Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 2: Heridas que nunca dejarán de doler (Parte 1)

LUKAS:

Dejo las llaves de la motocicleta encima de la mesa de cristal, dirigiéndome silenciosamente a mi habitación. Paso de puntitas por la sala cuando noto a papá dormido con una pila de papeles delante, camino en su dirección y apago la tele para taparlo con las mantas y subir a la segunda planta. La puerta de la habitación de Davin se encuentra habierta y asomo la mitad de mi cuerpo para observarlo dormido, sonrío entrando a besar su frente.

-Descansa enano -susurro abandonando la habitación cerrando la puerta a mis espaldas.

Las luces de mi cuarto están apagadas, sin embargo no necesito encenderlas para comenzar a desvestirme. Algunos rayos de la luz de las farolas del patio se cuelan por mi ventana provocando que impacten en el colchón. Muevo mi cuello de un lado a otro intentando relajar los músculos de mis hombros. Extiendo mi mano hasta mi mesa de noche tomando entre mis dedos la cajetilla de cigarros para pararme en la ventana a fumar, casi puedo escuchar la voz de Clío en mi subconciente: fumar es dañino para tú salud Lukas, sí, pero de algo debo morirme en este mundo de mierda, no?.

Todas las noches me replanteo lo mismo e intento buscar alguna solución lógica con respecto a las acciones de mi madre, aún después de once largos años no encuentro respuesta a su desición de abandonarnos.

Crecí viendo la vida con ojos totalmente diferentes a como la veo hoy, creía que todo era fácil, que algunos hechos sucedían por arte de magia, que todo se obtenía fácilmente, no entendía el porque de muchas cosas pero estaba bien, mis padres se encontraban ahí como un escudo protector dispuesta alejarme de toda la maldad que habita en el mundo. Entonces una noche sales con tú padre corriendo al hospital porque tu hermanito pequeño se ha intoxicado, la lluvia era demasiado fuerte para conducir pero velar por la salud de Davin siempre había sido primordial.

Recuerdo el momento exacto en que sentí el impacto del coche. Cuando desperté seis horas después mi abuela sostenía mis manos mientras secaba sus lágrimas con manos temblorosas, entonces creí lo peor, creí que papá o Davin habían muerto y comencé a preguntar por ellos, mi sorpresa fue peor cuando el médico entro y me explico que mi hermano, de apenas dos años estaba en un coma inducido.

Los primeros meses fueron tan jodidamente difíciles, cada día sentía que lo perdía completamente, mis padres comenzaron a tener discuciones, mamá culpaba a papá por todo lo que estaba sucediendo y yo, solo pude refugiarme en lo que más me apasiona: las motos.

Al final Patricia terminó abandonando a su familia, supongo que la carga de un niño paraplejico no estaba en sus planes.

Arrojo la colilla del cigarro al cenicero y camino a mi cama con la intención de descansar, sin embargo un sonido llama mi atención haciendo que abra mi ojo derecho, suspiro y decido que sea lo que haya sonado no es mi problema, así que volteo mi cuerpo para intentar descansar, cuando el mismo sonido vuelve a molestarme. Gruño por lo bajo levantandome para caminar a la ventana que da a la calle de la urbanización y arrugo las cejas al no ver nada fuera de lo común, giro para acostarme cuando encuentro a papá en la puerta observándome.

-¿Hace cuánto llegaste a casa? -pregunta con voz ronca y los ojos a medio cerrar reprimiendo el sueño.

-Treinta minutos más o meno -contesto encogiendo mis hombros -¿Sucede algo papá? -pregunto al notarlo un poco más perturbado de lo normal.

La mueca que hacen sus labios me hace saber que tenemos una conversación que no será agradable en lo absoluto.

Admiro a mi padre de una forma tan especial, que a veces temo que cometa algún error como ser humano al fin y termine decepcionandome por completo. Para Davin y para mí siempre ha sido un héroe porque sé lo difícil que es educar a dos niños varones, y puedo admitir con total sinceridad que nunca lo ví rendirse o quejarte ante el esfuerzo que realizaba a diario, jamás nos reprochó o se alejó de nosotros tratando de evitar sus demonios, al contrario, su amor por nosotros aumento a escalas enormes.

-Davin debe cambiar de fisioterapeuta -habla al cabo de unos minutos en silencio. No contesto intentando asimilar lo que acaba de decir.

Las fisioterapias de Davin no son baratas, papá me ayuda con las ganancias que tenemos en el taller de motos, mientras yo trabajo todos los días a la semana en una cafeteria en el compus, cubro uno que otro turno en un pequeño restaurante y corro carreras ilegales para aumentar el número de ganancias. No somos pobres, pero tampoco es que tengamos una vida llena de lujos y derroches económicos.

-Pensé que todo estaba bien con la fisioterapeuta -intento sonar lo más tranquilo que puedo.

-Han subido las cuotas de todos los pasientes Lukas, sabes que Marie nunca nos ha presionado para pagar la fisioterapia pero ya no es ella la que estará residiendo en la sala -murmura, haciendo que pase las manos por mi rostro con frustración.

-Trabajaré más turnos a la semana -hablo después de un rato -No te preocupes papá -coloco una mano en su hombro.

-Lukas, llevamos 2 años inactivo en la universidad ¿Crees que no me destruye ver como mi hijo pierde su juventud? -su pregunta escuese en esa herida que no terminará de sanar nunca.

-Sabes que lo hago por Davin -digo -No me ha pesado abandonar un poco mi vida papá.

Y es la verdad, de vez en cuando voy a una que otra fiesta, corro en las carreras y me enrollo con un montón de chicas, pero hasta ahí, mi vida personal en la que se reduce mi padre y mi hermano nunca la he dejado de lado.

-Voy a buscar otro trabajo -anuncia -Ví carteles en un un taller sobre necesitar a un mecánico hijo, ya encontraremos una solución.

Suspiro agotado y entristecido al saber que mi padre, como siempre, se convertirá en nuestro angel guardián.

🏍️🏍️🏍️🏍️🏍️🏍️🏍️🏍️

Corro entre los pasillos de la sala de rehabilitación. Puedo notar por las diferentes puertas acristaladas como hay desde bebés hasta ancianoa realizando una serie de ejercicios. Camino con más normalidad al notar a Clío esperando afuera.

-Lo siento mucho, tuve un retraso en la cafetería -me disculpo haciendo que ella me observe y me regale una hermosa sonrisa.

-No te preocupes Luk, todo ha estado bien, sabes que Davin es un niño maravilloso -expresa y asiento concordando con ella.

Mi amistad con Clío comenzó cuando tenía trece años, ella era tan cálida, sonriente, tan llena de vida que al inicio me causó contradicción porque en ese entonces yo era el opuesto a ella. Recuerdo perfectamente la manera en la que ha estado para mí en cada faceta de mi vida, es la única además de Kylan que conoce todos y cada uno de mis problemas.

Abro la puerta encontrándome a Davin de espaldas conversando con la doctora. Su cabello castaño está cubierto por una gorra de béisbol de los Blue Jeans, mientras su cuerpo se encuentro cubierto con un abrigo que apuesto a que es mío.

-Hola pequeño terremoto -saludo llegando a su lado.

-¡Lukas! -sonríe al verme -Le estaba comentando a la doctora lo mucho que me apasionan las motocicletas -explica haciendo que una sonrisa se extiensa por mis labios.

-¿Le comentaste que papá tiene un taller? -pregunto intentando sacar un tema de conversación. Su psicólogo dice que es muy importante hcerle saber que es útil a pesar de estar en silla de ruedas.

-Claro que sí, la doctora Maurin ha hablado mucho conmigo -observo como la chica asiente con una sonrisa divertida.

Davin sigue comentando con nosotros sobre el colegio y lo poco que le gusta asistir debido a que no puede realizar las mimas actividades que el resto de los estudiantes. Un rato después la doctora me hace una seña para hablar conmigo, así que indico a mi hermano que salga con Clío a buscar un helado.

-Un gusto señor Hedleston, soy la doctora Greta Maurin -extiende su brazo presentandose y la estrecho educamente -Sé que usted y su padre están un poco preocupados con el tema del pago.

-No se preocupe doctora, estamos intentando... -mueve sus manos en un gesto qu indica que no me preocupe.

-Estoy al tanto de vuestra situación Lukas, pedí hablar contigo pero no es para tratar el tema financiero -aclara -Es sobre Davin.

-¿Está todo bien? -no puedo evitar sentir un nudo quemándome la garganta.

-Claro que está bien no te preocupes, creo que lo mejor será agendar una cita y asi hablamos con más calma, ¿Estás de acuerdo? -asiento en respuesta.

Me despido de la doctora saliendo al exterior. El sol de la mañana quema mi piel y maldigo por no ponerme una casadora, camino hasta el auto con un montón de pensamientos en la cabeza. Escucho la risa infantil de Davin sintiendo como el pecho se me calienta.

-Vamos a casa enano, aún tengo muchas cosas que hacer.

Clío me ayuda a subir la silla de ruedas para encender el auto y conducir de regreso. Los primeros minutos del camino fueron amenos entre risas y bromas. Aunque de vez en cuando noto a Davin juguetear con sus dedos distraídamente.

-¿Sucede algo pequeño? -pregunto y niega con la cabeza sin observarme a los ojos. Si sucede algo -Davin...

-¿Mamá se fue porque no quería lidiar con un niño como yo? -su pregunta me descoloca un poco por lo que arqueo una ceja interrogativo.

-¿Qué quieres decir como un niño como tú?.

-En silla de ruedas Lukas, los chicos en el colegio se burlan de mí por no poder jugar fútbol y béisbol, las chicas susurran a mis espaldas -murmura y siento mi corazón agrietarse -Hubiese sido mejor no haber sobrevivido a ese accidente -cruza sus brazos enfadado.

Freno el coche de repente respirando entre jadeos. Las lágrimas se acomulan en mis ojos , así que parpadeo para alejarlas.

-No vuelvas a decir algo como eso, nunca más, eres un niño maravilloso, eres inteligente, con los mejores chistes que he escuchado alguna vez, puede que tus pedos huelan mal pero... -siento una carcajada de su parte y sonrío -Pero eres muy especial Davin -retiro el cinturón de seguridad para girarme y limpiar el rastro de lágrimas que hay en sus ojos azules como los de nuestra madre.

-¿Entonces por qué mamá se marchó?.

-No lo se Dav pero no fue por tí te lo aseguro, apuesto mi motocicleta a que ella está super orgullosa de tener a un hijo tan hermoso como tú -susurro levantando su mentón.

-Te quiero mucho Lukas.

-Yo también te quiero mucho Davin -susurro sonriendo -Vamos por una pizza, para ver el partido de béisbol -regreso a mi asiento para volver a dirigirnos a nuestro destino.




Buenas, buenas, aunque en realidad en Cuba son pasado las seis de la tarde. Espero que hayan tenido un inicio de semana espectacular. Lamento la tardanza, he estado enferma :( con gastritis y es un poco incómodo escribir sintiendo que mi estómago está siendo quemado.

Pero les he traído el cap, porque quiero cumplir con los lectores.

Espero que les haya gustado muchísimo, no olviden votar y comentar para apoyar a la historia.

Nos vemos el próximo miércoles.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro