Capítulo 6: La única luz de Lexy
Josh había muerto en frente de mis ojos, cuando vi a ese animal despedazarlo ante mí no pude mover siquiera un músculo, sus gritos diciendo mi nombre nunca los podré borrar de mi memoria...
Me encontraba en la esquina, abrazando mis rodillas, no quería hablar con nadie, extrañaba el calor de Josh. Todos se quedaron dormidos después de que el hombre de la sonrisa hiriese a Brian, yo, en cambio, no pude conciliar el sueño.
Tras lo que pareció una eternidad, volví a escuchar pasos, miré por la pequeña ventana y me percaté de que ya era por la mañana. Miré al frente con los ojos cansados y vi el cadáver de Fu, nadie se lo había llevado y empezaba a oler, despertando a los demás.
El hombre de la máscara blanca y ojos pintados de color negro estaba parado frente a la celda y centró su mirada, o su máscara, en mí por unos segundos hasta que por fin habló.
—Ven —me ordenó con voz calmada.
Me acerqué a la puerta de la celda para escuchar lo que tenía que decirme, no confiaba en él pero por lo que ya había visto era mejor no llevarles la contraria.
—Ayúdame con el cadáver, ahora —me ordenó.
—¿Cómo? —pregunté confusa.
—El idiota de Jeff lo ha dejado aquí, tengo que deshacerme de él y creo que a ti te vendría bien andar un poco.
Me quedé desconcertada, ¿quería que me diera un poco el aire o me estaba llamando gorda?
—¿Estás diciendo que tengo que hacer ejercicio? —dije molesta sin pensar.
El hombre soltó una pequeña carcajada.
—Sí —respondió de forma cortante.
—¿Me estás llamando gorda? —me crucé de brazos mirándolo.
—No, no, es solo que se te van a atrofiar los músculos como no te muevas un poco
—dijo amigablemente.
Sonreí por compromiso y el enmascarado se dispuso a abrirme la puerta de la celda.
—Espero que no intentes escapar, sería una pena que una cara tan bonita como la tuya acabara destrozada como la de este pobre chico —susurró cerca de mi rostro.
—¡Lexy! ¿Qué estás haciendo? ¡Vas a acabar como Fu! —exclamó Lana asustada al ver que estaba fuera de la celda con él.
Los gritos de Lana alertaron a los demás.
—No os preocupéis, os la devolveré pronto —dijo el hombre tranquilizándolos.
Después, volvió a fijar su mirada en mí.
—Soy Masky —se presentó amablemente.
—Lexy —le sonreí levemente.
—Lexy, ayúdame con esto —dijo señalando el cadáver.
Solo con mirar a Fu tan de cerca me entraron arcadas.
—No puedo... —dije con voz temblorosa.
—Está bien, lo llevaré yo, sígueme —me extrañaba que fuera tan amable conmigo, sin embargo, no parecía querer hacerme daño, así que respiré hondo y caminé junto a él. De alguna manera, me recordó a Josh, no parecía juzgarme ni ir con segundas intenciones.
Mientras recorríamos el pasillo y nos acercábamos hasta la puerta de salida, iba sintiendo como la libertad de la que antes de toda esta locura gozaba volvía a mí, me sentía mejor que nunca en todos estos días.
—Entiendes que solo será por unos momentos y no puedo dejar que te vayas, ¿verdad? —lo miré a los ojos de la máscara y asentí con algo de desilusión.
—Si no me matarán... —respondió Masky mirando hacia el suelo.
—¿De verdad? —pregunté asombrada— ¿Me dejarías escapar si pudieses hacerlo? —seguí diciendo esperanzada.
—Por supuesto, pero yo solo soy un peón en todo esto, no soy el que toma las decisiones aquí, solo el que las cumple. Aunque puedo tomarme algunas libertades, como dejarte salir por momentos siempre y cuando esté contigo... —murmuró el de pelo moreno. Me gustaba su pelo...
—Es bueno saber que eres diferente a ellos, es reconfortante tener a alguien que entienda mi situación, Masky... —suspiré algo aliviada.
—Tenemos que volver, Lexy, yo quemaré el cuerpo —sentí un escalofrío al escuchar la palabra cuerpo— vuelve a la celda, ahora te la abriré —me dijo mirándome de refilón. No pude evitar darle un doble sentido a lo que dijo y me sonrojé sin querer. Eso me ayudó a relajarme.
Masky dejó el cuerpo en un lugar del bosque y llegó a mi lado abriéndome la celda.
—Por cierto, siento lo de tu amigo, Eyeless me lo ha contado —dijo antes de marchar. Acaba de... ¿preocuparse por mí?
—Lexy, ¿qué ha pasado? —soltó Brian en cuanto perdimos a Masky de vista.
—Nada, solo ha sido amable conmigo y quería que saliera a andar un poco. Él parece diferente a los demás, tal vez quiso que me despejara después de lo de Josh... —contesté calmada.
—¿A ti te saca a pasear por lo de Josh y a mí ni me mira por lo de Fu? El idiota ese solo quiere crearte falsas ilusiones para matarte como hizo el de las hachas con mi hermano —dijo Brian enfadado.
—¡Te equivocas! ¡Masky es diferente! ¡Él es amable y solo es un peón en esto!
—¿Qué él es diferente? ¿Cómo lo sabes? ¿Te lo dice su mirada? ¡Eres idiota!—replicó Brian más alterado. ¡¿Por qué la ha tomado conmigo?!
—Masky es un asesino, es un proxy, no debes fiarte de él —intervino Tenny calmada.
—¡Tú no lo conoces! —respondí.
—¡Leí la historia de todos! ¡Sé lo que han hecho y por qué son lo que son hoy! —contraatacó la rubia.
—¡Tus cuentos de internet no tienen por qué ser reales! ¡Tú no has hablado con él, yo sí! —vociferé.
Sabía que Masky era diferente, sé que aún no puedo fiarme al completo de él pero, ¿y si es cierto lo que me dijo y él es sólo un peón? Y en caso de que pudiera elegir, él no sería un asesino.
Lo que estaba claro era que este lugar estaba lleno de peligros, y justamente por eso tendría que hacer algo más que quedarme sentada esperando a que me mataran para escapar.
Tenny empezó a reír estruendosamente.
—¿Crees que Masky te verá como alguien especial para él solo porque te haya sacado a pasear como a un perro? ¿Un juguete que capturaron para divertirse? Somos peor que un preservativo, Lexy, solo somos algo de usar y tirar.
—La rubia tiene razón —soltó el hombre de la sonrisa tallada.
Todos nos quedamos petrificados, ¿cuánto tiempo llevaba ahí sin que lo supiéramos?
—No me miréis así, os he traído el almuerzo —dijo burlonamente mientras nos tendía una bandeja con palitos de pescado y agua con gas.
—Gracias —dijo Tenny tomando la bandeja sin rechistar. Empezó a repartir la comida entre todos.
Locke tomó hambriento el primer bocado, y no tardó en poner cara de desagrado.
—Esto está congelado —soltó.
—Si quieres ketchup puedo cortarte una parte de tu cuerpo y lo acompañas con carne y sangre —dijo burlón Jeff mirando a la rubia, a lo que Tenny entrecerró los ojos sin perder de vista al asesino mientras comía.
—Oh, vamos, ¡solo estaba bromeando!
—rió levemente— A no ser que quieras eso...
—Perdón —interrumpió Lana
acercándose— ¿hay más? —preguntó calmadamente.
El atrevimiento de Lana en un momento tan delicado captó la atención del tal Jeff. Lana era más tranquila que Josh por lo que no parecía que fuera a acabar igual que él, sin embargo y tras lo que había pasado, resultaba extraño que se atreviera a hablarles sin que ellos preguntaran primero. Y Jeff no parecía tan bueno como Masky.
—¿Sabes? No es un palito de pescado, pero tengo algo largo parecido por si quieres un poco —contestó Jeff mirándola de arriba a abajo. Odio a esta clase de hombres...
—No, gracias, creo que estoy llena —dijo Lana asqueada.
—Como quieras —Jeff sonrió y tras eso sacó de su sudadera algo envuelto en papel de aluminio, como el que usaba yo para envolver los bocadillos que me llevaba a la escuela. Al abrirlo, vimos que era un delicioso perrito caliente.
—qué bien que no hayas querido, así me lo puedo comer todo yo —dijo Jeff entre risas mientras degustaba la comida delante nuestra.
—Creo que este es el peor de todos —dijo Locke susurrando.
—O al menos el más cabrón —contestó Carl.
—¿Que habéis dicho? —dijo Jeff mirándolos fijamente.
—Eeh... ¡Buen provecho! —dijeron ambos nerviosos.
El chico de la sonrisa soltó una mini carcajada y se fue de la habitación.
—Ése sí está mal de la cabeza... —comenté yo.
—Pero al menos va de frente —defendió Tenny.
—A mí casi que me dan más miedo los que parecen inofensivos a priori que éste que desde el principio te amenaza —dijo Lana— como Masky, por ejemplo, él no me da buena espina —añadió la castaña, molestándome un poco.
—No volváis a mencionarlo, es el único que ha sido amable con nosotros —repliqué.
—Querrás decir contigo —respondió Brian.
—Dejadla con sus ilusiones, al final Masky le acabará pegando un tiro como hace con todas sus víctimas —soltó Tenny.
El ambiente se tensó de sobremanera, esto terminaría acabando con nosotros, lentamente...
Curiosidad N°6: A Lexy le ha afectado más la muerte de Josh que a Brian la de Fu. Lo cierto es que ambos hermanos nunca han estado muy unidos.
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