15 meses después...

Isabela.

—Tyleeeer—chille adormilada al escuchar los gritos de Connor.
Hace ya un año que nació mi pequeño y parece que cada mañana, a las 6 en punto, se las apaña para gatear al cuarto de su hermana y despertarla con un grito.
Estoy tan agotada y con dolor en los huesos.

Al final decidí regresar a las pasarelas, Tyler, sigue un poco enojado ya que también modelo ropa interior, nunca estuvo de acuerdo pero le aclaré mil veces que era yo la que decidía en mi vida.
Fui remplazada en la oficina de Ty, por una mujer unos años más grande que yo, es bastante eficiente pero la detesto porque no para de insinuársele a Ty, que notoriamente lo quiere en su cama él dice jamas habrá otra en su vida y yo le creo. Siempre lo haré.

—Ya voy, ya voy—dijo levantándose desganado.
Lo vi desaparecer y fue automático, él pequeño se calló, cada vez que ve a Ty o a mi, pareciera que lo subieran en una nube. Sus ojos cafés nos miran y luego su pequeños labios se curvan, él es tan Grande y tan tierno pero a la vez tan llorón.

Unos meses antes del nacimiento de Connor, nació la pequeña Alina, la pequeña ojos verdes que enamoro a su padre cuando salió del vientre de Sofia, todos estábamos muy felices pues Sofia también lo estaba, ella siempre decía que los niños no era lo suyo y cuando quedo embarazada ella tenía mucho miedo pero dejo de lado eso y fue valiente, se atrevió a lo que pocos se atreven. Le hicieron una enorme fiesta al igual que cuando nació Ángel, Angelica y Roman, muchos asistieron, incluso Irina, quien actualmente esta saliendo con un chico.

Cuando él llanto de Connor, llegó a nosotros por primera vez, nos llenó de felicidad y dolores de cabeza, nosotros lo recibimos un poco más tranquilos, sin fiestas o reuniones, también decidimos mantenerlo alejado de la prensa ya que tres meses después del nacimiento de Connor, se enteraron que había otro Brown, de mi regreso a las pasarelas y del proyecto de Ty, en Rusia, empezaron incluso, ha acampar afuera de casa. Ty se enojó tanto que incluso tuve que agarrarlo para que no saliera a golpear a un fotógrafo él cual me había fotografiado en ropa interior. Eso fue mi culpa ya que deje la ventana abierta. Ty hizo que borraran la existencia de esas fotos de alguna manera.
Pero no rodo es malo, Katy recibió a su hermano más feliz que nunca, Cloudy tardo en acostumbrarse pero al final lo hizo de la mejor manera y aquí estamos casi muertos pero bastante felices, y yo con una pequeña sorpresa para todos.

Curvé mis labios con los ojos cerrados y lleve mi mano a mi vientre de tan solo imaginar su reacción.

(...)

3 años después.

—¡Connor Brown! ¡Ven aquí!—dije mientras corría detrás de él.
Mientras estaba cambiando su pañal, decidió salir corriendo totalmente desnudo mientras se carcajeaba de la situación.
Cuando Connor, iba a cruzar una de las puerta, casi choca con Katy, haciendo que ella suelte un grito y se tape los ojos al ver a las fachas de Connor, él la esquivó profesionalmente y siguió corriendo, «¿Quien diría que solo tiene 4 años?».
Los brazos de su padre lo tomaron en el aire antes de que este cruzara la puerta haciendo que él pequeño ría.

—Hola, amor—dijo mi esposo, acercándose a mi para besar mi frente.

—Hola amor. ¿Puedes ponerle el pañal a Connor? Aún me falta cambiar a Genevieve—le supliqué con un puchero sin separarme de su pecho. Ty, sonrió y me besó delicadamente en los labios.

Genevieve, nuestra hija menor la cual nació un tiempo después de Connor, recuerdo que Ty casi se desmaya, se puso tan pálido y por un momento creí que no quería tener mas bebés. Él me aclaro mas de mil veces que conmigo tendría todo los bebés del mundo solo que nunca imagino tener 3 hijo.
Katy le pareció hermoso otro hermanito pero no una hermanita, al principio estaba un poco celosa pero después se apegó tanto a su hermana que era demasiado difícil separarlas.

Ty y yo nos casamos tal y como se había planeado, en la playa, todos juntos.
Después de un tiempo, en específico, 3 meses, James y Crystal planearon casarse, después de 6 meses de espera se casaron en España en nombre de su madre y con mucho dolor, en nombre de su padre. De ese lindo matrimonio surgió Hansel, el pequeño castaño que se robó el amor de todos cuando no dejábamos de escuchar su risa.

Mili, Ellie, Sofí, Crystal y Lais traen a sus pequeños todos los días al ver el apego que se tienen todos, y si, Lais tuvo tubo un bebé, una hermosa niña pelirroja a la cual llamó Scarlett, él padre de la pequeña dejo a Lais en cuanto supo de la bebé, Lais no lloró ni tampoco se derrumbó pero si le dió unas buenas cachetadas, unos muy hirientes insultos y lo demandó, le dijo que se arrepentirá de eso y que a su hija no la iba ver en su vida. Un tiempo después empezó a salir con un chico del cual se enamoró profundamente y quien se convirtió en él padre legal de Scarlett.

Roman, Hansel y Connor se convirtieron en mejores y en cómplices de desastres a medida que crecían.
Genevieve, Alina y Angelica son las tres mosqueteras que cada día vienen a colectar flores para hacer coronas con ellas y ponerlas en cada cuarto de la casa.
Y Katy nunca dejó su amistad con Estrella, Amber, Paris y con sus primas Esmeralda y Wendy.

—Claro, amor—respondió Ty, mientras su mano viajaba descaradamente hacia mi trasero haciendo que lo mire con los ojos entrecerrados.

—Deja de ser tan sin vergüenza. Las niñas nos van a ver—le susurré mientras intentaba apartarme de el.

—Me debes la de anoche—dijo al fin soltándome mientras me apuntaba con un dedo.
Torcí los ojos y caminé a la habitación de Genevieve. Al llegar, encontré la puerta medio abierta y su dulce vocecita repitiendo las lineas de la princesa Giselle, es su favorita.

—Pequeña—dije dulcemente mientras entraba a la habitación. Genevieve volteó y sus ojos cafés me miraron con ilusión. Ella decía siempre que me parezco a su princesa favorita, y que le encantaría ser como yo cuando creciera, eso me hizo sonreír miles de veces.

—¡Mami!—dijo extendiendo los brazos para que la abrazara y eso hice. Acaricie la tela de su vestido rosa y olí su cabello, olía extrañamente delicioso, era un aroma bastante hipnotizante.

—Hermosa, debemos cambiarte ya, mama va ir a usar ropa bonita—dije mientras sacaba un hermoso vestido de rosas rojas, unos zapatos negros de charol y un lazo rostro rojo para su cabello.

—¿Como ese día que, que papa se enojo?—hablo mientras empezaba a saltar en la cama.

—Si—solté un a risita acercándome a ella para empezar a vestirla. Un rato después, Katy apareció en el marco de la puerta con un vestido blanco largo, manga larga y de encaje, su cabello estaba perfectamente peinado y sus zapatos blancos brillaban debido a la pulcritud. Me sorprende como a madurado Katy, es bastante inteligente y una niña muy pasiva, nunca perdió ese encanto de niña adorable que la acompaña a todas partes.

—Mamá, Wendy, Paris, Estrella, Amber, Esmeralda y yo tenemos un proyecto de Arte y necesitamos ayuda, papá dice que eres muy buena pintando—asentí y terminé de colocar el lazo en la cabeza de Genevieve.

—¿Mañana o el jueves?—pregunte bajando a mi pequeña de la cama.

—Jueves, mañana Amber esta en Grecia con su padre, y Paris pasará tiempo con su hermano mayor—dijo mientras se retiraba.
Mordí mi mejilla interior y tome a Genevieve de la mano para bajar las escaleras.

—Pero que preciosas—nos halagó Ty con Connor a un lado. Mi esposo me silbó haciendo que Connor intente hacer lo mismo. Solté una risita y la mano de Genevieve para caminar hacia Connor, besé su mejilla y le sonreí, dl hizo lo mismo solo que fue uno un pequeño y dulce beso en mi nariz.

—Vayan al auto con Rosita, ya iremos para allá—dijo Ty.
Katy escoltó a sus hermanos a el auto con ayuda de Rosita, dejándonos a Ty y a mi solos. El no perdió el tiempo y se lanzó contra mis labios mientras sus manos acariciaban cada parte de mi cuerpo.

—T-Ty, llegaré tarde—dije intentando enfocarme pero los besos en mi cuello no me dejaban.

—Mejor—dijo cayendo conmigo al mueble, yo sentada a horcajadas en sus piernas mientras él acariciaba de mi espalda a mis caderas y trasero, mi ceñido y corto vestido se enrolló un poco dejando así a la vista a mis interiores.

—Ty, d-deténte—automáticamente se detuvo mirándome con el ceño fruncido—. No me mires así—dije soltando una risita agitada. Me levante de sus piernas con su chillidos detrás mío.

—Te gusta provocarme con esa ropa. Eres mala Isabela—se quejó mirando como baja mi vestido.

—Y a ti te encanta que llegue tarde a mis pasarelas—le lancé un beso y empecé caminar hacia la salida pero antes de poder unas manos en mi cintura me lo impidieron.

—Te amó y quiero que sepas que si quiero eso—se burló besando mi cuello—podrían pasar treinta mil años que nunca me acostumbraré a que otros te vean como solo yo debería—me dió una nalgada haciendo que yo me sobresalte con sus risas de fondo mientras él caminaba al auto.

—¡Idiota!—chillé mientras lo veía caminar al auto muy feliz. Gruñi y apresuré mí pasó para darle una nalgada a él sin dejarlo que reaccione ya que me metí al auto rápidamente soltando risitas. Me sentía como una niña haciendo travesuras.

Así es nuestra vida, feliz y llena de amor interminable, con tres preciosos niños y amigos que siempre están allí para apoyarnos. Nuestros viajes de tradición nunca acabaron, seguimos descubriendo el mundo cada verano con nuestros hijos.
Cada día al levantarme al lado de Ty, lo miro y le repito una y otra vez cuanto lo amo, hacemos el amor he iniciamos el día tan felices como nunca, han habido peleas pero esas veces hemos sabido resolverlas maduramente, sin herirnos.
Cuando nos casamos, hicimos una promesa «sea cual sea el problema, lo resolvemos sin echarle mierda a nuestra vida» y así a sido, todo lo resolvemos y siempre acaba bien.

Somos felices a pesar de esos 6 años separados. A pesar que en esos 6 años sin el otro, nos desmoronamos una y otra y otra vez, la vida nos iluminó distintos caminos a ambos, pero al  final de esos dos camino nos reencontraríamos inevitablemente, siempre.

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Un minuto de silencio para esto. ¡Hemos acabado! Dios ya casi se cumple un año de esto y no se siente así, gracias por todo, por apoyar mi novela y por favor no me hagan sentir mal, se que no querían que esto acabase pero todo en la vida tiene un final.

¡Preguntas del día!

1. ¿Te gustó esta novela?

2. ¿Cambiarías algo? ¿Que sería?

3. ¿Te gusto el epílogo?

Si disfrutaste esta novela tanto como yo, no te olvides dejar tu voto, tus respuestas y tus opiniones ¡¡¡los adoro y gracias!!!

Otra vez, LOS ADORO.