Hannah salió corriendo en dirección a su habitación, no quería estar en la misma habitación que Klaus. Le había revelado todo y no sabía cómo él reaccionaría ante todo lo que dijo.

Sabía que decirlo sería era negativo hasta cierto punto, pero no quería afrontarlo más. Estuvo lista despues de muchos años de haber reprimido sus sentimientos desde que la engaño.

Era demasiado para ella.

―Aún no hemos terminado, Hannah― grito Klaus detrás de ella.

Estaba furioso, persiguiendo a Hannah por todo el lugar. Él creía que abandono la habitación sin motivo alguno, que la discusión aún no terminaba.

Necesitaban hablar sobre eso, su hijo era un Mikaelson, creía que aún podían ser una familia. Pero lo que sin duda alguna había molestado más a Klaus era que ella se hubiera ido, y no había nada que pudiera detener su ira.

Quería dejar ir el tema, quería hablar con calma sobre la situación y ver qué podía salir de ella. Sin embargo, Klaus tenía la notoria costumbre de permitir que su ira hablara por él.

Quería dejar en el pasado la situación, pero creía que Hannah estaba haciéndose la difícil.

―Nuestra conversación termino, al igual que hace años― dijo Hannah.

Las emociones de Hannah eran intensas y quería irse del lugar lo antes posible. La discusión se estaba volviendo increíblemente agotadora para ella y eso la esta irritando.

―¡No me des la espalda!―Klaus grito mientras a velocidad vampírica aparecía justo delante de ella.

―¡Debería haberte dado la espalda en el momento en que decidiste volver a mi vida! ―Hannah le gritó directamente a la cara.

Respiraba con dificultad y su ira se reflejaba en su rostro. Ahora se daba cuenta de que lo que Alaric le había dicho era cierto. Ella y Klaus nunca podrían tener un futuro juntos.

A pesar de que su corazón todavía sentía amor por él. Pero analizando la situación, si todos los días iban a ser así, entonces cuál era el punto.

―Debería haberte dado la espalda en el segundo en que me enteré de que estabas de vuelta en la ciudad. Destruiste nuestra relación. La destrozaste en el momento en que decidiste acostarte con Hayley, alguien en quien me dijiste que confiara porque dijiste que no pasaría nada―comenzó Hannah.

Agregó ―Tú eras el que no podía mantenerse fiel y bajo control mientras yo no estaba en casa―terminó Hannah.

Klaus todavía estaba enojado, pero sabía que él fue quien destruyó su relación, sabía que él tenía la culpa de ello.

Sin embargo, su ira no disminuiría. Estaba perdiendo el control de sí mismo y estaba sucediendo rápido.

―No quiero volver contigo, nunca―dijo Hannah.

Su tono tenía una sensación de finalidad. Una vez que Klaus escuchó lo que ella dijo, comenzó a darse cuenta de que había perdido la batalla para poder recuperar su corazón.

Klaus la había lastimado demasiado, ella nunca podría volver a confiar en él. Una relación sin confianza era una relación que nunca tendría futuro.

Klaus conocía mejor que nadie sus expresiones, así que abatido respondió ―Está bien amor, lo que quieras―dijo Klaus con tristeza.

Hannah comenzó a llorar.

Este era el cierre que había esperado por años, el momento en el que los dos habían aceptado que su relación estaba demasiado rota para ser reparada.

Hannah había besado a Klaus y de alguna manera ganaron audiencia. Todos los hijos de la rubia y Hope estaban parados allí. Todos estaban presenciando el final de una relación que debía ser hermosa pero que ya no podía repararse.

Después de que terminaron de besarse, Hannah susurró ―Siempre serás mi primer amor― murmuro en voz baja.

Las lágrimas corrían por sus rostros, pero ambos tuvieron que aceptar que su relación estaba destruida y que todo lo que podían hacer en ese momento era trabajar juntos y estar con su hijo.

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DI NO A LOS LECTORES FANTASMA.

Todos los derechos y créditos reservados a la autora original: --mikaelson

Solo falta el epilogo, dios. ¿Están listos?