Victoria: 

A la mañana siguiente me despierto apenas siento el sonido escandaloso de la alarma, me levanto de mi cama y me dirijo hacia el baño, me desvisto y me meto a la ducha, me tomo mi tiempo para darme un relajante baño, cuando termino voy a mi armario a vestirme, me coloco unos jeans anchos y rotos en la parte de la rodilla, una blusa básica lila, encima una chaqueta de jeans, y unos tenis blancos; me maquillo con polvo, rubor, rímel y brillo labial; me peino haciéndome unas ondas en las puntas de mi largo cabello castaño, y por ultimo tomo mi mochila, la cual había organizado hace dos días.

Ya lista bajo las escaleras y me dirijo a la cocina para desayunar, todavía tengo tiempo y el instituto queda solo a veinte minutos de camino, cuando ingreso a la cocina estaba Diana sirviendo mi desayuno, ya ella sabia lo que desayunaba habitualmente, wafles con fruta y jugo de naranja. Cuando Diana me pasa mi desayuno, empiezo a comer con un poco de afán, ya quiero llegar a mi primer día de clases, y no es raro en mi porque me encanta estudiar, cuando termino de comer, subo nuevamente a mi cuarto, me lavo los dientes y ahora si me dispongo a irme a la escuela.

Salgo de mi casa, subo a mi carro, lo enciendo y conduzco rumbo a el instituto, después de veinte minutos llego, estaciono mi auto y me dirijo a la dirección, donde la secretaria del director le entrega el horario a cada estudiante, cuando ya tengo el mío veo que mi primera clase es literatura y me corresponde en el aula 214 en el segundo piso; me dirijo hacia allá y cuando entro me encuentro a Lu ya ubicada en uno de los últimos puestos de la fila de en medio, como odio los últimos puestos, pero aun así me siento junto a ella, y desde allí pude ver que dos puestos delante de nosotras estaba Alessandro mi crush sentado junto a Samantha la chica más popular y odiosa de todo el instituto, no puedo negar que me dieron celos.

- Vi llegas justo a tiempo para el inicio de la clase - dice Lu y justo en ese momento ingresa el maestro MacDaniell, es como si hubiera adivinado, pero al ver la hora en mi celular me doy cuenta que ya es la hora del inicio de clases y me carcajeo internamente, que tonta soy.

La clase empezó con el maestro dándonos a conocer el microcurrículo del primer semestre del año y de verdad se escuchaba prometedor, después empezó la clase de lleno explicándonos que estudiaríamos la literatura inglesa de forma teórica, realizando un trabajo en parejas que ella escogería, y de manera practica leyendo el libro Orgullo y Prejuicio de Jane Austen, además de las temáticas impartidas en clases, esto seria para las notas del primer periodo del semestre y eran dos. El maestro al final de la clase nos dio las directrices del trabajo, y nos indicó como estarían conformados los grupos.

- Bueno chicos deben realizar un ensayo de mínimo veinte paginas sobre la literatura inglesa en general, me explico, que abarque todo sobre ella, deben entregarlo en físico dentro de quince días - nos explicó el maestro y no estaba nada mal, ojalá me toque con Lu - Y harán grupos con sus compañeros de mesa, no siendo mas nos vemos la próxima clase - el maestro se despidió y salió del salón, habían sido dos largas horas de clases, que extenuante. Lu y yo nos dispusimos a asistir a la siguiente clase, nos tocaba ciencias en el salón de a lado, por lo menos no nos tocaba caminar tanto, esta vez nos sentado en la segunda mesa de la fila de la esquina.

- Vi ¿No te pareció un poco exagerado el trabajo que dejo el maestro de literatura? - me pregunta Lu, sin ánimos, ella siempre quejándose de los trabajos en casa - No es justo apenas hoy empezaron las clases y ya nos dejan ese tipo de trabajos - en eso si tenia razón, hoy solo era el primer día, pero yo como siempre intente darle ánimos.

- Lu no te preocupes, al finalizar las clases vamos a la biblioteca y buscamos un libro de literatura inglesa y nos guiamos de ahí para hacer el trabajo, lo podemos hacer muy rápido - le dije tratando de que no se amargara más por eso - Por cierto, Lu viste que Alessandro estaba sentado junto a Samantha en la clase de literatura, es la primera vez que los veo juntos - le dije tratando de no sonar tan obvia, pero Lucrecia me conocía a la perfección.

- No te pongas celosa Vi, porque es obvio que esos dos se traen algo y no quiero que tu salgas con el corazón roto, el no es para ti porque tienen mundos totalmente diferentes, él es un mujeriego sin aspiraciones y tu si las tienes, no quiero que destruyas tu vida por alguien que no vale la pena Vi - me dice muy sabiamente y en el fondo de mi corazón se que tiene razón, pero no quiero aceptarlo, estoy muy enamorada de ese tonto ególatra. En eso llega la maestra de ciencias y no le respondo nada a Lu al respecto, prefiero callar, la clase empieza con normalidad, la maestra solo se dedica a explicar el plan de estudios, a dar la clase, y no deja nada objeto de investigación, y después de dos extenuantes horas de clases esta se termina, y empieza el receso, por lo cual Lu y yo nos dirigimos a la cafetería del instituto.

Estando ahí compramos fruta, un emparedado de pollo y un jugo de manzana, si ambas compramos lo mismo, compartimos ciertos gustos, luego nos sentamos en una mesa desocupada y nos disponemos a comer entre platicas sin importancia. Cuando se acaba el receso nos toca la última clase de dos horas que es de inglés en el aula 118 aquí en el primer piso, y camínanos con tranquilidad hacia allá, llegamos al salón y nos sentamos en la mesa de en medio de la segunda fila, al instante llega la maestra de inglés. Después de dos largas horas la clase llego a su fin, y con ella la jornada escolar del primer día de clases, yo me sentía agotada, solo quería llegar a casa y dormir un buen rato.

- Lu vamos un momento a biblioteca a buscar unos libros para el ensayo de literatura - le digo y ella asiente con la cabeza, la biblioteca queda en el ala este del instituto, nos dirigimos hacia allá y cuando llegamos, saludamos a Rosalin la encargada, y caminamos entre los estantes hasta llegar al de literatura, cuando distingo tres importantes libros de literatura inglesa, nos acercamos a Rosalin para pedirlos prestados hasta la semana siguiente.

- Buena tarde señorita Rosalin, necesito estos libros hasta el lunes de la semana siguiente por favor - ella asiente y me sonríe, hace el respectivo registro de la entrega de los libros en la computadora, y nosotras después de darle las gracias, nos disponemos a salir hasta el parqueadero, cuando ya estamos ahí Lu y yo nos despedimos con un abrazo, me subo en mi auto y emprendo el camino hacia mi casa, que se pasa super rápido en realidad.

Estando en casa parqueo mi auto y me dirijo a la entrada, tomo las llaves de mi bolso y cuando estoy a punto de abrir la puerta, esta se abre dejándome ver al odioso de Marcelo al lado de una rubia oxigenada y artificial, pero que rápido ha conseguido distracción este mequetrefe, ¿Dónde la habrá conocido? Pero que habilidad la de este tipo, yo sin darle mucha importancia les paso por el lado y me dirijo a la cocina a ver que ha preparado Diana de comer, y encuentro mi comida favorita, arroz de mariscos con ensalada y pan de ajo, una perfección ante mis ojos, Diana sabe que me encanta esto, era justo lo que necesitaba para que mi estado de animo mejorara.

-Diana es perfecta esta comida, a comer porque tengo mucha hambre, lo puedes hacer conmigo por favor, sabes que detesto comer sola - le digo y me mira por unos segundos, pero después sirve otro plato, y lleva ambos al comedor, yo pienso que es ella quien comerá conmigo, pero cuando veo que el innombrable se sienta donde ella puso el otro plato, pongo mala cara, pero me quedo callada y me dispongo a comer, para así poder irme lo más pronto posible a mi habitación.

-Espero no te haya molestado verme en tu casa con una chica, porque si te molesto me da mucha pena por ti, porque es algo que pasara muy seguido - este idiota no se podía quedar callado, pero no me interesa lo que haga con si vida, yo ni siquiera lo volteo a mirar, para que entienda que tanto me importa su presencia o la de sus amiguitas en mi casa. Si cree que con eso me va a perturbar, lo veo muy mal.