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Final

—May, pasa tu primero, no estoy preparada para verlo —dijo la madre de Alex refiriéndose a May. Habían pasado un par de días y al fin les habían dado el permiso para visitantes, él ya había despertado, pero por los medicamentos y sedantes estaba la mayor parte del tiempo dormido.

La chica asintió, y caminó hacia la entrada de la habitación.

En la camilla se encontraba el chico, él tenía varios vendajes en el cuerpo y el rostro.

¿Cómo pudo pasarle esto? ¿por qué a él? —pensó la chica.

May se acercó a la camilla en donde él se encontraba, y pudo ver que el rostro de Alex estaba lleno de pequeñas cortadas provocadas por vidrios rotos de los autos.

—Alex.

No hubo respuesta alguna.

—Estás dormido, y no puedes escucharme —dijo para tranquilizarse, May se sentó en la silla que estaba a un lado de la camilla—. Me duele muchísimo verte así, ¿es mi culpa? —la chica negó con la cabeza—. ¿Sabes? No pensé que volveríamos a este lugar.

El hospital en donde internaron a Alex por el accidente era el mismo en donde estaba internado por el trasplante. 

May empezó a llorar y a culparse mentalmente a sí misma, pero recordó que a Alex no le gustaría verla así. Se agachó para darle un pequeño beso a Alex, pero al momento de el rose de sus labios el chico abrió los ojos.

—Alex, ¡estás despierto! —exclamó May emocionada y avergonzada.

—¿Qué? ¿Dó... Dónde estoy?

—Tuviste un accidente, estás en el hospital.

—Ya entiendo el dolor —bromeó, el chico se estiró un poco y volteo a mirar a la chica—. ¿Y tú qué haces aquí?

—¿Eh?

—Sí, ¿por qué estás aquí?

—¿Qué dices?

—¡Ah! ¿Eres una enfermera? Genial, dile a mi madre que tengo hambre —dijo Alex interrumpiéndola.

—¿No me recuerdas?

—¿Debería?

—Pues... Sí, un poco.

May sonrío falsamente y salió de la habitación. Enseguida lágrimas empezaron a caer por sus mejillas.

—¿Está bien? ¿Qué pasa, May? ¿Alex tiene algo malo? —preguntó la mujer.

La chica negó.

—Él no me recuerda.

...

—Sí, por el golpe que tuvo en el accidente tuvo una pequeña contusión cerebral y eso ocasionó la amnesia.

—¿El recuperará sus recuerdos? —preguntó la madre de Alex.

—Supongo que sí, normalmente con este tipo de choques lo único que olvida la gente son los sucesos recientes, cosas que habían pasado hace menos de cinco meses.

—¿Puedo pasar a verlo? —preguntó Mark.

—Claro, solo que si él no lo llega a recordar no lo fuerce a hacerlo.

Mark asintió y entro a la habitación.

—Doctor, ¿cuánto tiempo tardará para que su memoria regrese?

—Es indefinido, depende de el ambiente, las personas que lo rodean y si el paciente quiere recuperarlos.

—¿Y qué pasará cuando los recupere?

—Pues... Eso depende de la persona, yo creo que Alex podrá continuar con su vida como normalmente lo hacía cuando recupere los recuerdos.

El doctor se ajustó los lentes y volteó a ver a May.

—¿Qué sucede con la chica? —preguntó el doctor a la madre de Alex.

—Ella es su novia, habían empezado a salir hace como tres meses, y ahora Alex no la recuerda.

—¿Desde cuando se conocían? Ella y Alex —preguntó el doctor.

—Desde que estaban en la primaria —suspiró—. Pero nosotros nos mudamos el verano pasado, y él empezó a verla de nuevo como en Enero.

—Está bien, lo más probable es que la recuerde pronto.

—Doctor, ahora que recuerdo, ¿usted sabe cómo en cuánto tiempo Alex podrá salir del hospital?

—Con su estado lo más probable es en unas dos semanas.

...

—¿May quieres pasar?

La chica negó con la cabeza.

—Por favor, tal vez verte de nuevo haga que recupere la memoria.

—No quiero, no quiero forzarlo.

—Por favor May.

—Bien...

La chica entró a rastras a la habitación y ahí se encontraba Alex viendo televisión.

—Hola, Alex —saludó Mark.

El chico volteó a mirar a May.

—¿Qué haces aquí?, no necesito a una enfermera en este momento.

—Que no soy una enfermera —dijo May, claramente molesta.

—¿Entonces?

—Es amiga mía y de nuestra madre, y antes del accidente, tuya —intervino Mark.

—¿En serio?, ¿cómo te llamas? —dijo Alex volviendo la mirada a May.

—May —dijo disgustada.

Mark le dio un codazo

—¿¡Qué?! —gritó May.

—Compórtate —respondió Mark.

—Ustedes dos hacen una bonita pareja —dijo Alex observando a ambos.

...

—May, ¿vas a ir a ver a Alex? —preguntó Mark

—Ya te dije que sí.

—¿Vamos?

—¿Ahora? ¿Estás loco? No estoy preparada para verlo.

—¿Qué? ¿Por qué no?

—Porque él me lastimó, aunque no haya sido su intención lo hizo, dame tiempo para respirar.

—May, él te necesita.

—Él no me necesita, yo lo necesito.

—¿Entonces por qué no vas con él? —insistió Mark.

—Bien.

Mark tomó de la mano a May y llevó a May a rastras al estacionamiento. Ambos entraron al auto de Mark y el silencio reino el lugar. Mark encendió el auto y partieron hacia la casa del chico.

Llegaron a la casa de Alex y Mark y ambos se dispusieron a entrar.

—May, al fin viniste, no sabes como te he extrañado —dijo Elisa, la madre de Alex, dándole un abrazo a May.

—Señora Miller, me alegra tanto verla de nuevo, y que esté tan bien —respondió May devolviéndole el abrazo.

—¿Quieres pasar a ver a Alex?

May volteó a mirar a Mark. El chico asintió y ella bajó la cabeza.

—Claro, señora —respondió May con una sonrisa un poco falsa.

Mark guió a May por el pasillo hasta llegar a la habitación del chico.

—Pasa, se amable —le recordó Mark a May.

—Claro, claro.

La chica tocó la puerta de la habitación y después de unos minutos la puerta se abrió.

—Oh, May, la novia de Mark, ¿cierto?

—No, ¿puedo pasar? Necesito hablar contigo.

—Ah, claro, pasa.

El chico hizo un espacio entre la puerta para que May pudiera entrar.

—Bien ¿qué sucede? —dijo Alex rompiendo el silencio.

—No soy la novia de Mark, ambos nos conocemos desde pequeños, pero no soy su novia.

—¿Eso que tiene que ver conmigo?

—Yo soy tu novia, bueno, lo era antes del accidente-

—Espera ¿qué? —la interrumpió Alex—, yo no... No lo recuerdo.

—Pero... ¿Sabes qué? Tienes razón, lo mejor es romper.

—Espera, May. Yo no me refería a eso.

—Adiós, Alex.

May salió de la habitación, se limpió las lágrimas rápidamente y bajó las escaleras.

—Mark —dijo May dirigiéndose al chico—, ¿harás lo que te pedí?

—May, ¿segura que quieres hacer esto?

—Segura

Fin de la primera parte.

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