Narrador

—¿Crees que es una buena idea, Saori? —preguntó Hyoga—. Digo, si Shun es reservado es por algo.

—Ahora más que nunca tenemos que saber como Shun se siente —Se cruza de brazos—. Así para no volver a repetir los mismos errores.

—Técnicamente sería violar su privacidad, sin ofender —dijo Shiryu desviando la mirada.

—Buenoooooo, admitamos. Siempre quisimos saber que es lo que piensa Shun detrás de esa sonrisa, ¡No le molesta nada! Es intrigante.

Seiya se movió de un lado a otro, se acercó donde la perilla de la puerta, la abrió y entró.

Si cuarto era muy normal, demasiado normal. Ikki no se esperó y revisó uno de sus cajones. Seiya su armario, y utilizó una de sus tirantes como nunchakus.

—¡Hey Shiryu, piensa rápido! —Como si fuera un látigo, utilizó los tirantes para golpearlo.

—¡Seiya! —exclamó enojado, agarró los tirantes y los lanzó para arriba.

Estos chocaron con la lampara colgante, y de esto cayó un libro un poco viejo.

—¿Qué es esto? —Hyoga agarró el libro—. ¡Es su diario! —Le dio una pequeña ojeada.

Ikki le arrebató el libro y empezó a leer la primera hoja.

"12/06/20xx"

"Hace ya un tiempo he regresado de la isla de Andrómeda, me he enfrentado contra muchos enemigos en nombre de Athena.

Pero creo que es bastante obvio que no quiero pelear. Y lo he intentado hacerlo, pero no pelear en una pelea… es estúpido, siendo sincero.

Aveces me pregunto, ¿Por qué hay tantas guerras? ¿Acaso no se dan cuenta cuando daño hacen?. Estoy seguro que casi nadie se ha dado cuenta que solo provoca más guerras sin sentidos.

Como con Poseidón, por lo que se Don Pose se enojó porque Saori lo rechazó… creo. Luego la terminó secuestrando y toooooodaaaaa la batalla para rescatarla.

Y luego Hades, eso si fue escalofriante. Primero revive a los caballeros de Oros muertos, que han sido matados por… mí y mis hermanos. Luego Athena va a derrotar a Hades, nosotros vamos a ayudarla y acabamos con daños psicólogicos graves.

¡No se pasen!, ¿Es que acaso ningún pariente de Athena tiene otro plan, en vez de secuestrala?

Despues de tantas guerras mi respuesta es no. No tiene otro plan.

Somos sus caballeros, es nuestro deber proteger a Athena, en nombre de la justicia. De eso no me quejo, no tenía otra opción de convertirme en caballero cuando era niño, incluso Ikki me lo ha dicho.

Me da un poco de gracias. Una vez en la Isla, June me había dicho algo que tenia mucho razón.

"—Shun ¿Qué eres tu? Eres un guerrero que no desea pelear, tienes un inmenso cosmos que nunca quieres usar, eres un alma pura condenada a matar, prácticamente eres una paradoja viviente"

Tenía dos opciones:La primera, decir un comentario un tanto sarcástico, porque sí. Me molestó un poco. Y la segunda es decir lo siento.

Pero como mi cerebro no reaccionó rapido. Dije "¿Hakuna Matata?" Y se mató de la risa.

Y todos lo de alrededor se también se rieron.

—Jajaja. —Se rió un poco Seiya.

—¡Shhhhh! —Le reprocharon.

Fue un mometo vergonzosamente dulce. Aveces extraño esos momentos dulces, donde pasas tiempo con tus seres amigos. Sin tener que preocuparte por las guerras.

Pero bueno, nos acaban de declarar la guerra. En otras palabras han secuestrado a Saori. Al parecer Ares esa siguiendo los pasos de sus familiares, ¿Y quién sabe?, tal vez apoderarse de la tierra.

En unos momentos vamos a rescatar a Saori. Tengo un mal presentimiento.

De todas formas, adiós diario. —Oh por Athena, es sonó tan cursi—

—Ahí acaba, luego empieza otro —dice Ikki—. La siguiente fecha esta más atrasadas.

—Chicos, creo que las guerras le esta afectando —Saori bajó la mirada—. Es mi culpa… —Empezó a sollozar

—Saori… —Seiya la abrazó—. Tu no tienes la culpa de nada, son… ellos.

—¡Son unos malditos! —Ikki golpeó la pared—. ¿Uh? —Algo había caído en su cabeza.

—Tienes una foto —dijo Hyoga, agarró la foto y abrió los ojos como platos—. ¿¡Queeeeeeeee!?

—¿¡Qué pasa Hyoga!?

—¡Son fotos en medió de todas las batallas que teníamos!

Todos empezaron a ver las fotos, una el la batalla contra Argol de Perseo, una cara sorprendida y luego poco a poco se convertía en piedra… giñando el ojo y con el símbolo de amor y paz.

Una esquivando el ataque de Shaka, con una cara de "¿Qué acabo de hacer?". Otra con Afrodita, este había apoyado su mentón encima de la cabeza de Shun sonriendo, con los ojos completamente cerrados, para el colmo Shun no tenia su armadura.

La tercera era junto la marina Sorrento de Sirena, haciendo poses graciosas.

Y la cuarta con Kanon haciendo poses de detectives con lentes oscuros. Y despues con Orfeo y Euridice los tres sonriendo. Y también con Hades, bueno, el cuando era Hades. Estaba sonriendo al lado de Pandora, que también estaba sonriendo, y una foto en oscuras con Shun cubriendo su boca con su dedo indice giñando el ojo rodeado de un montón de flores, y por ahí se veía una parte de la armadura de Seiya.

—¿Cómo es que Shun logra tomar esas fotos sin que nos demos cuenta? —Shiryu negó.

—¿Cómo es que logró tomar esa foto y que se vea taaaaannnn bien? —Todos miraron mal a Seiya.

—Solo alguien nos puede responder esa pregunta —dijo Saori, todos se quedaron callados.

—¿Sorrento?

—¿Kanon?

—¿Shaka?

—¿Hades?

—¿Pandora?

—¿Orfeo?

—¿Euridice?

—Bueno, queria decir Shun. Pero no es mala idea pregúntale a los dorados —Saori se encogió de hombros—. Llamaré a Shion para que me pase con ellos.

—¿Desde cuando Shion tiene telefono? —Preguntó Hyoga.

—Desde que lo obligue —Llamó a Shion y lo puso en altavoz—. ¿Halo, Shion?

—¿Señorita Saori? ¿¡Cómo esta Shun!? ¡Sentíamos como su cosmos bajaba!

—… Shun, Shun esta en-

—Esta en Coma —soltó Ikki—. Es mi culpa —Apretó el puño.

—… ¿Qué? —Se escuchó un jadeo—. ¿¡Cómo que Shun esta en Coma!?.

Aun que no lo crean, cada vez que iban a visitarlos, los ayudaba con favores, les daba hermosas sonrisas, ¡Inclusos podían desahogarse con el!, Era demasiado bueno… eso algún día lo iba a dañar. Varias veces le habían dicho eso, pero el solo se reía o se disculpaba.

Todos se habían encariñado con el portador de la armadura de Andrómeda. Su bondad caracterizada era algo inhumana, ellos sabían que en algun momento esa bondad le haría mucho daño, pero nunca escuchaba.

Shion es el que más se encariño con él. De cierta manera le hacía recordar a Mu de niño, alguien a quien proteger, cuidar y mimar. Y tendría la certeza que eso no se le suba a la cabeza. Sin embargo, eso no era lo único que le agradaba de Shun

Era... tan el.

—¿¡Por qué no lo protegiste!? —Le gritó—. ¡No debiste dejarlo!

Ikki no dijo nada, sintió sus ojos arder de tristeza, furia e impotencia. Simplemente se fue del cuarto a quien sabe donde.

—Shion, no debiste ser tan cruel con el —Se escuchó un bufido—. ¡Es su hermano! ¡El es el que más esta sufriendo!

—¡No importa el! ¡Lo más importante ahora es Shun! — Le contestó, luego se escuchó un suspiro—. De todas maneras, ¿Qué es lo que necesita?

—Amm, bueno —balbuceo, se sentía un poco tonta. Estaba preguntando algo estúpido—. ¿Podrías pasarme con Afrodita? Es algo sobre Shun.

—Esta bien. Dohko, llama a Afrodita. —Se escuchó un "Si" de fondo.

—No puedo creer que esto esté pasando —Negó con la cabeza Shiryu—. E-Es muy… ¡Agh! —Golpeó la pared

—Tranqulizate —La voz sería de Seiya lo sorprendió—. En estos momentos debemos estar calmados… Por favor, Shiryu —Su expresión se entristecio.

—Lo lamentó Seiya. Es que esto es… demasiado estresante —Se tumbó boca arriba en la cama de Shun—. Me siento presionado, no debí actuar así —Paso sus manos por su cara.

—Todos estamos estresado —Hyoga se sentó en la cama—. Sabemos lo que sientes, Shiryu.

—Recuerda esto, Shun sigue con vida, y en algún momento va a despertar —Seiya también se sentó.

—Gracias chicos…

—¿Halo, señorita Saori? —Se escuchó la voz de Afrodita—. ¿Qué es lo que sucede?

—Cuando nos enfrentamos contra ustedes. ¿En que momento tu y Shun se tomaron una foto? —No se escuchó nada.

—No es por ser grosero pero… ¿Esa no es una pregunta un poco, tonta? —dijo con un tono de nerviosismo.

—Ahora que lo pienso, sí. Pero ya no hay vuelta atrás, asi que dime.

—Buenooo, el mismo me pregunto si quería tomarme una foto con el. No se por que y no se cómo, pero logro converserme. Aparte que era un poco narcisista en esos tiempos.

—Gracias, quisiera pedir a los demas caballeros pero, sí es estúpido. Ya le puedes dar el celular a Shion.

—Si, señorita Saori.

—Adiós Afrodita —Recibió un Adiós de parte de el, y luego de Shion.

—Chicos, creo que si fue muy estúpido preguntar e-

Se quedo callada cuando vio que los chicos estaban durmiendo, sonrió y los tapó con una manta que había por ahí.

Le encantaría que en esa cama también este durmiendo Shun.

Se fue a su habitación con lágrimas en los ojos. De verdad quería que Shun estuviera aquí.

«Con Ikki»

Ni si quiera había pasado por la recepción. Estaba tan furioso que sabía que si se encontraba con alguien, lo iba a dañar.

Shion tenia razón, es su culpa. Si lo hubiera protegido como lo prometió, su hermano estaría sonriendo a su lado, viviendo su vida. Ahora esta durmiendo, en un sueño que tal vez no despierte nunca.

—Lo siento, Shun —Agarró su mano con fuerza—. De verdad, lo siento.

—Por favor, despierta… —Una lágrima cayó.

Pero no se movió, ni dijo nada. Seguía echado con los ojos cerrados.

—Shun, no se si me escucharas, pero te prometo que no me voy a alejar de ti. Me quedaré en la mansión antes y despues de que despiertes.

Estaba perdiendo poco a poco todo lo que quiere, primero Esmeralda, luego a Shun. No quería, no quería, ¡No quería que esto siguiera así!. Amaba a Shun, y aunque no lo quisiera admitir, también a Shiryu, Seiya, Hyoga y Saori.

Pero el que ganaba es Shun. Lo vio crecer desde un bebe, a ser el gran hombre que es. Uno de los legendarios caballeros de bronce, que se enfrentó con los mismísimos dioses, y que seguía con vida para contar la historia.

—Shun… Te amo, hermano —Puso la mano de Shun en su mejilla.

Aun así, despues de varias batallas, el seguía con la misma sonrisa, animando a los demás, apoyandolos y sobretodo, amandolos.

El es único en este mundo.

—H-Her… —Se escuchó un pequeño susurro.

—¿¡Shun!? —Se paró de la silla tumbandola.

Preciono varias veces el boton auxiliar, ¡Habló! ¡Pero claro que habló! El es un caballero de Athena que ha pasado por mucho. ¡Habló!

—¿Qué pasa? —Llegó una enfermera—. ¿Cómo es qué…?

—No hay tiempo de explicar explicaciones tontas —La enfermera fruncio el seño—. Habló…

—Voy a llamar al doctor.

(…)

—¡Ikki! —Seiya y los demas llegaron corriendo—. ¿¡Cómo esta Shun!?

—Habló… —Susurró—. ¡Shun habló!

—¡Se va a recuperar muy rapido! —Saori aseguró.

Lo que nadie se esperaba es que varios doctores más llegaran corriendo a la habitación de Shun. Todos se quedaron en shock, ¿Qué acaso no solo habló?

—¡Enfermera! —gritó Hyoga—. ¿¡Qué esta sucediendo!?

—Esperen a que el doctor le diagnostique que es lo que sucede —Y fue a la habitación.

—Shun… —susurró Shiryu.

Nadie conocía bien como es entrar en Coma. Lo más cercano es cuando Seiya cayó en estado vegetal, pero eso era porque le atravesó una espada, es un caso muy distinto al de Shun.

Creían que si hablaba era una buena señal, pero al parecer no es así.

—Los familiares de Shun Kido —Todos se exaltaron, eso tono no es bueno.

—A-Aquí —dojo Saori.

—Sere directo. Entró en estado vegetal.

De nuevo, lagrimas calleron.

—¿Por qué…? —Ikki apretó los puños de furia—. Si el, habló.

—El coma es producto de lesiones estructurales del sistema nervioso central, tales hemorragias, tumores, inflamaciones, edemas, etc.

—Lo que Shun tiene es una inflamación cuando tuvo ese golpe. Eso fue antes, luego se hizo un tumor.

—Pero…

—El despertó por unos momentos —Les dijo—. Cuando habló, su actividad cerebral se activó, pero bajó de golpe.

—¿Cuántas posibilidades hay para que despierte?.

—Después de cuatro meses en coma, la posibilidad de recuperación es inferior al 15%, y la posibilidad de una recuperación total es muy baja.

—¿No pueden hacer algo?

—Estamos haciendo todo lo posible, señorita Saori.

—...

—Buenas Tardes —Y se fue.

Todos se quedaron en silencio, justo cuando pensaban que Shun volvería a estar a su lado.

El cosmos de Ikki creció de una manera abrumadora. Salió corriendo del hospital seguido por Hyoga.

—¡I-Ikki espera! —gritó tratando de detenerlo, pero Ikki seguía y seguía corriendo—. Tks… —Aumentó su paso.

—Vamos a la mansión —dijo Saori entre lagrimas.

—¿Pero y ellos…? —preguntó Seiya.

—Volveran.

»Con ellos.

—¡Ikki espera!

No sabía con certeza cuando habían estado corriendo, tuvo que saltar carros, esquivar personas, disculparse de manera demasiada rapido para seguirle el paso a Ikki.

Tampoco tenía idea de como llegaron a un bosque, ¿Tanto habían corrido?

Poco a poco Ikki bajó la velocidad hasta quedar parado.

—G-Gracias por bajar la velocidad —Tomó un gran bocado de aire.

—…

—Ikki, entiendo como te sientes, pero no tienes que correr as-

—¿Sabes por qué corrí hasta aquí? —hablo ignorando a Hyoga—. Siempre cuando quiero relajarme voy aquí, es un lindo sitio —Se sentó en una piedra.

No lo había notado, era muy verde y por obvias razones demasiados arboles. Se escuchaba un riachuelo, y las aves cantaban. De verdad un lugar relajante.

—Una vez corrí sin control como esta vez. Y recuerdo que Shun me encontró aquí —Se agachó y arrancó una flor—. Y me hizo una corona de flores.

—Es un lindo recuerdo.

—Gracias…

—¿Sabes algo? Los recuerdos son muy importantes, te hacen más fuerte. Pero no te apeges a ell-

—No soy tú —Su voz tan sería hizo recorrer un escalofrío en la espalda de Hyoga. Se estaba metiendo en un terreno peligroso.

—Ikki… —Su tono se suavizó—. Yo perdí a mi madre.

—¡Y yo estoy perdiendo a mi hermano¡ ¡Lo prometí! ¡Prometí que lo protegeria!

Llevó sus manos a su cara, ¿Por qué la vida era así?.

—Yo quiero que Shun esté bien —Empezó a sollozar en silencio.

—Ikki… —Hyoga suspiró. Sabía lo que se sentía y sabia lo necesitaba en este momento—. No me mates por lo que voy a hacer.

—¿Por qué habría que matarte?

Y lo abrazó.

Ikki abrió los ojos como platos, el único ser humano que lo podía abrazar es Shun. Pero hoy, Hyoga se armó de valor y abrazó a Ikki. Éste tenía una reputación que tiene que mantener, pero ahora…

Él si quiere el abrazo.

—No eres tan bueno abrazando como Shun —Y correspondió el abrazo—. Pero… necesito esto.

—No te preocupes…

Se quedaron un rato así, Ikki se sentía solo, no quería perder a su hermanito. Hyoga también, sin embrago el ya perdió a muchas personas importantes, y sabía lo que se sentía, por eso, ahora tendría que apoyarlos como nunca.

—Ya, alejate de mí —Ikki se aparta del abrazo y desvía la mirada avergonzado.

—El gran Ikki, portador de la armadura de Fénix, esta avergonzado —Sonrió—, estoy completamente seguro que recordaré esto para siempre.

—No me hagas hacerte la ilusión diabólica del Fénix.

—No dije nada.

»Con Seiya.

Se apartó un rato del grupo, tenía cosas importantes que contarle a su psicóloga-hermana.

—¡Miren, es Seiya! —gritaron los niños del orfanato—. ¡Seiya! —Corrieron detrás de el.

—Hola, ¿Cómo están? —Se agachó con una sonrisa, ellos siempre les subía el animo.

—¡Muy bien!

—¿Saben dónde esta Seika? —Se estaba desesperando, necesitaba hablar con ell.

—Está en la cocina, ¿Por qué?

—Nada importante, solo quería decirle algo que me pasó.

Odiaba mentir.

—Mmmmm, ¡Okey! —Son muy niños como para decirles.

—Gracias —Les revolvió el cabello y fue a paso rápido donde estaban.

Ya no resistía más, necesitaba desahogarse, necesitaba a su hermana.

—¿Seiya? —La voz preocupada de Seika lo sacó de sus pensamientos—. ¿Qué pasa?, te vez como si hubieras visto a un muerto.

¿Tan mal se veía?

—Seika —Corrió a sus brazos—. Seika me siento muy mal.

—¿Qué tienes? —Le tocó la cara.

—Shun…

—¿Qué pasa con Shun?

—El está… Seika, es que el e-está —Su voz se empezó a quebrarse—. El…

—Esta bien, Seiya. Solo respira —No es la primera vez que le toca estar en esa condiciones.

—Shun… entró en coma —Susurró a lo bajo.

—No te escuché, Seiya.

—¡Entró en coma! —Grita.

Seika se quedó en shock, ¿Cómo quedó en ese estado? ¿Por qué? ¿Desde cuándo está así? Tantas preguntas pero cero respuestas, sin embargo no podía tener esas respuestas ahora. Su hermano se encontraba mal, y como su hermana mayor debería consolarlo y entender sus penas.

—¿¡Qué!? —Miho y los niños gritaron.

—¿¡Cómo Shun entró!? —Miho se acercó a Seiya y le agarró los hombros—. ¿¡Cómo pasó eso!?

—Basta —Seika la alejó—. ¿No vez que Seiya se encuentra mal?

No lo había notado, Seiya se encontraba en Shock, llorando y con la mirada pérdida. Se sentía mal, deseaba que todo fuera un mal sueño y que cuando despertara Shun lo abrazara.

—S-Seika… —Seika lo abrazó.

—Tranquilo, tranquilo… —Acarició su cabello.

Seiya se aferró con fuerza a la ropa de su hermana, hace tiempo que no sentía un abrazo protector.

—Mmmn… —Se sentía reconfortante y calientito—. Hermana… Shun…—Y se quedó dormido.

—¿Seiya va a estar bien?

Por primera vez no tenía la respuesta, desvió la mirada y luego de un suspiro de temor habló.

—No lo se.

»Con Shiryu y Saori.

—¡No quiero, me rehusó! —Pataleaba Saori.

—¡Saori entiende! —La agarró de los hombros—. Ellos también tienen el derecho a saber cual es el estado de Shun, ya lo habrán sentido con su cosmos, pero eso no les asegura nada.

—¿Por qué me obligas a hacer esto? —sollozó Saori.

—Por que se que es lo que quisiera Shun.

Saori se aferró a las manos de Shiryu, tenía razón, Shun quisiera eso.

—E-Esta bien —suspiró intentando tranquilizarse.

Llamó a Shion, y le explicó que llamará a todos los caballeros dorados, sin excepciones. También le había regalado un proyector, así que le ordenó que lo instalara. Cuando ya llegaron todos, se preparó mentalmente para eso.

—Ya estamos todos, Athena —dabló Shion.

—Mis caballeros, estoy segura de que habran sentido bajar el cosmos de Shun —Soltó un gran suspiro—. Shun… Shun está, b-bueno… el está…

A lo lejos Shiryu le daba animos para seguir. Todos tenían que saberlo.

—¿Athena? —habló Saga—. ¿Se encuentra bien?

—No… —dijo a lo bajo—. Shun, entró en coma.

Algunos caballeros bajaron la cabeza y otros suspiraron. Lo habían sentido el bajón de cosmos desde sus templos y ya lo sabían. Pero se sentían aliviados de que siguiera vivo, sabían que era un pilar emocional de su diosa y de los caballeros de Bronce, no sería muy conveniente que muriera. Por su puesto también se preocupaban por el

—Pero… esta bien ¿No? —dijo con esperanzas Aioros—. Solo entró en coma, se recuperará en semanas.

—Sobre eso… —Todos contuvieron la respiración—. Shun había hablado, los chicos y yo nos pusimos feliz, es una muy buena señal, pero… —Sentía las lagrimas caer—, entró en estado vegetal…

Saori se empezaba a sentir mal, su cabeza daba vueltas, sentía que se iba a desmayar. Los caballeros dorados se quedaron más en shock, ¿Cómo es que el pequeño Shun entró en estado vegetal?.

—A-Athena —Habló Aioria intentado recuperarse de la noticia—. ¿Cómo es que entró en coma?

—En la batalla contra Ares, cuando Ares le lanzó un a-ataque a Ikki, Shun de interpuso —Se limpió las lágrimas—. Y acabó… así.

—Athena —Habló Dohko—. Sera mejor que descanse, se ve fatal.

—Si… Adiós mis caballeros, cuidense, de verdad, cuidense —Y cortó la video llamada.

—Lo hiciste bien, Saori —La nombrada se tambaleó—. ¿Saori?

—Shiryu… —Calló de espaldas.

—¡Saori! —Corrió a  ayudarla, tocó su frente—, estas caliente, mejor descansa.

—Está bien…

Shiryu la cargó y la llevó a su cama, la recostó y dejó que descansara.

Pero, ¿Y ahora que? Saori se había puesto mal, Hyoga e Ikki todavía no llegaba, y Tatsumi no era una opción

Estaba solo.

—Shun… —Dejó escapar un suspiro, cuando estaba solo aprecia mágicamente Shun y le hacía compañía.

Era como si tuviera un radar, cuando alguien siempre estaba solo o triste aparecía de la nada, y te hacía compañía.

Ah, Shun. Eres tan indispensable en la vida de todos.

Pero…

¿Qué sientes tú en realidad?
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Me demoré, pero acabé.

Lamento la demora, pero los capítulos seran largos, así que. Es lo bueno.

Sin más que decir, me despido.

¡Bay!

Palabras:3422