-Ahora comenzaremos a cruzar India, aunque estoy un poco preocupado. —Dijo Joseph, rascando su mejilla. —Cuando pienso en India, me imagino un lugar donde solo se come curry, y te enfermas fácilmente.

-A mi me preocupa que mi cuerpo no pueda soportar la diferencia cultural. —Le dijo Polnareff a Avdol.

-No son más que falsas creencias. —Les aclaro Avdol soltando una carcajada.—Tranquilos, este es un país agradable de gente buena y sencilla, se los garantizo. —Les dijo con una sonrisa.

El barco llegó a un pequeño puerto en Calcuta, al bajar los cinco fueron recibidos muy bien por la gente de India, quienes los rodearon, ofreciendo servicios y pidiendo limosnas.

-¡A-Avdol! ¿Este lugar es India?.—Le preguntó Joseph, mientra intentaba quitarse a la gente de encima.

-¡Si! ¿No les parece un lugar maravilloso?. —Le Preguntó Avdol, soltando una risa al final. —¡Esto lo hace tan fascinante!

-Alguien acaba de robarme la cartera. —Le dijo Kakyoin, soltando un suspiro al escuchar la carcajada de Avdol.

Al salir de la muchedumbre se dirigieron a un restaurante, en donde Polnareff fue atacado por un stand enemigo en el lavabo del baño, el cual era del asesino de su hermana.

Polnareff decidió seguir por cuenta propia, lo que lo llevó a tener una discusión con Avdol, pero aún sabiendo que el moreno tenía razón, los dejó.

Llegó la noche y los cuatro decidieron quedarse en un hotel, esperando que talvez Polnareff recapasitara y volviera.

-Así que aún no a regresado. —Comentó Joseph, viendo el asiento vacío de su mesa.

-Mm.. Ire a la habitación, no tengo hambre. —Murmuró Kakyoin con una mueca, parándose de la mesa.

Joseph le dio las llaves de su habitación individual y los demás sólo lo vieron irse, Jotaro suspiro pesadamente.

-Iré a hablar con él. —Dijo Jotaro, mientras se paraba de su asiento, y tomaba otras llaves.

Jotaro llegó al cuarto de Kakyoin y tocó la puerta, pero no hubo ni siquiera una respuesta por parte de el pelirrojo.

-Nori.. Soy yo. —Le dijo Jotaro, y solo bastaron esas palabras para que él mencionado abriera la puerta.—¿Sucede algo?. —Le preguntó Jotaro, mientras pasaba al cuarto y se sentaba en la cama.

-No.. —Le respondió Kakyoin acercandose a él, pero solo logró hacer que Jotaro lo mirara seriamente. —Es Polnareff.. —Le dijo soltando un suspiro, y sentándose a su lado. —Fue tan inmaduro en irse.. Solo, estoy preocupado por él.

-No te preocupes, estoy seguro que volverá. —Le dijo Jotaro, dándole una sonrisa reconfortante. —Solo es un idiota que atrae los problemas.

Kakyoin acortó la distancia entre ellos, dándole un beso a Jotaro, quien se sorprendió, pero no lo apartó.

Mientras el beso seguía Jotaro tendió a Kakyoin en la cama, y empezó a meter sus manos bajo la camisa del pelirrojo, quien se estremeció al sentir sus frías manos tocando su piel.

-O-Oye.. Espera ¿No vamos muy rápido?. —Le preguntó Noriaki entre jadeos, separandose del beso.

-Si quieres que me detenga, dilo ahora. —Le dijo Jotaro, volviendo a besarlo.

Kakyoin no dijo nada, y Jotaro tomó ese silencio como un continua.

Le quito la molesta gabardina verde, y por la desesperación de hacer a Noriaki suyo, rompió algunos botones de su camisa.

-No habrás la camisa así. —Le reclamo Kakyoin, con un puchero.

-Lo siento Nori. —Le dijo Jotaro, sin siquiera prestarle atención.

Jotaro empezó a acariciar el torso de Kakyoin para después lamer sus pezones.

Kakyoin intentaba callar sus gemidos, pero aún así no podía evitar soltar pequeños jadeos que volvían loco a Jotaro.

Jotaro bajo sus manos hasta el pantalón del pelirrojo y se deciso de la prenda, al igual que su ropa interior, se tomó un tiempo para ver la imagen frente a él.

Kakyoin intentaba cubrirse con las sábanas lo cual el pelinegro no entendía, ya que para él, Noriaki tenía un cuerpo muy hermoso.

Quito las sábanas causando un puchero por parte de Kakyoin, lo cual no le duró mucho ya que Jotaro agarro su intimidad para empezar a masturbarlo.

El pelinegro bajo hasta el miembro de Noriaki y comenzó a brindarle suaves lamidas, haciéndolo retorcer un poco.

~Jotaro.. —Suspiro Kakyoin, intentando quitarlo.

Jotaro le dio una severa mirada para después atraer las caderas de Kakyoin, abrió con un poco de brusquedad sus piernas y zambullo su rostro en aquella intimidad, su lengua degustaba la pequeña entrada del pelirrojo causándole inigualables sensaciones.

~Ah.. Jojo.. —Gimió suavemente él pelirrojo, lo cual volvío loco a Jotaro.

Jotaro dejó de hacer lo que hacía para quitarse su gabardina y camisa, al igual que su gorra, bajo la atenta mirada de Kakyoin quien se sonrojo más al ver el torso descubierto del pelinegro.

Kakyoin se quería involucrar en su aventura, así que se acercó a Jotaro y bajó un poco su pantalón, pudo ver un gran bulto en la tela del bóxer, comenzó a bajarlo para después saborear su piel, brindándole un gran placer al pelinegro.

La timidez de Kakyoin lo hacían verse adorable a pesar de ser un hombre fuerte, eso era algo que le atraía a Jotaro, su personalidad transmitía calidez y confianza.

Kakyoin lo estaba volviendo loco con sus sutiles caricias, le detuvo de la frente, ya no podía esperar más.

Jotaro tendió a Kakyoin contra la cama, y se pocisiono detrás de él, pronto decidió aventurar un par de dedos en la cavidad de Noriaki, consiguiendo un temblor de su cuerpo mostrando la vulnerabilidad de este, lo cual lo incitaba aún más.

~Jo-Jo.. Ahh.. —Gemia Kakyoin, al sentir los dos dedos de Jotaro invadir su cavidad, a este paso el sonrojo de sus mejillas no disminuiría.

Pará distraer a Kakyoin de esa sensación Jotaro apretujaba los pezones de el pelirrojo, consiguiendo pequeños gemidos entre cortados, lo cual era bastante exitante para sus oídos.

Jotaro lamio su cuello y después hizo varias marcas, demostrando así lo ansioso que estaba por hacerlo suyo y que Kakyoin le pertenecia.

Cuando Jotaro intuyo que Kakyoin se había acostumbrado a sus dedos, decidió dar el siguiente paso, acomodo su miembro en la entrada de Kakyoin, quien se estremeció ante el contacto de aquella extremidad.

Jotaro comenzó a penetrar con extremado cuidado ya que no quería dañar a Kakyoin.

-A-Apurate.. Apura-te.. —Le dijo entrecortado Kakyoin, con lágrimas en los ojos, ya que sentía un gran dolor.

-Perdon.. Es-Esto puede doler un poco. —Le dijo Jotaro con voz ronca, hacía un gran esfuerzo por no embestir a Kakyoin de una, sentía un enorme placer pero no lo quería lástimar.

-Esto es más que un poco doloroso —Pensó el pelirrojo, mientras soltaba algunas lágrimas por el dolor.

Jotaro entró por completo en Kakyoin, y espero un poco a que este se acostumbrara, para después dar suves embestidas.

-Estoy sangrando—Pensó el pelirrojo, mientras veía un rastro de sangre en sus piernas.

Sabía que eso pasaría ya que el dolor era demaciado, pero después de un tiempo empezó a sentir más placer que dolor ya que Jotaro tocaba siempre un lugar dentro de él que lo hacía enloquecer.

~Ahh.. Jo-taro.. Mas rápido.. —Gimió Kakyoin, lo cual fue el punto de quiebra de Jotaro, quien empezó a dar embestidas más rápidas.

-Noriaki..—Gimio ronco Jotaro, iba a cambiar de pocision a Kakyoin, pero al separarse un poco de él, pudo notar la sangre.

Al darse cuenta que lo lastimó, salió de él rápidamente, causando una mueca de dolor en Kakyoin.

-Lo siento, te he hecho daño. —Le dijo Jotaro, mientras veía a Kakyoin acomodarse frente a él.

-No te preocupes, estás cosas están destinadas a suceder durante la primera vez. —Le dijo Kakyoin con una sonrisa.

-Pero..

-Está bien. —Le dijo Kakyoin sosteniendo su rostro. —Yo decidí aceptar todo de ti. —Le dijo para después darle un beso.

Jotaro se separó del beso y tomó entre sus brazos a Kakyoin, llevándolo al baño para tomar una ducha juntos.

Después de un tiempo salieron del baño, Jotaro llamó a los servicios del hotel y entregó sus uniformes para que los limpiaran, y arreglaran los botones de Kakyoin.

Quedaron en tuallas y viendo la sangre y el desastre de la cama decidieron, o más bien Jotaro decidió que dormirían en su recamara.

Fueron a la recamara y Jotaro ayudó a Kakyoin a ponerse su pijama, para después él solo ponerse unos boxers.

Kakyoin ni siquiera sentía pena alguna ya, cuando Jotaro se acostó en la cama junto a él, lo abrazo y se acomodo en su pecho para dormir así.

A la mañana siguiente Kakyoin desperto primero gracias a un relámpago por la lluvia, miró a Jotaro y este seguía dormido como si nada, le dio un beso en los labios, haciendo que este despertará.

-Buenos días. —Le dijo Kakyoin, con una sonrisa.

-¿Aun te duele?. —Le preguntó Jotaro con una mueca de preocupación.

-Estoy bien. —Le dijo con una sonrisa, iba a darle otro beso pero alguien entró al cuarto, haciendo que empujara a Jotaro de la cama y volteara a ver quien había entrado.

-¡Jotaro! ¿Has visto a Kakyoin? Entre a su habitación y había sangre en su ca.. —Joseph se quedó con las palabras en la boca al ver al pelirrojo en la cama. —¡Kakyoin! ¿Y Jotaro? ¿Estas bien, vi sangre en tu cama?. —Le preguntó, al no ver a su nieto en la habitación.

-Jotaro.. ¡Esta en el baño!. —Le dijo rápidamente Kakyoin. — Y.. ¡Me atacó un stand enemigo!, no fue nada grave gracias a que Jojo me ayudó, Joestar-San. —Le dijo un poco nervioso.

Joseph iba a mencionar algo, pero noto algo que lo hizo callar.

-Su ropa está afuera en un carrito de servicio, los esperamos en el lobi. —Le dijo Joseph, para salir con una sonrisa incomoda.

Al salir del cuarto Joseph se puso a pensar lo que había visto, a Jotaro quien estaba tirado del otro lado de la cama se le veían los malditos pies, aparte de que gracias a que por el cuello semi abierto de la pijama de Kakyoin pudo ver muy bien las marcas que este tenía, suspiro pesadamente, era mejor no pensar en eso, talvez solo deliraba.

Jotaro y Kakyoin llegaron al lobi, pero solo vieron a Joseph, este les dijo que Avdol había salido a buscar a Polnareff.

Jotaro y Joseph se adelantarian a buscar a Avdol, y Kakyoin los alcanzaría después ya que tenía una pequeña cojera por un corte en la pierna, gracias al ataque del stand enemigo.

Cuando Kakyoin salió del hotel, se dispuso a encontrar a Avdol, Joseph o Jotaro.

Mientras buscaba escucho que alguien gritaba que se estaban peleando y corrio como pudo hacia la pelea.

Cuando llegó a la pelea pudo ver que un stand en el reflejo del agua encajaba una cuchilla en la espalda de Avdol, y también como una bala entraba en su frente.

Corrió hacia el cuerpo de Avdol, para llenarse las mano de sangre, intentó pensar que no era grave, y que Avdol estaba bien pero no recibía respuesta alguna del moreno.

-¡Avdol-San, despierte! ¡Porfavor! ¡Avdol-San!. —Grito Kakyoin mientras agitaba su cuerpo, pero al no recibir respuesta lo acostó en el piso. —Es imposible.. ¡No pudo caer tan fácil!. —Murmuró con la cabeza agachada.

-Eso le pasa por venir con sus sermones. —Dijo Polnareff, haciendo enojar a Kakyoin. —Solo mirate.

-¿Que..? ¿Que estas diciendo, Polnareff?. —Le reclamo Kakyoin. —Avdol-San estaba preocupad-..

-¿¡Quién le pidió su ayuda!?. —Le interrumpió Polnareff dándole la espalda. —No era más que un entrometido y lo mataron por ser demasiado lento.. Las personas como él son una carga, por eso dije que vendría solo.

-Miserable... Acaba de salvarte la vida, ¿Como te atreves..?. —Kakyoin no terminó de gritarle, ya que vio como caían gotas a los pies de Polnareff y este sollosaba.

-Es agobiante.. Tener que verlo morir así... —Le dijo Polnareff, volteando a ver a Kakyoin mientras lloraba.

-Polnareff..

-¡No sabes lo agobiante que es!. —Grito Polnareff.

Hol Horse insulto a Avdol para así probocar a Polnareff, Kakyoin le advirtió al peliplata diciendo que no cayera en sus provocaciones y que lo mejor era retirarse en una camioneta la cual estaba cerca.

Pero Polnareff no pudo reprimir sus sentimientos, ya que apareció el stand que atacó a su hermana.

Polnareff lo atacó pero cayó en una trampa y Hol Horse le disparo, pero la bala no le dio gracias a que Kakyoin atacó al peliplata con su Emerald Splash, haciendo que la bala cambiará de dirección, luego encendió la camioneta y tomó la mano de este para retirarse.

- L-lo siento, Kakyoin. —Se disculpo Polnareff por su actuar. —Pensé.. Que no me importaría morir si lograba vengar a mi hermana. —Le dijo mientras pensaba mejor sus palabras. —Pero ahora lo comprendo.. Comprendo lo que sentía Avdol, su preocupación no será en vano, luchare para seguir vivo.

-¿De verdad lo comprendes?. —Le preguntó Kakyoin, con seriedad.

-Si.. —Le dijo Polnareff, para después recibir un golpe de Kakyoin.

-Puedes considerarlo como un signo de que hicimos las paces, Polnareff. —Le dijo Kakyoin, con lágrimas en sus ojos al recordar a Avdol.

-Si... Gracias, Kakyoin. —Le dijo mientras intentaba que su nariz dejara de sangrar, talvez estaba rota..

-Cuando vengan por nosotros, los derrotaremos juntos. —Le dijo Kakyoin, volviendo a prestar atención al camino y limpiando sus lágrimas.

Mientras Kakyoin manejaba alejándose de la ciudad, Jotaro y Joseph encontraron el cuerpo de Avdol.

Jotaro miró alrededor notando los vidrios rotos que solo podían ser obra del estoque de Polnareff por los finos cortes, y algunos agujeros y abolladuras de el Emerald Splash de Kakyoin, un escalofrio recorrió su espalda, solo esperaba que Noriaki estuviera bien.

Kakyoin condujo fuera de la ciudad, pero el stand enemigo los alcanzó y se metió en el reflejo del volante, haciendo que Noriaki perdiera el control de la camioneta y está se volcara.

-¿E-Estas bien Kakyoin?. —Le preguntó Polnareff, un poco preocupado.

-M-Me golpeé el pecho, pero estoy bien. —Le respondió con una mueca en el rostro, el fuerte dolor de caderas y ahora esto.. Sin duda Polnareff atraía los problemas.

Cuando salieron de la camioneta Polnareff se pudo dar cuenta que el stand enemigo se reflejaba en todo a lo que le diera la luz, así que se alejaron del vehículo.

-No te acerques a nada que refleje la luz. —Le dijo Polnareff. —¡Quítate todo lo que refleje la luz!. —Le grito mientras se retiraba sus aretes. —¡Los botones de tu uniforme!. —Intentó quitarle la gabardina, pero el pelirrojo no se lo permitió.

-¡Oye, Polnareff!. —Le grito Kakyoin con un pequeño sonrojo, ya que si se la quitaba, rebelaria las marcas de la noche anterior, así que prefirió arrancar los botones.

Un niño apareció y el stand enemigo se reflejo en su ojo, para después atacar a Polnareff.

-¡Que hombre más cobarde! ¡Es imperdonable!. —Dijo Kakyoin, al verse acorralado, ya que no podían lastimar al niño.

-Oye, Kakyoin.. No digas cosas como esas en nuestra situación. —Le dijo Polnareff soltando una risa. —En momentos como este, debes pronunciar algo como esto antes de vengarte.. Me llamo Jean Pierre Polnareff, por el honor de mi hermana y para que el alma de mi amigo Avdol pueda descansar en paz..—Le dijo para después manifestar a Silver Chariot a su lado. —¡Juro que me encargaré de arrojar te hacia las profundidades de la desesperación, Centerfold!.

Polnareff le avento arena al niño, la cual le entró en los ojos, así logrando que el stand enemigo saltará ahora al ojo de el peliplata quien lo hirió con Chariot.

Lograron escuchar un grito a lo lejos y supusieron que sería el usuario de stand, así que corrieron hacia ahí para encontrarlo.

Cuando llegaron al lugar este les tendió una trampa, e hizo que bagabundos los rodearan, para poder usar su stand en el reflejo de los ojos de estos, y empezar a herir los.

-Des-Desgraciado..

-Polnareff, no deberías hablar así, No puedes decir "desgraciado" antes de vengarte. —Le dijo Kakyoin, con una sonrisa. —Debes decir algo así.. Me llamo Kakyoin Noriaki, con tal de vengar a mi amigo Avdol y para que el alma de la hermana de mi amigo Polnareff descance en paz.. —Dijo sacando de su bolsillo una moneda. — Haré que pagues con tu propia vida.. ¡Quien agarre esta moneda de oro puede quedarse la!.—Les grito a los bagabundos, haciendo que todos pusieran su vista en ella, y lanzando la al aire.

-Ya veo, Kakyoin.. —Le dijo Polnareff, devolviendo la sonrisa.

Ya que todos habían puesto su mirada en un punto fijo, Polnareff encontró el stand enemigo en los ojos de uno de los bagabundos, le avento arena a los ojos, haciendo que el stand pasara a la moneda y así logró herirlo con Chariot.

El usuario de stand intentó huir pero no lo logró, Kakyoin y Polnareff lo siguieron y acorralaron, el peliplata lo atacó con Chariot, matando lo y consiguiendo su venganza.

Stan enemigo, Hanged Man, derrotado.

Regresaron a la ciudad caminando, y al llegar fueron detenidos por Hol Horse, quien los amenazó y solo esperaba que el stand de Centerfold hiciera acto de precencia.

Polnareff le dijo que estaba muerto, este no le creyó al princio pero ya que Centerfold no aparecía no le quedó más que creer le, he intentar huir ya que él trabajaba mejor en equipo.

Mientras intentaba huir por un callejón, Joseph y Jotaro aparecieron, este último le metió un puñetaso en el rostro.

Joseph les dijo a Polnareff y Kakyoin que ya se habían enterado de la muerte de Avdol, y que este había tenido un entierro y ya estaba descansando bajo tierra.

Polnareff estaba por atacar a Hol Horse pero llegó una mujer quien se le lanzó, evitando que lastimara a Hol Horse y haciendo que este pudiera huir.

Stand enemigo, Emperador, escapó.

To Be Continued..