Vuestros dedos se deslizan sobre las teclas del piano;
piano que ama, piano que llora;
porque vuestra alma sufre en un desesperado llanto.
 
Miráis a un punto,
y ese punto soy yo.
Me enamoro de la música,
y esa música sois vos.

"Min Yoongi, Min Yoongi..."
¿Qué hechizo es ese?
Que me toma y me envuelve.
Me vierte sobre sangre ardiente,
sobre mi corazón ferviente.

Pestañas de ébano,
mirada oscura que blanco ve;
me siento en un triste páramo,
Al saber lo que va a suceder.

Me has besado el alma corrupta,
me has bañado en tu meliflua pulcritud.
Vuestro alma empuña
el dolor de la mía con exactitud.

¡Oh, alma mía! No subáis al coche,
cuando vos sois mi encargo de esta noche.

Os besaré entonces,
antes de que el crepúsculo vuestra cara toque,
os besaré entonces,
cuando mirándome me digáis:

"Besadme de nuevo, por favor...
si mi ceguera habéis curado,
curadme también el corazón."

Sempiterno es el ósculo mío
sobre el dulce belfo vuestro;
la manera en que mi amor se derrite,
es superflua.

Amena vuestra mirada encantada,
nuestra pasión amada,
vuestra boca que de mí está enamorada;
viviéndome estoy yo de mi falsa vida deseada.

Rosas son vuestros labios;
divina flor,
cuando decís amarme;
bonhomía es vuestra alma
y mi pecho es ardor.

Aun si vuestro cuerpo está inerte,
descansa en el limbo,
aunque supiera yo vuestro sueño,
muriendo mi alma inmortal estaría de veros.

Besáis vos, mi frágil corazón
con vuestra melodía,
donde pierdo la razón.

Es de vivir, de eso se trata
pero cuando la armonía con la que mi cuerpo tocáis,
mi amor se dispara.
La tristeza me arrebatáis.

Vuestros ojos de plata y luna,
no miran al mar, no miran al sol,
sino a quien os acuna con pasión.

Pero soy la muerte que os acompaña,
y vos el inocente que acompañáis a la muerte.

Eres estrella de mi universo,
y galaxias son vuestros besos;
besos que me disteis en la eterna noche
de nuestro infinito amor.

Pero soy muerte,
y en ángel desalado me convierto
por desear teneros,
por siempre y para siempre.

Dios nos separa ahora,
no puedo rogar ya;
mi único anhelo es con vida veros
por lo tanto no lloréis por esto.

Es mi pecado el amaros,
por mí no lloréis, no sufráis;
ahora desaparezco.

Vivid y mirad el mundo que os rodea, mi amor;
cuando habréis despertado,
en el olvido habré quedado.

Desaparezco ahora y lloráis,
lloráis como si se os desgarraseis el alma
y tus lágrimas brillan como las estrellas de la luna, que muerte es, sabiendo que vuestro corazón me ama.

Bésame,
cuando dispersado me haya de vos.
Bésame,
cuando las olas de la roja mar,
os lleve lejos de nos.

Bésame antes de la aurora,
que aurora son las nubes de tus besos.

Bésame despacio.
Ámame lento y eterno.

Pero desbésame esta noche.

Desbésame del primer beso;
desenamórame del único amor.

Desbesa mis ojos,
desbesa mi alma,
desbesa las melodías de mi amante corazón.

Desbésame en el augurio de tu muerte.
Desbésame cuando beséis la pluma que de mis oscuras alas habéis cogido,
Con el anhelo inconmensurable de volver a verme,
os tiráis al vacío.

Y desbesa el viento vuestros recuerdos,
sois una pluma suave,
guardián de nuestros deseos,
me olvidáis al morir... nefelibata ave.

Pero en otra vida os desbesaré de nuevo,
En otra vida os amaré de nuevo.

"En efecto, Jimin... en otra vida
nos encontramos de nuevo."

No digáis nada por ahora,
solo del dolor desbésame...
y bésame el corazón.

Si alguien no lo ha entendido, este es el contexto del poema:

Yoongi es un pianista ciego cuya muerte estaba próxima. Jimin era el ángel de la muerte que debía recoger su alma y llevarla al Más Allá, sin embargo, al enamorarse de él, impide su muerte lo que lo lleva a dejar de existir.