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07

Para cuando llegué a casa eran las once de la noche casi las doce. Todo me daba vueltas y caminaba como una borracha, y es que exactamente así estaba.

Beolgyo fue quien me abrió y me dijo que mi madre y mi padre estaba durmiendo desde hacía tiempo y que ella ya se iba a la cama. Dije que yo haría lo mismo y con la ayuda de la baranda subí la escalera sana y salva. Cuando estuve en el segundo piso todas las luces se apagaron. La única fuera de su lugar y para colmo borracha era yo.

-¡Jungkookieee!- me lancé a sus brazos a penas abrió la puerta- te extrañé Jungkookie-, lo tomé de las mejillas y le di un pico. Me sentía extrañamente feliz

-¿Estas ebria?- sentí como cerró la puerta y devolvió su mano a mi cintura

-No, estoy feliz- sonreí muy ampliamente y me acerqué a besarlo, acto que el correspondió pero que yo próximamente detuve- guapo Jeon Jungkook- mi halago lo hizo sonreír.

-Me gustas más borracha- confesó

-¿Ya te gustaba antes ah?- dije con una juguetona sonrisa mirándolo muy de cerca. Jungkook guardó silencio- Es broma -hablé algo dolida por su silencio sin perder los buenos ánimos, antes que pudiera responder una cosa obvia lo besé nuevamente pero esta vez en breve

-Oh...-mencioné apartándome de él para ver de más de cerca el dibujo que tanto me había llamado la atención sobre su escritorio- ¿soy yo?- preguntè maravillada tomándolo entre mis manos poniéndolo debajo de la lamparita del escritorio para poder verlo a la luz ya que la habitación estaba predominante oscura. A esta casa le gusta valerse de la luz de la luna cuando es de noche.

Esta definitivamente era yo. No tenía todas mis neuronas pero no estaba en un estado tan crítico como para no reconocer mi propio rostro. El retrato tenía unos tonos muy lindos, a pesar de que eran con un común lápiz.

-¿Te gusta?- giré mi cabeza hacia él con los labios entreabiertos para verle mirándome atento con sus manos en sus bolsillos, los delanteros de su pantalón de pijama

-Claro, me encanta, ¿puedo quedármelo?, es muy lindo -vi el dibujo de nuevo

-Yo mismo te lo doy cuando acabe, aún le faltan algunos retoques

-¿Le falta?, así es perfecto, no se que más podría faltarle -lo dejé en donde estaba. Jungkook se acercó y lo metió dentro de un cuaderno para luego mirarme unos segundos.

-¿Por que me miras así?- pregunta adueñándose de mi cintura. Tomo sus manos y las aparto- ¿qué ya no quieres que te toque?- se quejó, yo negué con la cabeza rápidas veces reprimiendo una risita que interrumpiera mi plan, divirtiéndome mucho en el fondo, le indiqué que se acercara para decirle una cosa en el oído. Lo hizo, dobló un poco la espalda e ignorando en absoluto mi petición sus manos no fueron a mi cintura, fueron a mis nalgas, cosa que me hizo sonreír .

"No me toques así. Me calientas"

Hablé en su oído extremadamente bajo, ni siquiera las paredes lo escucharon. Sentí su boca acercarse a mi oreja izquierda y murmurarme de igual forma:

"¿Yo te caliento? "

"Mucho"

"Puedo quitarte la calentura de la forma que quieras"

Sonreí por el nuevo juego que se nos ocurrió inventar y continué con la dinámica

"Estoy embarazada, no me tomé el anticonceptivo de la última vez. Me preñaste Jeon"

Pensé que se asustaría pero solo conseguí hacerlo reír. Yo estaba tan relajada que no tenía cabeza para ponerme a pensar en la gravedad del asunto. Entonces fue que escuché :

" Usamos condón esa vez "

" igual no vamos a follar"

Ambos reímos a bajas y cortas carcajadas y acabamos de separarnos de una vez para mirarnos a los ojos en silencio, yo no dejaba de reír y acariciar su mejilla mientras él sonreía ¿es que acaso le gustaba verme así?.

Paso a paso nos fuimos acercando a la cama hasta caer los dos, yo sobre él. Todavía embelesados mirándonos como si se nos hubiera extraviado algo en la pupila del otro.

Sin tan solo no fueras un maldito fuckboy y notaras un poco mis sentimientos, todo fuera perfecto

-¿Por que no hablas?- preguntó desajustando el cómodo silencio que reinaba entre los dos.

-Tú tampoco dices nada- dije creando una especie de sonrisa divertida en mi rostro siempre mirándolo directo a los ojos. Creo que era la primera vez que sostenía tanto contacto visual con él y es que estar borracha me hace ser capaz de hacer cosas que en mi sano juicio no tuviera valor.

-No tengo nada que decir

-Yo si tengo

-Dilo entonces- autorizó

-De ahora en adelante seré una fuckgirl- pasé algo de trabajo para pronunciar la última palabra y en lo que lo hacía el comenzó a reír haciéndome sentir por mi misma como su estómago subía y bajaba

-¿Eso existe?- levantó las cejas mojando sus labios con su lengua

-Por supuesto, acabo de decirlo yo, ¿no escuchaste?- pregunté con un puchero

-Lo que sea. No lo serás ¿de acuerdo?- negué con la cabeza

-No de acuerdo. Todos cambian y yo sigo en el mismo lugar. Jae Hwan se fue con Rosé y tu tienes a alguien nueva que follarte cada día. Yo lo quiero así

-Pero yo no. No tienes que buscar sexo en otro lado cuando me tienes a mí ¿entiendes?- esclareció calmado

-¿Y por qué no lo haces tú?. Si te digo que no tienes que buscar sexo en otro lado cuando me tienes a mí, que harías?- no pareció pensarlo, simplemente se quedó callado mirándome

Un aire de decepción me golpeó y no en la cabeza; hablo del corazón, ya que si desde un principio latía rápido, ahora de manera literal se habla disparado porque me latía tan fuerte que estoy segura que Jungkook podía sentirlo. De susto, de miedo, de nervio, de desilusión de esa horrorosa manera que me provoca ganas de llorar.

-¿Te parece normal lo que hacemos?- frunció el ceño.

Maldita sea no me quedaría tranquila hasta que no tocara el bendito tema. Y es que ya fue suficiente. Me encanta lo que hacemos, realmente, me gusta, se siente bien. Pero ya basta, digamos las cosas como son.

-¿A que te refieres?- pregunta, cambié la mirada un instante y la regresé a sus ojos marrones

-A que me refiero...-redundé- a que no puedo seguir. Detengamos esto ya, Jungkook.

-¿Detengamos qué?- preguntó. Ahí verdaderamente quise morirme.

Cerré los ojos. Ya poco a poco me iba sintiendo más sobria e iba recobrando algo de coherencia al hablar. Sus ojos me miraban curiosos esperando por lo que tenía para decirle pero yo no me sentía lo suficientemente capaz para confesarlo.

-¿Qué no te das cuenta?. ¿Te dibujo en un papel el efecto que estás causando en mí?. No estamos midiendo cada cosa que que hacemos y...-suspiré -Tengo miedo

-¿Por qué?, ¿a que le tienes miedo?

-Temo que empieces a gustarme, Jungkook. ¿sí lo entiendes?, no puede pasar, eso no puede pasarme a mí, no de ti, no contigo.

-¿Por qué no de mí?, ¿qué tiene de malo que yo te guste?- tragué saliva fuermentente buscándole otro significado a lo que me decía en sus ojos. Prácticamente temblando por lo el rumbo que pueda llegar a tomar esta conversación

-Porque no voy a arriesgarme a que sigas jugando así con mis sentimientos.- me armé de valor- ¿tienes idea de lo mal que me siento cuando te veo entrar o salir de aquí con otra? o ¿lo mal que me siento cuando desde mi habitación tengo que escuchar como las otras gimen y gritan cuando te las coges justo sobre esta cama?- su expresión no era una en especial, sus ojos solamente me analizaban y sus oídos escuchaban lo que le decía, como si le estuviera contando algo de lo más ordinario - Quizás en las chicas que vienen a nuestra casa no provoque nada sentirse usadas por cualquier hombre. Pero eso es algo que alguien como yo no está capacitado a tolerar. Está de más decirte que no soy como ellas. Tú y yo no somos iguales ni parecidos a la hora de pensar. Así que simplemente....dejémoslo hasta aquí.

-¿Te gusto?- habló él después de escucharme hablar hasta el final. Es increíble que después de lo que le he dicho el solo haya podido recopilar ese dato.

-¿De que te sirve saberlo?- respondí evadiendo la definida respuesta a esa pregunta.

Había sido lo menos específica a la hora de hablar pero en mi mente estaba formulado un "me gusta Jungkook" desde hace mucho.

-Contestame, Tn- pidió dejándome perpleja y con el corazón en la mano- ¿te gusto?

-Claro, maldita sea, me gustas, has estado mirando con los pies todo este tiempo porque no he podido ser más clara. Pero no te importa ¿no es así?...al fin de cuentas solo me quieres para follar . Al otro día ya estas con otra, botándome a mí como una lata se refresco. Me duele sentirme así. Me duele que cuando no tengas del servicio de otras me busques a mí como si fuera una reserva y yo de tonta te complazca solo por pensar que me haría un bien a mi también. -expresé con toda plenitud sacando mi lado más sincero, dejándome llevar por el momento y la poca paciencia que se venía acumulando en mí ,con respecto a esta situación

Jungkook me miraba de alguna manera procesando cada una de mis palabras. No puedo creer como hemos soportado mimarnos todo este tiempo.

Pasados unos segundos me acarició la mejilla. Lo dejé, pero a la vez me impacienté. ¿Que se suponía que hacía?
Con toda la calma del universo movió su mano dándome leves caricias y llegado el momento colocó un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.

-Perdón ... tampoco soy de piedra, soy consciente de lo que hacemos. Yo solo...pensé que también lo disfrutabas. Solo me concentré en hacerte sentir bien. Fui un estúpido ,perdona.

-De acuerdo...olvídalo, ninguno es culpable. Solamente paremos por el bien de los dos. Es todo - dije. Hice el amago de levantarme de su regazo pero sus fuertes manos que habían permanecido en mis caderas, reforzaron su agarré de repente y no pude moverme

-No quiero que este juego acabe, Tn. No te comparas ni un poco con las otras y...eres especial. No lo hagas ¿si?- sonreí irónicamente, después de todo sigue siendo un aprovechado que hace lo que sea por un par de tetas y un culo de más.

-Es que no entiendo para que me quieres. De seguro has estado con dos y tres a la vez con el triple de cuerpo que yo.

-Pero tú eres diferente- repitió

-¡No!, no soy diferente Jungkook, deja de mentirme en la cara. Si realmente existiera una diferencia entre ellas y yo, no estarías....-suspiré - es mejor tenerme para follar en la madrugada y cada vez que se te pegue la gana ¿no?- dije guiada por el resentimiento que estaba sintiendo y traté de empujarlo para poder salir corriendo de una vez por todas a mi cuarto pero una vez más sus manos ejercían fuerza -¿que haces?, suéltame!

-Escúchame un segundo. No dejaré que te vayas molesta

-¿A ti que más te da si estoy molesta o no contigo?, mañana se me pasa. Olvida este maldito juego de mierda y conformarte con follar con otras. Debe ser fácil, solo hazlo.

-¡Te quiero a ti!, ¿lo captas?, ¡no quiero a otra!

Me quedé quieta y desistí de intentar salir de entre sus brazos para mirar que no me estuviera equivocando sobre el significado de lo dicho hacía tan solo un instante. El corazón latiendome con una potente fuerza dentro del pecho.

Tomándome desprevenida, me volteó quedando él encima de mí ,claramente sin dejar caer su peso. Se acercó más aún, rozando su nariz con la mía levemente, cerrando los ojos los dos, hasta casi rozar nuestros labios

-Detente, fue entretenido pero ya no más. Me ha quedado más que claro que solo quieres sexo conmigo. Pero ya te dije no soy ninguna puta, y mucho menos quiero enamorarme de ti. Apártate. No es divertido, Jeon Jungkook.

-¿Puta?- sonrió irónico alejándose para nuevamente establecer un contacto visual entre ambos- ¿quién?. No eres eso, solo tienes sexo con una persona, y no es por dinero, lo que haces no te clasifica como puta. Saca eso de tu cabeza.

Por un instante decido no mirarlo ya que esa simple acción solo empeoraba las cosas, pero su mano me hizo enderezar hasta mirarlo a los ojos una vez. ¿Que pretende?. ¿Acaso está jugando o se está divirtiendo con esto?. Oh, lo olvidaba. Es un fuckboy. Le importa un comino lo que otras personas sientan.

-¿Algo más que me quieras recalcar?

-Sí, vete a la mierda, ¿y sabes que?. No me gustas, acabo de cambiar de opinión. Solo eres un

Estrelló su boca con la mía interrumpiendo los miles de insultos que tenía para decirles en la cara. De forma automática le correspondí. De alguna manera me obligo a no querer rechazar todos y cada uno de los besos que tanto me confunden.

-Un estúpido, un patán, un fuckboy, un idiota. Pero aún así, le gustó a mi hermana pequeña -sonrió de lado. De haber podido gritarle con todas mis fuerzas un insulto más ,lo hubiera echo. Me choca que a pesar de todo sea un imbecil, y lo que me choca el doble es que con todas esas malas costumbres la baba me corre por él- ¿no es así?

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