Capítulo 3
Loki los alcanzó con su armadura dorada y su casco gritándoles que se arrodillaran. La gente lo ignoró y él proyectó cuatro imágenes de él para acorralarlos.
A Bella se la veía emocionada viendo a esos muggles miedosos.
- ¡ARRODILLAOS! - ordenó.
La gente lo hizo con miedo.
- ¿No es esto lo que anhelaís? - abrió los brazos sonriendo con satisfacción - ¿No es este vuestro estado natural? La verdad de la humanidad que anhelaís la subyugación. El atractivo de la libertad disminuye por una lucha por el poder. Nacieron para ser gobernados; y siempre os arrodillareís.
- Está chiflado - dijo Arthur.
- Quiere gobernar el Universo, así que sí, está chiflado - asintió Frank.
Un hombre se levantó.
- No ante hombres como tú.
- No hay hombres como yo.
- Sí, siempre hay hombres como tú.
- Cierto - dijo Marlene.
- Miren a ese hombre - dijo Loki levantando el cetro que comenzó a brillar - que os sirva de ejemplo.
Algunos se tensaron por el pobre hombre.
Loki lanzó un rayo de energía hacia el hombre, pero el Capitán América lo desvió con el escudo y derribó a Loki.
- Ese escudo parece muy resistente - dijo Lily.
- Sabes, la última vez que estuve en Alemania y vi a un hombre por encima de todos los demás, terminamos en desacuerdo - se acercó Steve.
- El soldado - se rió Loki levantándose - el hombre sin tiempo.
- Tú te quedas sin tiempo - siguió Steve.
- Loki suelta el arma y ríndete - la voz de Natasha se oyó por los altavoces.
Sobre ellos flotaba el Quinjet, una ametralladora apuntando al Dios.
Loki envió una ráfaga azul al Quinjet.
- Comparada con ese cetro, nuestras varitas quedan obsoletas - murmuró Remus.
Sirius y James hicieron una mueca estando de acuerdo.
Natasha se alejó a tiempo. Steve arrojó su escudo a Loki. Ambos comenzaron a luchar; el Dios tiró a Steve al suelo. El escudo fue lanzado hacia él, pero Loki lo apartó.
- Debería tener algo más que ese escudo para defenderse - dijo Severus.
Muchos estuvieron de acuerdo.
Steve atacó golpeando y pateando intentando derribarlo pero Loki lo derribó otra vez. Apuntó el cetro hacia el casco de Steve.
- Arrodillate - dijo Loki.
- Hoy no - se negó a someterse.
- ¿Qué le decimos a la muerte? - dijo James.
- Hoy no - respondieron Sirius y Remus.
Este volteó y golpeó a Loki con su pierna, pero Loki agarró su pierna y lo arrojó lejos.
- Este tipo está por todas partes - Natasha observaba desde la cabina del Quinjet.
- Es bueno con las ilusiones - dijo un Ravenclaw hijo de muggles.
De repente la música interrumpe por los altavoces. Una sonrisa tiró de los labios de Natasha.
La voz de Tony Stark llega por la radio.
- Agente Romanoff, ¿Me extrañaste?
Loki y Steve miraron hacia el cielo mientras Tony vuela alrededor de un edificio alto y lanza a Loki de regreso al suelo con una explosión.
- Están demasiado avanzados - dijo Regulus en shock viendo a ese hombre con su armadura.
- Hay que conseguir reforzar las líneas ley - siguió Lucius.
- No podremos hacer mucho hasta que quitemos al viejo - dijo Tom - entonces podremos empezar a hacer fuerte las protecciones.
Sus seguidores asintieron.
Tony aterriza y apunta con sus armas a Loki, quién se apoyó en los escalones.
- Haz tu movimiento, papá de bambi.
- ¡HEY! - se quejó James haciendo reír a Sirius y Remus.
Los demás los miraron confundidos.
Loki levantó las manos rindiéndose con su armadura desvaneciéndose.
Tom entrecerró los ojos ; ¿Después de todo lo que había formado ese Dios, se entrega tan fácil? Seguía pensando que había algo más.
- Bien jugado - Tony bajó las armas.
- Señor Stark - se acercó Steve.
- Capitán - le devolvió el saludo Tony.
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