón se fuera a salir de mi pecho. Me di cuenta de que no era el único, Yae también se veía afectada por esto.

- Fueron honorables oponentes, jamás olvidaré sus rostros.

El demonio se colocó en posición de pelea y como si nos hubiéramos puesto de acuerdo Yae y yo, los dos nos lanzamos al ataque.

Los dos nos acercamos a la luna superior, como él estaba justo en medio de nosotros, parecía un efectivo ataque de pinzas. Sin embargo, en cuanto nos acercamos a él, Kokushibo salto por los aires.

- Sexta postura: Luna solitaria en la noche perpetua incesante.

Un ataque devastador vino desde el cielo y si no hubiera sido por que ambos literalmente nos arrojamos hacia nuestros costados, hubiéramos terminado muertos.

Al levantarme vi como un gran corte estaba en la tierra, con solo un movimiento de su espada logró crear un gran agujero justo por en medio de nosotros.

El demonio aterrizó y de inmediato comenzó a correr hacia nosotros, al parecer yo era su objetivo porque iba directo hacia mí. Por lo que me preparé para recibirlo.

- Respiración del viento. Sexta postura: Tormenta de humo negro.

Intenté atacar su cabeza con un fuerte golpe vertical, pero el demonio se cubrió con su espada sin mucho esfuerzo. Al tener solo una mano significa que la fuerza de mis golpes se redujo a la mitad.

- Respiración de la roca. Sexta postura: Aplastamiento de placas.

Yae también atacó al demonio con un corte vertical, el demonio solo hizo un pequeño giro de muñeca para deshacerse de mi espada y detener el corte de Yae. Al ver que su ataque no funcionó, Yae intentó levantar su rifle para apuntarle en la cara, pero Kokushibo con una patada mando lejos el rifle de Yae.

- Ya me harté de ese rifle.

Yae se sorprendió un poco al ver su rifle en el suelo, pero no tenía suficiente tiempo para seguir así porque apenas se agachó para evitar que la espada de Kokushibo le cortase la cabeza.

Mientras eso pasaba, yo volví a atacar, aunque ya no tenga toda mi fuerza, al menos debo servirle de apoyo a Yae para que ella pueda decapitarlo.

- ¡Yae, yo seré tu apoyo!

- ¡Entendido!

Los dos comenzamos una serie de ataques consecutivos en contra de Kokushibo. Al no tener toda mi fuerza, me dediqué a la defensa mientras que Yae se encargaba de la ofensiva.

Ambos peleábamos con nuestras máximas fuerzas, debo reconocer que ninguno de los dos somos los oponentes indicados para este demonio, de no haber estado Yae, Tamayo y Genya, ya habría muerto desde hace tiempo.

- ¡Hyaaa!

Yae gritaba mientras lanzaba un ataque horizontal, claramente se puede ver que está dando su mejor esfuerzo en esta pelea. Es una gran mujer, es valiente, tenaz y tiene un fuerte carácter.

Sanemi, si logramos sobrevivir, deberías pedirle una cita.

- Respiración del viento. Primera postura: Torbellino de polvo.

Ataqué al demonio con las pocas fuerzas que me quedaban, pero este simplemente bloqueaba cada uno de mis golpes.

Mientras se defendía de mi ataque, Yae se deslizó por la derecha del demonio e intentó hacer un ataque bajo.

- Respiración de la *Gah*

Miré con temor como Yae fue golpeada en la boca de su estómago justo por la kashira de la espada de Kokushibo.

- Buen intento.

Ahora Kokushibo volvía a utilizar su kashira para golpear la barbilla de Yae lo que la obligó a levantar el rostro mientras daba un paso atrás. Sin embargo, lo que más me horrorizó fue ver como Kokushibo ahora tenía las dos manos en su espada y la estaba sujetado por encima de su cabeza.

- ¡Cuidado!

Le grité a Yae para que pudiera defenderse y como ella pudo, colocó su espada por la altura de su cabeza y en forma horizontal.

- Se acabo para ti.

Kokushibo se preparaba para atacar mientras que yo desesperadamente trataba de detenerlo. Lo único que se me ocurrió hacer fue arrojar mi espada para hacer que se detuviera.

Como si Kokushibo me hubiese visto, el solo dio un paso atrás, pero seguía con su espada levantada.

- Respiración de la luna. Onceava postura: Colmillo de la luna que perfora los cielos.

Y como si la espada del demonio se convirtiera en un poderoso colmillo, este no solo logró partir mi espada por la mitad, también la espada de Yae fue dividida en dos y pude ver como la sangre de Yae caía con fuerza hacia el suelo.

El golpe de Kokushibo le había provocado a Yae un corte en su rostro, podía ver que el corte pasaba por su frente y por en medio de sus ojos para terminar casi a la altura de su nariz.

Sin embargo, la fuerza del golpe de Kokushibo no termino ahí, como si su espada hubiese creado una ventisca, literalmente el viento provocado por su espada mandó a volar a Yae lejos de nosotros.

- ¡YAE SAN!

Miraba con impotencia como Yae caía de fea forma al suelo, muy cerca de donde estaba su rifle.

- *Jum*

El demonio hizo un ligero ruido como riendo para el mismo.

- Bien esquivado, mujer.

- ¿Qué?

- ¿No te diste cuenta? Cuando vio que tu espada se partía en dos, ella dio un ligero paso hacia atrás.

No, no me di cuenta.

- Fueron unos pocos centímetros, pero esos pocos centímetros fueron suficientes para evitar que su cabeza se abriera en dos.

Ambos veíamos como Yae seguía recostada en el suelo, mientras la sangre salía de su frente y cuerpo. En eso, el demonio se giró para ahora verme directamente a los ojos.

- También fue gracias a ti, si no hubieses arrojado tu espada ella estaría muerta en estos instantes, pero...

Yo instintivamente di un paso para atrás.

- Pero eso te ha dejado indefenso.

Kokushibo comenzó a acercarse a mí, por lo que decidí ponerme en guardia con una postura de aikido.

- Ahora solo te queda tu puño, veamos cuanto aguantas.

Kokushibo lanzó un simple golpe horizontal por lo que me dio oportunidad de agacharme, al estar abajo intenté tomarlo de su kimono, pero como si el demonio ya se esperaba este movimiento que hice, rápidamente hizo un ataque descendente en diagonal.

Ese último ataque logró herirme la pierna izquierda lo que me obligó a arrodillarme.

- Luchaste muy bien. Ahora muere.

Al levantar la mirada, solo vi como el demonio sujetaba con su mano derecha su espada por arriba de su cabeza y en cuestión de un segundo me atacó.

Creo que este es el fin. La verdad, no me arrepiento del resultado, hice mi mejor esfuerzo y eso me basta, estoy seguro de que los demás conseguirán derrotarlo.

Sanemi, sé que lo lograras.

Había agachado la cabeza resignándome a morir, pero fue en ese momento que escuché la voz de alguien que conozco muy bien.

- Respiración del viento. Cuarta postura: Tormenta de polvo ascendente.

Esa voz claramente era la de Sanemi, por lo que levanté el rostro para confirmar que él estaba parado por enfrente de mi dándome la espalda.

- ¿Otro usuario de la respiración del viento?

El demonio parecía preguntarse para sí mismo.

- Es correcto – Sanemi le responde – Y no cualquier usuario, soy el pilar del viento.

- Entiendo. ¿Entonces él es tu sucesor?

- Así es, y te obligaré a pagar por todo lo que le hiciste.

- No importa cuantos...

- Yo soy el viento que te arrancará la cabeza de los hombros, bastardo.

Sanemi había interrumpido a Kokushibo y este parecía un poco molesto.

- A diferencia de los otros tres, veo que eres el más maleducado.

- Je je, ¿Te molesta, demonio?

- Tú no eres un guerrero, eres todo lo que el bushido prohíbe.

- ¿Y eso a mí qué? ¿Crees que me importa ser educado frente a los demonios?

- No tienes remedio, a diferencia de tus compañeros, a ti no te recordaré.

De repente, Sanemi se había lanzado al frente y cruzó espada con Kokushibo, ambos empezaron a forcejear y a empujarse para tener el control del encuentro.

- ¡Uagh! Ese sí que es una espada asquerosa, ¿No lo crees?

- ...

- ¿Qué pasa? ¡¿Por qué no dices nada, eh desgraciado?!

Kokushibo comenzó a ejercer más presión y logró empujar a Sanemi hacia atrás.

- Respiración de la luna. Quinta postura: Vórtice maldito de luna fantasmal.

De repente, Kokushibo lanzó varios cortes por todas partes sin dar mucho margen para esquivarlo. Sanemi apenas pudo saltar y de milagro esquivo ese ataque, sin embargo, el viento provocado por la espada del demonio, me mando a volar unos cuantos metros.

- ¡Masachika!

Con esfuerzo medio me incorporé y le avisé a Sanemi.

- ¡Estoy bien, no te distraigas!

Sanemi solo asintió antes de volver a colocar su mirada en el demonio.

- Si que tienes reflejos, reconozco eso.

- No necesito tu reconocimiento infeliz.

Sanemi comenzó a mirar a todas partes.

- Ja ja ja, me doy cuenta de que ese ataque corta todo a su alrededor, aún sin blandir la espada.

- Así es, ya deberías ver la realidad.

- ¿Y esa cuál es?

- Que jamás podrás salir victorioso de aquí.

- Je... ¡Ja ja ja!

- ¿Qué te ocasiona tanta gracias?

Sanemi dejo de reír para responderle al demonio.

- ¿Sabes cuantas veces he escuchado eso, maldito? Infinidades de veces y heme aquí.

Kokushibo no le respondió, simplemente entrecerró sus ojos.

- ¡Ya me cansé de hablar! ¡Voy a partirte la jodida cara en dos!

Sanemi comenzó a correr para poder cumplir con su palabra, solo alcancé a ver como Kokushibo suspiraba.

- Que lamentable.

El demonio se colocó en posición de pelea e iba a contraatacar.

- Respiración de la luna. Octava pos...

Sin embargo, Kokushibo se sorprendió un poco al ver como Sanemi se había deslizado por el suelo para pasar por debajo de entre sus piernas. Mi amigo estuvo a punto de cortar el pie derecho del demonio, pero este había saltado para evitarlo.

- Respiración del viento. Primera postura: Torbellino de polvo.

Sanemi no había perdido el tiempo y en cuanto el demonio colocó sus pies en el suelo, atacó a Kokushibo rodeándolo con un torbellino de cortes.

El demonio repelía todos los ataques de Sanemi y lo obligó a retroceder. Tengo que admitir que verlos pelear es muy difícil, ya que su velocidad es increíble. Eso solo quiere decir que Kokushibo estuvo jugando con nosotros.

. . .

- Respiración del viento. Tercera postura: Árbol balanceándose en el aire de tormenta.

No dejan de ponérseme los pelos de punta. Este sujeto en verdad es muy fuerte, yo Shinazugawa Sanemi, no puedo dejar de moverme.

- Tengo que admitirlo – Este bastardo me empezó a decir – Eres bueno, tanto físicamente como en tus técnicas. Estas en la plenitud de tu vida.

Las técnicas de este sujeto, con un solo movimiento de su espada y aparecen pequeñas hojas sin un patrón en específico, todo alrededor de esa horrible espada. Lo peor de todo es que su tamaño cambia sin previo aviso.

Ahora entiendo cómo es que ni Masachika, ni Yae y ni Genya pudieron hacerle mella a este tipo. Las formas del ataque que se suponía ya habían esquivado cambia de forma irregular.

La única forma de esquivarlo es afilando todos los sentidos del cuerpo y eso se logra solo con una larga experiencia en combate. Lo peor de todo es que este monstruo utiliza técnicas de respiración.

Un demonio de por si es capaz de regenerase y posee una capacidad física sobrenatural, por lo que al utilizar una técnica de respiración aumenta mucho más su poder de ataque.

- ¡Je je je!

- ¿De qué te ríes cazador?

- ¡De que me estoy divirtiendo mucho! ¡Eres un demonio que vale la pena matar!

Este demonio me vio de fea forma por lo que me preparé para atacarlo con una técnica de la respiración del viento.

- Respiración del viento. Segunda postura: Garras de viento purificador.

Al ejecutar mi ataque realicé cuatro cortes verticales asemejándose a una garra. Estas garras de viento chocaron con la espada del demonio y este de un movimiento desvió mis cuatro ataques.

Sin embargo, al detener mi ataqué lo obligué a retroceder un poco, justo donde había algo que podía usar para sorprenderlo.

Por lo que no me quede quieto viéndolo tontamente, una vez que el demonio bloqueó mi ataque y dio esos pasos hacia atrás, yo me lancé en su contra, di un pequeño salto hacia adelante y lo ataque con mi espada que la tenía sujetada por arriba de mi cabeza.

Todo iba según lo que había planeado, el demonio me estaba observando detalladamente sin darse cuenta lo que estaba tirado por sus pies. En cuanto nuestras espadas chocaron, con los dedos de mi pie derecho sujeté la espada rota de Masachika y la utilicé para atacar su garganta.

Sin embargo, al parecer el demonio se dio cuenta de lo que planeaba al último momento y echó para atrás su cabeza esquivando la espada rota de mi amigo. Dado que me había impulsado para poder perforar su garganta, terminé dando un giro hacia atrás en el aire.

Apenas me dio tiempo de reaccionar cuando este demonio ya se me había acercado y pude bloquear uno de sus golpes, pero este no se quedó solo con ese corte, comenzó a atacarme desde varios ángulos por lo que me concentraba para defenderme lo mejor que podía.

Comenzamos a intercambiar golpes de espada, pero me molestaba cada vez que veía la cara de poker de este demonio, de cierta manera se parece un poco a la de Tomioka, pero multiplicado por mil.

- Jum, todavía puedes seguir el ritmo de mis técnicas, es una sensación familiar... que me emociona.

- ¿Ha?

No, este sujeto es peor que Tomioka, al menos Tomioka suele sonreír y ser agradable de vez en cuando, ¡Pero este desgraciado! Como deseo partirle la cara. El problema es que no puedo parpadear, un solo error en la trayectoria de mi espada y seria mi muerte.

Y no puedo morir, no aún. Aún tengo cosas que arreglar, sobre todo con Genya. Ese bastardo de Tomioka tenía razón en algo, ¡Tengo que proteger a mi hermano!

- En el pasado, en la era sengoku...

Este demonio en verdad me saca de mis casillas.

- También me dedicaba a pulir mi esgrima... Con el pilar del viento.

- ¿Qué?

- Respiración de la luna. Sexta postura: Luna solitaria en la noche perpetua incesante.

Una especie de vórtice con lunas me atacó desde varios lados que no pude protegerme de todos los golpes, por lo que terminé con varios cortes por todo mi cuerpo.

Podía ver como sangraba por todos lados, no podía creer como ese demonio me había atacado, jamás pude ver sus movimientos y no supe exactamente qué había pasado. El sonido de una espada siendo enfundada hizo que levantara un poco mi vista.

- Jum... Pudiste resistir bastante, pero si te mueves las entrañas se esparcirán por el piso.

Ese malnacido me estaba hablando.

- Por lo que es mejor que... ¿Eh?

Je, no sé porque, pero en lugar de preocuparme por mis heridas estoy agradecido de tenerlas.

- Ja, ja ja. ¿Qué sucede demonio? ¿Algo llamó tu atención?

Ese demonio parecía retener sus instintos.

- No hay mejor sebo para los demonios que una sangre rara ¿No lo crees?

Mientras que yo me comenzaba a emocionar.

- ¡Vamos ven, aquí hay de la sangre que tanto les gusta!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro