XIII
¿Por qué no todo era luz?
Yuuri creyó que luego de mucho tiempo al fin alcanzaba su felicidad deseada, pero ahora la persona que más amaba le recordaba lo más asqueroso que podía recordar.
Su propio yo.
Cuando lo vio en aquel mar de luz, Yuuri pensó que Víctor era todo lo que el deseo ser, lo considero su tabla salvadora.
Pues eran seres tan diferentes.
Ambos eran partes contrapuestas, después de todo.
El abandono todo por morir, huyendo de la realidad.
Mientras que el fue alguien que quiso desesperadamente vivir para alcanzar un cambio.
Un cambio que le fue arrebatado, ni siquiera por su propia muerte, sino por sí mismo.
Y no pudo evitar molestarse por ello.
Porque Yuuri lo entendía.
En el fondo.
En lo más profundo de su ser estaba consciente de todo. Que si no hubiera tenido el accidente, quizás por su mente también hubiera pensado esa posibilidad que Víctor llevo a cabo, porque se conocía, porque era el mismo.
Sufrió mucho durante su vida dada su forma de ser, abandono tantas cosas por el miedo. Aun con todo el apoyo que tuvo no podía sobrellevar la carga, no deseo que nadie le ayudara, no quería ser débil ante los demás, nunca acepto una palabra de aliento de nadie, y se sintió sucio, sucio por despreciar a Víctor aun cuando el mismo sabía que estaba siendo injusto.
Lo amaba, pero también lo odiaba por recordarle todo aquello que fue.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro