Son aproximadamente las ocho de la mañana, el pelinegro de Jin lo sabe gracias al enorme reloj que hay colgado en la entrada de la ahora, su nueva escuela.

Dándole un ultimo vistazo al esplendoroso paisaje detrás suyo, Kim Seokjin logra ver a Baek Taeyang ㅡsu amigo y chofer, desde siempreㅡ despidiéndose con una extensa pero agradable sonrisa sobre su rostro bien conservado.

ㅡ¡Ten un buen día! ㅡexclama Taeyang desde lejos, con una mano arriba, moviéndola de un lado a otro vivazmente, recordándole al menor aquellos días en los que era pequeño y el hombre unos metros frente a el, iba a dejarlo al colegio.

Taeyang es por mucho una de las personas más cercanas con las que Jin cuenta en su vida, y es algo que realmente valora en demasía.

ㅡ¡Igualmente, Taeyang! ㅡagradece el menor, despidiéndose de igual forma con una mano arriba y una gran sonrisa sobre su rostroㅡ. ¡Conduce con cuidado! ㅡclama SeokJin antes de volver a posar su vista en la escuela tras suyo.

Tan pronto vuelve a posar su vista en la enorme pero sobre todo imponente institución frente a él, siente sus nervios aumentar, ya que la escuela era aún más grande de lo que sus padres le habían comentado semanas atrás.

Sin siquiera dar un paso hacia adelante, una hermosa y muy amable chica aparece frente a Jin, devolviéndole la confianza que minutos antes se había hecho un poco más pequeña de lo que le gustaría admitir al pelinegro.

ㅡ¡Hola, buenos días! ㅡexclama eufórica pero sobre todo amablemente la joven frente a él, que mantiene una cabellera castaña impoluta con cada movimiento ㅡ. Debes de ser Kim Seokjin, ¿cierto? ㅡpregunta, haciendo una breve pero respetuosa reverencia a la persona del pelinegro, pese a parecer de su misma edad.

ㅡAsí es ㅡrespondí, asintiendo a la misma vez ㅡ, pero por favor llámame solo Jin ㅡpedí entre pequeñas sonrisas ㅡ. No es que me molesté que me llames por mi nombre completo ㅡaclaré ㅡ, simplemente creó que estaría bien hacer una amistad ㅡconfesé con entusiasmo.

Aunque ciertamente no era malo haciendo amigos, era prácticamente como mi don natural caerle bien a casi toda la gente que me rodeaba, claro que siempre había ciertas excepciones con una que otra persona por mi manera tan grosera de tratarlos pues me incómoda bastante la gente que tenía dinero y se creía más que los demás.

Si bien es cierto que yo posaba de una gran posición económica, no me creía más que los demás, ni siquiera mis padres, ellos eran los más interesados en que yo aprendiese a tratar con respeto a todas y todos.

ㅡUn gusto en conocerte Jin ㅡagregó con una agradable sonrisa.

ㅡEl gusto es todo mío amm...ㅡpause, pues aún no sabía cómo se llamaba la chica frente a mí.

ㅡTzuyu ㅡagregó dulcemente al percatarse que aún no se presentaba.

ㅡLindo nombre ㅡelogie mientras que admiraba como el tono de sus mejillas cambiaban a un lindo color carmesí.

ㅡVamos, tenemos clase ㅡcontinuó, acomodando una parte de su lindo cabello hacía la parte trasera de su oreja derecha, permitiéndome ver un lindo pero sencillo arete de oro sobre esta misma.

Una vez que nos adentramos al primer edificio, las miradas sobre nosotros no se hicieron esperar.

Inmediatamente centré mi mirada en Tzuyu quién era más que obvio estaba acostumbrada a aquellas miradas pues en definitiva era más que guapa.

ㅡLlegamos ㅡclamó sonrientemente, adentrándose un poco al aula en la espera por mí ㅡAquí estamos. Salón 2B ㅡinformó, permitiéndome notar lo extenso que era aquel salón el cuál solo tenía alrededor de unos veinticinco lugares ㅡ¿Tus padres estudiaron aquí? ㅡme interrogó con interés.

Asintiendo silenciosamente contemplé todo a mi alrededor.

Una de las ventajas o desventajas de ser de una familia de dinero, era una de estas, el poder estudiar en una de las mejores universidades de todo Seúl. Pues por lo poco que sabía, sólo podías ingresar si alguien de tu familia había ingresado anteriormente y vaya que era el caso, ya que tanto mi madre, como mi padre habían asistido a esta universidad, sólo que en grados diferentes.

ㅡMi madre al igual que mi padre asistieron aquí ㅡafirmé, notando como Tzuyu miraba todos y cada uno de mis movimientos ㅡ¿Y los tuyos? ㅡpregunté con el mismo interés, centrando toda mi atención a ella.

ㅡMi padre solamente ㅡrespondió con un poco de nerviosismo ㅡMi madre asistió a uno de los colegios más importantes en Daegu ㅡpausó, sentándose en una banca del medio del salón ㅡPero como mi padre está trabajando aquí actualmente está escuela era mi destino sí o sí ㅡcomentó sonrientemente ㅡY siendo sincera la escuela no es mala por algo salen de aquí muy buenos profesionistas ㅡla sencillez con la que actuaba y hablaba Tzuyu de las cosas era totalmente algo que me agradaba de las personas ㅡClaro que siempre hay excepciones ㅡsabía de bien que rumbo estaba por tomar está conversación ㅡNo lo digo por alguien en especial ㅡaclaró velozmente en un intento por disipar mis dudas ㅡSimplemente...

ㅡSimplemente hay gente que no aprovecha las oportunidades, ¿correcto? ㅡcompleté por ella, recibiendo un asentimiento por su parte ㅡConcuerdo.

Sin darnos cuenta, el aula comenzó a llenarse de estudiantes unos ajenos a mi presencia, otros conscientes pero sin importarles.

ㅡPuedes sentarte donde quieras, Jin ㅡagregó Tzuyu, señalando calmadamente un asiento vacío junto a ella.

ㅡGracias ㅡcomenté, tomando a si asiento.

Enseguida de que el aula se llenó, una profesora de cabellera negra se adentró, cerrando tras de ella, notándome velozmente ㅡ¿Eres nuevo? ㅡindagó, depositando su maletín café sobre el escritorio de madera fina al frente del salón.

ㅡSí ㅡrespondí velozmente.

ㅡ¿Quién es la encargada o encargado de darte el tour por la Universidad? ㅡpreguntó con bastante interés.

ㅡTzuyu. ㅡcontesté sin más.

ㅡEstás en muy buenas manos en ese caso ㅡsonrió ㅡAprovéchalo ㅡaconsejó ㅡBien, vamos a comenzar la clase de hoy...

Alrededor de unos treinta minutos aproximadamente al inicio de la clase, comencé a sentir sobre mi nuca una mirada penetrante una que me causaba ciertos escalofríos en cada parte de mi cuerpo.

Era más que obvio que alguien al final del salón me miraba de manera sobre intensa, ya que a pesar de no ver a la o el responsable, los bellos de mis brazos y piernas estaban total y completamente erizados por la situación.

Tan pronto la clase de economía y álgebra terminaron emprendí el camino junto a Tzuyu por la Universidad y debía admitir que mis padres se habían quedado cortos con respecto a la descripción de como era por dentro la Universidad.

ㅡ¿Quieres comer algo? Podemos parar el recorrido e ir a comer algo ㅡdijo mi ahora compañera de clase, guía y amiga.

ㅡSospecho que tienes hambre, así que por mi está bien, vamos ㅡsonreí, permitiéndole de nueva cuenta guiarme.

Al llegar a la cafetería, ambos nos formamos en una no tan corta fila, para escoger lo que comería cada quién. Frente a nosotros, yacía un carro ni tan grande, ni tan chico, con 6 dispensadores de botanas que podías tomar mientras esperabas.

Tzuyu, tomó una barra rellena de manzana con varios cereales esparcidos por fuera.

ㅡIntegral, he ㅡmencioné.

ㅡ¿Cómo sabes? ¿Las has probado? ㅡabordó tiernamente.

Risueño saqué de la bolsa delantera de mi pantalón azul cielo, la misma barra que Tzuyu tenía entre sus manos ㅡVeo que comemos la misma colación ㅡreí.

ㅡEsta rica, ¿verdad?

ㅡDemasiado.

Pese a ya haber pasado varias horas desde la primera clase en que aquella mirada me había erizado los bellos de la piel, seguía sintiéndola sobre mí, algo en extremo raro.

ㅡ¿Pasa algo? ㅡTzuyu podía describirse como una persona, observadora.

ㅡLlámame loco, pero desde la primera clase siento que alguien me observa de sobre manera.

ㅡPues varias personas te observan justo ahora pero se a lo que te refieres, hay alguien que no ha dejado de seguirnos desde que salimos del salón y puedo decirte que no me sigue a mi, sino a ti ㅡla mirada de Tzuyu se centró detrás de mí, disimuladamente ㅡMin Yoongi ㅡsusurra, mirándome ahora a mí ㅡUno de los chicos más atractivos de la Universidad.

ㅡDéjame adivinar, anda con todo mundo aquí ㅡmurmuré, mientras avanzamos en la fila.

ㅡNo ㅡcontesta un poco burlesca ㅡÉl no anda con nadie, solo... ㅡpausó, meditando sus siguientes palabras ㅡNo sé cómo decirlo.

ㅡSolo, ¿son aventuras? ㅡIntento completar algo avergonzado.

ㅡDigamos que si y no ㅡatentó, contempló los movimientos de Tzuyu quien avanza segura de si hacía adelante, tomando los alimentos que consumirá durante el desayunó, sorprendiéndome pues come bastante bien, tanto como yo ㅡSino deja de mirarte es porque le llamaste mucho la atención, así que...

ㅡ¿Soy su próxima conquista? ㅡpregunto, recibiendo solo un asentimiento de su parte acompañado de una dulce sonrisa.

Al finalizar por fin el almuerzo ambos caminamos a paso lento pero firme a la siguiente clase, hasta que tres chicos se detienen frente a nosotros, impidiéndonos el paso a Tzuyu y a mí.

Dos de los tres chicos frente a nosotros tienen el mismo color de cabello ㅡnegroㅡ el otro chico por otro lado posee una linda pero caprichosa cabellera rubia; este último no hace falta preguntar quién es, pues por su mirada coqueta y forma en que se paro frente a nosotros es más que claro quién es.

Puedo darme cuenta de que en efecto es bastante atractivo, sus ojos son de un café oscuro, su mirada es brillante pero linda, encantadora a simple vista, los pequeños pero escasos cabellos en su frente se mueven rebeldemente por el poco aire que se cuela por las ventanas corredizas del lugar.

ㅡUn gusto lindo, mi nombre es...

ㅡMin Yoongi, ya lo sé ㅡlo interrumpo con toda la intención a no dejarlo terminar ㅡNo me interesa entablar algún tipo de conversación o lazo contigo. Con permiso ㅡfinalizo, saliendo de su campo de visión con Tzuyu a mi lado.

ㅡ¿Cómo te sientes, Min? Después de que te han bateado tan pronto ㅡalcanzamos a oír mientras que sus supuestos amigos se burlan de él en su cara.