Días atrás

Un chico de pelo negro y tez morena; con lentes oscuros, una gorra y una gran chaqueta que le llegaba casi a las rodillas caminaba apurado por ciudad Lumious

Se dirigía a la torre Lumious, donde se ubicaba el gimnasio tipo eléctrico de la región, pero no iba precisamente a combatir con el líder de gimnasio

A lo lejos, una multitud de personas con cámaras y micrófonos lo seguían, se dió cuenta que su disfraz no había servido

—¡Señor Ash, queremos hacerle una entrevista!— Gritó una reportera

—¡Ya les dije que no me molesten, también tengo una vida privada!— Les reclamó a los periodistas que lo perseguían — Y no me digan señor, no soy tan viejo— Comenzó a correr lo más rápido que pudo con todos tras él

Al llegar a la torre, solo él pudo pasar debido a la seguridad del gimnasio, cosa por lo que se sintió muy agradecido

Se quitó la gran chaqueta que traía puesta, solo le daba calor, y se quitó los lentes, ya no era necesario seguir escondiéndose

Las puertas del gimnasio se abrieron y caminó hasta la cancha; Pudo ver que había un chico rubio del otro lado con una Pokebola en la mano

—Bienveni~— El lider de gimnasio se sorprendió al ver que no se trataba de un entrenador cualquiera —¡Ash!— Se acercó con él y se dieron un abrazo —Que gusto verte amigo, ¿Cómo has estado?—

—Bien, he estado muy bien, pero muy ocupado con lo de la liga, supongo que ya sabes, llegué a finales— Dijo orgulloso de si

—Claro que sé, vimos todos tus combates por la tele, perdón que no estuviéramos presentes, papá estuvo enfermo estos días y nos dedicamos a cuidarlo—

—Esta bien, no te preocupes por eso Clemont, la familia es lo primero; ¿Y como estás tú? Y Bonnie, ¿Cómo está ella?—

—Pues, yo estuve algo ocupado, fueron muchos los entrenadores que vinieron por su medalla para entrar a la liga, ahora que ya empezó y ya participaron todos, todo está más calmado para los líderes de gimnasio—

—¿No se las diste así nomás o sí?—

—Claro que no, muchos vinieron a retarme, pero sabes cómo soy de fuerte— Ambos rieron —Y Bonnie, bueno, ella está emocionada, no falta mucho para que pueda ser entrenadora ella también, se la pasa todo el tiempo aquí en el gimnasio viendo las estrategias de los retadores, pero sobretodo, viendo tus combates, la haz inspirado Ash—

—¿Yo?—

—Sí, quiere dedicarse a los combates Pokémon, dice querer llegar a ser igual de fuerte como tú, era la más emocionada cuando veíamos tus combates en la tele—

—Eso... Eso es halagador— Sonrió de oreja a oreja ante los comentarios de su amigo

De repente, un ligero pitido se escuchó, era del reloj de Ash

—¿Y eso?— Ash nunca usaba reloj, por eso a veces llegaba tarde a dónde iba (o más bien, casi todo el tiempo)

—Oh, fue un regalo de mi madre, insistió en que lo tuviera, dice que necesito tener mi vida más ordenada ahora que tengo más pendientes, pero la verdad, yo digo que es innecesario— Otra vez volvió a sonar —Ay no, se me hace tarde—

El rubio solo se tapaba la boca evitando reírse, su amigo seguía igual de descuidado como siempre

—Debo irme Clemont, lo siento— Rápidamente se volvió a poner los lentes oscuros y su larga chaqueta

—¿A dónde vas con tanta prisa?—

—Tengo un entrenamiento con Diantha y Steven—

—¿¡Con los campeones!? Dios, tienes que conseguirme un autógrafo de ellos—

—Realmente no creo que eso vaya a ser difícil, ¿Para ti y para Bonnie?—

—No, solo para mí, tengo que presumirselo Bonnie—

—Eres un mal hermano; Espera, ¿Por qué no me pides un autógrafo a mi? Casi soy el campeón — Le dijo bastante orgulloso

—Porque ya te conozco, no sería divertido—

—Eres un mal hermano y un mal amigo— Se indignó un poco por el comentario, pero después solo se escuchó una pequeña risa de ambos; Era una manera de llevarse entre ellos

El azabache terminó de arreglarse, y justo cuando iba a salir...

—Espera, se me olvida lo más importante— Corrió en dirección del rubio mientras buscaba algo en sus bolsillos

—Ay Ash, siempre tan descuidado— Vió como el chico sacó un sobre de su chaqueta y se lo entregó —¿Y esto?—

—Son boletos para la Liga—

—Ay Ash, no te hubieras preocupado, ya compra~—

—Son VIP— Lo interrumpió el chico

Hubo un enorme silencio

—¿¡Qué clase de influencias tienes Ash!?— Parecía que lo estaba regañando —Estos boletos se acabaron ya hace un par de semanas, ¿Cómo los conseguiste? No los robaste ¿Verdad?—

—¿¡Qué!? Claro que no, no puedo creer que pienses algo así— Se sintió insultado — Literalmente soy finalista, ¿Crees que no tengo algunos beneficios? Me dieron un par de boletos—

—Bueno, mientras no sean robados— Siguió viendo el sobre, y pudo percibir que habían boletos de más —¿Y eso? Solo necesito tres—

—Bueno, em, no he podido contactarme con Serena en varios días, ni ella ni su manager contestan mis mensajes, supongo que como es tu novia, pues, podrías invitarla—

—Ash...— Se quedó en silencio un rato —Ella y yo dejamos de salir desde hace un año y además ell~— Fue interrumpido por el otro chico

—Oh, perdón, en serio, no sabía— Se disculpó rápidamente muy preocupado —¿En serio ya hace tanto tiempo? Perdón si he estado tan distante, con todo eso de la liga de Alola, y la actual pues, tú sabes

—Oh no, no te preocupes por eso, no tiene importancia, entiendo que te la pases ocupado, pero, Ash ¿Qué no te enteraste?—

—¿Enterarme? ¿Acerca de qué?—

—Serena tuvo un accidente —