Sus vidas han sido marcadas por el dolor, la traición y la muerte. Cada uno lleva encima penas y miedos. Sus manos están manchadas con la sangre de personas inocentes. Algo con lo que tendrán que vivir toda su vida.

Seth Beckett ya no espera nada de nadie, después de la muerte de su madre y la casi evidente caída del imperio que su padre levantó con el paso de los años. Su venganza será implacable, nadie quedará en pie. Su único objetivo es hacer pagar a los culpables a como dé lugar.

Vanya Záitseva está en el blanco, la princesa de la mafia rusa pagará cada una de las malas decisiones de sus padres, sufrirá en carne propia el dolor y la pena.

No hay salvación, no hay rendición, pero ¿qué pasa cuando te enamoras del enemigo?

El infierno los espera con los brazos abiertos.

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